Flatulencia para niños
Datos para niños Flatulencia |
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Una de las muchas representaciones en el rollo, «He Gassen» en la que se representa un «concurso de flatulencias»
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Especialidad | gastroenterología | |
Una flatulencia (conocida popularmente como pedo o gas) es una mezcla de gases que se forma en el intestino y se expulsa por el ano. A menudo, viene acompañada de un sonido y un olor particulares. Estos gases se producen de varias maneras: por las bacterias y levaduras que viven en nuestro tracto gastrointestinal al digerir los alimentos, por el dióxido de carbono que se forma cuando el ácido gástrico se neutraliza, y por el aire que tragamos. Si una persona tiene muchos gases o estos huelen muy fuerte, podría ser señal de alguna condición de salud que necesita ser revisada, como la celiaquía, la sensibilidad al gluten no celíaca, el síndrome del intestino irritable o la intolerancia a la lactosa.
Los gases que se forman por la acción de las bacterias (principalmente hidrógeno y metano) representan alrededor de tres cuartas partes del total de una flatulencia. En personas sanas, la frecuencia con la que se expulsan estos gases varía.
Contenido
- ¿Qué son las flatulencias y por qué se producen?
- ¿De qué están compuestas las flatulencias?
- ¿Qué alimentos causan flatulencias?
- ¿Cómo reaccionamos a las flatulencias?
- Las flatulencias y el medio ambiente
- Las flatulencias en la literatura y el arte
- Las flatulencias en la mitología
- Las flatulencias en el cine y la televisión
- Las flatulencias en celebridades
- Véase también
¿Qué son las flatulencias y por qué se producen?
Cuando una persona produce y expulsa muchos gases con olor, esto puede ser incómodo en situaciones sociales. Generalmente, esto ocurre porque las bacterias del colon fermentan sustancias que no se digirieron bien. Es un problema que puede tener varias causas y, a veces, es un síntoma de una condición médica, como los problemas de malabsorción (cuando el cuerpo no absorbe bien los nutrientes).
La microbiota intestinal y los gases
Nuestro cuerpo es el hogar de una gran comunidad de microorganismos vivos, llamada microbiota. Se calcula que tenemos unas 100 billones de estas células, diez veces más que nuestras propias células humanas. La mayoría de ellas viven en el colon, y las más comunes son las bacterias llamadas Firmicutes, Bacteroidetes y Actinobacteria.
Las principales condiciones de salud que pueden causar un exceso de gases o que estos huelan mal, si no se tratan, son la celiaquía, la sensibilidad al gluten no celíaca, el síndrome del intestino irritable y la intolerancia a la lactosa.
Todos los animales, desde los mamíferos hasta algunos invertebrados, pájaros, gusanos, hormigas, pezes y reptiles, expulsan gases. Debido a sus diferentes dietas, los gases de animales carnívoros, como perros y gatos, suelen tener un olor más fuerte que los de los herbívoros, como las vacas.
La cantidad de gas que se produce por la fermentación de las bacterias depende principalmente de cuántos restos de alimentos fermentables llegan al colon sin ser absorbidos en el intestino delgado, y de la composición de las bacterias que viven en el colon.
¿De qué están compuestas las flatulencias?
Las flatulencias humanas están compuestas principalmente por:
- nitrógeno (que tragamos, 70-85%)
- hidrógeno (producido por algunos microbios y usado por otros, 0-50%)
- dióxido de carbono (producido por microbios o que tragamos, 10-30%)
- metano (producido por microbios anaerobios, 0-10%)
- oxígeno (que tragamos, 0-10%).
También contienen partículas muy pequeñas de excrementos.
Es importante saber que las flatulencias están compuestas principalmente por nitrógeno, no por metano, como a veces se cree.
El metano es producido por microorganismos llamados metanógenos, que pertenecen al grupo de las Archaea (diferentes de las Bacteria), y se encuentran en el intestino. El metano y el hidrógeno son gases que pueden encenderse con fuego. Sin embargo, se cree que dos de cada tres personas no expulsan metano en sus flatulencias.
¿Por qué huelen mal las flatulencias?
El olor fuerte y característico de las flatulencias proviene de pequeñas cantidades de otras sustancias que se producen cuando las proteínas se descomponen. Estas incluyen:
- ácido butírico (que huele a mantequilla rancia).
- Compuestos de azufre, como:
- sulfuro de hidrógeno (que huele a huevos podridos).
- disulfuro de carbono.
¿Qué alimentos causan flatulencias?
Los gases intestinales provienen en un 90% de fuentes externas (lo que comemos) y en un 10% de fuentes internas (lo que produce nuestro cuerpo). Los gases internos se forman al digerir ciertos tipos de comida.
Los alimentos que suelen producir flatulencias son aquellos ricos en carbohidratos complejos (especialmente oligosacáridos como la inulina). Algunos ejemplos son:
- frijoles
- leche
- cebollas
- batatas
- castañas
- brócoli
- coles
- alcachofas
- levadura del pan
- huevos, entre otros.
En el caso de los frijoles, los gases parecen venir de los oligosacáridos, que son carbohidratos difíciles de digerir. Estos llegan al intestino grueso casi sin cambios, y allí las bacterias se alimentan de ellos, produciendo mucho gas.
Las bacterias intestinales que se alimentan de la lactosa, en personas con intolerancia a la lactosa, pueden producir un exceso de gas cuando consumen leche u otros productos con lactosa.
¿Cómo reaccionamos a las flatulencias?
Aunque el humor relacionado con las flatulencias puede ser divertido, en muchas culturas se considera de mala educación expulsar gases en público. A veces, la persona que lo hace puede sentir vergüenza, y quienes lo perciben pueden reírse o incluso enojarse.
Las flatulencias y el medio ambiente

A menudo se cree que las flatulencias son una fuente importante de gases de efecto invernadero, debido a la idea errónea de que el metano liberado por el ganado proviene principalmente de sus gases. Aunque el ganado produce cerca del 20% de las emisiones mundiales de metano, entre el 90% y el 95% de este gas se libera al exhalar o al eructar.
En países como Nueva Zelanda, que producen muchos productos agrícolas, las emisiones de metano del ganado pueden ser altas en comparación con otras fuentes de gases de efecto invernadero. El Gobierno de Nueva Zelanda ha firmado el Protocolo de Kioto para intentar reducir estas emisiones. Para lograrlo, después de una investigación agrícola, se propuso un impuesto, que rápidamente se conoció como un «impuesto al pedo». Sin embargo, esta propuesta fue rechazada por los agricultores, grupos de presión agrícolas y políticos de la oposición.
En Fresno, California, existe un sistema que recoge el metano del ganado lechero y lo convierte en biogás. Esto se hace en colaboración con Pacific Gas & Electric (PG&E) y Soluciones de Bioenergía. Esta última vende el metano recogido del estiércol de vaca a PG&E, que luego lo transforma en biogás utilizable, muy parecido al gas natural. Es importante aclarar que esto no tiene relación con las flatulencias, sino con el gas producido por la fermentación del estiércol.
En Argentina, el doctor Guillermo Berra, del INTA, logró recolectar, purificar y comprimir los gases que emiten los bovinos. Su objetivo es usarlos como una fuente de energía alternativa. Según el doctor Berra, este sistema podría ayudar a reducir las emisiones de un gas que contribuye al efecto invernadero.
Las flatulencias en la literatura y el arte
- Aristófanes (444-385 AC) escribió en 424 Los caballeros, una obra con humor escatológico que incluye muchas referencias a las flatulencias.
- Dante Alighieri (1265-1321), en La Divina comedia, en la última línea del capítulo 21 del «Infierno», describe un uso demoníaco de una función natural del cuerpo: Ed elli avea del cul fatto trombetta («y él había, del trasero, hecho trompeta»).
- Geoffrey Chaucer (1343-1400) en Los Cuentos de Canterbury, en el Cuento del molinero, hay un famoso pasaje de humor con flatulencias: «Nicholas levantó rápidamente la ventana y asomó su trasero hacia afuera… Entonces Nicholas dejó escapar un pedo con un ruido tan grande como un trueno, de modo que Absolom casi fue arrojado por su fuerza. Pero él tenía listo su hierro caliente y golpeó violentamente a Nicholas en medio de su trasero».
- Rolando el Pedorro (conocido como Roland le Fartere) fue un artista medieval que vivió en la Inglaterra del siglo XII. Su verdadero nombre era George, pero adoptó ese nombre para su arte. Cada Navidad, debía presentar un espectáculo llamado “Unum saltum et siffletum et unum bumbulum " (“Un salto, un silbido y un pedo) para la corte del Rey.
- Friedrich Dedekind (siglo XVI), en su obra Grobianus et Grobiana, que llegó a Inglaterra en 1605 como La escuela de Slovenrie, enseñaba que contener las ganas de orinar, expulsar gases y vomitar era malo para la salud. Por lo tanto, se debía permitir libremente estas actividades.
- François Rabelais (1494-1553) escribió en 1532 Gargantua y Pantagruel, donde se menciona un gas que hizo temblar la tierra a nueve millas a la redonda.
- Montaigne (1533-1592), en su ensayo La fuerza de la imaginación, dedicó un capítulo a la flatulencia: «Yo mismo conocí uno tan bruto, que por cuarenta años utilizó su trasero como respiradero principal intermitentemente hasta que murió de ello».
- Miguel de Cervantes (1547-1616), en El Quijote de la Mancha, capítulo 20, Don Quijote y Sancho Panza buscan agua de noche. Sancho, asustado por unos ruidos, intenta retener a Don Quijote. Como no lo logra, ata los pies de Rocinante y, para entretener a su amo, le cuenta una historia. Al no atreverse a alejarse, Sancho hace sus necesidades cerca de Don Quijote y explica un gas como señal de una nueva aventura: «¿Qué rumor es ese, Sancho? - Alguna cosa nueva debe de ser».
- Francisco de Quevedo (1580-1645) afirma que «el pedo antes hace al trasero digno de laudatoria que indigno de ella». En su Poema al Pedo, explica de forma rimada qué es un gas, cómo son y que todas las personas los producen.
- Hans Jakob Christoph von Grimmelshausen (1621-1676), escritor alemán del Barroco, en su obra El aventurero Simplicíssimus, describe un pasaje donde el personaje principal, criado casi como un animal de granja, suelta un gas ruidoso y maloliente que asusta a todos.
- Benjamin Franklin (1706-1790), escribió alrededor de 1781 el ensayo «Pee orgullosamente», donde analiza cómo los diferentes alimentos influyen en el olor de los gases.
- Pierre-Thomas-Nicolas Hurtaut (1719-1791), escribió el ensayo «El Arte de tirarse pedos» en 1751, donde argumenta que los gases pueden ser útiles en el mundo social, por ejemplo, para iniciar una conversación o para terminar una discusión.
- Esteban Echeverría (1805-1851), en su obra El Matadero, menciona que la falta de carne y el consumo excesivo de legumbres causaron una epidemia de gases en la población.
- Juan Valera (1824-1905): un gas es el tema central de su cuento La Reina Madre.
- Émile Zola (1840-1902): en La Tierra, el hijo mayor de Fouan expulsa gases cuando quiere y gana concursos por su habilidad.
- Guillaume Apollinaire (1880-1918), en su obra Las Once Mil Vírgenes, menciona los gases en varias ocasiones, describiendo cómo apestan la atmósfera.
- James Joyce (1882-1941): en Ulises (1922), el personaje Leopold Bloom expulsa gases. En Cartas de amor a Nora Barnacle, le escribe a su esposa: «Tenías un trasero lleno de pedos aquella noche .. ».
- Roberto Arlt (1900-1942) en Los lanzallamas (1931), describe una atmósfera caliente e impregnada por un intenso olor a gas seco.
- Leopoldo Marechal (1900-1970) en Adan Buenosayres (1948), describe una ciudad donde dos millones de cuerpos duermen ruidosamente, "rajando a pedos las conyugales sábanas".
- Samuel Beckett (1906-1989), en su obra Molloy (1951), discute la "Antropología del Pedo", contando cuántos gases expulsaba por hora.
- Julio Cortázar (1914-1984), en el capítulo «Lucas, sus pudores» de su novela Un tal Lucas (1979), describe el horror de Lucas al soltar un gas ruidoso en el baño de otra casa.
- Adolfo Bioy Casares (1914-1999) en su diario de conversaciones con Jorge Luis Borges, menciona un poema de Octavio Paz con el verso «tus pedos estallan y se disipan».
- Alejandro Dolina (1944) escribió el cuento breve Historia del que se desgració en el tren, donde un hombre sufre un incidente vergonzoso en el tren que lo lleva a bajarse.
- Augusto Roa Bastos (1917-2005) escribió el cuento Bajo el puente, donde se dice: «A cada uno le güele bien su pedo».
- Paco Ignacio Taibo I (1924-2008) en su libro Breviario de la Fabada, incluye un capítulo llamado «La defensa del pedo», donde menciona que en 1816, el Inquisidor General prohibió defender el gas.
- Guillermo Cabrera Infante (1929-2005) escribió la novela Ella cantaba boleros (1999), que termina con un gas, y el personaje recuerda la frase de Dalí: "los pedos son el suspiro del cuerpo".
- Milan Kundera (1929—2023) escribió la novela La insoportable levedad del ser, donde la madre de Teresa suelta gases para demostrar que el cuerpo humano los produce.
- Eduardo Mendoza (1943) escribió la novela El asombroso viaje de Pomponio Flato (2008), una parodia donde el protagonista resuelve un misterioso asesinato entre gas y gas.
- Philip Roth (1933-2018) escribió en su novela El mal de Portnoy (1969): «Cuando yo me tiro pedos en la bañera ella se hunde y besa las burbujas».
- Mario Vargas Llosa (1936) en su novela Los Vientos, describe cómo el personaje principal sufre de gases en situaciones estresantes.
- Abelardo Castillo (1935—2017), en su novela Crónica de un iniciado (2009), un personaje suelta un gas ruidoso durante una conversación.
- James Scott (1936), en su libro Los dominados y el arte de la resistencia, escribió «Cuando el gran señor pasa, el campesino sabio hace una gran reverencia y silenciosamente se echa un pedo».
- Ana María Shua (1950) en su recopilación El Libro de los Pecados, los Vicios y las Virtudes, incluye un cuento popular árabe llamado «El Pedo Histórico», donde un novio sufre una vergüenza por un gas ruidoso.
- Iain Banks (1954) escribió en su novela La fábrica de Avispas (1984) sobre un padre que tiene un detector telepático de gases y puede saber lo que la gente ha comido o incluso pensado.
- Jo Nesbø (1960) escribió El doctor Proctor y los polvos tirapedos, un libro infantil sobre gases muy ruidosos y sus aventuras.
- En 1998, la Dra. Mara Sidoli ganó el Premio Ig Nobel de Literatura por su informe «Las flatulencias como defensa contra los terrores innombrables».
- Joël Dicker (1985), escribió en 2012 La verdad sobre el caso Harry Quebert, donde la madre del protagonista le pregunta si quiere que se vaya para que pueda expulsar un gas.
- Sandra Alonso Villar (2022), publicó el título “¿Ha sido un pedo?”, un libro ilustrado que aborda el tema de los gases de forma divertida y cómo disimularlos en público.
- Moore Nicola (2022), publicó el título de literatura infantil “El libro de los pedos: frota y huele”, donde se pregunta a qué huelen los gases de diferentes animales.
- He Gassen (屁 合 戦), que significa "Competencia de pedos" o "Batalla de Pedo", es un arte japonés en rollos de papel del periodo Edo. Muestra a personas expulsando gases en dirección a otras personas, animales y objetos, en batallas y duelos imaginativos.
Las flatulencias en la mitología
Los Kappa son criaturas de la mitología japonesa, a menudo representadas como seres con forma de rana y cara de tortuga, del tamaño de un niño. Viven en ríos y lagunas de Japón y son muy rápidos nadando. En los cuentos tradicionales, los Kappa suelen ser personajes traviesos: expulsan gases muy fuertes, se esconden para observar a las mujeres, roban en huertos y a veces raptan niños o mujeres. Muchas aldeas japonesas usan fuegos artificiales para asustarlos. A pesar de su comportamiento, la mitología dice que son muy educados y siguen el código de conducta japonés.
Se dice que tienen un cuerpo verde o rojo, una placa circular sin pelo en la cabeza que debe estar siempre mojada para que no pierdan su fuerza, un pico corto, un caparazón en la espalda y manos y pies palmeados. También se dice que tienen un olor corporal a pescado y que sus brazos están conectados por dentro, de modo que si se tira de uno, el otro se encoge.
La imagen del Kappa ha cambiado a lo largo del tiempo. Antes del siglo XVIII, se les describía como nutrias envejecidas o bestias parecidas a monos que vivían en ríos. A mediados del siglo XVIII, se creó un modelo de Kappa en Edo que se parecía a un anfibio, una mezcla de rana y tortuga. Esta nueva imagen se hizo muy popular y se extendió por todo Japón a través de publicaciones y obras de arte, convirtiéndose en un símbolo de la cultura popular japonesa.
Las flatulencias en el cine y la televisión
- En la serie de videojuegos Samurai Shodown, el personaje Earthquake usa ataques con flatulencias. En el crossover SVC Chaos: SNK vs. Capcom, también puede lanzar nubes de gases.
- En la película Locura en el Oeste, de Mel Brooks, unos vaqueros comen frijoles y luego sueltan una serie de gases que llenan el aire.
- En la película ¡Ay, Carmela! de Carlos Saura, el público pide al actor principal que haga sus famosos "pedos", una habilidad que los divierte mucho.
- En la película Amarcord de Federico Fellini, el abuelo se retira a una habitación después de comer para hacer ejercicios con las piernas y suelta gases mientras cuenta.
- En la película Amadeus (1984) de Miloš Forman, Wolfgang Amadeus Mozart se burla de Antonio Salieri en una fiesta de disfraces y luego suelta un largo gas que hace reír a todos.
- En la película Scooby-Doo (2002) de Raja Gosnell, hay una escena cómica donde Shaggy Rogers y Scooby Doo sueltan muchos gases.
- En la película Fanny y Alexander de Ingmar Bergman, un tío del protagonista, Carl Ekdahl, suelta gases repetidamente en la fiesta de Navidad para divertir a los niños.
- En la película Beavis and Butt-Head Do America, los personajes principales encuentran a dos hombres en el desierto que les muestran su habilidad para expulsar gases.
- En la película Diario de una niñera, la protagonista Annie Braddock (interpretada por Scarlett Johansson) suelta un gas en la bañera y es sorprendida por la dueña de casa.
- En la película Espías como nosotros, Emmett, el personaje de Chevy Chase, suelta un gas durante una prueba y culpa a otro.
- En la película franco-italiana La Grande Bouffe (La gran comilona) de Marco Ferreri, Michel, el personaje de Michel Piccoli, tiene frecuentes ataques de gases que causan su muerte.
- En la película anglo-francesa Shaun of the Dead (Zombies party), Ed, el personaje de Nick Frost, tiene el hábito de soltar gases sin sonido pero con muy mal olor.
- En la película neozelandesa Braindead de Peter Jackson, un intestino humano suelta gases esporádicamente contra los protagonistas.
- Como agua para chocolate es una película mexicana basada en el libro de Laura Esquivel. La protagonista le da a su hermana una dieta que empeora su salud, aumentando sus gases y llevándola a la muerte.
- En la película El Balneario de Battle Creek de Alan Parker, George, el hijo del Dr. Kellogg, interrumpe la fiesta de Navidad con un ruidoso gas.
- En la película animada Shrek de Andrew Adamson, se dice que la flatulencia «está mejor fuera que dentro». El protagonista usa sus gases para aturdir peces en un río.
- En la película El profesor chiflado de Eddie Murphy, el padre de Sherman Klump suelta un ruidoso gas durante una cena familiar, lo que provoca una serie de gases entre todos los presentes.
- En la película Bruce Almighty (Todopoderoso) de Tom Shadyac, Bruce Nolan (Jim Carrey) usa sus poderes divinos para humillar a su rival de trabajo, Evan Baxter, haciéndole soltar un gas ruidoso y prolongado en vivo en televisión.
- En la película Mystery Men (Hombres misteriosos) de 1999, el personaje The Spleen, interpretado por Paul Reubens, tiene el poder de su flatulencia.
- En la película Along Came Polly (Mi novia Polly) de John Hamburg, Sandy Lyle (Philip Seymour Hoffman) confiesa a su amigo que ha expulsado un gas y ha tenido un accidente, por lo que debe retirarse.
- En la película Step Brothers (Hermanos por pelotas) (2008), Dale Doback (John C. Reilly) arruina un contrato al soltar un gas muy prolongado.
- En la película Laberinto (1986) de Jim Henson, la protagonista debe cruzar la Laguna del Hedor Eterno, donde las rocas explotan en flatulencias al pisarlas.
- La serie animada South Park presenta a dos comediantes, Terrance y Philip, que actúan con grandes flatulencias que ofenden a los habitantes de South Park.
- En la serie Babylon Berlin, capítulo 2, el Inspector Bruno Wolter suelta un gas y se jacta de ello.
- En la película El Suplente de Diego Lerman, la hija del protagonista suelta un gas ruidoso al ser despertada, y el olor es tan fuerte que abren las ventanas para celebrarlo.
- En el canal de Youtube Linguriosa, Elena Herraiz explica el origen común de las palabras "pedo" en castellano y "fart" en inglés.
- En la película Scary Movie 3, Cindy Campbell (interpretada por Anna Faris) se excusa por soltar un pequeño gas diciendo que fue el sofá. Shaneequa (Queen Latifah) se burla de ella soltando un gas mucho más grande.
- En la película The BFG (Mi amigo el gigante) de Steven Spielberg, basada en la novela de Roald Dahl, hay una escena de gases con la Reina de Inglaterra y sus perros.
- En la película animada El rey león (The Lion King), Pumba, un facóquero, sufre de flatulencias y todos huyen de él, excepto Timón, que lo acepta tal como es.
- En la película Pobres Criaturas (2023) de Yorgos Lanthimos, el actor Mark Ruffalo como Duncan Wedderburn suelta un gas en una escena en un barco.
Las flatulencias en celebridades
- El portal de Broadway preguntó a actores de musicales, y Norbert Leo Butz, actor en Big Fish, reveló que se le escapó un gas justo antes de una nota alta.
- En el programa mexicano Venga la alegría, Ricardo Casares soltó un gas debido a las carcajadas por la respuesta de su compañera Tanya Rincón.
- En el comentario del DVD de la película Los sospechosos de siempre, el actor Kevin Pollak reveló que durante una escena, Benicio del Toro soltó gases repetidamente, lo que causó las risas de sus compañeros.
- En una entrevista sobre Spider-Man: No Way Home, Tom Holland reveló que se le escapó un gas sobre Zendaya mientras filmaban una acrobacia.
- En una entrevista sueca con Tom Cruise y Dustin Hoffman promocionando Rain Man, Hoffman soltó un gas mientras Cruise hablaba, causando risas.
- Durante una entrevista de James Corden con Josh Hutcherson y Krysten Ritter, Hutcherson reveló que, mientras filmaba una escena con Tom Hanks para El expreso polar, accidentalmente soltó un gas sobre Hanks, describiéndolo como el "momento más vergonzoso de su vida".
Véase también
En inglés: Flatulence Facts for Kids
- Meteorismo
- Ignición de flatulencias
- Flato
- Le Pétomane
- Pedo de monja