Filosofía occidental para niños
La filosofía occidental es el estudio del pensamiento y las ideas que han surgido en el mundo occidental. Esta forma de pensar comenzó en la filosofía griega antigua, con los primeros pensadores conocidos como presocráticos. La palabra filosofía viene del griego antiguo philosophía, que significa literalmente «el amor a la sabiduría».
Contenido
Historia de la filosofía occidental
Filosofía antigua: ¿Cómo empezó todo?
La filosofía occidental antigua no solo trataba los temas que hoy conocemos como filosofía. También incluía otras áreas como las matemáticas puras y las ciencias naturales, por ejemplo, la física, la astronomía y la biología. Aristóteles, un famoso filósofo, escribió sobre todos estos temas.
Los presocráticos: Buscando el origen del universo
Los filósofos presocráticos se interesaron por la cosmología, es decir, la naturaleza y el origen del universo. Ellos rechazaron las explicaciones basadas en mitos y buscaron respuestas usando la razón. Querían encontrar el arche, que era el principio o la causa primera de todo.
Tales de Mileto (nacido alrededor del 625 a.C. en Jonia) fue el primer filósofo reconocido. Él creía que el agua era el arche, diciendo que "todo es agua". Usó la observación y la razón para llegar a esta idea, por eso se le considera el primer filósofo. Su alumno Anaximandro pensó que el arche era el apeiron, algo infinito. Después, Anaxímenes de Mileto sugirió que el aire era el elemento principal.
Pitágoras (nacido alrededor del 570 a.C.) de la isla de Samos, vivió más tarde en Crotón, Italia. Los pitagóricos creían que "todo es número". Descubrieron que los intervalos musicales consonantes (que suenan bien juntos) podían explicar la armonía en la filosofía. Esto sugería que cosas opuestas podían unirse para crear algo nuevo. También creían en la reencarnación, que las almas podían pasar a otros cuerpos.
Parménides pensaba que el mundo era único, inmutable y eterno. Creía que cualquier cosa que sugiriera lo contrario era una ilusión. Zenón de Elea creó sus famosas paradojas para apoyar las ideas de Parménides, mostrando que el cambio y el movimiento eran imposibles. Por otro lado, Heráclito decía que todo estaba en constante cambio, y que no se podía pisar el mismo río dos veces.
Empédocles propuso que el arche estaba formado por varios elementos, dando lugar al modelo de los cuatro elementos clásicos (tierra, agua, aire y fuego). Estas fuerzas eran movidas por el Amor y la Lucha, creando las mezclas que forman el mundo. Anaxágoras creía que una fuerza externa, la nous (la mente), era la responsable de todo. Leucipo y Demócrito propusieron el atomismo, diciendo que el universo estaba hecho de pequeñas partículas indivisibles llamadas átomos.
Además, los sofistas eran maestros de retórica que enseñaban a debatir. Aunque no tenían una filosofía única, promovían el subjetivismo (que la verdad depende de cada persona) y el relativismo (que no hay verdades absolutas). Protágoras, un sofista influyente, dijo que "el hombre es la medida de todas las cosas".
Período Clásico: Sócrates, Platón y Aristóteles
El período clásico de la filosofía griega se centra en Sócrates y sus alumnos.
La vida de Sócrates cambió cuando el Oráculo de Delfos dijo que nadie en Atenas era más sabio que él. Sócrates dedicó su vida a interrogar a la gente en Atenas para entender esta afirmación. Desarrolló el método socrático, una forma crítica de examinar las ideas de las personas. Se enfocó en temas como la felicidad (eudaimonia), la justicia, la belleza, la verdad y la virtud. Sócrates no escribió nada, pero sus alumnos Platón y Jenofonte registraron sus conversaciones.
Las preguntas de Sócrates le ganaron enemigos, quienes lo acusaron de no respetar a los dioses y de corromper a la juventud. Fue juzgado, declarado culpable y condenado a muerte. Aunque sus amigos le ofrecieron escapar, Sócrates prefirió quedarse y seguir sus principios. Murió en el año 399 a.C. al beber veneno.
Después de la muerte de Sócrates, Platón fundó la Academia platónica y la Filosofía platónica. Al igual que Sócrates, Platón relacionó la virtud con el conocimiento. Esto lo llevó a investigar qué es el conocimiento y cómo se obtiene.
Otros alumnos de Sócrates también fundaron escuelas. El Cinismo, fundado por Antístenes, creía que el propósito de la vida era vivir con virtud, de acuerdo con la naturaleza, rechazando la riqueza y la fama. Los Cirenaicos, fundados por Aristipo, tenían una filosofía opuesta, promoviendo el hedonismo, donde el placer era el bien supremo.
La última escuela importante del período clásico fue la escuela peripatética, fundada por el alumno de Platón, Aristóteles. Aristóteles escribió sobre muchos temas: física, biología, metafísica, estética, política y lógica. Su lógica aristotélica fue la primera en clasificar los argumentos válidos. Su forma de entender el conocimiento era una forma temprana de empirismo (conocimiento a través de la experiencia).
Aristóteles criticó las ideas de Platón sobre la metafísica. Propuso el modelo de las cuatro causas para explicar el cambio en el mundo. Sus ideas éticas decían que la felicidad (eudaimonia) era el bien supremo, y se alcanzaba viviendo con razón y virtud. Definió la virtud como el punto medio entre dos extremos. Aristóteles fue tutor de Alejandro Magno, quien conquistó gran parte del mundo antiguo. Las ideas de Aristóteles han influido en casi todos los filósofos posteriores.
Filosofía helenística y romana: La búsqueda de la tranquilidad

Durante los períodos helenístico y romano, el aristotelismo y el cinismo continuaron. Surgieron nuevas filosofías como el pirronismo, el epicureísmo y el estoicismo. El platonismo también siguió, pero con nuevas interpretaciones. La filosofía griega influyó mucho en la romana.
Las diferentes escuelas filosóficas proponían distintas formas de alcanzar la felicidad (eudaimonia). Algunas buscaban la calma interna, la ataraxia (tranquilidad mental), o la indiferencia, la apatheia (ausencia de emociones fuertes). El objetivo del cínico era vivir de acuerdo con la naturaleza, rechazando las costumbres sociales.
Esto inspiró a Zenón de Citio, fundador del estoicismo. Los estoicos adoptaron la idea de la autodisciplina y aplicaron la apatheia a las circunstancias personales. Creían que la calidad de vida dependía de cómo uno respondía a las situaciones externas.

Los cirenaicos y los epicúreos tenían una visión diferente. Los cirenaicos eran hedonistas y creían que el placer físico era el bien supremo. Los seguidores de Epicuro también buscaban el placer y evitar el dolor, pero se referían a la ausencia de dolor en el cuerpo y de problemas en la mente, buscando la ataraxia.
Otra corriente importante fue el escepticismo. Pirrón de Elis viajó a la India con el ejército de Alejandro Magno y fue influenciado por el Budismo. Al regresar a Grecia, fundó el pirronismo, que enseñaba que las opiniones sobre cosas inciertas impedían la ataraxia. Para lograr la tranquilidad, el pirronismo usaba la epoché (suspensión del juicio) sobre todas las ideas no evidentes.
El neoplatonismo, con Plotino como su primer gran pensador, sostenía que la mente existe antes que la materia y que el universo tiene una causa única, que es una mente. El neoplatonismo se convirtió en una especie de religión y tuvo un gran impacto en el pensamiento cristiano posterior.
Filosofía medieval: Fe y razón
La filosofía medieval abarca desde la cristianización del Imperio romano hasta el Renacimiento. Se caracterizó por el redescubrimiento de la filosofía griega y helenística, y por la necesidad de unir las ideas de las religiones abrahámicas (Judaísmo, Cristianismo e Islam) con el conocimiento secular. Se discutieron temas como la relación entre la fe y la razón, la existencia de Dios, y la naturaleza del conocimiento.
Una figura clave fue Agustín de Hipona, uno de los Padres de la Iglesia más importantes del cristianismo occidental. Agustín adoptó las ideas de Platón y las adaptó al cristianismo. Su influencia dominó la filosofía medieval hasta el siglo XIII. Él abordó el problema del mal, la guerra justa y la naturaleza del tiempo. Sobre el mal, creía que era un resultado necesario del libre albedrío humano.
Una escuela de pensamiento influyente fue la escolástica. No era tanto una filosofía, sino una metodología que enfatizaba el razonamiento dialéctico para expandir el conocimiento y resolver contradicciones. La escolástica se caracterizaba por un análisis conceptual riguroso.
Anselmo de Canterbury (llamado el "padre de la escolástica") argumentó que la existencia de Dios podía probarse lógicamente con el argumento ontológico. Él decía que Dios es, por definición, lo más grande que se puede concebir, y como algo que existe es más grande que algo que no existe, Dios debe existir.

Boecio también trabajó en el problema de los universales (ideas generales), argumentando que no existían de forma independiente como decía Platón, pero sí en las cosas particulares, siguiendo a Aristóteles. Pedro Abelardo extendió esto al nominalismo, que afirma que los universales son solo nombres dados a características compartidas por cosas individuales.
Tomás de Aquino, un filósofo escolástico y padre del tomismo, tuvo una enorme influencia en la cristiandad medieval. Fue influenciado por el recién descubierto Aristóteles y buscó unir su filosofía con la teología cristiana. Para entender el alma, consideró temas metafísicos como la Teoría de la sustancia, la materia y la forma. Definió una sustancia material como la combinación de una esencia y rasgos accidentales. Para los humanos, el alma es la esencia.
Otros filósofos occidentales importantes de la Edad Media incluyen a Juan Escoto Eriúgena, Hildegarda de Bingen, Roger Bacon, Guillermo de Ockham y Meister Eckhart. La escolástica continuó hasta el siglo XVII. Durante la Edad Media, la filosofía occidental también fue influenciada por filósofos judíos como Maimónides y por filósofos musulmanes como Avicena y Averroes.

Renacimiento: El resurgir del humanismo

El Renacimiento fue un período de cambio entre la Edad Media y el pensamiento moderno. Se recuperaron textos de la Filosofía de la Antigua Grecia, lo que llevó a que los filósofos se interesaran menos en la lógica y la teología, y más en la moral, la literatura y el misticismo. El estudio de los clásicos y las artes humanas, como la historia, ganó un interés sin precedentes. Esta tendencia se llamó humanismo. Los humanistas, siguiendo a Petrarca, pusieron a la humanidad y sus virtudes en el centro de la filosofía.
En la transición del Renacimiento a la filosofía moderna, el diálogo fue un estilo de escritura principal para filósofos como Giordano Bruno.
Filosofía moderna: Nuevas formas de pensar
El término "filosofía moderna" se usa de varias maneras. A veces, Thomas Hobbes es considerado el primer filósofo moderno por su método sistemático en la filosofía política. Otras veces, René Descartes es visto como el primero porque basó su filosofía en problemas de conocimiento, no solo en la metafísica.
La filosofía moderna, especialmente la del Ilustración, se caracteriza por su independencia de autoridades tradicionales como la Iglesia. Se enfocó en los fundamentos del conocimiento y en la creación de sistemas metafísicos. También vio el surgimiento de la física moderna a partir de la filosofía natural.
Primeros años de la modernidad (siglos XVII y XVIII): Mente, cuerpo y conocimiento

Algunos temas centrales de la filosofía occidental en su período moderno temprano incluyen la naturaleza de la mente y su relación con el cuerpo. También se exploraron las implicaciones de las nuevas ciencias naturales para temas como el libre albedrío y Dios. Además, surgió una base secular para la filosofía moral y política. Estas ideas se unieron con la propuesta de Francis Bacon de un nuevo programa empírico para expandir el conocimiento.
La forma de conocer de Descartes se basaba en la duda cartesiana. Él creía que solo la creencia más segura podía ser la base para nuevas investigaciones. Esto lo llevó a su famosa frase Pienso, luego existo. Esta idea fue fundamental para gran parte de la filosofía occidental posterior. Sin embargo, un problema importante para su pensamiento fue el problema mente-cuerpo.
Baruch Spinoza propuso que la mente y el cuerpo son una sola sustancia. Esto se basaba en su idea de que Dios y el universo son lo mismo. Por otro lado, Gottfried Wilhelm Leibniz creía que el mundo estaba compuesto por muchas sustancias individuales llamadas mónadas. Descartes, Spinoza y Leibniz son considerados los primeros racionalistas.
En contraste con Descartes, Thomas Hobbes era un materialista que creía que todo era físico. También era un empirista, pensando que todo el conocimiento proviene de las sensaciones causadas por objetos externos. John Locke fue otro empirista clásico. Junto con David Hume, forman el núcleo del 'empirismo británico'. George Berkeley estaba de acuerdo con el empirismo, pero argumentaba que el mundo existía solo como resultado de ser percibido.
En filosofía política, los argumentos a menudo comenzaban con la idea de cómo sería el mundo sin sociedad, un escenario llamado estado de naturaleza. Hobbes creía que sería violento y caótico, y que el gobernante debía tener un poder ilimitado para evitarlo. Locke, en cambio, pensaba que en el estado de naturaleza los individuos tenían libertad, pero que debían ceder parte de ella al formar una sociedad, sin llegar a un gobierno absoluto. Jean-Jacques Rousseau sostenía que en la naturaleza las personas vivían en paz, y que la sociedad llevó al aumento de la desigualdad.
El final de este período se identifica con el intento de Immanuel Kant de limitar la metafísica, justificar el conocimiento científico y unirlo con la moral y la libertad. Mientras los racionalistas creían que el conocimiento venía del razonamiento a priori (antes de la experiencia), los empiristas decían que venía de la experiencia sensorial a posteriori. Kant buscó reconciliar estas ideas, argumentando que la mente usa el entendimiento a priori para interpretar las experiencias a posteriori.
Muchos otros contribuyeron en este período, incluyendo a Galileo Galilei, Blaise Pascal, Isaac Newton y Adam Smith.
Moderna tardía (siglo XIX): Idealismo y voluntad

La filosofía moderna tardía se considera que comienza alrededor de 1781. El siglo XIX vio el inicio de la división entre las tradiciones filosóficas continental (más interesada en la metafísica, común en Alemania) y analítica (enfocada en el conocimiento, la ética y la política, común en el mundo angloparlante).
La filosofía alemana tuvo una gran influencia. Los idealistas alemanes, como Johann Gottlieb Fichte, Friedrich Wilhelm Joseph Schelling y Georg Wilhelm Friedrich Hegel, transformaron el trabajo de Kant. Ellos sostenían que el mundo está formado por un proceso racional o similar a la mente, y por lo tanto es completamente conocible.
Hegel creía que la historia era el viaje dialéctico del Geist (mente universal) hacia la autorrealización. Su filosofía se basaba en el idealismo absoluto, donde la realidad misma es mental. Su legado se dividió entre los hegelianos de derecha (conservadores) y los jóvenes hegelianos (radicales), como Ludwig Feuerbach, quien inspiró a Karl Marx.
Arthur Schopenhauer se inspiró en Kant y en la filosofía india. Él aceptó la división de Kant del mundo en lo nouménico (lo real) y el fenómeno (lo aparente). Sin embargo, creía que lo nouménico sí era accesible a través de la experiencia de la voluntad, que subyace a toda la naturaleza. Mientras él pensaba que la frustración de esta voluntad causaba sufrimiento, Friedrich Nietzsche creía que la voluntad de poder era algo que daba fuerza, llevando al crecimiento y la expansión.
Véase también
En inglés: Western philosophy Facts for Kids