Alejandro Magno para niños

Datos para niños Alejandro Magno
Rey de Macedonia Hegemón de Grecia Faraón de Egipto Rey de Asia Gran rey de Media y Persia
Busto en mármol de Alejandro Magno, siglo II a. C. Obra helenística original de Alejandría (Egipto).
Reinado
336 a. C. - 323 a. C.
Rey de Macedonia Hegemón de Grecia
Predecesor	Filipo II de Macedonia
Sucesor	Alejandro IV de Macedonia
Faraón de Egipto Rey de Asia Gran rey de Media y Persia
330 a. C. - 323 a. C.
Predecesor	Darío III, rey de Persia y faraón de Egipto
Sucesor	Filipo III de Macedonia
Información personal
Nacimiento	20 o 21 de julio del año 356 a. C. Pela, Macedonia, Antigua Grecia
Fallecimiento	10 u 11 de junio del año 323 a. C. (32 años) Babilonia, Mesopotamia
Familia
Dinastía	Argéadas
Padre	Filipo II de Macedonia
Madre	Olimpia de Epiro
Consorte	Roxana de Bactriana, Estateira y Parisátide
Hijos	Heracles de Macedonia, Alejandro IV de Macedonia

Alejandro III de Macedonia (Pela, 20 o 21 de julio de 356 a. C.-Babilonia; 10 u 11 de junio de 323 a. C.), más conocido como Alejandro Magno (griego: Μέγας Αλέξανδρος, romanización: Mégas Aléxandros) o Alejandro el Grande, fue rey de Macedonia (desde 336 a. C.), hegemón de Grecia, faraón de Egipto (332 a. C) y Gran rey de Media y Persia (331 a. C), hasta la fecha de su muerte.

Alejandro Magno fue rey de Macedonia en la antigua Grecia. Su padre, Filipo II, lo preparó para gobernar desde joven. Sin embargo, su ascenso al trono no fue fácil, ya que su padre lo exilió por un tiempo. Después de la muerte de Filipo, Alejandro tomó el poder y eliminó a sus oponentes.

Alejandro tenía grandes ambiciones y quería vengar a Grecia conquistando el vasto Imperio Persa. Comenzó su conquista en el año 334 a.C. con un pequeño ejército, pero logró victorias impresionantes en batallas como Gránico, Issos y Gaugamela.

Durante su reinado, cambió la cultura y la política en muchas regiones, creando un período conocido como el "Período Helenístico". Su imperio se extendió desde Grecia hasta la India, y fundó muchas ciudades con su nombre.

Alejandro murió en circunstancias misteriosas y su imperio se dividió entre sus generales. Su legado perdura como uno de los más grandes conquistadores de la historia y una figura icónica de la antigüedad.

Biografía

Filipo II de Macedonia, padre de Alejandro.

Alejandro Magno fue un rey de Macedonia en la antigua Grecia. Era hijo de Filipo II y Olimpia. En su nacimiento, se decía que hubo señales de triunfo en la capital. Hubo rumores sobre su paternidad, pero se cree que fue hijo de Filipo.

Alejandro era conocido por su apariencia física atractiva y su altura baja. Tenía cabello castaño claro y a menudo inclinaba la cabeza hacia un lado. También se cree que era zurdo.

Su educación fue muy importante. Tuvo maestros que lo instruyeron en ejercicios físicos y literatura, y el filósofo Aristóteles fue su tutor durante cinco años. Aprendió muchas materias, desde filosofía hasta biología.

A una edad temprana, Alejandro demostró valentía y habilidad al domar un caballo salvaje llamado Bucéfalo. Más tarde, se convirtió en regente de Macedonia y participó en la política y la guerra.

Alejandro Magno se convirtió en un gran conquistador y expandió su imperio desde Grecia hasta la India. Su vida está llena de logros asombrosos y hazañas legendarias, y su legado perdura en la historia como uno de los más grandes líderes militares y culturales de la antigüedad.

Alejandro Magno creía en los dioses griegos y seguía las prácticas religiosas tradicionales de la antigua Grecia. Para él, la religión era una parte importante de su vida y de su gobierno.

Realizaba rituales y sacrificios a los dioses olímpicos, como Zeus, Poseidón, Ares y Atenea, entre otros. También hacía ofrendas a dioses de otras culturas que encontraba durante sus conquistas, como Amón en Egipto y Baal en Oriente.

Alejandro consideraba a Zeus como su protector y a Heracles como el ancestro de su dinastía macedónica. Mostraba su devoción a través de monedas con la imagen de Zeus y Hércules. Su admiración por el héroe griego Aquiles, a quien quería imitar, sobre todo, en dejar un legado en su búsqueda por la inmortalidad, lo llevaba a dormir con una copia de La Ilíada de Homero bajo su almohada.

Después de sus victorias, ofrecía sacrificios a los dioses y organizaba procesiones y competencias deportivas en su honor. También mostraba respeto por los templos de las ciudades que conquistaba.

Alejandro también confiaba en la adivinación y buscaba consejo de adivinos y videntes para tomar decisiones importantes. Creía en las profecías y supersticiones, como el famoso nudo gordiano, que se decía que solo podría desatar quien gobernara toda Asia.

Alejandro Magno se enemistó con su padre, el rey Filipo II, debido a un nuevo matrimonio que podría poner en peligro su derecho al trono. En la boda de su padre, un noble macedonio llamado Átalo hizo un comentario que insinuaba que Alejandro no era un heredero legítimo porque su madre era de Epiro. Esto enfureció a Alejandro, quien arrojó una copa y se burló de su padre.

Debido a esta pelea, Alejandro se vio obligado a exiliarse a Epiro junto con su madre, Olimpia, y sus amigos. Eventualmente, su padre Filipo lo perdonó.

Sin embargo, después del asesinato de Filipo en una conspiración en el año 336 a.C., Alejandro asumió el trono de Macedonia a los veinte años de edad. Tomó medidas para asegurarse de que no hubiera herederos vivos que pudieran disputar su reinado, incluyendo la eliminación de parte de la familia de su madrastra Cleopatra.

Busto de Alejandro.

Después de suceder a su padre, Filipo II, como rey de Macedonia, Alejandro Magno se encontró gobernando un país que había cambiado mucho bajo el reinado de su padre. Macedonia pasó de ser un reino pobre y poco respetado por los griegos a convertirse en un poderoso estado militar con un ejército bien entrenado y una influencia en Grecia a través de la Liga de Corinto.

Tras la muerte de Filipo, algunas ciudades griegas se rebelaron contra Alejandro debido a la aparente debilidad de la monarquía macedonia. Alejandro tuvo que tomar medidas para mantener el control de estas ciudades y reclutar mercenarios de las polis griegas para su campaña contra Persia.

Alejandro demostró su habilidad estratégica y militar al sofocar rápidamente la revuelta en Tebas y someterla con dureza. Luego visitó el oráculo de Delfos y fue recibido con respeto. Atenas, por su parte, reconoció su supremacía, nombrándolo hegemón de Grecia.

Una anécdota famosa es su encuentro con el filósofo Diógenes de Sinope en Corinto. Alejandro le preguntó si podía hacer algo por él, y Diógenes respondió con sarcasmo. A pesar de las provocaciones, Alejandro admiró la elocuencia de Diógenes y nunca tomó represalias.

Después de asegurar la paz en Grecia y el sureste de Europa, Alejandro dejó a Antípatro a cargo de sus dominios y se preparó para conquistar el Imperio Persa. Cruzó el Helesponto hacia Asia Menor con un ejército de alrededor de 40,000 soldados, que incluían aliados griegos y mercenarios.

En su camino, Alejandro visitó Troya y honró la tumba de Aquiles. La primera gran batalla en Asia fue la Batalla del Gránico, donde derrotó a las fuerzas persas. Aunque estuvo cerca de morir en la batalla, fue salvado por uno de sus hombres.

Luego ocupó ciudades como Éfeso, Halicarnaso, Pérgamo y Mileto, donde fue recibido como liberador por algunas y otras se sometieron por temor. Memnón, un general mercenario griego al servicio de Persia, planteó amenazas tácticas, pero murió durante el asedio a Mitilene, lo que debilitó la amenaza marítima persa.

Después de consolidar su control en Jonia, Alejandro celebró bodas masivas entre sus soldados griegos y mujeres de las ciudades liberadas. También fue un amante de las artes y apoyó a artistas como Apeles.

En Gordión, se enfrentó al famoso Nudo Gordiano, que según el oráculo de Gordión, si se desataba, conquistaría Asia. Alejandro lo desató, ya sea pacientemente o cortándolo con su espada, y se consideró un presagio favorable.

El comandante Coeno regresó con refuerzos desde Grecia, incluidos los soldados recién casados, para unirse a Alejandro en su campaña.

Después de la Batalla de Issos, donde Alejandro derrotó al rey persa Darío III, continuó su campaña en Asia. En su camino, capturó a la familia real persa, incluyendo a la madre, esposa e hijas de Darío. Se casó con una de las hijas, Barsine, como parte de su estrategia política.

Luego, Alejandro conquistó Fenicia y fue bien recibido en Judea. Sin embargo, la ciudad de Tiro se negó a someterse pacíficamente y fue sitiada durante varios meses antes de ser destruida. Gaza también resistió, pero finalmente fue conquistada por Alejandro.

Después de estas victorias, Alejandro se dirigió a Egipto, donde fue recibido como un liberador. Su campaña continúa en su camino hacia la conquista del Imperio Persa.

Relieve de Alejandro Magno ante Amón-Ra, en el templo de Luxor.

Después de derrotar a los persas, Alejandro entró en Egipto y fue recibido con entusiasmo por los egipcios. Fue nombrado faraón y considerado un "salvador y libertador". Fundó la ciudad de Alejandría en Egipto, que se convirtió en un importante centro cultural y económico.

Luego, Alejandro viajó al oasis de Siwa en el desierto, donde consultó al oráculo del dios Amón. El oráculo le dijo que sería vengado por la muerte de su padre y que dominaría a todos los hombres. Alejandro quedó impresionado por la cultura egipcia y adoptó algunas de sus tradiciones, como vestirse como un faraón.

Su estancia en Egipto dejó una marca duradera en su reinado y en la historia de la región.

En los jeroglíficos del muro se distinguen además los títulos de Alejandro-faraón que se representan dentro de un serej y un cartucho egipcio:

Nombre de Horus:

ḥr mk kmt (Horus Mek Kemet) Protector de Egipto (Kemet)

Nombre de Nesut-Bity:

stp.n rˁ mr imn (Setepenra Meryamón) Elegido de Ra; Amado de Amón

Nombre de Sa-Ra:

ˁ l k s i n d r s (Aleksanders) Alejandro

Después de establecerse en Egipto, Alejandro organizó su ejército y se preparó para conquistar Persia. En la batalla de Gaugamela, derrotó a Darío, el rey persa, a pesar de estar en desventaja numérica.

Luego, ocupó Babilonia y continuó su campaña en Persia. Perseguía a Darío, pero este fue asesinado por sus propios nobles. Alejandro honró a Darío y persiguió al asesino, Bessos.

Alejandro promovió la mezcla de culturas y se casó con Roxana, una princesa persa. También tuvo encuentros con las Amazonas y otras experiencias exóticas en su viaje.

Sin embargo, enfrentó rebeliones en Sogdiana y otras regiones, pero finalmente las sofocó y fortificó sus territorios. La persecución de Bessos terminó cuando fue arrestado y ejecutado.

Después, Espitamenes lideró revueltas, pero Alejandro lo derrotó y él fue asesinado. Apama, la hija de Espitamenes, se casó con el general Seleuco y fundaron la Dinastía Seléucida en Persia.

Año 327 a. C. Ocupación de las satrapías persas del este y región del Indo. Regreso a Babilonia.

Alejandro lideró a su ejército a través de diversas regiones, incluyendo Egipto, Anatolia y el Egeo. En el 331 a.C., organizó a sus tropas en Tiro y Egipto para marchar hacia la conquista de Persia.

Una de sus batallas más destacadas fue la Batalla de Gaugamela, donde derrotó al rey persa Darío a pesar de estar en desventaja numérica. Alejandro luego ocupó Babilonia, Susa y Persépolis, asegurando su control sobre estos territorios.

Persiguió al rey Darío, quien más tarde fue asesinado, y Alejandro lo honró con un funeral real. Alejandro tenía como objetivo fusionar las culturas griega y persa, promoviendo matrimonios mixtos entre griegos y mujeres persas y adoptando el título de "Rey de Reyes".

Alejandro continuó su conquista en Asia, enfrentando la resistencia del rey indio Poros en la Batalla del Hidaspes. Expandió la influencia griega y preparó el terreno para el período helenístico.

Después de lidiar con rebeliones y consolidar su dominio en Asia, Alejandro puso su mirada en la India, pero enfrentó desafíos de diversas tribus indias. Su ejército finalmente se amotinó y tuvo que regresar a Persia.

Durante su viaje de regreso, enfrentó dificultades, incluyendo batallas con tribus indias feroces y una grave lesión. Al llegar a Susa, Alejandro ejecutó a algunos de sus funcionarios por abuso de poder. Intentó crear armonía entre sus súbditos persas y macedonios, pero enfrentó resistencia.

Su regreso estuvo marcado por la tragedia, ya que su amigo cercano Hefestión murió, afectándolo profundamente. Las conquistas de Alejandro tuvieron un gran impacto en la historia y en la fusión de culturas entre Oriente y Occidente.

El imperio de Alejandro tras su muerte en el 323 a. C.

El 11 de junio del 323 a. C. (10 de junio, según algunos autores), Alejandro murió en el palacio de Nabucodonosor II de Babilonia. Le faltaba poco más de un mes para cumplir los 33 años de edad. Existen varias teorías sobre la causa de su muerte, que incluyen envenenamiento por parte de los hijos de Antípatro (Casandro y Yolas, siendo este último copero de Alejandro) u otros sospechosos; enfermedad (se sugiere que pudo ser la fiebre del Nilo), o una recaída de la malaria que contrajo en el 336 a. C. Se sabe que el 2 de junio Alejandro participó en un banquete organizado por su amigo Medio de Larisa. Tras beber copiosamente, inmediatamente antes o después de su baño, lo metieron en la cama por encontrarse gravemente enfermo. Los rumores de su enfermedad circulaban entre las tropas, que se pusieron cada vez más nerviosas. El 12 de junio, los generales decidieron dejar pasar a los soldados para que vieran a su rey vivo por última vez, de uno en uno.

Plutarco hace referencia respecto a su última semana con vida, en la que se internaba en extensos baños de inmersión para curarse y sacrificar a los dioses, lo que sugiere la práctica de la hidroterapia, muy común entre los griegos.

Causas

La teoría del envenenamiento sugiere que Alejandro Magno pudo haber sido envenenado para causar su muerte. Según antiguas historias de Justino y Curcio, Casandro, hijo del regente de Grecia, llevó veneno a Babilonia y el copero real de Alejandro, Yolas, se lo administró. Muchos tenían motivos para querer eliminar a Alejandro. Las sustancias mortales que podrían haber sido utilizadas incluyen el heléboro y la estricnina. Sin embargo, algunos argumentan que esta teoría es poco probable porque pasaron 12 días entre el inicio de su enfermedad y su muerte, y en la antigüedad no se conocían venenos con efectos tan prolongados.

Otra teoría es que Alejandro sufrió de pancreatitis aguda, ya que los síntomas que experimentó coinciden con los de esta enfermedad. En 1865, el médico Émile Littré sugirió que murió debido a un mal tratamiento de una crisis de paludismo, y en 2018, la doctora Katherine Hall propuso que pudo haber muerto debido al síndrome de Guillain-Barré, una enfermedad autoinmune con síntomas como fiebre, fatiga, dolores abdominales y parálisis de los miembros. También se plantea la posibilidad de que haya sido embalsamado vivo porque los médicos creyeron que estaba muerto sin verificar su pulso.

Las disputas sucesorias

Alejandro no tenía ningún heredero legítimo. Su medio hermano Filipo Arrideo era deficiente, su hijo Alejandro nacería tras su muerte, y su otro hijo Heracles, cuya paternidad está cuestionada, era de una concubina. Debido a ello la cuestión sucesoria era de vital importancia.

Tragedia familiar

Todos sus familiares y herederos, tanto su madre Olimpia, su esposa Roxana, su hijo Alejandro, su amante Barsine y su hijo Heracles, fueron mandados asesinar por Casandro, lo que llevó a la extinción de la dinastía Argéada.

Las guerras de los diádocos

Se da el nombre de diádoco a los pretendientes de la herencia del imperio que dejó Alejandro Magno. La mayoría de los historiadores creen que si Alejandro hubiera tenido la intención de elegir a uno de sus generales obviamente habría elegido a Crátero porque era el comandante de la parte más grande del ejército, la infantería, porque había demostrado ser un excelente estratega, y porque tenía las cualidades del macedonio ideal. Pero Crátero no estaba presente, y los otros pudieron haber elegido oír Krat'eroi, ‘el más fuerte’. Fuera cual fuese su respuesta, Crátero no parecía ansiar el cargo. Entonces, el imperio se dividió entre sus sucesores (los diádocos).

A pesar de los intentos de mantener unificado el Imperio macedónico, este acabaría por dividirse en varios reinos independientes que fundaron sus dinastías.

• Dinastía Tolemaica: Tolomeo se convirtió desde un primer momento en gobernante de Egipto y se mantuvo aislado y estable desde el principio.
• Dinastía Antigónida: con centro en Macedonia y con el hijo de Antígono Monoftalmos, Demetrio como rey; esta dinastía conquistó su reino a Casandro y ocupó también Grecia.
• Dinastía Seléucida: Con base en Mesopotamia y Siria, Seleuco dominó después un territorio más amplio, ya que se adueñó de Asia, que estaba en poder de Antígono.
• Lisímaco obtuvo Tracia y Asia Menor pero no logró fundar una dinastía propia ni consolidar sus dominios.

Testamento

Mosaico de Alejandro Magno hallado en una casa patricia en Pompeya.

En su lecho de muerte, Alejandro Magno fue preguntado por sus generales a quién dejaría su imperio. Hay debates sobre su respuesta: algunos creen que dijo "al más fuerte" y otros que dijo "a Crátero". Esto se debe a que las palabras griegas para "el más fuerte" y "Crátero" son similares en pronunciación. Según algunos relatos antiguos, Alejandro dio instrucciones escritas detalladas a Crátero poco antes de morir.

En su testamento, que se encuentra en el libro XVIII de Diodoro, Alejandro tenía varios planes interesantes:

• Completar un monumento en honor a su amigo Hefestión.
• Construir una flota masiva de barcos de guerra en diferentes lugares para una campaña contra los cartagineses y otras regiones costeras.
• Construir una carretera desde el norte de África hasta las Columnas de Hércules (estrecho de Gibraltar) con puertos y astilleros.
• Erigir grandes templos en varios lugares, incluyendo Delos, Delfos y Troya.
• Construir una tumba monumental para su padre, Filipo, que rivalizara con las pirámides de Egipto.
• Establecer ciudades y promover la mezcla de poblaciones entre Asia y Europa para unir a los continentes a través de matrimonios y relaciones familiares.

Tumba

Catafalco de Alejandro, según la descripción de Diodoro. Alejandro falleció en el año 323 a.C, y su cuerpo fue trasladado en el año 321 a.C. Los restos iban a ser trasladados a su Macedonia natal, en Grecia. Existe un gran misterio de cómo ocurrió el desvío del mismo, ya que fue trasladado a Alejandría, Egipto, donde permaneció al menos hasta comienzos de la Edad Media. En el hecho se implicó directamente a su amigo personal y comandante, y nuevo regente de Egipto, Ptolomeo, fundador de las dinastías helenísticas. Lo que ha sucedido con su tumba desde la ocupación romana es todo un misterio. Los emperadores romanos robaron objetos de Magno, como su coraza, su capa, incluso flagelándolo.

El cuerpo de Alejandro Magno fue colocado en un ataúd de oro que estaba dentro de otro ataúd de oro. Cubrieron el ataúd con una tela púrpura y lo pusieron en un carruaje dorado con un techo especial decorado con columnas jónicas doradas. El carruaje tenía una decoración lujosa con escamas de oro incrustadas de joyas y una corona de olivo en oro en la parte superior. También había estatuas de Victoria sosteniendo trofeos en cada esquina y campanas doradas colgando de la cornisa. Había relieves en el carruaje que mostraban a Alejandro en un carro de gala, elefantes de guerra indios, la caballería en formación y la flota. El carruaje tenía una entrada guardada por leones de oro, y las ruedas doradas tenían cabezas de león en los extremos. Estaba diseñado para proteger el cuerpo de los golpes.

Se dice que el cuerpo de Alejandro fue conservado en un recipiente de arcilla lleno de miel para preservarlo y luego colocado en un ataúd de cristal. Sin embargo, algunos relatos cuentan que el cuerpo fue robado y llevado a Alejandría, donde se mostró durante mucho tiempo. Más tarde, el sarcófago de Alejandro fue reemplazado por uno de cristal, y el oro del original se fundió para hacer monedas y pagar deudas.

El llamado "Sarcófago de Alejandro", que se encuentra en el Museo Arqueológico de Estambul, en realidad pertenecía a Abdalónimo, a quien Hefestión nombró rey de Sidón por orden de Alejandro. El sarcófago muestra escenas de Alejandro y sus compañeros cazando y luchando contra los persas.

Ejército de Alejandro Magno

El ejército de Alejandro Magno al principio de su campaña tenía 40,000 hombres, pero luego se aumentó a 50,000 con la ayuda de aliados griegos. Estaba compuesto principalmente por 35,000 soldados de infantería y 5,000 de caballería. Aunque este número era menor en comparación con los grandes ejércitos persas y las ciudades bajo su control, el ejército macedonio tenía una organización especializada.

El ejército de Alejandro se dividía en diferentes cuerpos que trabajaban juntos: - Caballería pesada: Estaba formada por los "hetairoi" o compañeros de Alejandro y aliados griegos. Eran jinetes altamente entrenados y equipados con lanzas y espadas. - Arqueros y lanzadores de jabalinas: Estaban al frente de los compañeros y proporcionaban apoyo a distancia. - Caballería ligera: Esta unidad exploradora estaba equipada para reconocer el territorio enemigo y proteger el flanco derecho del ejército. - Caballería aliada: Protegía el flanco izquierdo de la infantería y estaba compuesta en su mayoría por aliados griegos, como los tesalios. - Infantería: La infantería formaba la "falange" macedonia y actuaba como el "yunque" en la estrategia de batalla. Estaba altamente armada y equipada. - Armas de asedio: El ejército macedonio tenía ingenieros que desarrollaron armas de asedio avanzadas, como catapultas y onagros, que eran cruciales para tomar ciudades y enfrentar a las tropas enemigas.

La estrategia de Alejandro se basaba en la coordinación de estos diferentes cuerpos para lograr la victoria en la batalla. Su ejército no solo era numeroso, sino que también estaba altamente entrenado y equipado con armas avanzadas, lo que le permitió conquistar un vasto imperio.

Ancestros

Alejandro en la posteridad

En Asia, a Alejandro Magno a menudo se le llamaba "Dhul-Qarnayn", que significa "el de dos cuernos". Esto se debe a que se representaba a sí mismo como el dios Zeus-Amón, usando una diadema con dos cuernos de carnero (que simbolizaba a Amón) y dos penachos largos que salían de su casco.

A lo largo de la historia, la figura de Alejandro dio lugar a numerosas leyendas y mitos. Por ejemplo, una leyenda neogriega cuenta que Alejandro estaba obsesionado con la inmortalidad, similar a Gilgamesh, y buscaba en vano el agua sagrada que le otorgaría la inmortalidad.

En las tradiciones del Medio Oriente, como el zoroastrismo, se le conoce como el "maldito Alejandro" debido a la destrucción del Imperio persa y la quema de su capital, Persépolis.

En diferentes culturas orientales, se le conoce con nombres como "Eskandar-e Maqduni" en persa, "Al-Iskandar al-Akbar" en árabe, "Sikandar-e-azam" en urdu e hindi, "Skandar" en pashto y "Alexander Mokdon" en hebreo. También se le asociaba con los cuernos de carnero del dios egipcio Amón en algunas monedas acuñadas durante su reinado.

Influencia en la Antigua Roma

Al final de la República Romana y al comienzo del Imperio Romano, los romanos cultos usaban el latín principalmente para asuntos legales, políticos y ceremoniales. Para discusiones intelectuales y filosóficas, preferían el griego antiguo. Los romanos se enorgullecían de su conocimiento del griego y no les gustaba que se dijera que lo hablaban mal. En todo el Imperio Romano, la lengua común era el "koiné", una variante del griego que se basaba en el griego que hablaba Alejandro Magno.

Muchos romanos admiraban a Alejandro Magno y sus conquistas, y querían ser como él. Sin embargo, no sabemos mucho sobre las relaciones diplomáticas entre Roma y Macedonia en esa época. Julio César, por ejemplo, lloró en Hispania solo al ver una estatua de Alejandro, lamentando que a su edad no había logrado hacer tantas cosas como él.

Julio César también mostró su respeto por Alejandro visitando su tumba en Alejandría, Egipto, mientras estaba aliado con Cleopatra. Después de la caída de Alejandría bajo el dominio romano, la tumba y el cuerpo de Alejandro fueron saqueados y dañados por emperadores romanos posteriores. Augusto, el emperador, visitó la tumba y consideró que Alejandro era el único líder que merecía su visita, pero accidentalmente rompió la nariz del cuerpo momificado mientras dejaba una ofrenda.

Otros emperadores romanos como Pompeyo el Grande y Calígula robaron objetos y prendas de la tumba de Alejandro para su propio uso. Incluso en siglos posteriores, algunas familias romanas llevaban la imagen de Alejandro en sus joyas y ropa, y tenían platos con dibujos que representaban la vida del rey macedonio.

Alejandro Magno en la literatura

Se han escrito innumerables obras de Alejandro

• De 1969 a 1981 Mary Renault escribió una trilogía de ficción histórica sobre Alejandro: Fuego en el paraíso (sobre su niñez y adolescencia), El muchacho persa (la campaña de Asia a partir de la conquista de Persia, narrada desde el punto de vista del eunuco Bagoas), y Juegos funerarios (sobre las luchas de los diádocos). Alejandro también aparece brevemente en la novela La máscara de Apolo, y se alude directamente a él en El último vino, e indirectamente en El cantador de salmos. Además de estas obras de ficción, Renault también escribió una biografía histórica, The Nature of Alexander (traducida al castellano simplemente como Alejandro Magno).
• El polémico escritor francés Roger Peyrefitte escribió una trilogía sobre Alejandro que es considerada una buena biografía: La Jeunesse d'Alexandre (1977), Les Conquêtes d'Alexandre (1979) y Alexandre le Grand (1981).
• Una tercera trilogía fue escrita por el italiano Valerio Massimo Manfredi en 1998: El hijo del sueño, Las arenas de Amón y El confín del mundo.
• Gisbert Haefs también noveló la vida en una obra con título el nombre del rey, Alejandro Magno.
• La ucronía Alejandro Magno y las águilas de Roma, de Javier Negrete, fue publicada en 2007 en España.

Juicios sobre su personalidad

Los historiadores tienen diferentes opiniones sobre la personalidad de Alejandro Magno. Las opiniones sobre la personalidad de Alejandro Magno varían entre ellos, y su carácter es un tema de debate y discusión en la historia.

- Flavio Arriano defiende a Alejandro, diciendo que aquellos que lo critican deben considerar todo lo que hizo y quién llegó a ser. Argumenta que cualquier crítica debe tener en cuenta el conjunto de sus acciones y logros.

- Mary Renault sugiere que los juicios modernos sobre la personalidad de Alejandro deberían considerar el contexto de su época. En su tiempo, buscar la fama era visto como una aspiración honorable, y muchos grandes filósofos como Sócrates, Platón y Aristóteles también lo aceptaron. Por lo tanto, critica a quienes lo juzgan desde una perspectiva moderna.

- Hermann Bengston sugiere que Alejandro debe ser juzgado según las normas de su tiempo, ya que tenía derecho a ser evaluado de acuerdo con las costumbres de su época.

- Robin Lane Fox defiende a Alejandro argumentando que no debe ser comparado con figuras como Hitler o Stalin. Alexander nació como rey y tenía la intención de incluir a los pueblos conquistados en su nuevo reino. No tenía la misma ideología de limpieza étnica o racial que algunos líderes modernos.

- Victor Davis Hanson compara a Alejandro con Hitler, argumentando que ambos eran líderes obsesionados con el botín y el saqueo bajo la apariencia de llevar la cultura y la liberación a otros pueblos. Aunque eran amables con ciertos aspectos, también eran despiadados y ambiciosos.

- Nicholas G. L. Hammond destaca las múltiples facetas de la personalidad de Alejandro, incluyendo sus emociones profundas, su valentía, su curiosidad intelectual y su amor por la gloria. También señala su ambición desmesurada y su fuerza de voluntad despiadada. En resumen, describe a Alejandro como alguien con muchas cualidades, pero también con sus lados oscuros.

Frases célebres

• "No me envidies, porque tengo un destino igual de grande que mi ambición."
• "No temo a un ejército de leones dirigido por una oveja; temo a un ejército de ovejas dirigido por un león."
• "Prefiero conquistar un mundo que gobernar un reino."
• "No me preocupa un ejército de leones dirigido por un cordero; me preocupa un ejército de corderos dirigido por un león."
• "A veces, el miedo a la muerte nos hace olvidar la vida."
• "No existen caminos difíciles para aquellos que tienen sueños fáciles."
• "Cuando dejas de querer aprender, dejas de ser un líder."
• "Dame un ejército de soldados valientes y te conquistaré el mundo."
• "La gloria se compone de dos partes: una conquista de las cosas deseadas y la otra en la adquisición de la justicia."
• "Mi tumba sea digna de un rey, pero mi nombre es lo único que dejo atrás."

Datos de interés

• El nombre completo de Alejandro Magno era Alejandro III de Macedonia. El "Magno" se le atribuyó debido a sus hazañas y conquistas impresionantes.

• Alejandro fue educado por el famoso filósofo griego Aristóteles cuando era joven. Esto influyó en su pensamiento y en su interés por la cultura griega.

• Alejandro tenía un caballo llamado Bucéfalo, que se dice que era tan leal a él como él lo era a su caballo. Bucéfalo fue una parte importante de sus conquistas y batallas.

• Después de conquistar Egipto, fundó una ciudad llamada Alejandría en su honor, que se convirtió en un importante centro cultural y comercial en la antigüedad.

• A pesar de sus conquistas, Alejandro mostró un gran respeto por la cultura persa y promovió la mezcla de las culturas griega y persa en su imperio.

• Alejandro y su ejército llegaron a las montañas del Hindu Kush en el norte de la India, donde se enfrentaron a dificultades extremas debido al clima y la geografía. Su determinación se puso a prueba en estas regiones inhóspitas.

• La causa exacta de la muerte de Alejandro Magno sigue siendo un misterio. Algunos creen que murió de fiebre tifoidea, mientras que otros sugieren que fue envenenado. La verdadera causa de su muerte nunca se ha establecido definitivamente.

• Según algunas fuentes históricas, Alejandro Magno prefería una dieta simple y a menudo comía carne asada y pan duro. No era fanático de los lujos gastronómicos.

• Alejandro se convirtió en rey de Macedonia a la edad de 20 años y comenzó su campaña de conquista poco después. Su juventud no le impidió lograr hazañas asombrosas.

• Las hazañas de Alejandro Magno fueron inmortalizadas en numerosas obras literarias y epopeyas, incluida la famosa "Historia de Alejandro Magno" escrita por el historiador griego Arriano.

Galería de imágenes

• 

  Alejandro y Aristóteles. El notable filósofo se ocupó de la formación intelectual y académica de Alejandro durante cinco años.

• 

  Alejandro junto a su madre Olimpia (réplica ubicada en Viena).

• 

  Diógenes a Alejandro: «Quítate de ahí, me tapas el sol».

• 

  Batalla del Gránico. Ubicado cerca del emplazamiento de Troya (actual Turquía). Primera victoria macedonia sobre suelo persa. Fuentes modernas calculan que en la contienda se enfrentaron cuarenta mil soldados macedonios y cuarenta mil persas. Las bajas persas fueron numerosas, mientras que el ejército heleno sufrió muy pocas.

• 

  Batalla de Issos. Segunda victoria de Alejandro sobre los persas. Según fuentes modernas, esta vez el rey Darío reunió seiscientos mil soldados, mientras que los macedonios sumarían cincuenta mil. A pesar de la gran diferencia, la estrategia de Magno prevaleció por sobre la desventaja numérica. Las bajas persas fueron significativas, pero no así las macedonias. Darío huyó, abandonando también la tienda familiar, donde estaban su esposa, su madre, y sus dos hijas.

• 

  Boda de Roxana y Alejandro, por el pintor Giovanni Bazzi.

• 

  Alejandro en un submarino (pintura del año 1445). British Library Royal.

• 

  Batalla del Hydaspes, India. El ejército macedonio bordeaba el río, imposible atraversarlo por su profundidad, mientras las tropas del rey hindú, Poros, seguían de cerca sus movimientos. Finalmente, en un tramo de aguas bajas, se abrió batalla. Fue una de las contiendas más difíciles que tuvo Alejandro, ante un nuevo elemento: el ejército adversario disponía de elefantes de guerra, y su olor descomponía a los caballos del ejército macedonio. Pero según Calístenes, Alejandro tuvo en cuenta esto, por lo que utilizaron el fuego para dispersar a los elefantes, prendiendo antorchas y estatuas de bronce. Una vez finalizada la batalla, Alejandro se encontró con Poro, herido, y lo felicitó por la tenacidad de sus hombres. Le dio trato «real», y lo conservó como sátrapa de su región, incluso le obsequió otras regiones más.

• 

  Campañas de la invasión del sur de Asia.

• 

  Diario astronómico de los años 323-322 a. C. que contiene la muerte de Alejandro, Museo Británico.

• 

  El denominado «Sarcófago de Alejandro Magno» (Museo Arqueológico de Estambul).

• 

  Planteo táctico de Alejandro, basado en el utilizado por su padre Filipo II. Lo que cambiaba sustancialmente era la estrategia. La infantería (falange), actuaba como «yunque», y la caballería (hetaroi) era el «martillo», cuyo movimiento formaba la llamada línea oblicua, rompiendo el orden de las líneas enemigas.

• 

  Falange macedonia. Portaban lanzas (sarissa) de 6 metros de largo. Mantenían lejos al enemigo, o caso contrario, lo atravesaban. La segunda fila cubría los huecos formados en la primera, haciéndola prácticamente impenetrable. Las sarissas de las líneas de atrás tomaban medidas angulares desde 45° y la última a 90°. Los analistas coinciden en que la falange macedonia en tiempos de Alejandro Magno era similar a la de un puercoespín.

• 

  Arma colectiva: el «euthytonón», predecesor de la helépolis y la ballesta.

• 

  La familia de Darío ante Alejandro Magno. En la obra podemos observar a Hefestión señalando a Alejandro. Obra de Justus Sustermans conservada en la Biblioteca Museo Víctor Balaguer.

• 

  Busto de Alejandro Magno como Helios. Museos Capitolinos, Roma.

• 

  Olimpia y Nectanebo conciben a Alejandro. Pintura antigua de la colección de Historia de British Library Royal.

• 

  Camafeo de Alejandro Magno representado como Zeus-Amón.

• 

  Alejandro "El Grande", San Petersburgo, Rusia

• 

  Busto en mármol de Alejandro Magno, siglo II a.C. Obra helenística original de Alejandría, (Egipto).

• 

  Busto de Alejandro Magno como Helios. Museos Capitolinos, Roma.

• 

  Herma con busto de Alejandro. Copia romana en mármol de un original de Lisipo (ca. 330 a. C.). Museo del Louvre.

• 

  Alejandro montando a Bucéfalo, alzando a Niké (diosa de la victoria), en Pela, Macedonia (Grecia)

• 

  Alejandro El Grande, Salónica, Grecia

• 

  Alejandro domando a Bucéfalo

• 

  Moneda de Ptolomeo I que representa a Alejandro con una piel de elefante, símbolo de sus conquistas en la India.

• 

  Moneda que muestra en el anverso a Ptolomeo I y en el reverso a Alejandro montando un carro tirado por elefantes (campañas en la India)

• 

  La boda de Roxana y Alejandro, de Pietro Antonio Rotari

• 

  El casamiento de Alejandro y Roxana, Palacio Caserta.

• 

  Alejandro en el Templo de Jerusalén, 332 a.C., de Sebastiano Conca (1736), Museo del Prado

• 

  Cuadro de Charles Le Brun que muestra a Alejandro y Poros durante la batalla del Hidaspes.

• 

  Alejandro corta el Nudo Gordiano, por Jean-Simon Berthélemy (Escuela de Bellas Artes, París).

• 

  "Alejandro rechaza beber el agua", en la escena que ordena que beban primero sus tropas, de Giuseppe Cades

• 

  Alejandro fundando Alejandría, de Placido Costanzi

• 

  Alejandro y Poro, de Francesco Fontebasso

Véase también

En inglés: Alexander the Great Facts for Kids

• Reino de Macedonia
• Filipo II de Macedonia
• Alejandro IV de Macedonia
• Olimpia de Epiro
• Nudo gordiano
• Falange Macedonia
• Diádocos
• Período helenístico
• Teorías acerca de las relaciones personales de Alejandro Magno
• Tumba de Alejandro Magno