Escarificación (incisión) para niños
La escarificación es una forma de modificación corporal que consiste en crear marcas o dibujos en la piel mediante cortes o quemaduras controladas. Estas marcas se convierten en cicatrizes permanentes que forman diseños.
En muchas culturas, la escarificación se ha usado por diferentes razones. Por ejemplo, en algunas comunidades de África, las mujeres la veían como algo hermoso, y en los hombres, como un símbolo de fuerza. También fue practicada por pueblos antiguos en América, como los mayas y huastecos. Hoy en día, algunas personas en la cultura occidental también la usan con fines decorativos.
La palabra "escarificación" viene del latín tardío scarificāre, que significa "hacer incisiones en el cuerpo". Es una técnica que puede ser dolorosa y, si no se hace con cuidado, puede causar infecciones o hemorragias. Por eso, es importante conocer los riesgos.
Aunque no es tan común como los tatuajes o las perforaciones, la escarificación ha ganado algo de popularidad en ciertos grupos y subculturas, como el punk o hippie, que la ven como una forma de expresión personal.
Contenido
Historia de la Escarificación
Desde hace mucho tiempo, la escarificación ha sido parte de las tradiciones de pueblos indígenas en América, África y Oceanía. Se usaba para recordar a los antepasados, como parte de rituales o por su significado simbólico. Se cree que esta práctica se desarrolló mucho en África Occidental y fue evolucionando con el tiempo.
Cuando los europeos comenzaron a explorar el mundo en el siglo XV, se interesaron por estas formas de arte corporal que veían en África subsahariana.
No se sabe exactamente cuándo comenzó la escarificación, pero hay registros antiguos, como manuscritos y esculturas del siglo XV y XVI, que muestran a personas con estos diseños. También se han encontrado evidencias en sitios arqueológicos que sugieren que ya en la era del Paleolítico se practicaba en diferentes partes del cuerpo.
En el antiguo Egipto, hace más de 4000 años, se usaban tanto los tatuajes como las escarificaciones. Un ejemplo es la momia de Amunet, una sacerdotisa, que tenía figuras y algunas incisiones en el abdomen. En Japón, se cree que estas prácticas se originaron en el período Jōmon (hace miles de años), como se ve en pequeñas estatuas de arcilla.
Liam Brady, un investigador de la universidad de Monash en Australia, ha estudiado cómo las tribus indígenas usaban la escarificación para interactuar socialmente. En el estrecho de Torres, encontró pinturas rupestres e imágenes de cuerpos humanos con tatuajes y cicatrices, lo que muestra que eran una forma importante de decoración corporal.
En la época prehispánica, el pueblo huasteco en Mesoamérica usaba la escarificación como parte de sus tradiciones. Una escultura famosa, la "mujer escarificada" o "venus de Tamtoc", muestra a una mujer con marcas en los hombros, pecho y muslos. Estas marcas podrían representar ciclos importantes de sus calendarios.
En muchas culturas africanas, la escarificación también podía significar éxito o haber logrado un objetivo. En América prehispánica, las modificaciones corporales como los cortes, la vestimenta y la deformación craneal artificial eran parte de un sistema de símbolos muy importante.
Las tribus africanas siempre han visto el arte corporal (tatuajes, escarificaciones y perforaciones) como un aspecto cultural central. Usaban herramientas afiladas, como hojas de piedra, para crear diseños significativos. A pesar del dolor, la escarificación se consideraba esencial para la vida social, cultural y espiritual.
El antropólogo Lars Krutak ha investigado cómo algunas tribus africanas, como los Batammariba, realizan este rito. A menudo, comienza con una ceremonia donde los chamanes deciden el patrón de los cortes. Luego, el artista corta la piel, a menudo en el rostro, y se aplican sustancias como manteca de Karité o carbón para ayudar a la curación y, en algunas creencias, para proteger.
Los maoríes y otras tribus de África también usaban esta técnica en sus rostros. Las cicatrices resultantes eran un signo de belleza y valentía para las mujeres, y ayudaban a identificar a los miembros de la comunidad. Algunas tribus de Oceanía, como los Sepik de Nueva Guinea, se cortaban la piel en honor al cocodrilo, un animal sagrado para ellos. Los "maestros escarificadores" son los encargados de realizar estas marcas, transmitiendo conocimientos ancestrales.
Se cree que muchas tribus adoptaron la escarificación porque en la piel oscura, los tatuajes con tinta no se veían tan bien, mientras que las cicatrices de la escarificación sí eran muy visibles. En general, la escarificación se puede ver como una "marca de identidad" que distingue a los miembros de un grupo.
En el pasado, era obligatoria en muchos grupos y comunidades, siendo fundamental en los roles sociales, rituales y costumbres. También se consideraba que los cortes representaban la pureza del alma y el inicio de una vida espiritual, que con el tiempo se transformaba en "fortaleza mental y maduración". Aunque es una técnica muy antigua, todavía se practica en algunas comunidades, incluso en niños pequeños, y a veces se usan plantas o carboncillo para limpiar las heridas.
Desde el punto de vista de la antropología, el estudio del cuerpo ha sido muy importante. Investigadores como Arnold van Gennep y Claude Lévi-Strauss describieron las transformaciones corporales como rituales o como un "lienzo" cultural. Terence S. Turner usó el término social skin para hablar de cómo la decoración del cuerpo es parte del estilo de vida y la cultura de un pueblo.
Según Susan Vogel Mullin, fundadora del Museum for African Art, las modificaciones corporales como tatuajes y escarificaciones siempre se vieron como "marcas de la civilización", mostrando cómo el ser humano cambia y evoluciona, y cómo establece lazos sociales y familiares.
Existen varias ideas sobre el origen de la escarificación. Algunos creen que es una práctica cultural muy antigua, mientras que otros sugieren que se desarrolló en el siglo XVIII como una forma para que las tribus identificaran a sus enemigos y aliados. Otra teoría es que se usó durante el comercio transatlántico de esclavos en los siglo XV y XVI como una forma de "protección y categorización", ya que los comerciantes de esclavos a veces se desinteresaban de las personas con muchas cicatrices. También ayudaba a los capturados a identificar a sus familiares en cautiverio. Esto hizo que las tribus africanas se unieran más y vieran la escarificación como una forma de identificación cultural.
Arte y Cultura de la Escarificación
La escarificación es una práctica cultural extendida en muchas civilizaciones. Hay varias razones por las que se ha practicado:
- Razones simbólicas y rituales: Muchas tribus africanas la usaban para clasificar a sus miembros, como un acto religioso, o para demostrar fuerza, madurez y disciplina.
- Expresión personal: Algunas personas la ven como una forma de "libertad" para "escapar de presiones sociales" o como un medio de autoexpresión y para interactuar con otros.
- Arte: Artistas y tatuadores la consideran una forma de arte corporal.
El catolicismo ha expresado que estas prácticas van en contra de sus creencias, basándose en textos bíblicos. A pesar de ser una práctica ancestral, todavía se realiza en el siglo XX y XXI en algunas tribus africanas y sudamericanas.
Escarificación en América
Los guaraníes y otras etnias sudamericanas practicaban la escarificación. Por ejemplo, los potiguaras de Brasil se escarificaban los brazos y pantorrillas con espinas de plantas o dientes de pescado para evitar el cansancio. Estas prácticas tenían significados relacionados con la purificación, la guerra, los ritos y la salud.
En el pueblo maya, los cortes eran un símbolo de éxito y valentía, representando a los guerreros. Las mujeres mayas también participaban en ceremonias y practicaban la escarificación facial. Arqueólogos han encontrado figuras de mujeres mayas con adornos faciales y modificaciones corporales como escarificaciones en los labios. Los pilagás de América del Sur se escarificaban el pecho y las piernas para adquirir cualidades de los animales.
En Venezuela, el pueblo hoti practica una técnica llamada jkawajke, donde los niños y adultos se escarifican a sí mismos, especialmente en la cara y el cuerpo. Lo hacen como una forma de curación, creyendo que la sangre tiene poder. También creen que los jkajo, que son chamanes o sabios, tienen capacidades curativas especiales.
En Paraguay, los achés se cortaban la piel como parte de un ritual llamado jaychá. Los adultos se marcaban la espalda con dibujos geométricos, y las mujeres adolescentes se hacían cortes en el vientre, lo que simbolizaba fertilidad y belleza, y se creía que brindaba protección contra espíritus malignos. La escarificación para ellos tenía tres aspectos importantes: identidad, estética y magia.
Escarificación en África
En África Oriental, el pueblo surma realiza una ceremonia llamada "donga", una lucha donde se pintan y se cortan los cuerpos para resaltar su físico. Las escarificaciones representan valentía y distinguen a quienes han ganado batallas.
Para las mujeres, tener muchas cicatrices puede significar que son capaces de soportar el dolor. En algunas tribus de Ghana, las adolescentes se hacen cortes en las manos, lo que simboliza el paso a la adultez y la preparación para ser buenas compañeras y madres. La socióloga Victoria Pitts señala que la escarificación se ha extendido y se ha convertido en un elemento que diferencia a las personas en la sociedad.
Para los Bessoribe de la República de Benín, las incisiones en los rostros de los adultos simbolizan que un bebe ha crecido y se ha convertido en niño. Los padres creen que así honran a sus antepasados y protegen a los menores. Muchos grupos africanos y americanos creen que las incisiones protegen sus vidas, ahuyentan espíritus malignos o los conectan con seres superiores.
En Abiyán, Costa de Marfil, algunas tribus practicaban una costumbre llamada "Hââbré", que consistía en cortes intensos en el rostro. Aunque ahora está en desuso por considerarse peligrosa, la fotógrafa Joana Choumali la describe como un "documento de identidad" que revela el origen y la pertenencia de una persona a una comunidad.
Escarificación en Oceanía
En algunas comunidades de Australia, la escarificación suele comenzar en la adolescencia. Si alguien se negaba, corría el riesgo de ser excluido de actividades tradicionales como ceremonias y danzas.
El museo Australiano indica que los aborígenes australianos solían cortarse como parte de sus creencias, aunque esta práctica ha disminuido. Solo un pequeño grupo en Tierra de Arnhem aún la practica. Los cortes y cicatrices eran un "lenguaje inscrito en el cuerpo" que transmitía mensajes sobre la identidad, la belleza, la alegría, el sufrimiento y la valentía. Usaban una roca fuerte llamada jimpilam kemerrempurru para escarificarse.
Los sepik de Papúa Nueva Guinea, conocidos como "hombres cocodrilos", se marcan la piel como parte de ritos de madurez. Durante este proceso, se hacen cortes en el cuerpo que forman cicatrices parecidas a las de un reptil. Esta escarificación es necesaria para obtener el "estatus de miembro adulto" y la aprobación de la comunidad para actividades como la caza. Creen que los "hombres fueron creados por los cocodrilos". Sin embargo, es una práctica peligrosa y puede causar la pérdida de mucha sangre.
Métodos de Escarificación
La escarificación no es una práctica predecible. El resultado final puede variar según el tipo de piel, la profundidad del corte, el cuidado de la herida, la salud de la persona y su edad biológica. Las cicatrices tienden a expandirse a medida que sanan.
Existen varias técnicas para la escarificación, como el branding (quemaduras) o el cutting (cortes). En general, los cortes no deben exceder los 3 milímetros de profundidad para evitar dañar vasos sanguíneos, tendones o nervios.
Quemaduras en la piel (branding)
El branding es una técnica común que usa herramientas como sopletes, soldadores eléctricos o piezas de metal calientes para hacer quemaduras en la piel.
- Cauterización: Consiste en calentar la punta de un alambre para hacer las quemaduras.
- Laser branding: Popularizado por Steve Haworth, usa una unidad de electrocirugía que produce un láser para cortar y cauterizar la piel. Es más preciso y puede reducir el dolor y el tiempo de curación.
- Strike branding: Se calienta una placa de metal a altas temperaturas y se presiona sobre la piel. Históricamente, se usaba para marcar propiedades o castigar, pero también como arte corporal. Es menos precisa y la curación es más larga.
- Cold branding: Similar al strike branding, pero la pieza de metal se enfría a temperaturas extremas (por ejemplo, con nitrógeno líquido) en lugar de calentarse.
Cortes en la piel (cutting)
El cutting es una de las técnicas más conocidas, donde se usan cuchillas quirúrgicas, navajas, espinas, vidrios o piedras para hacer los cortes. Los profesionales suelen recomendar el escalpelo por su precisión. A veces, las heridas se tratan con tintas, zumos de plantas, lodo, carbón molido o cenizas para ayudar a la cicatrización.
- Skin removal o peeling: Se hacen cortes lineales con un bisturí y se retiran cuidadosamente partes de la piel.
- Ink rubbing: Se raspa la piel con una cuchilla quirúrgica y se añade tinta, similar a un tatuaje.
- Packing: Común en África, se corta la piel y se rellena con arcilla, ceniza o tinta para dar color. Es más arriesgado por el riesgo de infección.
- Hatching: Consiste en hacer trazados grandes para definir diseños más pequeños, lo que requiere más habilidad y tiempo.
Abrasión
Las cicatrices también pueden formarse por fricción o raspadura, usando una máquina de tatuajes o un objeto que remueva la piel, como una lima o papel de lija.
- Escarificación por inyección: Se inyectan líquidos en la dermis para crear ampollas que luego se retiran. Es peligrosa por el alto riesgo de infecciones.
- Etching o scarification tattoo: Se usa una máquina de tatuar para "sobretatuar" el contorno de un diseño sin usar tinta, lo que permite una mejor definición.
- Escarificación química: Se usan productos corrosivos como el ácido para remover la piel y formar cicatrices. Es una técnica menos común y no se recomienda por las reacciones impredecibles.
Riesgos y Precauciones
La escarificación puede causar daños permanentes en la piel y tiene riesgos de infecciones y enfermedades cutáneas. Es fundamental que los lugares donde se realizan estos procedimientos cumplan con estrictas normas de higiene y seguridad. Lo ideal es que el artista tenga una licencia, aunque no siempre existen leyes que regulen estas prácticas.
Las personas que se someten a la escarificación pueden contraer enfermedades contagiosas como el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH), tuberculosis, lepra, tétano y hepatitis B o C. Las heridas son vulnerables a bacterias o virus. Por ello, es esencial usar guantes, máscaras quirúrgicas, antisépticos y esterilizar todas las herramientas.
Algunos especialistas en dermatología asocian la escarificación con la dermatilomanía, un trastorno que implica rascarse la piel repetidamente. También puede estar relacionada con condiciones psicológicas como la ansiedad y la depresión.
Es muy importante que el profesional que realiza la escarificación tenga un conocimiento detallado de la anatomía de la piel para evitar cortes demasiado profundos o lesiones graves. La reacción a los cortes y el proceso de cicatrización varían en cada persona.
Como resultado, la persona puede sufrir inflamación, irritación, dolor intenso y ardor. También pueden presentarse hemorragias y, en casos graves, úlceras cutáneas o queloides (crecimientos exagerados de tejido cicatrizal). Estos problemas pueden requerir cirugías o terapias.
En algunos países, la escarificación es ilegal o está regulada. Por ejemplo, en el Reino Unido está prohibida, y en Chile es ilícita si no cumple con normas mínimas de salud. En algunos estados de Estados Unidos, como Kansas y Oregón, está prohibida, y en otros, como Arizona, es ilegal para menores de 18 años sin la presencia de un adulto. Estas medidas se toman porque es una práctica extrema y menos segura que los tatuajes o perforaciones, y no siempre hay estudios o normativas que la regulen.
Estudios han sugerido que algunos adolescentes se someten a la escarificación como una forma de lidiar con presiones sociales, o por moda, rebeldía o para recordar eventos. También se ha visto como una forma de "experimentar el deseo de individualización", haciendo que cada persona se sienta diferente.
Algunos psicólogos han observado que los jóvenes que experimentan depresión o tristeza pueden recurrir a cortes en el cuerpo como una forma de "sacar el dolor" o como una "ofrenda de sacrificio" para llamar la atención.
Galería de imágenes
Véase también
En inglés: Scarification Facts for Kids