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Historia de las Fuerzas Armadas de México para niños

Enciclopedia para niños

La historia de las Fuerzas Armadas de México trata sobre los distintos grupos armados que han existido en el territorio de lo que hoy es México. Cada uno de estos grupos tuvo sus propias características. Podemos dividir esta historia en siete etapas principales, desde antes de la caída de México-Tenochtitlán en 1521 hasta el día de hoy.

Archivo:Emblema Ejército Mexicano
Logo del actual Ejército Mexicano.

Contenido

Etapa Prehispánica: Los Guerreros Antiguos

En el México antiguo, antes de la llegada de los españoles, los mexicas son el grupo del que más información tenemos sobre su organización militar. Sin embargo, muchos grupos, incluyendo a los mayas, compartían algunas características en sus formas de guerra.

Las comunidades menos desarrolladas se organizaban en torno a familias. El jefe de familia era responsable de proteger a su gente y sus tierras. Para esto, contaba con la ayuda de sus hijos. Sus armas eran herramientas comunes, como hachas, lanzas y cuchillos, hechas de madera y piedra.

La organización militar mexica

Los mexicas tenían una organización militar muy avanzada, con jerarquías y recompensas. Los niños varones comenzaban su entrenamiento desde pequeños. Los de origen noble (llamados pipiles) se educaban en el calmecac desde los cinco años. Se esperaba que ellos fueran los futuros líderes del ejército.

Los jóvenes de origen humilde (llamados macehuales) se entrenaban en el texpocalli desde los nueve años. Allí recibían educación militar y técnica para tener un oficio en el futuro. Estos centros estaban en cada barrio y eran atendidos por la comunidad.

A los diez años, a los cadetes se les dejaba crecer un mechón de pelo en la nuca, llamado mocuexpaltia. A los quince años, este mechón, ya más largo, se llamaba cuexpalchicácpol, y marcaba el inicio de su servicio activo en el ejército.

Rangos y recompensas entre los mexicas

Archivo:LOGO Marina Armada de Mexico NEGRO
Imagen de los cuerpos de mar de la Marina Armada de México.

Los mexicas valoraban mucho la captura de prisioneros para ceremonias, más que simplemente matarlos. Si un guerrero novato lograba capturar a un enemigo, se le recompensaba. Si lo hacía solo, se le cortaba el mechón de la nuca y se le permitía dejarse crecer uno sobre la sien derecha, símbolo de su valentía.

Si un guerrero no lograba capturar a nadie después de varias campañas, se le consideraba de poco valor. En cambio, si capturaba un prisionero solo en su primera campaña, era elogiado por el líder supremo, el Huey Tlatoani. Se le permitía pintar su cara y cuerpo de colores especiales y usar vestimentas bordadas.

Si capturaba tres prisioneros, se le daba el mando sobre otros soldados y se le encargaba la educación en el texpocalli de su barrio. Con cuatro prisioneros, obtenía un rango similar al de capitán y podía sentarse con otros líderes.

El entrenamiento militar mexica era muy estricto. Esto les permitió resistir el asedio de los españoles y otros pueblos indígenas durante seis meses, a pesar de la falta de alimentos y enfermedades.

La estrategia de guerra mexica

Los mexicas eran muy hábiles en la guerra. Tenían grupos de espías, los pochteca, que eran comerciantes. Ellos visitaban otros pueblos en tiempos de paz para obtener información sobre sus ejércitos. También servían como embajadores y administradores de impuestos.

Para el transporte de suministros, contaban con los tamemes, que acompañaban a los ejércitos. Los mexicas a menudo obtenían recursos de los pueblos por donde pasaban.

Una forma de declarar la guerra era pedir un servicio a un pueblo en paz. Si lo aceptaban, se convertían en aliados y solo pagaban tributos. Si lo rechazaban, se enfrentaban en una batalla. Si los mexicas ganaban, dejaban en paz a la población civil si pagaban tributos. Incluso podían aliarse con ellos contra enemigos comunes.

Si un pueblo aliado se rebelaba, los mexicas podían destruir el pueblo, llevando a los hombres a ceremonias y a las mujeres y niños como trabajadores forzados. Luego, repoblaban esas tierras con sus aliados.

Los mexicas respetaban a los buenos guerreros, incluso de otros pueblos. Muchos de sus aliados los acompañaban a la guerra y recibían las mismas recompensas. Sus ejércitos eran diversos.

Etapa de la Conquista: La llegada de los españoles

La organización de los ejércitos durante la conquista de México-Tenochtitlan es un poco confusa. Se sabe que los españoles contaron con un gran número de aliados indígenas, especialmente tlaxcaltecas. Estos grupos indígenas se unieron a los españoles como parte de acuerdos o pagos.

Después de la conquista, muchos indígenas se incorporaron como aliados a las expediciones españolas. Por ejemplo, participaron en la conquista de las Filipinas. Esto llevó a la creación de comunidades nahuas fuera de México, como un barrio en El Salvador que aún se llama "Mexicanos".

Los indígenas que participaban en estas expediciones podían recibir privilegios, como montar a caballo y usar armas de fuego. Esto ayudó a establecer misiones y presidios (fortalezas) en el norte del virreinato.

Etapa Virreinal: La Nueva España se organiza

Archivo:BANDERA VIRREINAL NOVOHISPANA
Bandera Virreinal.

Una vez que los españoles controlaron los territorios, el gobierno virreinal comenzó a organizar la Nueva España para explotar sus riquezas. Se desarrollaron el comercio y la minería. Para proteger estas actividades, se crearon grupos armados llamados "milicias".

Estas milicias estaban formadas por los habitantes de cada comunidad y tenían armamento limitado. Al principio, Hernán Cortés ordenó que todos los españoles tuvieran armas. Con el tiempo, estas reuniones militares se convirtieron en fiestas donde los niños se vestían de soldados y desfilaban.

Milicias locales y semiprofesionales

En 1550, se crearon las "Milicias de Pardos", formadas por descendientes de africanos que habían obtenido su libertad. También hubo alianzas entre grupos indígenas sedentarios, como los "Indios Amigos" de Nuevo México, para defenderse de pueblos nómadas como los Apaches.

Las milicias de ciudades importantes, como Campeche o Veracruz, recibían entrenamiento de oficiales del ejército español. Esto fue importante para defenderse de los ataques de corsarios y piratas.

El gobierno virreinal tenía pocos cuerpos armados regulares, formados principalmente por españoles. Los más conocidos eran los "Guardias Alabarderos del Rey", que protegían al virrey. También había regimientos que cuidaban el Palacio Virreinal y los puertos importantes como Veracruz y Acapulco.

El Consulado de Comercio de México también tenía un regimiento, el "Regimiento del Comercio de México", para escoltar los cargamentos de mercancías.

Las milicias locales actuaban como policía en sus regiones, ayudando a las autoridades. Estaban formadas por la gente del pueblo y su número y armamento variaban. Al principio, solo se permitía a los españoles, pero la falta de gente hizo que se incluyeran personas de todas las razas, incluso en puestos de mando. Se les llamó "Milicias Integradas".

Privilegios y obligaciones de las milicias

Pertenecer a una milicia ofrecía dos privilegios: el fuero militar y la exención de impuestos. El fuero militar significaba que los miembros de la milicia eran juzgados por leyes militares, no civiles, en ciertos casos. Esto a veces causaba problemas con las autoridades civiles.

Además, los milicianos no recibían un salario, por lo que el gobierno los eximía de pagar impuestos. Esto motivó a muchos a unirse, pero también significó menos ingresos para el gobierno.

Las milicias debían mantener el orden en su región, patrullar y dar la alarma en caso de peligro. También escoltaban prisioneros, bienes del gobierno y funcionarios. Cada miliciano debía aportar sus propias armas, caballos y uniformes.

Una vez al año, se reunían para recibir instrucción militar y revisar sus armas. A veces, oficiales veteranos supervisaban estas asambleas.

Fortalezas y fuerzas externas

El virreinato de la Nueva España también apoyaba fortalezas en otros territorios, como Manila en las Filipinas, San Juan en Puerto Rico y La Habana en Cuba. También había Presidios en las fronteras, que servían como defensa y para expandir el cristianismo.

Otras fuerzas importantes eran la Flota de Barlovento y la Nao de la China, que protegían las rutas comerciales. El Batallón de la Armada de Barlovento en Veracruz era muy importante para proteger la costa de corsarios y piratas.

Reformas Borbónicas: Un ejército más formal

En 1760, con la llegada del virrey Marqués de Cruillas, comenzaron reformas en los cuerpos armados para crear un ejército más formal. Esto fue impulsado por el rey Carlos III, quien quería modernizar el imperio y defenderlo de las presiones de Francia e Inglaterra.

Una parte importante de la reforma fue permitir que personas de diferentes orígenes, incluyendo indígenas, ocuparan altos cargos en la milicia. También se crearon juzgados militares permanentes y se estableció un reglamento para las milicias, basado en el de Cuba.

El virrey Cruillas trabajó para preparar el reino ante una posible guerra con Inglaterra. Se reclutó a cualquier persona y se puso en servicio a los milicianos. Se intentó armar y uniformar a las tropas, pero hubo dificultades.

En 1763, el rey Carlos III ordenó crear un ejército permanente. Para la Nueva España, nombró a Juan de Villalba como "Comandante General de las Armas". Se formaron cuerpos milicianos permanentes, llamados "Fijos", con nuevas reglas de reclutamiento. Todos los hombres entre 16 y 40 años debían inscribirse en una de las siete "Clases" para el servicio militar.

Los milicianos activos tenían fuero militar y estaban exentos de impuestos. Después de cinco años de buen servicio, podían unirse al ejército virreinal como soldados permanentes.

Guerra de Independencia: La lucha por la libertad

Archivo:Bandera Nacional de Guerra de Mexico en 1815
Bandera de los patriotas mexicanos.

La Guerra de Independencia fue una lucha entre dos grupos: los Insurgentes (que buscaban la independencia) y los Realistas (leales a España). Terminó cuando los Realistas propusieron un gobierno independiente de España, pero que mantuviera al monarca español. Esto cambió cuando Agustín de Iturbide fue proclamado emperador en 1821, y luego cuando abdicó en 1823.

Milicias Insurgentes: El inicio del movimiento

Al principio, el movimiento que comenzó con el Grito de Dolores no tenía un ejército formal. Eran grupos diversos de milicias que lucharon contra el organizado ejército realista.

Miguel Hidalgo (1810-1811)

La conspiración de Querétaro, de la que formaba parte el cura Miguel Hidalgo, tuvo que adelantarse. Hidalgo, con el grito de "¡Viva Fernando VII, muera el mal gobierno!", reunió a un gran grupo de personas en su camino a la Ciudad de México. Este grupo incluía algunos soldados de la milicia.

Tomaron la Alhóndiga de Granaditas en Guanajuato, donde hubo muchas pérdidas. Luego, se enfrentaron a las fuerzas realistas en la Batalla del Monte de las Cruces. Aunque los insurgentes eran muchos, carecían de coordinación y un mando central efectivo, lo que facilitó su derrota. Hidalgo fue nombrado "generalísimo".

José María Morelos (1811-1815)

Después de la captura de Hidalgo, Ignacio López Rayón encabezó el movimiento. Se formó la Suprema Junta Gubernativa de América, que emitió la primera acta de independencia de México y le dio una bandera. Este gobierno organizó sus fuerzas armadas bajo el mando del generalísimo José María Morelos.

Morelos organizó grupos de resistencia por todo el país. La Junta también creó un grupo de espionaje, Los Guadalupes, para obtener información y recursos. Morelos logró importantes victorias militares, pero finalmente fue derrotado y sus líderes principales fueron capturados. Esto llevó a que la lucha se dispersara en guerrillas.

Vicente Guerrero (1815-1821)

Vicente Guerrero mantuvo la lucha a través de grupos guerrilleros que asaltaban caravanas, tomaban pueblos y establecían pequeños fortines. También buscaron puertos para recibir armas de EE. UU.. Se continuó con las patentes de corso, que permitían a barcos privados atacar embarcaciones españolas.

Ejército Realista: La defensa del virreinato

Milicias Cívicas y Fieles

La guerra para el ejército virreinal comenzó con menos fuerzas debido a la separación de varios oficiales. Sin embargo, su mejor preparación y disciplina les permitieron controlar el movimiento insurgente en muchos lugares.

Se crearon las "Milicias Cívicas" en las ciudades, formadas por ciudadanos de todas las razas que tuvieran ciertos ingresos. Esto dio al ejército virreinal más opciones para reclutar, pero también significó que estas milicias cívicas ofrecían una protección contra el alistamiento forzoso.

Otro grupo fueron los "Fieles", que juraban lealtad a la corona española. Este grupo civil del ejército recopilaba información y se acercaba a sospechosos de deslealtad.

Entre 1812 y 1820, España envió siete regimientos veteranos para reforzar su posición en la Nueva España. Estos cuerpos enfrentaron dificultades como caminos bloqueados por los insurgentes y enfermedades. A pesar de las victorias realistas, la hostilidad de la población local y los problemas económicos debilitaron al ejército.

La revuelta general y el Ejército Trigarante

En 1820, los liberales volvieron a triunfar en España. En la Nueva España, los grupos insurgentes estaban reducidos. El brigadier Agustín de Iturbide fue enviado a combatir a Vicente Guerrero. Iturbide y Guerrero se reunieron y decidieron unir sus fuerzas para lograr la independencia de la Nueva España.

Así se formó el Ejército Trigarante, al que se unieron casi todos los cuerpos realistas. Hubo pequeñas batallas, y finalmente, Iturbide se reunió con el virrey Juan O'Donojú en Córdoba. Allí firmaron el Acta de Independencia del Imperio Mexicano. O'Donojú entregó el Palacio Nacional a Iturbide y formó parte del primer gobierno del México independiente.

Primer Imperio Mexicano: Un nuevo comienzo

Archivo:Estandarte de las Tres Garantías
Estandarte de las Tres Garantías.

Según los Tratados de Córdoba, se invitó al monarca español a gobernar México, pero no aceptó. Entonces, Agustín de Iturbide fue coronado Emperador. Se le dio el título de "Generalísimo de las Armas de Mar y Tierra" o "Generalísimo Almirante". Creó cuatro ministerios, incluyendo el de Guerra y Marina.

El nuevo México independiente mantuvo gran parte de la administración y las fuerzas armadas del virreinato. Algunos españoles se retiraron, otros regresaron a España, y muchos aceptaron la nueva nación.

Primera República Federal: Cambios y desafíos

Archivo:Flag of Mexico (1823-1864, 1867-1893)
Bandera Republicana.

Después de que Antonio López de Santa Anna derrocara al emperador Iturbide en 1823, se formó un nuevo Congreso. Este emitió la Constitución Política de 1824. Los ministerios se convirtieron en Secretarías, y se reorganizaron las fuerzas armadas.

Se crearon tres tipos principales de fuerzas: el Ejército Nacional (permanente), las Milicias Estatales (que reemplazaron a las provinciales) y las Milicias Cívicas (que continuaron).

El Ejército Nacional era pequeño (unos 5 mil efectivos) y se encargaba de la seguridad exterior e interior, aduanas, puertos y presidios. El Congreso Federal autorizaba su composición.

La Milicia Estatal estaba bajo el mando de cada gobernador y se encargaba de la seguridad interna del estado. Con el tiempo, se le llamó "Guardia Nacional". Se dividía en cuerpos "Fijos" (permanentes) y "Volantes" (organizados para situaciones específicas).

La Milicia Cívica era un cuerpo local de cada ayuntamiento, formado por los habitantes del municipio. A menudo, estaba bajo el mando de personas ricas y notables, lo que les permitía tener control en sus regiones. Sus oficiales eran elegidos por voto popular.

Creación del Colegio Militar y la Marina Armada

Desde 1818, se había propuesto crear un Colegio Militar para formar oficiales. Finalmente, en 1822, durante el Primer Imperio, se creó la "Academia de Cadetes, Academia de Ingenieros y Colegio Militar de México". Aunque el proyecto se interrumpió con la caída del imperio, fue restablecido en 1823 en la Fortaleza de San Carlos de Perote.

Para protegerse de una posible reconquista española, el gobierno mexicano decidió crear una marina armada nacional. En la época republicana, se contrató al comodoro estadounidense David Porter para sentar las bases de la primera Armada de México. En 1825, la fortaleza de San Juan de Ulúa fue tomada, siendo la primera batalla en la que participó la nueva marina.

República Centralista: Conflictos internos

En 1835, México pasó de ser una república federal a una república centralista. Esto causó descontento entre los líderes locales, ya que el gobierno central nombraba a los administradores de los departamentos.

Este cambio provocó movimientos de separación, como en la República de Yucatán y la República del Río Grande. La guerra de Secesión de Texas también fue un resultado, impulsada por inmigrantes estadounidenses.

En estos conflictos, la Guardia Nacional fue usada tanto para la separación como para mantener la unión. Por ejemplo, en Texas, los rebeldes formaron un "Ejército Regular de Texas" con milicias cívicas, mientras que la Guardia Nacional y el Ejército Nacional se mantuvieron leales al gobierno central.

El gobierno central envió un ejército, llamado "Ejército de Operaciones en Texas", bajo el mando del general Antonio López de Santa Anna. Este ejército, formado principalmente por la Guardia Nacional, enfrentó problemas de reclutamiento forzoso, logística y suministros.

En esta época, se registraron los primeros casos de "soldaderas", mujeres que no solo acompañaban a sus esposos, sino que también combatían. Se otorgaron grados militares como general de división y brigada.

Segunda República Federal: La invasión estadounidense

Invasión estadounidense (1846-1848)

Para 1846, las fuerzas armadas mexicanas contaban con unos 18,882 efectivos permanentes y 10,495 en la Guardia Nacional. Se había creado un "Ejército del Norte" para contener los avances de texanos y estadounidenses.

La invasión estadounidense comenzó en 1846. Se formaron dos cuerpos principales: el Ejército del Este (para el centro y poniente) y el Ejército del Sur (para Puebla y el sur). A pesar de los esfuerzos, las rebeliones internas y la falta de apoyo de algunos gobernadores impidieron crear un ejército bien entrenado y abastecido.

El "Ejército del Norte" fue derrotado, y el del Este sufrió grandes pérdidas. La marina armada era pequeña, por lo que las poblaciones de Baja California y Alta California tuvieron que defenderse solas. La resistencia fue mínima en el norte de Alta California, pero en el sur hubo pequeñas milicias que lucharon.

Revolución de Ayutla (1854-1855)

Después de la guerra con EE. UU., se reinstauró la república centralista y se volvió a un solo "Ejército Nacional". Antonio López de Santa Anna obtuvo un poder ilimitado, aumentando el número de efectivos del ejército. Sin embargo, la falta de pago y la venta de territorios llevaron a una serie de movimientos de oposición.

El más importante fue el Plan de Ayutla en 1854, liderado por Juan Álvarez. Este movimiento comenzó como una rebelión local en Guerrero y Michoacán. Las fuerzas del Ejército Nacional, bajo el mando del General Ángel Pérez Palacios, usaron tácticas de terror, lo que les hizo perder el apoyo de la población.

Con la incorporación de liberales como Ignacio Comonfort, el movimiento se expandió. Se formó el Ejército Restaurador de la Libertad, con oficiales profesionales. En Nuevo León, Santiago Vidaurri y Juan Zuazua crearon el Ejército del Norte, con buena caballería y armamento. Estas insurrecciones obligaron a Santa Anna a dejar el poder en 1855.

Finalmente, los ejércitos del centro, sur y norte se unieron, reinstaurando la república federal, creando las Leyes de Reforma y la Constitución de 1857, y refundando el Ejército Nacional.

Etapa de la República Restaurada: Un nuevo orden

Después de la Revolución de Ayutla, se creó un nuevo estado nacional con la Constitución de 1857 y las Leyes de Reforma. Esto llevó a la Guerra de Reforma y la desaparición del Ejército Nacional en 1860.

El presidente Ignacio Comonfort desconoció la Constitución, lo que inició la Guerra de Reforma. Los cuerpos del Ejército Nacional se unieron a los rebeldes, y los ejércitos revolucionarios se aliaron. En esta etapa, los ejércitos se distinguían por su afiliación política: Liberales o Conservadores.

El gobierno Liberal, liderado por Benito Juárez, emitió las Leyes de Reforma, que establecieron un gobierno laico. El Ejército Nacional fue abolido en 1860. El conjunto de fuerzas armadas liberales se llamó Ejército Constitucionalista.

Segundo Imperio: La intervención francesa

Archivo:Bandera del II Imperio Mexicano
Bandera del 2.º Imperio Mexicano.

Después de la Guerra de Reforma, el país no se pacificó del todo. El gobierno federal creó tres ejércitos para controlar el territorio:

Estos ejércitos se dividieron en Divisiones (infantería, caballería, artillería, zapadores y sanidad), Regimientos y Batallones. Se creó el grado de general de división. También se iniciaron los servicios de telecomunicaciones con líneas telegráficas. A estos ejércitos se les llamó Ejército Federal en oposición al Ejército Imperial.

Durante esta época, muchos mexicanos lucharon en el ejército de EE. UU.. Por otro lado, los ejércitos conservadores se unieron a la intervención francesa y al Segundo Imperio Mexicano. Aunque había muchos oficiales mexicanos, estaban subordinados a los regimientos franceses y a los voluntarios austrohúngaros y belgas.

El gobierno imperial intentó crear un "Ejército Imperial Mexicano", pero nunca se consolidó. Algunas comunidades indígenas formaron milicias para defender el Imperio, creyendo que se les devolverían sus derechos y tierras.

República Restaurada: Consolidación del Estado

Después de la ejecución de Maximiliano y el fin del imperio, el gobierno de Benito Juárez tuvo que pacificar el país. Diferentes grupos, especialmente indígenas, continuaron rebelándose. Esto fue aprovechado por algunos líderes para levantarse contra el gobierno, como Porfirio Díaz con el Plan de la Noria.

Benito Juárez comenzó a dar forma al Ejército Federal, debilitando a la Guardia Nacional para quitar poder a los gobernadores y líderes estatales. También impulsó la inversión extranjera y la creación de cuerpos de policía modernos, como los Rurales, para disminuir la delincuencia en las zonas rurales.

Sebastián Lerdo de Tejada continuó la obra de Juárez, buscando que el ejército tuviera su propia industria militar. También envió estudiantes al extranjero para que, a su regreso, enseñaran a otros militares.

El Ejército Federal en 1899

Según un informe del general Bernardo Reyes de 1899, el "Ejército Federal" tenía 34,000 efectivos permanentes, armados con fusiles Máuser. En caso de necesidad, podía aumentar a 160,000 efectivos con reservas.

El ejército y la marina estaban bajo la "Secretaría de Guerra y Marina". Contaba con un Estado Mayor, departamentos de Ingenieros, Artillería, Caballería, Infantería, Cuerpo Médico y Marina. Había escuelas militares, hospitales, servicios de administración y justicia militar.

La Marina Armada era pequeña, con una corbeta, tres cañoneros y otros barcos. Las reservas del ejército incluían a los Rurales y las gendarmerías de aduanas y frontera, así como la Guardia Nacional de cada Estado.

Porfiriato: Modernización y control

El general Porfirio Díaz impulsó la creación de un ejército moderno. Destinó más presupuesto al Colegio Militar y ofreció becas para estudiar en el extranjero. Para dar espacio a los nuevos oficiales, creó puestos públicos para los viejos militares, interesándolos en la paz y la estabilidad del régimen.

Desarrolló los cuerpos de comunicaciones, sanidad y transporte, usando el ferrocarril para mover tropas por el país. Esto ayudó a que los soldados no tuvieran una lealtad exclusiva a sus jefes locales, sino al concepto de nación. También permitió a los líderes regionales controlar cuerpos privados llamados "Milicias Blancas", formadas por trabajadores.

Para modernizar la armada, se creó la Escuela Naval Militar en Veracruz en 1897, con el objetivo de formar marinos y oficiales bien entrenados. También se enviaron oficiales a Francia para estudiar el uso de globos en el campo de batalla.

El Ejército Federal comenzó a enviar guarniciones lejos de su lugar de origen para evitar represalias contra la población local. A pesar de lo que se cree, el gobierno de Díaz redujo el tamaño del ejército, buscando mejorar su calidad en lugar de solo la cantidad.

Revolución Mexicana: Un ejército en constante cambio

La Revolución Mexicana comenzó formalmente con el Plan de San Luis. Al principio, hubo enfrentamientos entre las fuerzas de Francisco I. Madero, formadas por grupos irregulares, y el Ejército Federal en el norte.

En Morelos, grupos indígenas de campesinos, liderados por Emiliano Zapata, se organizaron para reclamar la restitución de sus tierras. Formaron un ejército irregular que luchaba cuando no estaban en labores agrícolas.

Presidencia de Madero (1911-1913)

Con la renuncia de Díaz, Francisco I. Madero fue elegido presidente y tomó el mando supremo del Ejército Federal. Madero intentó evitar confrontaciones, pero el rechazo a la restitución inmediata de tierras a los campesinos de Morelos llevó a la rebelión del Ejército Libertador del Sur bajo el Plan de Ayala.

Madero envió al general Victoriano Huerta para contener la revuelta. En el norte, los indígenas Raramuris y las fuerzas de Pascual Orozco también se sublevaron. Huerta, con experiencia en sofocar revueltas, hizo una campaña rápida. Esta fue la primera vez que se usaron aviones en México para comunicación y observación.

El golpe de Estado conocido como la Decena Trágica ocurrió debido al apoyo que Bernardo Reyes aún tenía en el Ejército Federal. Victoriano Huerta arrestó a Madero y al vicepresidente, lo que llevó a Huerta a la presidencia.

Gobierno de Huerta (1913-1914)

Como presidente, Victoriano Huerta ordenó al Ejército Federal apoyar a sus aliados y reprimir a sus oponentes. Su intento de tomar el mando de las Guardias Nacionales de los estados fue un pretexto para la rebelión. El gobernador de Coahuila, Venustiano Carranza, inició el movimiento con el Plan de Guadalupe, declarando nula la elección de Huerta.

Para organizar las fuerzas armadas que se unieron al movimiento, se dividió el territorio en siete Zonas Militares. El plan era presionar al Ejército Federal hacia el centro del país, tomando puertos y aduanas para cortar sus suministros. La División del Norte, bajo el mando del general Francisco Villa, causó una división en el "Ejército del Noreste" al preferir ser comandada por Villa.

La División del Norte, con oficiales profesionales y suministros de EE. UU., logró avanzar rápidamente y tomar ciudades importantes. Mientras tanto, en Veracruz, cadetes de la Escuela Naval Militar defendieron el puerto de la intervención estadounidense.

La lucha continuó hasta la renuncia de Huerta. Se firmaron los Tratados de Teoloyucan, que acordaron la desmovilización y el fin del Ejército Federal formado en 1861.

En esta lucha, el gobierno carrancista compró un avión, el "Sonora", que fue usado para observación. En 1914, ocurrió el primer combate aeronaval mundial en Topolobampo. Después de la contienda, se organizó el primer cuerpo formal del Colegio del Aire.

Reformas al Ejército bajo Huerta

Victoriano Huerta emitió una ley de amnistía que permitió a varios líderes revolucionarios unirse a su causa. Aumentó el presupuesto militar y el número de efectivos a 97 mil, comprando armas en España. También militarizó secundarias, preparatorias y universidades.

Lucha de facciones (1914-1917)

Al disolverse el Ejército Federal, los gobernadores pudieron crear o remodelar sus Guardias Nacionales. También se crearon Guardias Civiles en los municipios para actividades policiales.

El Gobierno Constitucionalista convocó a la Convención de Aguascalientes para crear un gobierno nacional. Sin embargo, grupos como los villistas y zapatistas se opusieron. El gobierno Constitucionalista se retiró a Veracruz.

En la convención, se creó un nuevo gobierno federal bajo el general Eulalio Gutiérrez Ortiz, protegido por la División del Norte de Villa. La División del Norte controlaba el centro y este del norte de México, y el Ejército Libertador del Sur controlaba varios estados del sur.

Las compañías petroleras tenían cuerpos privados para proteger sus pozos. En Yucatán, grupos radicales de izquierda, con apoyo del general Salvador Alvarado, crearon el primer gobierno socialista en el continente.

La Ciudad de México cambió de manos varias veces. Los ejércitos Constitucionalistas, reconocidos por EE. UU., pudieron derrotar poco a poco a la División del Norte. El general Álvaro Obregón incorporó a grupos indígenas, prometiéndoles la devolución de tierras.

El arma de aviación del Ejército Constitucionalista participó en misiones de observación y bombardeo. En 1915, se creó la "Arma de Aviación Militar". La División del Norte sufrió por la falta de suministros, lo que llevó a muchos exoficiales del Ejército Federal a abandonarla. Obregón, en cambio, mejoró el entrenamiento y las tácticas, usando trincheras y ametralladoras, lo que le permitió derrotar a la caballería de Villa en las batallas del Bajío.

Al tomar el control del país, las fuerzas constitucionalistas se convirtieron en el ejército nacional. Se organizó el Departamento de Aviación y se creó la Escuela Nacional de Aviación. También se estableció el Departamento de Establecimientos Fabriles y Aprovisionamientos Militares para asegurar el suministro de armamento.

Etapa Institucional: El ejército moderno

Después de la lucha entre constitucionalistas y convencionistas, las facciones zapatistas se integraron lentamente al bando constitucionalista. En el norte, Pancho Villa continuó luchando, pero al prohibírsele la compra de suministros en EE. UU., atacó poblaciones en Nuevo México. Esto provocó la Expedición Punitiva estadounidense, donde el general John J. Pershing aprendió estrategias de combate y supervivencia de los indígenas Raramuris.

Reformas Carrancistas (1917-1920)

Con la nueva Constitución de 1917, el gobierno de Venustiano Carranza comenzó a crear un nuevo Ejército Federal, basado en el "Ejército Constitucionalista". El objetivo era disminuir el poder militar de los líderes revolucionarios y entregárselo al poder ejecutivo federal.

Se redujo el número de efectivos, dando de baja a soldados y oficiales jóvenes. Se eliminaron las comandancias militares y el mando de las tropas pasó a los jefes de guarnición. Los cuerpos irregulares se organizaron en regimientos.

Muchos oficiales y soldados desmovilizados fueron reubicados en cuerpos especiales o en colonias rurales. Se creó la Legión de Honor del Ejército Mexicano para que los oficiales tuvieran comisiones y justificaran su sueldo.

En 1918, se reorganizó la Justicia Militar. En el ámbito educativo, se creó la Escuela Constitucionalista Médico Militar y la Academia de Estado Mayor. En 1920, se reabrió el "Colegio Militar" con varias escuelas especializadas.

Una comisión se encargó de organizar un ejército de 133,510 efectivos, divididos en seis zonas militares.

México posrevolucionario: Consolidación y profesionalización

Reforma Obregonista (1920-1924)

Después de la sucesión presidencial de 1920, el general Álvaro Obregón asumió la presidencia. El general Joaquín Amaro, como Secretario de Guerra y Marina, impulsó reformas para limitar el ejército a unos 50 mil efectivos, revisar los grados de los oficiales y mejorar su disciplina.

Se licenciaron a las guardias civiles y tropas voluntarias. Se crearon colonias agrícolas en haciendas expropiadas. El país se dividió en seis Zonas Militares, y se aumentó el número de jefaturas de operaciones para disminuir la influencia de los jefes de zona.

La revuelta de Adolfo de la Huerta (1923-1924)

Durante la sucesión presidencial de 1923, un grupo de militares se opuso a la candidatura de Plutarco Elías Calles. Cerca de 50,000 militares se levantaron en armas. Sin embargo, EE. UU. apoyó al gobierno de Obregón, lo que ayudó a sofocar la rebelión. La Batalla de Ocotlán fue decisiva para el triunfo del gobierno.

Reforma militar de Plutarco Elías Calles (1924-1928)

El general Joaquín Amaro Domínguez continuó la reorganización del ejército. Se redujo el número de efectivos y el presupuesto militar. Se sustituyó a trabajadores civiles por personal militar.

En la Marina Armada, el recorte de presupuesto llevó a que muchos barcos quedaran inactivos. En la fuerza aérea, se creó la "Escuela Militar de Aplicación Aeronáutica" para formar personal capacitado.

Una medida importante fue rotar a los jefes de operaciones y a los soldados para evitar la lealtad incondicional a un solo jefe y fomentar un sentido de grupo nacional. Esto también motivó la migración interna.

El general Amaro también implementó el fuero de guerra de manera estricta y controló las armas de los civiles. En 1925, se crearon comisiones para modernizar la legislación militar y establecer el Servicio Militar Obligatorio, aunque esto último enfrentó oposición.

Reforma legislativa militar de 1926

En 1926, se promulgaron varias leyes importantes:

  • Ley Orgánica del Ejército: Creó un ejército permanente con reservas. El reclutamiento sería voluntario por tres años. Se eliminó la Guardia Nacional de los estados y se creó el arma de aviación.
  • Ley de Disciplina: Más estricta que la anterior, pero permitía no acatar órdenes perjudiciales.
  • Ley de Retiros y Pensiones: Creó una seguridad social para los soldados, asegurándoles un dinero mensual al jubilarse.
  • Ley de Ascensos y Recompensas del Ejército y Armada Nacionales: Estableció ascensos basados en mérito y cursos militares, no solo en la antigüedad.

Educación Militar

El Colegio Militar se trasladó a Popotla, con instalaciones más modernas. Ofrecía becas para estudiar en el extranjero, y los alumnos debían enviar informes y materiales de estudio. Los nuevos oficiales fueron asignados a cuerpos problemáticos para mejorar la disciplina.

La tropa también debía recibir educación primaria. José Vasconcelos, con sus "Misiones Culturales", envió profesores a todo el país, a menudo con el apoyo del ejército, para llevar educación básica a las tropas y a las comunidades rurales.

México contemporáneo: Modernización del Ejército

Periodo de Lázaro Cárdenas (1934-1940)

El general Lázaro Cárdenas continuó con las reformas militares. Al romper con el "Maximato" (el control de Calles sobre la política), Cárdenas se apoyó en figuras políticas de izquierda. Esto llevó a enfrentamientos entre grupos de ideologías opuestas.

El gobierno se declaró socialista, lo que impulsó una reforma educativa con el socialismo como eje. Esto causó problemas, ya que algunos líderes locales y religiosos se oponían a la educación laica, llegando incluso a la violencia contra maestros y estudiantes. Esto obligó a movilizar tropas para proteger a los profesores.

Se realizó una "Convención Médico – Militar" para mejorar el cuerpo médico del ejército. Se mantuvo la división territorial por zonas de operaciones, y Cárdenas puso a generales leales a él al frente de estas zonas.

Hubo una modernización del ejército con la adquisición de aviones, rifles y barcos guardacostas. También se compraron tanques, creando el arma de blindados.

El general Manuel Ávila Camacho, como Secretario de Guerra y Marina, implementó reformas sociales para mejorar la vida de los soldados. Se creó un Fondo de Ahorros del Ejército y escuelas para los hijos de los militares, lo que fortaleció la lealtad de la tropa al gobierno federal. También se impulsó el deporte militar y se apoyó a aviadores para abrir rutas aéreas.

A pesar de las reformas, continuaron los levantamientos militares, como el de Lauro Rocha. Cárdenas emitió una Ley General de Amnistía para los alzados en armas. También eliminó las reservas del Ejército, quitando estos cuerpos armados a los gobernadores estatales. La revuelta del general Saturnino Cedillo llevó a la Expropiación Petrolera de 1938.

Periodo de Manuel Ávila Camacho (1940-1946)

Archivo:Spanish troops at Pensacola
Granaderos españoles y el batallón de La Habana entran en Fort George durante la Batalla de Pensacola.

El hecho militar más importante durante la presidencia del general Manuel Ávila Camacho fue la entrada de México a la Segunda Guerra Mundial. Fue la primera vez que México envió tropas a un conflicto externo. Esto impulsó la modernización del ejército.

Se permitió el enrolamiento de pilotos de la Fuerza Aérea Mexicana en unidades aéreas de EE. UU.. Soldados de infantería también se unieron al Ejército de los Estados Unidos. Para muchos mexicanos, esto fue una forma de obtener la ciudadanía estadounidense o un medio de trabajo.

Lo más recordado es la participación del Escuadrón 201 en el Pacífico. También se organizaron simulacros de apagones y se implementó el Servicio Militar Nacional. El ejército se modernizó rápidamente con la compra de tanques y aviones de transporte. Se iniciaron los cursos de paracaidismo.

La marina armada defendió las costas con patrullas y puntos de vigilancia, usando radios de comunicación. Se temía una invasión nazi, lo que llevó a la creación del "ejército charro" como respaldo.

También se introdujeron servicios de espionaje para descubrir posibles colaboradores de las Potencias del Eje. Después de la guerra, el ejército se "limpió", pasando a retiro a muchos generales y mandos. Los elementos que habían servido en el ejército de EE. UU. regresaron con experiencia de combate, lo que cambió los procedimientos de entrenamiento.

Periodo de Miguel Alemán (1946-1952)

Durante el gobierno de Miguel Alemán, el ejército continuó su desarrollo. Se enviaron más cadetes becados a estudiar en el extranjero y se compraron equipos militares sobrantes de EE. UU., incluyendo aviones de combate y barcos de guerra.

Administrativamente, la Secretaría de la Defensa Nacional se dividió, y el sector naval se transformó en la Armada de México. Se construyeron unidades habitacionales para los soldados y sus familias, lo que mejoró su seguridad y calidad de vida. Se inauguró la "Ciudad Militar" en Toluca y la "Colonia Militar Venustiano Carranza" para producir alimentos para las tropas. También se creó el Banco Nacional del Ejército y la Armada (hoy Banjército).

En educación militar, se inauguró la Escuela Superior de Guerra para formar oficiales mejor preparados. Se mejoraron las instalaciones del Colegio Militar.

En 1948, el nombre de "Ejército Nacional" cambió oficialmente a "Ejército Mexicano". Las zonas militares se reorganizaron para evitar que los jefes adquirieran demasiada influencia.

1960 a la fecha: El ejército actual

En 1967, se creó una nueva Zona Militar, sumando 35 divisiones territoriales militares. En ese entonces, el ejército tenía unos 40,200 efectivos.

En 1970, el general Marcelino García Barragán se convirtió en el primer Secretario de la Defensa Nacional completamente profesional, egresado del Colegio Militar.

En 1986, se reformó la Ley Orgánica del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos, reforzando el concepto de servidor público.

Fuerzas Armadas Mexicanas número de efectivos
Año Total Año Total
1876 37463 1913 69049
1877 29364 1913 91785
1880 33000 1913 150000
1881 27507 1913 200000
1884 34050 1914 250000
1886 34881 1914 28323
1886 35002 1914 38600
1893 22000 1916 250000
1895 24489 1917 175000
1896 30112 1917 147120
1898 26000 1918 160000-135000
1399 30335 1918 133510
1899 30305 1920 99595
1899 99639 1921 120490
1901 34000 1923 70818
1909 29966 1924 82735
1905 28154 1925 62947
1906 28588 1926 53018
1907 27696 1927 68728
1910 25430 1928 67249
1910 36700 1999 73567
1910 29000 1930 72556
1913 32594 1930 63007
1913 61000

Galería de imágenes

Véase también

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Historia de las Fuerzas Armadas de México para Niños. Enciclopedia Kiddle.