Colonización agraria en Andalucía para niños
La colonización agraria en Andalucía fue un proyecto importante llevado a cabo por el Estado en España. Consistió en establecer a agricultores en terrenos que antes eran de secano (que dependían solo de la lluvia) y que se transformaban en regadío (con sistemas de riego). A estos agricultores se les daban parcelas de tierra para cultivar y viviendas construidas por el gobierno.
Este proceso ocurrió principalmente durante un periodo de gobierno específico en España, a través de una institución llamada Instituto Nacional de Colonización (INC), que se creó el 18 de octubre de 1939.
Algunos expertos creen que esta política tuvo sus orígenes en leyes anteriores, como la Ley de Colonización y Repoblación Interior de 1907 y la Ley de Obras de Puesta en Riego de 1932, que fue durante la Segunda República Española.
Contenido
¿Cómo se organizó la colonización agraria?
El Instituto Nacional de Colonización (INC)
El principal objetivo del Instituto Nacional de Colonización (INC) era mejorar la producción agrícola. Esto se lograba transformando tierras de secano en regadío y asentando a familias de agricultores, llamados colonos. La idea era que, con el tiempo, estos colonos se convirtieran en dueños de sus propias fincas.
Para regular este proceso, se crearon leyes. La primera fue la Ley de Bases para la Colonización de Grandes Zonas Regables de 1939. Esta ley estuvo vigente hasta 1949, cuando fue reemplazada por la Ley de Colonización y Distribución de la Propiedad de las Zonas Regables.
La mayor parte del trabajo del INC se realizó entre 1959 y 1971. Después de ese año, el INC fue sustituido por el Instituto de Reforma y Desarrollo Agrario (IRYDA). Esta nueva institución empezó a dejar de lado la política de crear nuevos asentamientos y se centró más en organizar mejor las parcelas de tierra existentes.
¿Qué impacto tuvo la colonización en la sociedad y la economía?
Transformación de la tierra y sus beneficios
Según el profesor Ventura Fernández, la idea principal de esta política era transformar las tierras de secano en zonas de regadío. Esto se hacía construyendo embalses (presas) y sistemas de canales para llevar el agua.
Esta transformación aumentaba mucho el valor de las tierras de cultivo. Por eso, el gobierno podía expropiar (tomar) tierras a los antiguos dueños para repartirlas entre los nuevos colonos. Sin embargo, los principales beneficiados fueron a menudo los antiguos propietarios. Aunque perdían una pequeña parte de sus tierras, generalmente las de peor calidad, la mayor parte de sus fincas se convertían en regadío y aumentaban mucho su valor.
Por ejemplo, en la provincia de Jaén, solo una cuarta parte de las tierras afectadas por la colonización se consideraron "tierras en exceso" (las que se podían expropiar para los colonos). El 40,1% de la tierra se quedó para los dueños originales, y el resto se excluyó por diferentes razones.
Creación de nuevos pueblos
Esta política también implicó la construcción de viviendas para los colonos. Al principio, se pensó en construir casas aisladas, cada una junto a su parcela. Pero esta idea no funcionó bien porque era muy caro llevar servicios básicos a estas casas y el transporte era difícil en esa época.
Por eso, se decidió crear pueblos completamente nuevos. Estos pueblos se construían cerca de las zonas agrícolas, con un diseño básico que buscaba un asentamiento por cada 20 kilómetros cuadrados. Algunos autores sugieren que también se buscaba que los colonos estuvieran un poco separados de los problemas sociales de los pueblos andaluces más antiguos, y así fomentar una forma tradicional de ver la propiedad de la tierra. En raras ocasiones, como en Espeluy, también se construyeron casas en pueblos ya existentes, como barrios nuevos.
Resultados de la política de colonización
En general, la política de colonización en Andalucía no logró un desarrollo económico duradero. También tuvo problemas sociales, ya que iba en contra de la tendencia de la gente a concentrarse en ciudades. Además, la falta de tierra adicional impedía que los nuevos pueblos crecieran. Por ejemplo, los hijos de los colonos, al crecer, no podían conseguir nuevas casas ni tierras.
En 1975, cuando esta política de asentamientos terminó, se habían construido en Andalucía 101 nuevos pueblos, con 8.622 viviendas. También se construyeron 448 viviendas dispersas. La provincia de Jaén fue la que tuvo más intervenciones, con 22 pueblos nuevos, seguida de Sevilla, con 19. Sin embargo, Sevilla superó a Jaén en el número de viviendas construidas (2.233 frente a 1.959).
¿Qué pueblos se crearon?
Aquí tienes una lista de algunos de los pueblos nuevos que se crearon:
En Andalucía Occidental
- Bembézar del Caudillo, en Hornachuelos, Córdoba.
- Mesas de Guadalora, en Hornachuelos, Córdoba.
- Céspedes, en Hornachuelos, Córdoba.
- Puebla de la Parrilla, en Hornachuelos, Córdoba.
- Rivero, en Posadas (Córdoba), Córdoba.
- El Calonge, en Palma del Río, Córdoba.
- Vegas de Almenara, en Peñaflor, Sevilla.
- La Vereda, en Peñaflor, Sevilla.
- Setefilla, en Lora del Río, Sevilla.
- Esquivel, en Alcalá del Río, Sevilla.
- Guadalcacín, en Jerez de la Frontera, Cádiz.
- Isla Mayor, en Sevilla.
- La Montiela, en Santaella, Córdoba.
- Poblado de Doña Blanca, en El Puerto de Santa María, Cádiz.
- San Ignacio del Viar, en Alcalá del Río, Sevilla.
- El Viar, en Alcalá del Río, Sevilla.
- Torre de la Reina, en Guillena, Sevilla.
- El Trobal, en Los Palacios y Villafranca, Sevilla.
- Maribáñez, en Los Palacios y Villafranca, Sevilla.
- Los Chapatales, en Los Palacios y Villafranca, Sevilla.
- Trajano, en Utrera, Sevilla.
- Pinzón, en Utrera, Sevilla.
- El Priorato, en Lora del Río, Sevilla.
- Marismillas, en Las Cabezas de San Juan.
- Vetaherrado, en Las Cabezas de San Juan.
- San Leandro, en Las Cabezas de San Juan.
En Andalucía Oriental
- Agrupación de Mogón, en Villacarrillo, Jaén.
- Agrupación de Santo Tomé (también conocida como Montiel), en Santo Tomé, Jaén.
- Arroturas, en Villacarrillo, Jaén.
- Atochares, en Níjar, Almería.
- Buenavista (también conocida como Burrianca), en Alhama de Granada, Granada.
- Campillo del Río, en Torreblascopedro, Jaén.
- Campohermoso, en Níjar, Almería.
- El Chaparral, en Albolote, Granada.
- El Donadío, en Úbeda, Jaén.
- Espeluy (ampliación), en Jaén.
- Fuensanta, en Pinos Puente, Granada.
- Guadalén, en Vilches, Jaén.
- Guadalimar, en Lupión, Jaén.
- Llanos del Sotillo, en Andújar, Jaén.
- Loreto, en Moraleda de Zafayona, Granada.
- Miraelrío, en Vilches, Jaén.
- Los Nietos, en Níjar, Almería.
- Peñuelas, en Láchar, Granada.
- Poblado San Julián, en Marmolejo, Jaén.
- Puebloblanco, en Níjar, Almería.
- Puente del Obispo, en Baeza, Jaén.
- La Quintería, en Villanueva de la Reina, Jaén.
- Romilla la Nueva, en Chauchina, Granada.
- La Ropera, en Andújar, Jaén.
- San Isidro, en Níjar, Almería.
- San Miguel, en Úbeda, Jaén.
- Solana de Torralba, en Úbeda, Jaén.
- Sotogordo, en Mancha Real, Jaén.
- Vados de Torralba, en Villatorres, Jaén.
- Valdecazorla, en Cazorla, Jaén.
- Vega Santa María, en Linares, Jaén.
- Vegas de Triana, en Andújar, Jaén.
- Veracruz, en Úbeda, Jaén.
- Villafranco del Guadalhorce, en Alhaurín el Grande, Málaga.
- Los Villares, en Andújar, Jaén.