Novela para niños

Una novela es una historia escrita que cuenta hechos inventados o basados en la realidad. Su objetivo principal es entretener a los lectores, describiendo situaciones interesantes, personajes y sus emociones. También puede servir para que el autor comparta sus ideas o para mostrar cómo vivía un grupo de personas en cierta época.
La Real Academia Española define la novela como una "obra literaria narrativa de cierta extensión". Es un tipo de texto que permite mucha libertad al escritor. Puede incluir muchos personajes, historias que se cruzan, o presentar los hechos en un orden diferente al que ocurrieron. También puede contener cartas, documentos o poemas, lo que la hace más compleja que otros tipos de relatos.
Contenido
¿Qué hace a una novela una novela?
Las novelas tienen características especiales que las distinguen de otros textos:
- Cuentan historias que pueden ser reales o inventadas.
- Se enfocan en narrar, pero también incluyen descripciones, diálogos, pensamientos internos de los personajes o incluso cartas.
- Describen con detalle el lugar y el ambiente donde ocurre la historia.
- Siempre están escritas en prosa (como hablamos normalmente, no en verso).
- El autor presta mucha atención a la belleza del lenguaje.
- Los personajes se desarrollan de forma más profunda que en un cuento o un relato.
- Son textos largos: generalmente tienen entre 50.000 y 200.000 palabras, o de 150 a 1200 páginas o más.
A veces, es difícil saber si un texto es un cuento o una novela. Para los textos que son demasiado cortos para ser novelas y demasiado largos para ser cuentos, se usa el término "novela corta".
¿Para qué sirve una novela?
Las novelas pueden tener varios propósitos:
- Compartir las experiencias, preocupaciones e ideas del autor para influir en la sociedad.
- Mostrar las costumbres, formas de vida y sueños de un grupo social específico.
Elementos clave de una novela
Una novela se construye con varios elementos importantes:
La acción: ¿Qué sucede en la historia?
La acción es el conjunto de eventos que ocurren en la novela. Se divide en tres partes:
- El planteamiento: Es el inicio de la historia. Aquí se presenta el tema principal, se introducen los personajes y sus características, y se describe el ambiente. También empiezan a surgir los primeros conflictos.
- El nudo: Es la parte central y más emocionante. Los conflictos se desarrollan y se entrelazan, llevando la historia a su punto más alto.
- El desenlace: Es el final de la historia. Después del punto más alto, los conflictos se resuelven, y la historia puede tener un final feliz o triste, dependiendo de lo que el autor quiera transmitir.
Los personajes: ¿Quiénes participan en la historia?
Los personajes son quienes llevan a cabo la acción:
- Personajes principales: Son los protagonistas. La historia gira en torno a ellos y sus acciones.
- Personajes secundarios: Apoyan la historia de los personajes principales con sus propias tramas, aunque menos importantes.
- Personajes de relleno o terciarios: Aparecen brevemente con una función menor y luego desaparecen.
El ambiente: ¿Dónde y cuándo ocurre la historia?
El ambiente es el lugar y las circunstancias donde se mueven los personajes:
- Físico: Son los elementos visibles del lugar, como una casa, un río o una ciudad.
- Social: Incluye las creencias, costumbres y formas de pensar de una época o sociedad.
- Emocional: Describe los sentimientos, preocupaciones y estados de ánimo que rodean a los personajes.
¿Cómo se expresa una novela?
Las novelas usan diferentes formas de expresión:
- La narración: Es la forma principal. Puede ser:
* En primera persona: Cuando un personaje cuenta su propia historia (el protagonista es el narrador). * En tercera persona: Cuando un narrador externo cuenta la historia, sabiendo todo lo que pasa (narrador omnisciente).
- La descripción: Se usa para detallar cómo son los personajes (física y psicológicamente) y los lugares.
- El diálogo: Es la conversación entre los personajes. Refleja cómo hablan según su edad, género, educación o estado de ánimo.
- El monólogo (conversación interior): Muestra los pensamientos de un personaje que no se dicen en voz alta.
- La epístola: Es una forma menos común donde la historia se cuenta a través de cartas que los personajes se escriben.
Tipos de novelas
La novela es un género muy variado, con muchas formas y puntos de vista. Se pueden clasificar de diferentes maneras:
- Por el tono:
* Novela satírica: Usa el humor para criticar. * Novela humorística: Busca hacer reír. * Novela didáctica: Enseña algo. * Novela lírica: Se enfoca en las emociones y la belleza del lenguaje.
- Por la forma:
* Autobiográfica: El autor cuenta su propia vida. * Novela epistolar: Contada a través de cartas. * Dialogada: Predominan los diálogos. * Novela corta o novella. * Novela de aprendizaje (Bildungsroman): Narra el desarrollo de un personaje desde la infancia hasta la madurez.
- Por el contenido:
* Novela de aventuras: Llena de viajes y peligros. * Novela bélica: Trata sobre guerras. * Ciencia ficción: Explora mundos futuros o tecnologías avanzadas.

* Novela costumbrista: Describe las costumbres y la vida diaria de un grupo social. * Novela de espías y suspense: Llenas de intriga y misterio. * Novela fantástica: Con elementos mágicos o sobrenaturales. * Novela gótica: Con ambientes oscuros, misterio y terror. * Novela histórica: Ambientada en el pasado, con personajes y eventos reales. * Novela de misterio: Con enigmas por resolver. * Novela negra: Un tipo de novela policíaca con un ambiente más oscuro y personajes complejos. * Novela picaresca: Narra las aventuras de un personaje astuto que sobrevive con engaños. * Novela policíaca: Trata sobre crímenes y su investigación. * Novela rosa: Se centra en historias de amor. * Novela de terror: Busca asustar al lector. * Novela del oeste o westerns: Ambientada en el Viejo Oeste americano.
También hay clasificaciones por el estilo, como la novela realista o la novela existencial, o por sus argumentos, como la novela psicológica (que explora la mente de los personajes) o la novela de tesis (que busca defender una idea).
Historia de la novela
La novela es uno de los géneros literarios más recientes. Aunque tiene orígenes antiguos, no se estableció completamente hasta la Edad Media.
Orígenes antiguos
Antes de la novela, existían largos relatos en verso, como la Epopeya de Gilgamesh de Sumeria o el Ramayana de la India. En Grecia y Roma, hubo epopeyas como las de Homero y Virgilio.
Las primeras historias en prosa aparecieron en la época helenística, como El Satiricón de Petronio o El Asno de Oro de Apuleyo. También surgieron la novela bizantina y la novela pastoril, que influirían en la novela moderna.
La novela en la Edad Media

En Japón, la Novela de Genji (siglo XI) de Murasaki Shikibu es considerada una de las novelas más antiguas del mundo.
En Europa, en los siglos XI y XII, surgieron los "romances", que eran largas historias de ficción en verso, escritas en lenguas romances. Trataban temas históricos y legendarios, como las historias del Rey Arturo.
En el siglo XIII, Ramon Llull escribió lo que se consideran las primeras novelas modernas occidentales en prosa, como Blanquerna.
En los siglos XIV y XV, los romances empezaron a escribirse en prosa, dando origen a los libros de caballerías. En China, se escribieron dos de las cuatro grandes novelas clásicas: el Romance de los Tres Reinos y A la orilla del agua.
También en el siglo XIV, surgieron colecciones de cuentos, como El Decamerón de Giovanni Boccaccio y Cuentos de Canterbury de Geoffrey Chaucer. En estas obras, los personajes se contaban historias entre sí.
A finales del siglo XV, en España, apareció la novela sentimental, que hablaba de amores idealizados. Un ejemplo importante es Cárcel de amor (1492) de Diego de San Pedro.
El Amadís de Gaula (1508) fue una de las obras más representativas de los libros de caballerías, muy populares en esa época.
La novela en la Edad Moderna
Siglo XVI
La invención de la imprenta ayudó a que las novelas se difundieran más, aunque los libros seguían siendo caros.
Este siglo estuvo dominado por la novela pastoril, que situaba las historias de amor en ambientes rurales y naturales. Un ejemplo es La Arcadia (1502) de Jacopo Sannazaro.
A mediados de siglo, las ideas cambiaron hacia un mayor realismo. Esto se ve en Gargantúa y Pantagruel de François Rabelais y en La vida de Lazarillo de Tormes (1554), que dio origen a la novela picaresca. En Oriente, se escribieron Viaje al Oeste (1590) y una segunda versión de A la orilla del agua.
Siglo XVII
La novela moderna, tal como la conocemos hoy, se considera que nació en el siglo XVII con Don Quijote de la Mancha (1605) de Miguel de Cervantes. Esta obra es muy innovadora porque se burla de los libros de caballerías y presenta una estructura más compleja.
Después del Quijote, Cervantes publicó las Novelas ejemplares (1613), que eran narraciones más cortas. Estas novelas buscaban ofrecer ejemplos de comportamiento moral, aunque a veces trataban temas difíciles.
En Francia, surgieron romances más "nobles", como La Astrea (1607-27) de Honoré d'Urfé. Más tarde, Madame de La Fayette publicó La princesa de Clèves (1678), una novela que exploraba los sentimientos y el comportamiento humano de forma detallada.
A finales del siglo XVII, se popularizaron en Europa novelas cortas que a menudo contaban historias escandalosas. Para justificar su publicación, los autores decían que eran historias verdaderas que ofrecían lecciones morales. Esto llevó al desarrollo de la novela epistolar, contada a través de cartas.
Siglo XVIII

Al principio del siglo XVIII, hubo un debate sobre si las novelas debían ser "romances" (historias fantásticas) o "historias verdaderas". Obras como Robinson Crusoe de Daniel Defoe (1719) se presentaron como historias reales, aunque eran pura ficción. Esta novela cuenta las aventuras de un hombre que sobrevive solo en una isla desierta.
Más tarde, Los viajes de Gulliver (1726) de Jonathan Swift fue una sátira que criticaba la sociedad de la época.

Samuel Richardson introdujo un nuevo tipo de novela con Pamela (1740). Esta obra buscaba enseñar valores y moralidad a los jóvenes, a la vez que entretenía.
Henry Fielding, influenciado por el Quijote y la novela picaresca, escribió Tom Jones (1749), una novela con mucho realismo.
En la segunda mitad del siglo, la crítica literaria se hizo más importante. Esto dividió el mercado de la novela en dos: una ficción popular para el entretenimiento y una literatura más seria para el debate y el análisis.
La ilustración francesa usó la novela para expresar ideas filosóficas. Voltaire escribió Cándido o El optimismo (1759), una sátira, y Rousseau reflejó sus ideas sobre la naturaleza y la libertad en Julia o la nueva Eloísa (1761) y Emilio (1762).
En Alemania, Las cuitas del joven Werther (1774) de Johann Wolfgang von Goethe fue una novela sentimental muy popular. En China, se escribió la última de las cuatro novelas clásicas, Sueño en el pabellón rojo (1792).
La novela en la Edad Contemporánea
Siglo XIX
A finales del siglo XVIII y principios del XIX, la novela gótica se hizo popular, con obras como Los misterios de Udolfo (1794), que incluían elementos sobrenaturales y misterio. Jane Austen parodió este estilo con La abadía de Northanger (1803) y creó un nuevo estilo de "comedia de costumbres" con novelas como Orgullo y prejuicio (1811), que criticaban la sociedad de su tiempo.

El Romanticismo también influyó en la novela, especialmente en Francia, con autores como Victor Hugo (Nuestra Señora de París). En Inglaterra, las hermanas Brontë (Emily Brontë, Charlotte Brontë y Anne Brontë) y Walter Scott (Ivanhoe) escribieron novelas románticas e históricas. En Estados Unidos, James Fenimore Cooper escribió El último mohicano.
El realismo se desarrolló mucho en este siglo. Se caracterizaba por historias verosímiles, descripciones detalladas y una psicología profunda de los personajes. Autores como Honoré de Balzac (La Comedia humana), Flaubert y Zola (quien llevó el realismo al naturalismo) buscaron reflejar la sociedad de su tiempo.
En Inglaterra, Charles Dickens y William Makepeace Thackeray también pintaron un retrato de la sociedad. Este siglo fue muy importante para la literatura rusa, con obras maestras realistas como Anna Karénina de León Tolstói y Los hermanos Karamázov de Fiódor Dostoyevski.
En el siglo XIX, el mercado de la novela se dividió entre una "alta" literatura (que buscaba expresar la identidad nacional) y una "baja" producción (más enfocada en el entretenimiento). Surgieron nuevos géneros populares como la novela policiaca (con Edgar Allan Poe) y la ciencia ficción (con Julio Verne y H. G. Wells).
Siglo XX
El siglo XX trajo grandes cambios a la novela, influenciados por el psicoanálisis, la relatividad y las dos guerras mundiales. La novela se volvió más personal, a veces irreal o más enfocada en la forma.
La influencia del psicoanálisis hizo que las novelas se centraran en el análisis psicológico de los personajes. Henry James y James Joyce (con Ulises) exploraron la vida interior de los personajes, usando técnicas como el monólogo interior.
También hubo un regreso al realismo con la novela vienesa, que buscaba reflejar todos los aspectos de una época, como El hombre sin cualidades de Robert Musil.
La búsqueda y la experimentación fueron clave en este siglo. La novela experimental rompió con las estructuras tradicionales, alterando la trama, el espacio y el tiempo. En busca del tiempo perdido de Marcel Proust y el Ulises de James Joyce son ejemplos de novelas que exploran el tiempo de formas nuevas.
La novela existencialista, con autores como Jean-Paul Sartre (La náusea) y Albert Camus, se centró en temas como la angustia, la soledad y la búsqueda de sentido en la vida.
La novela corta también se desarrolló, con obras como El proceso o La metamorfosis de Franz Kafka, que exploraban lo sombrío y lo grotesco.
Las tragedias del siglo XX, como las guerras mundiales y los campos de concentración, llevaron a la aparición de relatos que no eran ficción pero usaban técnicas de novela para contar experiencias reales y mantener viva la memoria.
También surgió la distopía o antiutopía, novelas que describen mundos controlados por dictaduras, como 1984 de George Orwell y Un mundo feliz de Aldous Huxley.
Boom latinoamericano



El boom latinoamericano fue un fenómeno literario y cultural que ocurrió entre los años 1960 y 1970. En ese tiempo, las obras de un grupo de novelistas latinoamericanos jóvenes se hicieron muy populares en Europa y en todo el mundo.
Este "boom" se asocia especialmente con cuatro autores: el argentino Julio Cortázar, el mexicano Carlos Fuentes, el colombiano Gabriel García Márquez y el peruano Mario Vargas Llosa. Un momento clave fue en 1967, con el gran éxito de la novela Cien años de soledad de García Márquez.
Estos escritores desafiaron las formas tradicionales de la literatura latinoamericana. Sus obras eran experimentales y, debido a los cambios sociales de América Latina en los años 60, también abordaban temas sociales.
El éxito repentino de estos autores se debió en gran parte a que sus obras fueron de las primeras novelas latinoamericanas publicadas en Europa, especialmente por editoriales españolas en Barcelona. Así, los novelistas latinoamericanos se hicieron famosos en todo el mundo por sus escritos y por su interés en los temas sociales.
Galería de imágenes
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En busca del tiempo perdido, con correcciones del autor.
Véase también
En inglés: Novel Facts for Kids
- Historia de la novela
- Literatura
- Ficción
- Relato
- Cuento
- Novela corta
- Romance (narración)
- Novela bizantina
- Teatro y drama
- Poesía
- NaNoWriMo