Klezmer para niños
Datos para niños Klezmer |
||
---|---|---|
Orígenes musicales | Surgió durante la Baja Edad Media, en las comunidades judías de Europa Oriental, basado en melodías y canciones tradicionales judías tanto religiosas como seculares. Algunas composiciones armónicas influenciadas mayormente por la música tradicional rumana (predominantemente de Moldavia, particularmente Besarabia y la región rumana de Bucovina); también están presentes influencias musicales griegas, ucranianas y turcas. | |
Orígenes culturales | Celebraciones judías, especialmente bodas, en Europa oriental. Se fue consolidando como género independiente, dejando de ser accesorio y creando un estilo propio. | |
Instrumentos comunes | Violín, Címbalo o Dulcémele, Clarinete, Acordeón, Trombón, Trompeta, Mandolina, Piano, Percusión. | |
Popularidad | Muy rara entre no-judíos, seguida por los judíos de América, especialmente después del resurgimiento de los años 1980. | |
El klezmer es un estilo de música tradicional que nació en las comunidades judías de Europa del Este. Se desarrolló rápidamente en estas comunidades antes de las grandes guerras mundiales. Los músicos que tocaban esta música se llamaban klezmorim. Al principio, la música klezmer se usaba principalmente para bailes y piezas instrumentales en bodas y otras fiestas. Con el tiempo, se convirtió en un género musical propio, con características únicas. Hoy en día, la música klezmer se sigue tocando en casi todo el mundo, manteniendo su esencia y sonido originales.
Contenido
- ¿Qué significa la palabra Klezmer?
- ¿Cómo surgió la música Klezmer?
- ¿Cómo suena el Klezmer?
- Galería de imágenes
- Véase también
¿Qué significa la palabra Klezmer?
El nombre klezmer viene de dos palabras antiguas del idioma hebreo:
- כְּלִי [k'lî], que significa 'herramienta' o 'instrumento'.
- זֶמֶר ['zęmęr], que significa 'canción' o 'hacer música'.
¿Cómo se usaba el término Klezmer?
Las palabras se unieron para formar klezmer, que al principio significaba 'instrumentos de canción' o 'vehículo de la canción'.
El término klezmer se refería originalmente a:
- Los instrumentos musicales que se usaban para tocar esta música. Se cree que los instrumentos fueron reemplazando poco a poco a las voces. Para algunos, klezmer significa que los instrumentos son como la voz interior que canta en el alma de cada persona.
Más tarde, a mediados del siglo XVII, la palabra también se usó para nombrar a:
- Los músicos mismos, a quienes hoy se les llama klezmorim. Entre los siglos XVI y XVIII, otras palabras más antiguas para músicos fueron desapareciendo. En un escrito antiguo del siglo XVI, la palabra klezmer se usó por primera vez para referirse al músico, no al instrumento. Para el siglo XVII, se distinguía entre klezmorim (músicos), letsonim (artistas), badkhonim (maestros de ceremonias en bodas) y jazanim (cantores de sinagoga).
No fue hasta el siglo XX que el término se usó para identificar:
- El género musical. La expresión klezmerishe muzik (música klezmer) fue introducida en 1938 por el musicólogo Moshe Beregovsky. Al principio, las grabaciones y escritos del siglo XX a menudo llamaban a este estilo "Música Yiddish" o "música Freilekh" (música alegre). La primera grabación que usó el término klezmer para referirse a la música fue "Jewish Klezmer Music" de Andy Statman y Zev Feldman.
¿Cómo surgió la música Klezmer?
Se sabe poco sobre los inicios de la música klezmer. Su historia está muy ligada a la vida del pueblo judío a lo largo de los siglos. Eventos como la diáspora (dispersión), las migraciones y las persecuciones fueron parte de la vida diaria de las comunidades judías. La música judía en general tiene una historia muy larga, desde las posibles músicas tribales hasta el canto de los levitas en Jerusalén.
Los primeros sonidos musicales
Textos antiguos como el Tanaj (la Biblia hebrea) describen orquestas y levitas tocando música. Sin embargo, después de la destrucción del Segundo Templo de Jerusalén en el año 70 d.C., muchos líderes religiosos judíos (rabinos) desaconsejaron el uso de instrumentos musicales. La única excepción era el shofar (un cuerno) durante días festivos importantes.
Los salmos del rey David son quizás algunas de las primeras piezas musicales estructuradas. Son himnos que alaban al creador y reflejan la vida diaria. Los salmos eran cantados por los levitas en el Templo de Jerusalén, mostrando una conexión entre la música instrumental y la religión. Lamentablemente, no se sabe cómo sonaba esta música, ya que no existía notación musical escrita en esos tiempos.
Lo más parecido a la notación musical en la tradición judía son los ta’amey hamikra’ o acentos de lectura. Estos son signos especiales en los textos sagrados que guían la forma de leerlos en la sinagoga. Indican dónde poner el énfasis en las palabras, cómo dividir las frases y también tienen un valor musical, convirtiendo la lectura en un canto. Estos motivos musicales inspiraron las melodías usadas en las oraciones.


Letras consonantes en negro; puntuaciones vocales y dagueshim (marcas de duplicación) en rojo; acentos en azul.
La destrucción del Segundo Templo de Jerusalén marcó un período de tristeza, y el uso de música instrumental fue prohibido. En la sinagoga, el canto del jazán reemplazó a los instrumentos. Sin embargo, la música instrumental sí se usaba para acompañar eventos alegres no religiosos y también celebraciones religiosas felices, como bodas, ceremonias de circuncisión o inauguraciones de sinagogas y nuevos rollos de Torá.
La importancia de animar las bodas no disminuyó, y los músicos que llenaron ese espacio fueron los klezmorim. El primer músico klezmer conocido fue Yakobius ben Yakobius, que tocaba un instrumento llamado aulós en Samaria en el siglo II.
La prohibición de la música instrumental se hizo menos estricta mil años después. En la Europa Medieval, los klezmorim o grupos musicales judíos eran a menudo preferidos por la nobleza cristiana. Sin embargo, esta preferencia, junto con prejuicios, llevó a que se les impusieran altos impuestos. Con el tiempo, no se les permitía tocar en eventos sin un permiso especial del gobierno, y a veces ni siquiera en sus propias celebraciones. A pesar de estas dificultades, algunas bandas organizadas siguieron tocando. En muchas ciudades, la actividad de los músicos judíos tenía muchos impuestos y estaban limitados en cuándo y dónde podían tocar, o qué instrumentos usar.
En la Edad Media, el crecimiento de la música no religiosa fue impulsado por trovadores y juglares que tocaban para todas las clases sociales. Los judíos también tuvieron sus propios músicos. En Italia, donde había una actitud más abierta hacia los judíos, hay registros del siglo XVI de músicos y profesores de baile judíos. La música instrumental judía floreció en Italia durante el Renacimiento, pero sufrió restricciones de la iglesia en el siglo XVII. En Alemania, la música no religiosa se tocaba para bailar, y los salones de baile eran populares desde el siglo XII. La danza con música instrumental era parte de las celebraciones judías como Simjat Torá, Purim y Janucá, así como en bodas.


A finales de la Edad Media, surgieron los primeros grupos de músicos judíos, y algunas prohibiciones se hicieron menos estrictas. La música de los klezmorim era una mezcla de diferentes orígenes. Hay descripciones de klezmorim tocando en desfiles en Praga en el siglo XVI. Los registros escritos más antiguos sobre klezmorim y sus grupos datan del siglo XV y XVI. Se cree que el estilo y la estructura del klezmer actual provienen principalmente de la región de Besarabia en el siglo XIX.
¿Cómo se desarrolló y consolidó el Klezmer?
A finales del siglo XVI y principios del siglo XVII, los músicos judíos de Bohemia y de la Mancomunidad polaco-lituana formaron sus propias asociaciones. Esto mejoró la posición de los músicos judíos. En estos grupos, se votaba, se fijaban precios, se daban licencias a los miembros y se ofrecían beneficios.
Los conflictos y problemas continuaron en Europa con la Guerra de los 30 años (1618-1648), que incluyeron persecuciones a las comunidades judías. Las masacres de Jmelnytsky (1648-1651) fueron muy duras y causaron una mayor dispersión de judíos. Algunos se mudaron al Imperio otomano y llevaron formas musicales turcas a sus repertorios. El siglo XVII vio la caída del Imperio polaco, y grandes áreas fueron absorbidas por Austria, Hungría y Rusia. Después de la expulsión de los turcos en 1699, algunos klezmorim emigraron del sur de Polonia a Hungría y colaboraron con músicos gitanos. Esto llevó a una gran mezcla entre la música popular húngara y la judía.
En 1791, la zarina Catalina la Grande creó la Zona de Asentamiento, la única área donde los judíos podían vivir. Después de 95 años, unos 5.5 millones de judíos se habían establecido en esta zona, que consistía en pequeños pueblos rurales llamados shtetl. Los klezmorim podían vivir en un shtetl, pero a menudo viajaban para tocar en eventos especiales o para la nobleza local.
Además de los klezmorim, los únicos músicos profesionales en la Zona de Asentamiento eran los gitanos. Por eso, los dos grupos a menudo unían fuerzas. La influencia de cada grupo se puede ver en la música del otro. Gracias a este intercambio de estilos, muchas melodías klezmer de Hungría sobrevivieron al siglo XX.
La liberación de los judíos en tierras de Habsburgo en 1867 llevó a una rápida disminución de la profesión klezmer en Hungría y en Bohemia-Moravia. Los grupos gitanos tomaron entonces el lugar que antes ocupaban los klezmorim. Los grupos que combinaban músicos judíos y gitanos se hicieron comunes en la Moldavia otomana y la Besarabia rusa. Sin embargo, en Moldavia, el elemento musical judío se mantuvo fuerte, atrayendo a músicos no judíos que tocaban y componían al estilo "judío".
Con el tiempo, se establecieron nuevas reglas sobre cuántos músicos podían tocar en eventos específicos, como bodas. La música, como muchas otras profesiones, era un asunto familiar. Los grupos klezmer (di klezmer, kapelye, o khevrisa) estaban formados solo por hombres. Tradicionalmente, el director era el primer violín, quien solía pasar su puesto a su hijo o yerno. Los klezmorim no acompañaban música vocal judía, excepto en las bodas, donde ponían música a las rimas del badkhn. Aunque el líder solía ser músico a tiempo completo, los demás miembros de la banda generalmente tenían otra profesión.
Aunque los judíos vivían bajo diversas restricciones legales en Europa, los klezmorim eran contratados para eventos judíos y no judíos debido a su talento y popularidad. La nobleza cristiana y los comerciantes también buscaban sus servicios. Como en muchas regiones la mayoría de los músicos eran klezmorim, su actividad musical no se limitaba a la sociedad judía.
Dentro de la sociedad judía, el escenario principal y la mejor oportunidad para tocar y ganar dinero era la boda. Las bodas judías duraban más de un día e incluían música para meditar, diferentes tipos de bailes y conciertos para los invitados más importantes. Los mejores klezmorim solo tocaban en estos conciertos improvisados. El repertorio de la boda dependía de la clase social, por lo que los klezmorim guardaban sus piezas más originales para las bodas de familias ricas. La calidad de los músicos se evaluaba por su habilidad para tocar, su repertorio y, sobre todo, por su capacidad para adaptar la música a quienes escuchaban y bailaban.
Un badkhn (el maestro de ceremonias de la boda) dirigía a los klezmorim, improvisaba canciones y poemas sobre los novios y los invitados. A veces tocaba el violín y guiaba a la banda (kapelye), contaba chistes y entretenía la fiesta. El badkhn era un puente entre la música vocal religiosa de la sinagoga y la música instrumental del klezmer. También invitaba a bailar y a menudo dirigía el baile. Las celebraciones podían durar una semana.
Aparte de las bodas, los klezmorim tocaban en festividades como Janucá, Purim y a veces en Sukkot, Pesaj y Rosh Jodesh, y al final del shabbath, en la sinagoga o en casas de personas adineradas. Algunas comunidades jasídicas también impulsaron el desarrollo de la música klezmer.
Se dice que los músicos judíos profesionales solían viajar por toda Europa Oriental para tocar en diversas ocasiones festivas. A menudo eran pobres, y aunque a veces se les veía de forma negativa, ganaron una buena reputación por su habilidad y su estilo musical innovador. Seguían siendo muy solicitados.
Algunos de ellos se hicieron famosos en Europa, como el músico Mikhoel-Yosef Gusikov (1806-1837), y los violinistas Arn-Moyshe Kholodenko (1828-1902) y Yossele Drucker (1822-1879), quien inspiró un personaje del escritor Sholem Aleijem.
En lugares como Polonia y Lituania, donde no había muchos músicos gitanos, los klezmorim eran la mayoría de los músicos profesionales. Se establecían principalmente en pueblos privados de la nobleza polaca. También había centros urbanos de música klezmer, especialmente en Vilna y Leópolis. Para el siglo XVIII, los klezmorim también eran importantes en la Moldavia otomana. Los klezmorim formaban una especie de grupo profesional; hablaban su propio argot y se casaban entre familias de badkhonim. Algunas familias de klezmorim duraron un siglo o más.
A finales del siglo XVIII, los judíos estaban bajo tres influencias culturales diferentes: Al oeste, los Maskilim (miembros de la Haskalá, un movimiento de ilustración judía) del filósofo Moses Mendelssohn, que promovían la integración cultural. Al norte, los Mitnagdim (opositores o racionalistas), liderados por Eliah ben Solomon Zalman, que buscaban un equilibrio entre estudios tradicionales y seculares. Y al este, los Jasidim, seguidores de Israel ben Eliezer, que valoraban la alegría, las canciones y el baile como formas de expresar su amor por la humanidad y por D-s. Más tarde, los klezmorim tocaron en las cortes de los Rebbes Jasídicos.
En Europa Central, los judíos se estaban integrando rápidamente en la sociedad. Para los maskilim en Alemania, Austria, Bohemia y Moravia, el idioma yiddish y la música klezmer debían ser reemplazados por la cultura alemana. Pero en Europa oriental, el klezmer floreció y tomó prestadas melodías (nigunim) de la corriente jasídica, mezclándolas con canciones populares, música de baile y cantos de sinagoga.
Generalmente, la música de los klezmorim no llegaba a la cultura urbana no judía ni a la música clásica. Aunque hubo excepciones, como Yosef Gusikov, quien se hizo famoso en los salones de concierto de Europa occidental a principios del siglo XIX. Tocaba un tipo de xilófono que él mismo inventó, llamado “shtroyfidl”. Recorrió Europa Oriental y luego tocó en Viena y Europa Occidental, donde obtuvo éxito y buenos comentarios del compositor Félix Mendelssohn.
Aunque no hubo mucha influencia del klezmer en la música clásica, los klezmorim tocaban melodías populares de la época, incluyendo bailes y piezas clásicas para la nobleza. Para otros eventos, tocaban bailes y canciones folclóricas locales.
En los territorios polacos, la organización de cada grupo klezmer estaba estrictamente regulada. Después de que la mayor parte de Polonia pasó a ser parte de Rusia a finales del siglo XVIII, la autonomía judía disminuyó. Esto llevó a que músicos no klezmer formaran parte de sus grupos, que ahora se llamaban kompaniya.
Antes del siglo XIX, hay referencias a los klezmorim en registros de comunidades judías y cristianas. Las descripciones literarias y visuales no judías de los klezmorim aparecen antes y son más completas que las judías. A mediados y finales del siglo XIX, las referencias a los klezmorim aparecen ocasionalmente en escritos en yiddish.
A principios del siglo XIX, a los judíos no se les permitía vivir en las ciudades importantes de la región alrededor de Kiev. La mayoría de los músicos aprendían a tocar de oído, y la profesión se pasaba de padre a hijo. Hablaban un argot propio del klezmer, lleno de palabras con doble sentido. Formaron asociaciones, como sindicatos, para representarse ante los gobiernos.
A finales del siglo XIX, el reinado del Zar Alejandro II trajo cambios para los klezmorim. Antes, a los músicos judíos se les impedía estudiar en conservatorios a menos que cambiaran de religión. Bajo Alejandro II, esto cambió, y por primera vez los judíos pudieron estudiar música y trabajar en el mundo musical no judío. La aceptación de judíos en conservatorios en Rusia y Austria a finales del siglo XIX afectó el estilo klezmer y las oportunidades de los músicos en las grandes ciudades. Después de la Primera Guerra Mundial, los klezmorim se integraron poco a poco en diversas formas de la vida musical europea, aunque mantuvieron su papel en la música comunitaria judía. En algunas regiones, las hijas de familias klezmer podían ahora ser músicas profesionales, formando grupos de mujeres, aunque no se les permitía tocar en bodas judías. Mientras la música religiosa se transmitía de forma oral, los músicos klezmorim intercambiaban muchas melodías populares con las culturas a su alrededor: rumana, rusa, polaca, ucraniana, lituana, húngara, griega, otomana (turca) y gitana. Por eso, se considera que es una fusión musical.
¿Cómo se extendió el Klezmer por el mundo?
La región donde vivían los judíos tenía una historia compleja, con fronteras cambiantes y diferentes gobiernos. Era un área con muchos conflictos, y a menudo las poblaciones locales atacaban a las comunidades judías en tiempos difíciles. Estos ataques se llamaron pogromos y fueron muy duros a finales del siglo XIX y principios del siglo XX. Esto provocó una nueva ola de migraciones hacia el oeste, a Alemania, Europa Central y las Américas. Entre 1880 y 1914, casi un tercio de la población judía de Europa Oriental emigró al continente americano, y unos 2.5 millones llegaron a Nueva York.
En Estados Unidos, el género cambió mucho, ya que los inmigrantes judíos de habla yiddish de Europa Oriental conocieron y adoptaron el jazz americano. Los primeros músicos klezmer que llegaron a Estados Unidos seguían usando el violín como instrumento principal, aunque muchos eligieron la trompeta. Otros músicos llevaron el címbalo, el schrammel (un tipo de acordeón pequeño) y el trombón. Para 1920, la mayoría de estos instrumentos fueron reemplazados por los usados en el vodevil.
En Europa, los klezmorim dependían de los grupos locales, pero en el siglo XX, los sindicatos tomaron el papel de estos grupos. Los inmigrantes fueron excluidos de la American Music Federation, así que crearon su propio sindicato, la Russian Progressive Musical Union. Además de cuidar el bienestar de los músicos, el sindicato era el lugar para contratar una banda. Los inmigrantes también encontraban apoyo al formar grupos con músicos de su mismo lugar de origen, llamados landmanshaften.
Los músicos aficionados encontraron otras oportunidades, como en coros de trabajadores o en orquestas de mandolinas.
Al igual que en Europa, los klezmorim americanos tocaban en bodas y, con el tiempo, también se hicieron populares en los bar mitzvahs. El badkhn, que era muy importante en la experiencia klezmer, fue desapareciendo, y su papel fue tomado por el organizador de eventos. La figura del badkhn se transformó en el cantante, actor y comediante del teatro de variedades o vodevil en el nuevo continente.
La música popular americana se añadió al repertorio klezmer, así que los eventos tenían una mezcla de canciones antiguas y nuevas. Las bodas en América duraban un día y tenían menos rituales que las de Europa.
La adaptación cultural también se reflejó en la música klezmer y en el teatro yiddish. Ejemplos notables se encuentran en temas como: !װאָט קען יו מאַך? עס איז אַמעריקע Vot ken yu - What can you- makh? Es iz Amerike! (¿Qué puedes hacer? ¡Es América!) y די גרינע קוזינע Di Grine Kuzine (La prima inexperta, un término para los nuevos inmigrantes).
Entre las guerras hubo un gran auge de la cultura yiddish, impulsado por el consumo de entretenimiento. El público compraba discos de canciones populares, folclóricas, teatrales y piezas instrumentales. Las grabaciones religiosas seguían siendo muy populares, y algunos cantores grabaron canciones en yiddish, ucranianas, artísticas, teatrales e incluso ópera. Este auge cultural yiddish se reflejó en muchas partes de América y Europa donde había población judía.
El teatro yiddish
La práctica religiosa judía tradicional desde el siglo XVI incluía un elemento de teatro durante la festividad de Purim, donde se representaban operetas o purimshpils para contar la historia de Ester. Abraham Goldfaden (1840-1908) fundó el primer teatro profesional yiddish en Rumania alrededor de 1870. Este teatro influyó mucho en la creación y popularización de canciones judías. También es conocido por componer Rozhinkes mit Mandlen (Pasas con Almendras), una de las baladas judías más populares. A finales del siglo XIX comenzó el teatro yiddish, primero en Iași, Rumania, y luego en Odesa. Mezclaba klezmorim y badkhonim con actores y cantantes no judíos para representar obras musicales. Estas obras tuvieron mucho éxito en Europa y América. El teatro yiddish evolucionó, abarcando desde versiones en yiddish de Shakespeare hasta comedia y teatro musical.
La popularidad del teatro musical yiddish llevó a nuevas oportunidades. El público compraba las partituras de las canciones que acababan de escuchar. Hubo un gran aumento en la compra de pianos a principios del siglo XX, y este entretenimiento en casa creó un mercado para la música y las partituras. Una de las primeras canciones exitosas en este formato fue A Brivele der Mame (Una Carta a Mamá) de 1908, de Solomon Smulewitz. Los teatros publicaban las partituras de sus espectáculos, y otros editores pronto aprovecharon el creciente interés en la música escrita, ofreciendo versiones escritas del repertorio klezmer y de las canciones de los espectáculos.
Vodeviles y cines
El final del siglo XIX y principios del siglo XX también vieron el crecimiento del entretenimiento popular en los teatros de vodevil, con sus espectáculos de sketches, acrobacias y variedades musicales. Algunos de estos actos se basaban en estereotipos étnicos. Muchos klezmorim encontraron trabajo en los teatros de vodevil como músicos y actores.
Al igual que los teatros de vodevil, los cines (cuarenta y dos de ellos en el Lower East Side de Nueva York a principios del siglo XX) proyectaban películas mudas. Estas películas necesitaban acompañamiento musical, lo que generó trabajo para los klezmorim. Además de películas del oeste, dramas y romances, algunos filmes mostraban la vida judía, lo que permitía a los klezmorim tocar melodías familiares que el público judío podía reconocer.
Años 1920 - Teatro musical
El teatro y la comedia musical siguieron siendo populares. Desde los años 20, había estrellas del teatro yiddish nacidas en Estados Unidos, como Molly Picon, una gran estrella de musicales y películas. Fanny Brice fue una comediante muy conocida que se especializaba en estereotipos judíos. Además de grabar música y canciones de teatro, se empezaron a grabar números y canciones cómicas y de parodia.
En 1921, Abe Schwartz compuso la música para el espectáculo Di Grine Kuzine (La Prima Inexperta), que inició una serie de canciones sobre inmigrantes. En 1925, una grabación de Yiddishe Mama (Mamá Judía) fue un gran éxito. Otros artistas "judaizaron" canciones populares americanas. Las canciones también reflejaban eventos actuales como el incendio en la fábrica Triangle Shirtwaist, el hundimiento del Titanic y la Primera Guerra Mundial.
Los klezmorim siempre habían adaptado sus repertorios a los tiempos y lugares. En Europa Oriental, la doina (una canción de pastor rumana) se convirtió en parte estándar del repertorio de bodas. El mismo proceso ocurrió en Estados Unidos con el jazz. En 1926, Kandel grabó Jackie Jazz ‘em Up, una pieza jazz con un toque de trompeta klezmer. La Yiddishe American Jazz de Joseph Chernaivsky (también conocida como la Hassidic American Jazz Band) tocaba versiones jazzísticas de melodías klezmer.
Años 1930 - Cine sonoro
En los años 1930, la llegada del cine sonoro hizo que muchos klezmorim en Nueva York perdieran su trabajo, aunque algunos encontraron empleo componiendo y grabando para películas. Otros artistas, como Molly Picon y Yosele Rosenblatt, pasaron del vodevil al cine, y, por supuesto, Al Jolson, estrella de El cantante de jazz. La Gran Depresión afectó al teatro de vodevil y a la industria discográfica, pero surgieron nuevas formas de entretenimiento. En 1926 se lanzó el Hotel Libby Program, el primer programa de radio en yiddish con drama y música. Otros programas de radio en yiddish añadieron documentales, poesía y series dramáticas.
El período entre guerras también vio el desarrollo del "Borscht Belt", una zona de hoteles en las montañas Catskill donde los neoyorquinos de clase media iban de vacaciones de verano. El entretenimiento era parte del paquete, con bailarines, música durante la cena y espectáculos que seguían el estilo americano, pero incluían canciones y música del teatro yiddish. Los klezmorim encontraban trabajo allí, y muchos comediantes famosos comenzaron sus carreras entreteniendo a los turistas judíos.
Canciones de espectáculo
Una canción de espectáculo, Bay Mir Bistu Sheyn (Para mí eres hermosa), se convirtió en el éxito judío más aceptado. Fue escrita por Sholom Secunda en 1932 para un espectáculo. Fue grabada por las hermanas Andrews en 1937 y se convirtió en un gran éxito. Le siguieron otros grupos como las hermanas Barry, que grabaron canciones jazz y se presentaban en un nuevo programa de radio "Melodías Yiddish en Swing" con Tarras. Otras canciones exitosas fueron Bublitchki Beygelakh, escrita por Abe Schwartz, y Der Shtiler Bulgar, que se convirtió en Frailach in Swing. Muchas canciones populares tenían una estructura similar: empezaban y terminaban con un estilo de jazz americano, con un pasaje klezmer en el medio.
Foxtrots y tangos
Antes, en Europa, los klezmorim en el periodo de entreguerras incluían foxtrots y tangos en sus repertorios. Los tangos en yiddish se escribían e interpretaban en Suramérica y Europa. Al mismo tiempo en Kiev, Moshe Beregovski realizó una gran investigación etno-musicológica de los klezmorim. Grabó muchos ejemplos de la música, los transcribió y comentó sobre ellos.
Películas yiddish
Los años 1930 también vieron el auge de las películas yiddish. Yidl mitn Fidl (1936), protagonizada por Molly Picon, cuenta las aventuras de Itke, una chica que se disfraza de muchacho para tocar en una banda de klezmorim, recorriendo la Polonia rural. Aunque la banda sonora tiene poca música klezmer tradicional, la historia refleja algunos aspectos de la vida diaria de los klezmorim a principios del siglo XX en Europa del Este.
Otras películas tuvieron un sonido más auténtico, y muchos musicales continuaron las tradiciones del teatro yiddish en el cine. También destacan películas clásicas yiddish como Uncle Moses (1932) y The Dybbuk/Der Dibuk (1937).
Grabaciones musicales
Los primeros años del siglo XX vieron un gran auge en otra área del entretenimiento: las grabaciones. El Klezmer se hizo popular en esta época en Estados Unidos. La gran migración de judíos a Estados Unidos entre 1880 y 1920 coincidió con el desarrollo de la tecnología de grabación comercial. Las grabaciones hechas entre 1912 y 1940 para el público judío han sido la principal fuente para el actual resurgimiento del klezmer.
Desde 1899, la Gramophone Company de Londres estaba haciendo grabaciones en Europa del Este. El sello discográfico Syrena tuvo un gran éxito con sus grabaciones del cantor Sirota y continuó grabando pequeños grupos y grandes bandas. Una de sus primeras grabaciones fue la Rumanian Belf's Orchestra, con el sonido central del clarinete, la melodía y segundos violines, chelo y piano. Otras grabaciones tempranas de klezmer fueron de Abe Elenkrig con su Hebrew Bulgarish Orchestra, que tenía ritmos y estilo de Moldavia y el suroeste de Ucrania.
Aunque se exportaban grabaciones de Europa a Estados Unidos, la producción en Estados Unidos era mucho mayor. En Estados Unidos, la United Hebrew Disc and Cylinder Record Company grabó canciones, canciones teatrales y popurrís de klezmer, produciendo cerca de 150 discos en 3 años. Durante la Primera Guerra Mundial, la llegada de artistas de Europa Oriental se interrumpió, por lo que los estudios de grabación tuvieron que buscar talento local.
Muchos judíos dejaron Europa oriental a finales del siglo XIX buscando una vida mejor y, más tarde, huyendo de las persecuciones, para establecerse en Estados Unidos. Estos emigrantes: Harry Kandel (1885-1943), Abe Schwartz (1881-1963), Joseph Frankel (1885-1953), Dave Tarras (1897-1989), Naftule Brandwein (1889-1963), Shloimke Beckerman (1883-1974), etc., o sus descendientes, permitieron que el klezmer perdurara y prosperara como música de baile y entretenimiento.
Abe Schwartz. Un artista muy productivo en Estados Unidos en ese momento, violinista, pianista, arreglista, compositor y director, que llegó en 1899 de Bucarest. En 1917, fue director para Columbia Records y grabó 7 discos, incluyendo Tants Tants Yiddelekh (Bailen, Bailen Judíos), uno de los primeros y muy populares éxitos klezmer. Como muchos otros klezmorim, tocaba y escribía para el teatro yiddish. En 1920, grabó y publicó unas 35 canciones klezmer. También grabó con orquestas y otros grupos. Algunos de sus mejores discos son los de Schwartz acompañado por su hija Sylvia de 12 años al piano.
Otro director para Columbia fue Joseph Frankel de Kiev. Educado en conservatorio y director de banda en el ejército, llegó a Estados Unidos en 1904. Después de la guerra, grabó para Columbia.
Mientras tanto, el sello discográfico Victor contrató al clarinetista y director Harry Kandel. Originario de Leópolis, asistió al Conservatorio de Odesa, tocó en el ejército y emigró en 1905. Tocó en vodevil antes de mudarse a Filadelfia para formar la Harry Kandel’s Famous Inlet Orchestra, que tocaba música americana. En 1917, firmó con Victor y grabó A Freylakh fun der Khupe y Odessa Bulgarish. La orquesta de Kandel, con dos cornos, cuatro violines, flauta, viola, trombón, tuba, piano y clarinete, tuvo un gran éxito.
Shloimke Beckerman (1889-1974) tocaba con un estilo elegante y un ritmo constante, mientras que Itzikel Kramtweiss (fecha desconocida), clarinetista de Filadelfia a finales de los años 20, tocaba con un sonido agudo y nasal.
Otros klezmorim muy famosos que grabaron fueron dos clarinetistas inmigrantes: Naftule Brandwein y Dave Tarras, probablemente los músicos más conocidos de este período. Desarrollaron estilos únicos y virtuosos que han influido en todos los intérpretes posteriores.
Naftule Brandwein, aunque no sabía leer partitura, era admirado por su forma de tocar enérgica y alegre. Sus habilidades para improvisar eran excelentes. Era excéntrico en su música y en su forma de ser. Brandwein es considerado el "chico salvaje" del klezmer. Nació en Galitzia, en una familia de músicos. Tocaba el corno con músicos locales polacos y gitanos. Luego cambió al clarinete y llegó a Nueva York en 1908. Se promocionaba como el "Rey de la Música Judía" y tocó en las primeras grabaciones con Abe Schwartz. Para 1922, ya dirigía su propia orquesta.
Dave Tarras es otro gran clarinetista de principios del siglo XX. De Ternivka, Ucrania, creció tocando en la orquesta familiar, recibió educación musical formal y fue recluta del ejército. Llegó a Nueva York en 1921. Se presentó y grabó mucho durante muchos años con muchos artistas klezmer y yiddish. Era famoso por su estilo musical elegante y refinado. Era menos tradicional que Brandwein, y su música refleja influencias de Besarabia. Fue responsable de popularizar los bulgars durante los años 1920 y 1930.
Cuando los judíos dejaron Europa oriental, el klezmer se extendió por todo el mundo, especialmente en Estados Unidos. Al principio, no se mantuvo mucha de la tradición klezmer por los judíos en Estados Unidos. En la década de 1920, los clarinetistas Dave Tarras y Naftule Brandwein causaron un breve e influyente resurgimiento. La soprano Isa Kremer fue una popular cantante de canciones yiddish a nivel internacional durante la primera mitad del siglo XX. A medida que los judíos norteamericanos adoptaban la cultura dominante, la popularidad del klezmer disminuyó lentamente. El sonido cambió, evolucionando con los nuevos entornos y la cultura de América.
Mientras el klezmer era influido por la cultura americana, ciertos compositores judíos que tuvieron éxito en la cultura dominante, como Leonard Bernstein y Aaron Copland, siguieron siendo influidos por el estilo musical klezmer que escucharon en su juventud. Muchos creen que Gershwin fue influido por el yiddish de su juventud, y que el inicio de "Rapsody in Blue" fue un homenaje al clarinete klezmer. Gran parte del estilo de clarinete de Benny Goodman puede interpretarse como derivado del género. Muchas de las melodías de Benny Goodman, aunque no eran klezmer, tenían un toque sonoro distintivo. Al mismo tiempo, compositores no judíos se interesaban en el klezmer. Dmitri Shostakovich, en particular, admiraba la música klezmer por expresar tanto la alegría como la tristeza de la vida humana, y usó varias melodías en sus obras.
¿Por qué disminuyó la popularidad del Klezmer?
Desde finales de los años 1920, la popularidad del klezmer comenzó a disminuir por varias razones. La Gran Depresión afectó a la industria discográfica, y la migración masiva de judíos de Europa oriental casi se detuvo. Esto significó que no había nuevos músicos que renovaran el repertorio, y menos público interesado en el sonido del "Viejo Mundo". La población judía establecida comenzó a integrarse culturalmente. Cada vez menos parejas pedían música de baile tradicional, que era la principal fuente de ingresos del klezmer. Las audiencias jóvenes se sentían más atraídas por las nuevas músicas de posguerra: Música latina, Jazz, Be-bop y el Rock and roll.
Artistas como Artie Shaw y Benny Goodman eran los "Reyes del Swing". Irving Berlin, aunque hablaba yiddish, escribió canciones famosas como "Blanca Navidad". La música de George Gershwin todavía tenía temas y sensibilidades judías, pero ninguno de ellos compuso ni tocó klezmer.
Las guerras mundiales y los eventos trágicos de esa época causaron una gran pérdida en las comunidades judías de Europa. Muchos músicos y sus familias desaparecieron, lo que afectó mucho la continuidad de la música klezmer en el continente. Las comunidades que habían impulsado la emigración a Estados Unidos dejaron de existir. Quienes habían emigrado se transformaban rápidamente, y a medida que se integraban, su música se "americanizaba" poco a poco.
El Estado de Israel, fundado en 1948, ofreció un nuevo hogar para los sobrevivientes y para todos los judíos del mundo. El joven Estado buscaba una nueva cultura e identidad nacional. El deseo era romper con el pasado, con Europa y con la diáspora, y construir una nueva sociedad. El idioma yiddish y la música klezmer quedaron en el olvido, porque allí eran un símbolo de un período oscuro. Después de la Segunda Guerra Mundial, la integración cultural y el sionismo entre los judíos norteamericanos hicieron que la música klezmer se desvaneciera. Las canciones y bailes israelíes se hicieron populares. Estaba surgiendo una nueva música popular hebrea, un folclore nuevo, enérgico y orgulloso, mientras el klezmer estaba en un estado de letargo, despertando solo en algunas bodas y bar mitzvahs.
Después de los años 1940, la música klezmer casi había desaparecido, devastada en Europa por la pérdida de tantos músicos judíos, e incapaz de competir con la música folclórica israelí emergente. El klezmer quedó relegado a la nostalgia.
En 1941, Brandwein grabó su última sesión. Esto marcó el inicio del fin de una era para el klezmer. Una nueva generación había crecido en el continente, más interesada en el jazz que en el klezmer, y hablando más inglés que yiddish.
Para la Segunda Guerra Mundial, la mayoría de las emisoras de radio yiddish habían cerrado, y el teatro yiddish estaba en declive. Durante la guerra, las comunidades judías de Europa Oriental fueron muy afectadas, lo que puso fin a la música klezmer en Polonia. Además, la profesión y el género klezmer serían reprimidos en los países controlados por la Unión Soviética. Parecía que el klezmer dejaría de existir.
Años 1950
Sin embargo, el klezmer tradicional no desapareció del todo. Sam Musiker tocaba en Estados Unidos durante el período de posguerra, una mezcla de klezmer y jazz, un "klezmer americanizado". Se convirtió en el yerno de Dave Tarras y lo convenció de grabar el disco ‘Tantz’ en 1956. Abe Schwartz siguió tocando en los Hoteles de Catskill después de la guerra, al igual que Tarras, tocando para ocasiones festivas. Muchas bandas de jazz importantes actuaron con Tarras en estos eventos. Otros grupos satisfacían la necesidad de música en las comunidades judías, interpretando principalmente jazz y pop moderno para fiestas. Algunos teatros yiddish continuaron en Nueva York y otras partes de América y Europa, pero el número de hablantes de yiddish disminuía constantemente.
Al mismo tiempo, los grupos jasídicos establecidos en lugares como Brooklyn, Nueva York, continuaron hablando yiddish, practicando la religión y manteniendo la cultura folclórica yiddish (ligeramente americanizada pero no integrada). Su música adoptó los teclados y bajos eléctricos, pero continuaron el estilo klezmer con adiciones de melodías religiosas y sonidos de Oriente Medio.
Años 1960
Para los años 1960, la música klezmer tradicional solo sobrevivía en las comunidades jasídicas y en los recuerdos de la generación mayor. Mientras tanto, muchos músicos judíos tocaban en la música dominante, ya fuera clásica, jazz, pop, rock, música para cine o teatro. Hubo un crecimiento en la popularidad del baile folclórico israelí. Se establecieron varios grupos de danza folclórica, y era una actividad popular entre los grupos juveniles.
En estos años, se destacó un artista judío, Mickey Katz, que se hizo popular en los 60 con sus presentaciones y discos. Era conocido por sus rutinas cómicas en yinglish (una mezcla de yiddish e inglés) que incluían parodias de canciones estadounidenses. También era disc jockey en la radio y grabó álbumes instrumentales.
¿Cómo resurgió el Klezmer?
El término "renacimiento" del klezmer puede no ser el más adecuado, porque implica que la música murió. En realidad, el klezmer nunca murió, solo estuvo en un estado de "hibernación", esperando mejores tiempos. Hay diferentes opiniones, algunos dicen que el klezmer fue "revivido" o "re-energizado".
Años 1970
A finales de la década de 1970, hubo un resurgimiento del klezmer, gracias a músicos de clásica, jazz, folk o pop, entre otros. Destacan Giora Feidman, Zev Feldman, Andy Statman, Henry Sapoznik (Kapelye) y Hankus Netsky (The Klezmer Conservatory Band). Ellos tomaron parte de sus repertorios de grabaciones antiguas y de los músicos klezmer que aún vivían en Estados Unidos.
Estos músicos formaron nuevas bandas y fortalecieron el resurgimiento del klezmer. Se convenció a Tarras para que interpretara y grabara su álbum de 1979 ‘Master of the Clarinet’. The Klezmer Conservatory Band (KCB), de Boston, fundada por Hankus Netsky, se convirtió en un lugar de formación para algunos klezmorim de la nueva generación, que luego formaron sus propias bandas.
En Latinoamérica, el argentino Giora Feidman, músico de cuarta generación de una familia de klezmorim, fue el primero en llevar la música klezmer a un nuevo público. Sintió la necesidad de pasar de la música clásica al klezmer para dedicar su talento a su revitalización. Su primer álbum Jewish Soul Music (1972), es un hito en el resurgimiento del klezmer. Mientras Giora Feidman extraía la esencia, jóvenes artistas como Andy Statman, Henry Sapoznik y Hankus Netsky buscaban una especie de autenticidad histórica, escuchando todo el repertorio grabado en discos antiguos y creando el "neo-klezmer".
En Estados Unidos, paralelamente, jóvenes músicos encontraron un nuevo interés por la música de sus antepasados. Hubo un movimiento para descubrir las raíces, no solo entre los judíos. El libro de Alex Haley y las series televisivas “Raíces” jugaron un papel importante en el interés por la historia familiar. Las diversas minorías, incluyendo a los judíos, reclamaron su parte de la herencia histórica y cultural. Así, el resurgimiento del klezmer es una consecuencia directa de la búsqueda de identidad cultural en un lugar diverso y lleno de inmigrantes.
Hubo un interés general en la música folclórica. Algunos investigadores encontraron grabaciones de música klezmer en el YIVO, el Institute for Jewish Research, en Nueva York. Su interés creció, encontraron klezmorim sobrevivientes y fueron a tocar y aprender de ellos.
Otros músicos de California, como Michael Alpert y Stuart Brotman, también redescubrieron los viejos discos de klezmer. Mientras tanto, en la costa este, Hankus Netsky había comenzado su banda klezmer experimental KCB, y Alpert se unió a Sapoznik y otros para formar Kapelye.
Andy Statman fue otro de los pioneros que abrió el camino para el resurgimiento del género. Se dio cuenta de que "ya nadie más estaba tocando klezmer" y quiso "mantenerlo vivo". Conoció a Dave Tarras, uno de los mejores clarinetistas de la generación de la migración, quien se convirtió en su maestro y le dejó su repertorio. Su primer álbum “Jewish klezmer Music” (1977), con Zev Feldman, es una joya.
También en 1977, se lanzó el álbum ‘East Side Wedding’, la primera grabación en vinilo de The Klezmorim, un grupo de Berkeley, California. Los miembros del grupo venían del jazz clásico y del folk. Su objetivo era recrear las orquestas klezmer que grabaron a principios del siglo XX.
La revitalización del klezmer creció rápidamente, atrayendo a músicos que antes tocaban jazz, bluegrass, country y otros estilos. La KCB, en particular, siempre estuvo abierta a músicos de todos los orígenes. Esta nueva diversidad hizo que cada banda tuviera un estilo distinto dentro del klezmer. La KCB se inclinó hacia arreglos para un grupo grande, recordando algunos de los primeros discos. Kapelye acentuó más las raíces de Europa Oriental, y Feldman y Statman intentaron lograr el sonido del siglo XIX. Pero todos sacaron un repertorio que iba más allá de las melodías de baile. Las canciones alegres de la música "pop judío-americano" de principios del siglo XX atrajeron mucho al público.
Años 1980
Poco después, en los años 1980, ocurrió un segundo resurgimiento a medida que crecía el interés en interpretaciones más tradicionales con instrumentos de cuerda, en gran parte con personas no judías de Estados Unidos y Alemania. Los músicos comenzaron a prestar atención a las tradiciones "originales" anteriores al jazz. Otros, como Josh Horowitz, Yale Strom y Bob Cohen, pasaron años investigando en Europa central y oriental. Además, comenzaron a buscar el viejo klezmer europeo escuchando grabaciones, encontrando transcripciones e investigando a los pocos klezmorim que quedaban en Europa oriental. Artistas clave en este estilo son Joel Rubin, Budowitz y Khevrisa. Otros artistas como Yale Strom usaron su investigación como base para fusionar el repertorio tradicional con composiciones originales, e incorporar elementos musicales gitanos al estilo judío. Grupos como Brave Old World y The Klezmatics también surgieron durante este período.
En 1984 se fundó en Estados Unidos el Yiddish Folk Art Institute, y al año siguiente fue la sede del primer Klezkamp, un festival de música, idioma, baile, canto, historia y poesía yiddish. Esto llevó al desarrollo de eventos similares en América y Europa. Estos eventos han sido muy importantes para el resurgimiento del klezmer. En 1985, Henry Sapoznik y Adrienne Cooper fundaron KlezKamp para enseñar klezmer y otra música yiddish. En Europa, Giora Feidman dejó la Filarmónica israelí y comenzó una nueva carrera tocando música klezmer, ganando nuevas audiencias y teniendo un gran impacto en Alemania con su actuación como clarinetista klezmer en una obra sobre el gueto de Vilna. Sus talleres en Alemania y Suiza inspiraron a una nueva generación de klezmorim en Europa. Este resurgimiento europeo fue impulsado, además, por grupos klezmer de Estados Unidos que iban de gira por Europa.
En Inglaterra, una de las primeras señales del resurgimiento fue un concierto klezmer en 1987. Esto fue seguido por una serie de talleres locales para jóvenes y adultos. Dentro de Europa, después de la Segunda Guerra Mundial, algunos elementos de la música klezmer persistieron solo en aquellas partes de la Unión Soviética que habían estado bajo ocupación rumana, y donde una población judía considerable que hablaba yiddish sobrevivió a la guerra. La música klezmer reapareció en la ex-Unión Soviética, Polonia y otros lugares de Europa gracias al impacto de los artistas americanos después de 1989.
Años 1990 y siglo XXI
Poco a poco, esta vitalidad del klezmer se extendió al mercado musical general. La nueva ola de desarrollo del klezmer tomó direcciones inesperadas. Una fue la exportación de bandas a Europa, llevando una música que era europea de regreso a sus orígenes y teniendo un gran impacto, especialmente en Alemania. Otra dirección llevó la idea del klezmer a la escena musical experimental en el centro de Nueva York. Frank London, también de la primera generación de la KCB, se unió a otras estrellas para formar The Klezmatics, una de las bandas más influyentes de la segunda ola. Michael Alpert pasó de Kapelye a Brave Old World, otro grupo innovador. Andy Statman decidió conectar con la religión, de forma pionera, personal y musical.
El klezmer también se vio envuelto en la tendencia de la "World Music", creada por la industria discográfica. Mientras tanto, el crecimiento de estructuras colectivas como Klezkamp, que comenzó en 1985, ayudó a establecer los descubrimientos y el estilo de los pioneros del resurgimiento del klezmer.
A principios de 1900, bandas como The Burning Bush y The Klezmer Festival Band tuvieron éxito en conciertos, radio y televisión. Los músicos del área de la bahía de San Francisco también contribuyeron a revivir el interés en la música klezmer, llevándola a nuevos territorios. El clarinetista Ben Goldberg tocó en grupos klezmer establecidos y formó el aclamado New Klezmer Trio. Este trío abrió la puerta a experimentos con música ashkenazi y allanó el camino para otros proyectos. The New Orleans Klezmer All Stars también se formó en 1991 con una mezcla de funk de Nueva Orleans, jazz y estilos klezmer.
El interés por el klezmer fue preservado y apoyado por músicos de jazz de vanguardia como John Zorn y Don Byron, quienes a veces mezclan klezmer con jazz. Las melodías klezmer han sido incorporadas recientemente en canciones por la banda Ska Streetlight Manifesto. De igual forma, nuevos grupos han hecho innumerables experimentos de fusión con géneros tan diversos como el techno y el rock metal. Esta música es ahora más popular que nunca, siendo interpretada y llevada en nuevas direcciones por grupos en todo el mundo.
La Jewish Music Distribution se convirtió en una fuente útil de grabaciones y libros. El Jewish Music Institute (JMI) se fundó en la Escuela de Estudios Orientales y Africanos de la Universidad de Londres. Merlin Shepherd lideró la enseñanza del klezmer de forma tradicional en talleres y en el primer Klezfest del JMI en Londres en 2001. Los Klezfests anuales de Londres son una oportunidad para aprender klezmer, baile, idioma yiddish, canto y cultura, y para escuchar a los mejores músicos de todo el mundo.
A principios de 2008, el proyecto "Los Otros Europeos", fundado por varias instituciones culturales de la UE, investigó las raíces klezmer y lăutari en Moldavia. Buscaban fusionar la música de estos dos grupos. La banda resultante ahora se presenta internacionalmente. Al igual que este grupo, bandas como Di Naye Kapelye y Yale Stom & Hot Pstromi han incorporado músicos y elementos gitanos desde sus inicios.
Yale Strom describe a la nueva generación de klezmorim como ba’ale kulturniks (señores de cultura), que regresan a la cultura y la transmiten a otros. Strom esquematiza cinco olas o generaciones de klezmorim en Estados Unidos y América en general. La primera nació y se educó en Europa Oriental antes de la Segunda Guerra. La segunda nació en Estados Unidos o emigró joven, y su música refleja la influencia del swing. La tercera aprendió de las dos anteriores en los años 70. La cuarta comenzó a tocar en los años 80, aprendiendo de las tres anteriores pero ampliando las fronteras musicales. La quinta comenzó a tocar en los años 90, aprendiendo de la tercera y cuarta generación, con la ayuda de muchos recursos desarrollados en los veinte años previos.
Las últimas dos décadas han visto el crecimiento de bandas que interpretan y graban una amplia variedad de música klezmer. Algunas intentan recrear el sonido de los klezmorim de finales del siglo XIX, otras muestran influencias del jazz, rock y otras tradiciones musicales. Algunas incluyen música sefardí y canciones en ladino, otras incluyen canciones yiddish (tradicionales y nuevas). La música klezmer se escucha en películas y teatros, así como en radio y televisión. Se toca de nuevo en bodas, barmitzvahs y otras celebraciones. Con el tiempo, la música klezmer se convirtió en una forma para los judíos no religiosos de identificarse con su pasado.
Se pueden distinguir tres corrientes en la música klezmer: los músicos centrales (The Epstein Brothers, The Maxwell Street Klezmer Band) tocan principalmente en eventos religiosos, como bodas y otros festivales judíos. Otros músicos tradicionales (Joel Rubin, Andy Statman, Di Naye Kapelye o Budowitz) buscan actualizar el sonido y los arreglos del pasado. Pero para la mayoría de los klezmorim contemporáneos, el escenario está abierto para expresar su propio estilo, compartir ideas artísticas y tocar sus propias composiciones, aceptando influencias de todas las tendencias actuales como el jazz, jazz libre, música pop, Rock and Roll y otros tipos de música étnica: india, bhangra, árabe, celta, etc. Como en siglos pasados, algunas bandas klezmer usan sus canciones yiddish para expresar sus preocupaciones sociales y culturales.
En España destacan Barrunto Bellota Band y Trivium Klezmer. También se puede conocer a Itzhak Perlman.
¿Cómo suena el Klezmer?
El klezmer es fácil de reconocer por sus melodías expresivas, que recuerdan a la voz humana, llenas de risas y lamentos. Esto no es una coincidencia; el estilo intenta imitar el canto del jazan o los cantos religiosos. Para lograr este estilo, se usan una serie de dreydlekh (giros, adornos musicales), como krekhts (imitación de gemidos o suspiros).
El klezmer también toma de la tradición musical jasídica e incorpora sonidos, instrumentos y formas de tocar de los países donde vivían los judíos de la diáspora. La influencia rumana es quizás la más fuerte y duradera de los estilos musicales que influyeron en los músicos klezmer tradicionales. Ellos escuchaban y adaptaban la música tradicional rumana, lo que se refleja en las formas de baile que se encuentran en el repertorio klezmer (por ejemplo, Horas, Doinas, Sirbas y Bulgars).
Galería de imágenes
Véase también
En inglés: Klezmer Facts for Kids