Isabel I de Castilla para niños

Datos para niños Isabel I de Castilla
Reina de Castilla Reina consorte de Aragón, Valencia, Mallorca, Nápoles, Sicilia, Cerdeña y condesa consorte de Barcelona
Isabel la Católica, por Juan de Flandes (c. 1500). Óleo, 63 × 55 cm, Palacio Real de Madrid.
Reina de Castilla junto a Fernando V desde 1475
13 de diciembre de 1474-26 de noviembre de 1504
Predecesor	Enrique IV
Sucesor	Juana I
Reina consorte de Aragón, Valencia, Mallorca, Cerdeña y condesa consorte de Barcelona
20 de enero de 1479-26 de noviembre de 1504
Predecesor	Juana Enríquez
Sucesor	Germana de Foix
Otros títulos Reina consorte de Sicilia 19 de octubre de 1469-26 de noviembre de 1504 Predecesor Juana Enríquez Sucesor Germana de Foix Reina consorte de Nápoles 31 de marzo de 1504-26 de noviembre de 1504 Predecesor Ana de Bretaña Sucesor Germana de Foix
Información personal
Coronación	13 de diciembre de 1474 en la iglesia de San Miguel de Segovia
Nacimiento	22 de abril de 1451 Madrigal de las Altas Torres, Corona de Castilla
Fallecimiento	26 de noviembre de 1504 (53 años) Medina del Campo, Corona de Castilla
Sepultura	Capilla Real de Granada
Religión	Católica
Familia
Casa real	Trastámara
Padre	Juan II de Castilla
Madre	Isabel de Portugal
Consorte	Fernando II de Aragón
Hijos	Véase descendencia
Firma
Escudo de Isabel I de Castilla

Isabel I de Castilla (Madrigal de las Altas Torres, 22 de abril de 1451-Medina del Campo, 26 de noviembre de 1504) fue reina de Castilla desde 1474 hasta 1504, reina consorte de Sicilia desde 1469 y de Aragón desde 1479, por su matrimonio con Fernando de Aragón. También ejerció como señora de Vizcaya. Se conoce también como Isabel la Católica, título que le fue otorgado a ella y a su marido por el papa Alejandro VI mediante la bula Si convenit, el 19 de diciembre de 1496. Es por lo que se conoce al matrimonio real con el nombre de Reyes Católicos, título que usarían en adelante prácticamente todos los reyes de España.

Isabel I se casó con Fernando de Aragón el 19 de octubre de 1469. Necesitaron una bula papal especial para casarse porque eran primos segundos, y finalmente la obtuvieron en 1472. Juntos, conquistaron el Reino de Granada y formaron alianzas matrimoniales que permitieron que su nieto, Carlos, heredara los tronos de Castilla y Aragón, entre otros. Isabel y Fernando lucharon por el trono de Castilla, primero contra Enrique IV y luego en la Guerra de Sucesión Castellana contra Juana la Beltraneja.

Isabel reorganizó el gobierno y la administración, centralizando el poder que antes tenían los nobles. También realizó reformas en seguridad ciudadana y economía. Apoyó a Cristóbal Colón en su búsqueda de las Indias Occidentales, lo que llevó al descubrimiento de América y la creación del Imperio español. Isabel gobernó durante treinta años como reina de Castilla y veintiséis como reina consorte de Aragón al lado de Fernando II.

Hoy en día, la Iglesia católica la considera "sierva de Dios," y su proceso de beatificación está en marcha.

Biografía

Infanta de Castilla

Nacimiento

Actual monasterio de Nuestra Señora de Gracia, lugar de nacimiento de Isabel la Católica, en la localidad de Madrigal de las Altas Torres.

Juan II de Castilla

Isabel de Castilla nació el 22 de abril de 1451, un jueves santo, a las 4:30 de la tarde. Sus padres eran el rey Juan II de Castilla y su segunda esposa, Isabel de Portugal. Sus abuelos eran los reyes de Castilla, Enrique III y Catalina de Lancaster, y el infante Juan de Portugal y su esposa Isabel de Barcelos.

Isabel nació en Madrigal de las Altas Torres, en el palacio que ahora es el monasterio de Nuestra Señora de Gracia. Fue bautizada en la Iglesia de San Nicolás de Bari en la misma localidad. En ese momento, nadie sabía cuán importante llegaría a ser esta niña en el futuro.

La demencia de Isabel de Portugal. Cuadro atribuido al pintor barcelonés Pelegrín Clavé, en el que se muestra a la reina viuda de Castilla, Isabel de Portugal, siendo víctima de uno de sus ataques de demencia. A su lado se encuentran su hijo menor, Alfonso de Castilla (izquierda) y su hija mayor, la futura reina Isabel la Católica (derecha) junto con otros personajes de la pequeña corte que acompañaba a la familia.

Isabel de Castilla nació como infanta, que es como se llama a las princesas en España. Sin embargo, no era la heredera al trono, ya que su hermano mayor, Enrique, era el príncipe de Asturias y estaba destinado a ser el rey. Después de su nacimiento, su madre tuvo un hijo varón llamado Alfonso, lo que relegó a Isabel aún más en la línea de sucesión.

El nacimiento de Enrique y Alfonso fue celebrado, especialmente el de Alfonso, porque aseguraba la sucesión al trono. Enrique estaba casado, pero no tenía hijos, lo que preocupaba a la gente en ese momento.

En sus primeros años, Isabel vivió con sus padres mientras la nobleza luchaba por el poder en el reino. Su madre, la reina Isabel, influenció al rey para arrestar y ejecutar a un noble llamado Álvaro de Luna, que tenía mucho poder. Esto fortaleció la posición del príncipe Enrique.

Cuando el rey murió, Enrique se convirtió en rey, y Isabel quedó en un tercer lugar en la línea de sucesión. El rey dejó un testamento que regulaba quién heredaría el trono si Enrique no tenía hijos legítimos. Isabel recibió algunas propiedades, pero su hermano Alfonso recibió mucho más, incluido el maestrazgo de Santiago.

La reina Isabel también dejó la educación de Isabel y Alfonso en manos de personas religiosas importantes. En este momento, la reina comenzó a mostrar signos de desequilibrio mental debido a la muerte de su esposo.

Después de la muerte del rey, la reina Isabel y sus hijos se trasladaron a Arévalo, donde vivieron en condiciones difíciles. A pesar de las dificultades, la reina se preocupó por la educación de sus hijos y creó una pequeña corte a su alrededor. Isabel recibió una buena educación y conoció a personas que jugarían un papel importante en su vida, como Gonzalo Chacón, su preceptor, y Beatriz de Bobadilla, su amiga. También conoció a otras figuras influyentes en su vida, como Gutierre de Cárdenas y fray Martín Alonso de Córdoba.

Esta etapa en Arévalo fue un momento importante en la vida de Isabel, ya que allí recibió educación y conoció a personas que más tarde desempeñarían un papel crucial en su reinado.

Enrique IV de Castilla

En 1461 y 1462, Isabel y su hermano Alfonso fueron llevados a la Corte, donde vivió en un lugar entre Segovia y Madrid. El rey Enrique IV quería mantenerlos cerca para controlarlos, ya que la sucesión al trono estaba cambiando y temía que fueran utilizados en su contra.

En la Corte de Enrique IV, la nobleza estaba dividida en dos grupos, con diferentes consejeros que luchaban por el poder. Había quienes apoyaban al rey y otros que querían más poder para la nobleza. Esta división creó tensiones en la Corte.

El rey Enrique IV tenía problemas para tener un heredero y se le llamó "el impotente" debido a la falta de descendencia después de muchos años de matrimonio. En un intento por tener un heredero, se casó con Juana de Portugal, pero después de 13 años de matrimonio, decidieron anular el matrimonio con Blanca de Navarra debido a la falta de hijos.

Juana de Portugal se dio cuenta de las tensiones y ambiciones de algunos nobles y de la debilidad de su esposo, por lo que mantuvo cerca a Isabel y Alfonso para protegerlos. Mientras tanto, el rey Enrique otorgó tierras y títulos a "hombres nuevos" en la corte, lo que molestó a algunos nobles poderosos.

En 1462, Juana de Portugal dio a luz a una hija llamada Juana la Beltraneja, lo que desató rumores sobre la paternidad del rey, ya que habían pasado muchos años sin que tuviera un heredero. Algunos creían que la niña era hija del valido del rey, Beltrán de la Cueva.

Isabel ejerció como madrina de bautismo de la niña, que fue jurada heredera por las Cortes, lo que la colocó en tercer lugar en la línea de sucesión. Sin embargo, algunos nobles cuestionaron la legitimidad de Juana como heredera y firmaron un manifiesto de quejas contra el rey.

Esto llevó a una revuelta de nobles en 1464, que firmaron un manifiesto acusando al rey de varios problemas y desafiando la legitimidad de Juana. Enrique IV llegó a un acuerdo con los sublevados, reconociendo a Alfonso como heredero y comprometiéndolo con Juana, aunque ella fue considerada ilegítima sin especificar las razones. Esto creó tensiones en la Corte y llevó a un acuerdo intermedio en el Pacto de Cigales.

Moneda acuñada en nombre de Alfonso XII

Una vez resuelto quién sería el heredero, los nobles promulgaron la Sentencia de Medina del Campo. Esto permitió a Isabel mudarse de la Corte y vivir por su cuenta, mejorando su situación financiera con las rentas de Casarrubios del Monte. Sin embargo, esta sentencia también incluyó cláusulas que otorgaban a los nobles un gran poder político, como la creación de un Consejo Real que debía aprobar todas las decisiones del rey. Esto igualaba el poder de la nobleza con el del rey, lo que no le gustó a Enrique IV.

El rey consideró el matrimonio de Isabel con Alfonso V de Portugal, pero ella rechazó esta idea debido a la gran diferencia de edad entre ellos. Mientras tanto, un grupo de nobles llamó "tirano" a Enrique IV y pretendieron reemplazarlo por su hermanastro, el infante Alfonso. Esto llevó a la "farsa de Ávila" en 1465, donde construyeron una plataforma y humillaron un muñeco que representaba al rey. Luego proclamaron a Alfonso como rey.

La situación era complicada, y el papa apoyó a Enrique IV, pero la mayoría de las ciudades y la nobleza se mantuvieron del lado del rey. Algunos nobles que se habían rebelado se acercaron a Enrique en busca de un acuerdo, y a cambio exigieron que Isabel se casara con Pedro Girón, el hermano de uno de los nobles. Sin embargo, Girón murió repentinamente, posiblemente envenenado.

A pesar de las presiones de los nobles, Isabel se negó a proclamarse reina mientras Enrique IV estuviera vivo. En cambio, logró que él le otorgara el título de princesa de Asturias, convirtiéndola en heredera al trono. Isabel se mudó a Ocaña, propiedad de Juan Pacheco, un noble poderoso. Mientras tanto, el rey buscó alianzas matrimoniales con otras casas reales.

Armas combinadas de los Reyes Católicos

Isabel usó el símbolo del águila de San Juan con un halo a partir de 1473, incluso cuando todavía era princesa. Su esposo, Fernando, tenía un emblema personal que representaba un nudo, lo que significaba que desatar o cortar el nudo tenía el mismo efecto, haciendo referencia al nudo gordiano. El lema "Tanto monta" expresaba esto. La divisa de Isabel era un haz de flechas. Después de su unión, estos símbolos se fusionaron en el escudo de armas conjunto.

Desde que tenía tres años, Isabel estuvo comprometida con Fernando, el hijo de Juan II de Aragón. Sin embargo, Enrique IV rompió este compromiso y la comprometió con Carlos, príncipe de Viana. Este matrimonio no se llevó a cabo debido a la oposición de Juan II de Aragón. Enrique también intentó casar a Isabel con Alfonso V de Portugal, pero ella lo rechazó debido a la gran diferencia de edad.

Isabel fue prometida más tarde a Pedro Girón, un hombre mucho mayor que ella. Sin embargo, Girón murió repentinamente antes de que se llevara a cabo el matrimonio.

En 1468, Isabel fue proclamada princesa de Asturias, revocando el nombramiento anterior de su sobrina Juana. Luego, Enrique IV intentó casarla con Alfonso V de Portugal nuevamente, pero ella se negó. También intentó que se casara con el duque de Guyena, hermano de Luis XI de Francia, pero Isabel también rechazó esta propuesta.

Juan II de Aragón trató de negociar en secreto un matrimonio entre Isabel y su hijo Fernando. Aunque eran primos segundos y necesitaban una bula papal para casarse, el Papa no firmó el documento por temor a las consecuencias negativas que esto podría tener con Castilla, Portugal y Francia.

Documento firmado por los Reyes Católicos.

Isabel y Fernando se casaron en 1469, y se dice que hubo una bula falsa del papa Pío II que les permitía casarse a pesar de ser parientes. Se casaron en secreto en 1469 en Valladolid. Este matrimonio causó conflictos con su hermanastro, el rey.

Después de la muerte de Enrique IV, Isabel se proclamó reina de Castilla en 1474 en Segovia. Esto desencadenó una guerra de sucesión entre sus partidarios y los de su sobrina Juana. El Tratado de Alcaçovas puso fin a la guerra y reconoció a Isabel y Fernando como reyes de Castilla.

Isabel instruyó a sus hijos y los llevó con ella en campañas militares. Hubo un motín en Segovia en 1476, y ella cabalgó 60 kilómetros para calmar la situación. Durante las campañas militares de Fernando, Isabel estuvo en la retaguardia, acompañada de sus hijos. Su ayuda fue crucial en la victoria castellano-aragonesa en la guerra de Granada. Isabel también fue pionera en la atención médica en el campo de batalla al llevar personal médico y ayudantes para atender a los heridos.

Retrato anónimo de Isabel la Católica hacia 1490. Museo del Prado.

Isabel creyó en los proyectos de Cristóbal Colón, a pesar de las críticas y problemas políticos. Durante su reinado con Fernando, establecieron la Santa Inquisición, la Santa Hermandad, y unificaron la religión en su reino. Obligaron a los judíos a convertirse o ser expulsados y más tarde hicieron lo mismo con los musulmanes en un proceso de reconquista.

Después del descubrimiento de América en 1492, se enfocaron en convertir a los indígenas y tratarlos justamente. Limitaron la esclavización de los indígenas y crearon la Santa Hermandad para mejorar la seguridad en el comercio.

También firmaron el Tratado de Tordesillas con Portugal en 1494 para delimitar sus áreas de influencia en el Atlántico. Durante sus campañas militares, contaron con la ayuda del Gran Capitán, Gonzalo Fernández de Córdoba, en la conquista de Granada y otras batallas.

Por sus logros, el papa les otorgó el título de "Reyes Católicos." Al final de su vida, Isabel enfrentó tragedias familiares, incluyendo la muerte de su madre, su hijo varón, su hija primogénita y su nieto. Estas desgracias la sumieron en una profunda tristeza.

Doña Isabel la Católica dictando su testamento, por Eduardo Rosales, 1864, Museo del Prado.

Isabel murió en Medina del Campo debido a una enfermedad llamada hidropesía. Antes de fallecer, pidió los últimos rituales religiosos y dejó instrucciones para su entierro. Quiso ser sepultada en el monasterio de San Francisco en la Alhambra de Granada, pero permitió que si su esposo, el rey Fernando, eligiera otro lugar en sus reinos, sus restos fueran trasladados allí. Fue inicialmente enterrada en la Alhambra en una tumba simple, como lo deseaba. Luego, sus restos y los de su esposo fueron trasladados a la Capilla Real de Granada. También descansan allí su hija Juana I, su yerno Felipe el Hermoso y otros familiares. En el museo de la Capilla Real se conservan objetos personales de Isabel, así como cuadros de famosos pintores.

Testamento y sucesión

Testamento de Isabel I.

En su testamento, Isabel la Católica dejó claro que su hija Juana sería la heredera del trono de Castilla, pero su esposo, el rey Fernando, gobernaría en su nombre hasta que su hijo Carlos cumpliera veinte años. Después de los hijos de Juana, la sucesión pasaría a su hija María y luego a Catalina.

Sin embargo, la nobleza castellana no apoyó a Fernando, y él se retiró a Aragón. El gobierno de Castilla quedó en manos de Felipe I, esposo de Juana, pero él murió poco después. Esto llevó a que Fernando fuera nuevamente nombrado regente. Juana fue encerrada en Tordesillas por su padre, quien gobernó Castilla hasta su muerte en 1516. Luego, Carlos, hijo de Juana y nieto de Isabel y Fernando, asumió el trono.

Isabel también pidió a sus sucesores que continuaran la reconquista en el norte de África y que convirtieran a los habitantes de América al cristianismo y los trataran justamente.

Su testamento original se guarda en el Real Monasterio de Santa María de Guadalupe, y copias se encuentran en otros lugares, como el monasterio de la Alhambra de Granada y la catedral de Toledo. En 1864, el pintor Eduardo Rosales representó el momento en que la reina dictó su testamento en un famoso cuadro llamado "Doña Isabel la Católica dictando su testamento".

Posteridad

Billete español de 1957 con los retratos y el escudo de los reyes Isabel y Fernando.

Durante los siglos XVI y XVII, la figura de Isabel fue menos destacada en la historia que la de su esposo, el rey Fernando. A principios del siglo XIX, se escribió un elogio de la Reina Católica que enfocaba más en Isabel que en Fernando. En 1815, el rey Fernando VII creó la Orden de Isabel la Católica, una condecoración importante que aún se otorga en España. En el siglo XIX, los liberales y los románticos españoles tuvieron una visión positiva de los Reyes Católicos, considerándolos los últimos monarcas nacionales. Durante la dictadura de Francisco Franco a partir de 1938, se usaron la figura y los símbolos de Isabel la Católica en la propaganda franquista.

En 1952 se publicó por primera vez la bula "Si convenit," que otorgaba a Isabel y Fernando el título de "católicos." En 1958, el arzobispo de Valladolid inició el proceso de beatificación de Isabel. Sin embargo, ha habido controversias y disputas sobre este proceso, con acusaciones de que se eliminaron documentos históricos que podrían poner en duda la legitimidad de Isabel como reina. Algunos defensores de la beatificación culpan a un supuesto grupo de presión judío por la falta de progreso en el proceso de beatificación.

Descendencia

Isabel tuvo al menos siete hijos con Fernando. Sus hijos fueron:

1. Isabel, quien se convirtió en reina de Portugal y murió durante el parto de su primer hijo. 2. Juan, que se casó con Margarita de Austria, pero murió joven debido a la tuberculosis. 3. Juana, conocida como Juana la Loca, fue reina de Castilla y se casó con Felipe el Hermoso de Habsburgo. Tuvieron un hijo, Carlos I, quien se convirtió en emperador del Sacro Imperio Romano Germánico. 4. María, que se casó con Manuel I de Portugal y fue madre de varios hijos, incluido Juan III de Portugal. 5. Catalina, que se casó primero con Arturo de Gales y luego con Enrique VIII de Inglaterra. Se convirtió en reina de Inglaterra y fue madre de María I de Inglaterra.

Ancestros

Títulos

Predecesor: Alfonso de Castilla	Princesa de Asturias 1468-1470/1474 (en paralelo con Juana de Castilla entre 1470 y 1474)	Sucesora: Isabel de Aragón
Predecesor: Juana Enríquez	Reina consorte de Sicilia 1469-1504	Sucesora: Germana de Foix
Predecesor: Enrique IV	Reina de Castilla 1474-1504 (junto a Fernando V desde 1475)	Sucesora: Juana I
Predecesor: Boabdil	Reina de Granada 1492-1504	Sucesora: Juana I
Predecesora: Juana Enríquez	Reina consorte de Aragón 1479-1504	Sucesora: Germana de Foix
Predecesora: Ana de Bretaña	Reina consorte de Nápoles 1504	Sucesora: Germana de Foix

Semblanza de la reina

Imagen de Isabel de Castilla en el Conquistato de Granada, de 1482, por Pedro Marcuello.

Los cronistas contemporáneos hablaban muy elogiosamente de Isabel. La describían como una mujer de virtudes admirables. Pedro Mártir de Anglería la alababa por su valentía, constancia y pureza. Hernando del Pulgar la consideraba una mujer de buenas costumbres y autodominio. Lucio Marineo Sículo la elogiaba por su fortaleza, inteligencia y cortesía. Andrés Bernáldez la describía como esforzada, poderosa, sabia, casta y devota. Gonzalo Fernández de Oviedo la admiraba por su elocuencia. Varios otros cronistas la elogiaban por su prudencia, humanidad y bondad.

En cuanto a su apariencia, Isabel tenía la piel muy clara, ojos azul verdoso y cabello entre rojizo-dorado y cobrizo. Estas características físicas eran compartidas por algunas de sus hijas, especialmente Catalina.

Frases célebres

• "Lo que España ha unido, que no lo separe el hombre."
• "Abrid escuelas y se cerrarán cárceles."
• "No entiendo por qué se admiran tanto de lo que he hecho en el descubrimiento del Nuevo Mundo, si yo, no siendo más que una mujer, y tan joven, he hecho lo que ningún hombre de todos los que han nacido en el mundo."
• "De tal manera que no más porque yo lo dije, no lo queráis creer, antes por vosotros mismos y vuestros consejos y deliberaciones lo considerad y tomed consejo, porque mejor ordenado y determinado será lo que se asentare y finalmente más duradero."

Datos de interés

• Su matrimonio con Fernando de Aragón en 1469 fue un hecho crucial en la historia de España. Esta unión de dos poderosos reinos, Castilla y Aragón, allanó el camino para la unificación de España como nación.

• A pesar de las restricciones de género en la época, Isabel recibió una educación excepcional. Hablaba latín, francés y portugués, además de su lengua materna, el castellano.

• Isabel I financió el primer viaje de Cristóbal Colón en 1492, que llevó al descubrimiento de América. Esta decisión marcó el inicio de la Era de los Descubrimientos.

• En 1492, Isabel y Fernando emitieron el Edicto de Granada, que ordenó la expulsión de los judíos de España. Esto marcó un triste capítulo en la historia de la tolerancia religiosa en la región.

• Durante su reinado, se estableció la Inquisición Española en 1478. Su intención era mantener la ortodoxia religiosa, pero a lo largo del tiempo se convirtió en una institución infame por sus métodos represivos.

• Además de financiar el viaje de Colón, Isabel I también apoyó a otros exploradores, como Américo Vespucio. Esto contribuyó significativamente a la exploración y expansión en el Nuevo Mundo.

• Isabel I sufrió la pérdida de su único hijo varón, el príncipe Juan, lo que creó incertidumbre sobre la sucesión. Su hija, Juana la Loca, eventualmente heredó el trono.

• Isabel I y Fernando de Aragón cofundaron la Universidad de Alcalá en 1499, que se convirtió en un importante centro de aprendizaje durante el Renacimiento español.

• Isabel I también fue reina de Sicilia, Nápoles y Cerdeña, lo que resalta su influencia en las posesiones de la Corona de Aragón.

Galería de imágenes

• 

  Maqueta del palacio de Juan II, residencia de Isabel en sus primeros años, junto a su madre y hermano

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  Gonzalo Chacón en un retrato imaginativo de 1556.

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  Tumba de Alfonso de Castilla, hermano de Isabel la Católica, en la Cartuja de Miraflores, realizadas por Gil de Siloé, s. XV

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  Muralla de Ávila, junto a la que tuvo lugar la farsa de Ávila

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  Isabel I de Castilla representada en el cuadro llamado la Virgen de la mosca, que se encuentra en la sacristía de la colegiata de Toro, en la provincia de Zamora.

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  Proclamación de Isabel la Católica en Segovia. F. de P. Van Halen, dibº, litº y pintó.

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  Retrato de la reina Isabel (Casa de los Tiros, Granada)

• 

  La rendición de Granada, por Francisco Pradilla (1882). Palacio del Senado, Madrid.

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  Reina de Castilla

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  Reina consorte de Aragón

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  Estatua ecuestre en el paseo de la Castellana de Madrid

Véase también

En inglés: Isabella I of Castile Facts for Kids

• Tabla cronológica de Reinos Hispánicos
• Orden de Isabel la Católica
• Escudo de los Reyes Católicos
• Anexo:Isabel I de Castilla en el cine y la televisión