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Luis Alberto de Herrera para niños

Enciclopedia para niños
Datos para niños
Luis Alberto de Herrera
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Consejero de Gobierno
II Consejo Nacional de Gobierno
1 de marzo de 1955-1 de marzo de 1959
Presidente Luis Batlle Berres (1955)
Alberto Fermín Zubiría (1956)
Arturo Lezama (1957)
Carlos Fischer (1958)

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4.to presidente del Consejo Nacional de Administración
1 de marzo de 1925-1 de marzo de 1927
Presidente José Serrato
Predecesor Julio María Sosa
Sucesor José Batlle y Ordóñez

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Senador de la República

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Representante Nacional

Información personal
Nacimiento 22 de julio de 1873
Bandera de Uruguay Montevideo, Uruguay
Fallecimiento 8 de abril de 1959
Bandera de Uruguay Montevideo, Uruguay
Sepultura Cementerio Central de Montevideo
Nacionalidad Uruguaya
Familia
Padres Manuela Quevedo Antuña
Juan José de Herrera Pérez
Cónyuge Margarita Uriarte Olascoaga
Hijos María Hortensia de Herrera
Educación
Educado en Universidad de la República
Información profesional
Ocupación Político, abogado, juez, militar, embajador, periodista, escritor
Lealtad Ejército Revolucionario de Aparicio Saravia
Ejército del Paraguay
Rango militar Teniente
Conflictos Revolución de 1897
Revolución de 1904
Guerra del Chaco
Partido político Partido Nacional Flag of the National Party (Uruguay).svg
Distinciones
  • Gran Cruz de la Orden de Carlos III
  • Honorary Knight Grand Cross of the Order of the British Empire
Firma
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Luis Alberto de Herrera y Quevedo (nacido en Montevideo, Uruguay, el 22 de julio de 1873 y fallecido en la misma ciudad el 8 de abril de 1959) fue una figura muy importante en la política y la historia de Uruguay. Fue periodista, diplomático, historiador y político. Se le considera el líder principal del Partido Nacional durante la primera mitad del siglo XX. Fue candidato a presidente siete veces y dejó una huella significativa en el país.

Luis Alberto de Herrera venía de una familia con una larga historia en el gobierno de Uruguay. Empezó su vida pública a finales del siglo XIX. Mientras estudiaba en la universidad, también comenzó a trabajar como periodista en diarios como Las Primeras Ideas y El Nacional. A los veinte años, en 1893, dio su primer discurso político. Participó como soldado en la Revolución de 1897, y sus experiencias las escribió en su primer libro, Por la Patria (1898).

En 1901, publicó La tierra Charrúa, una de sus primeras obras sobre política e historia. Ese mismo año viajó a América del Norte como secretario de una misión comercial en Estados Unidos y México. Allí se interesó mucho por la forma de gobierno de Estados Unidos. Regresó a Uruguay en 1903, debido a la situación política del país. En 1904, cuando estalló la Revolución de 1904, renunció a su cargo para unirse a la lucha liderada por Aparicio Saravia. Después de la muerte de Saravia, participó en las negociaciones de paz. Más tarde, fundó el diario La Democracia con Carlos Roxlo y fue elegido legislador por primera vez en 1905. Durante sus primeros años como legislador, presentó proyectos sociales y se opuso firmemente al líder del Partido Colorado, José Batlle y Ordóñez. También publicó varias obras importantes sobre su pensamiento, la historia americana y las relaciones internacionales.

En 1920, Luis Alberto de Herrera se convirtió por primera vez en presidente del Directorio del Partido Nacional. En 1922, fue candidato a presidente por primera vez, pero perdió las elecciones ante el candidato del Partido Colorado, José Serrato. Sin embargo, en las elecciones de 1925, el Partido Nacional ganó por primera vez en décadas. Así, Herrera entró al Consejo Nacional de Administración y lo presidió entre 1925 y 1927. Volvió a ser candidato en las elecciones de 1926 y en las de 1930, perdiendo por poco margen. En 1931, fundó el diario El Debate.

En 1933, apoyó un cambio de gobierno liderado por el presidente Gabriel Terra, y la creación de una nueva Constitución en 1934. En 1940, se opuso a la idea de instalar bases militares de Estados Unidos en Uruguay. En 1942, no apoyó otro cambio de gobierno que llevó a una nueva Constitución.

Fue candidato nuevamente en las elecciones de 1942 y en las de 1946. Durante la presidencia de Luis Batlle Berres, hizo un acuerdo político llamado «coincidencia patriótica». En las elecciones de 1950, fue candidato presidencial otra vez. Luego, apoyó al presidente Andrés Martínez Trueba para cambiar la constitución y establecer un Poder Ejecutivo compartido por varias personas (llamado «colegiado»). En 1952, publicó el segundo tomo de su obra Antes y después de la Triple Alianza, marcando el final de su trabajo como escritor.

En las elecciones de 1954, fue elegido consejero de gobierno a los 81 años. Luego, hizo una alianza electoral con el movimiento ruralista que ganó las elecciones de 1958. Poco después de que el Partido Nacional llegara al gobierno por primera vez en 93 años, Luis Alberto de Herrera falleció el 8 de abril de 1959, a los 85 años. Su nieto, Luis Alberto Lacalle de Herrera, fue presidente de Uruguay entre 1990 y 1995, y su bisnieto, Luis Lacalle Pou, es presidente para el período 2020-2025.

Antecedentes familiares

Luis Alberto de Herrera y Quevedo nació el 22 de julio de 1873 en Montevideo. Fue el último hijo de Juan José de Herrera Pérez y Manuela Quevedo Antuña. Tenía cuatro hermanos mayores.

La familia Herrera había vivido en el continente americano por varias generaciones. El primer Herrera en llegar al Río de la Plata fue Antonio de Herrera Caballero, quien se estableció en Buenos Aires en 1749. Se casó con María Isabel Izaguirre y Gibaja, descendiente del famoso colonizador español «Hernandarias». Uno de sus hijos, Luis de Herrera e Izaguirre, se mudó a la Banda Oriental (actual Uruguay) como funcionario. Este Luis de Herrera e Izaguirre apoyó a los rebeldes de la revolución oriental y fue expulsado de Montevideo en 1811.

Archivo:Juan José de Herrera por Schütz
Caricatura de Juan José de Herrera, padre de Luis Alberto de Herrera.

El abuelo de Luis Alberto de Herrera, también llamado Luis de Herrera Basavilbaso, nació en 1806. Se unió a la cruzada de los 33 orientales en 1825 y participó en batallas importantes. Fue uno de los firmantes del Acta de la Jura de la Constitución en 1830. Participó en un levantamiento militar y luego fue reincorporado al Ejército. Después de un tiempo, viajó a Europa con su familia debido a la Guerra Grande, regresando en 1852. Al volver, se dedicó a la política, siendo secretario del primer Directorio del Partido Blanco y luego jefe político de Montevideo. También fue senador y ministro de Guerra. Falleció en 1869.

Juan José de Herrera, el padre de Luis Alberto de Herrera, también tuvo que ir a Europa de joven por la Guerra Grande. Estudió Derecho en Francia. Al regresar a América, trabajó en Buenos Aires y luego se recibió de abogado en Montevideo. Fue diputado y tuvo una larga carrera como diplomático en Río de Janeiro y Paraguay. También fue canciller (ministro de relaciones exteriores). Tuvo que exiliarse en Buenos Aires después de un conflicto político. Participó en la Revolución de las Lanzas (1870-1872) y ayudó a lograr la Paz de Abril de 1872, que puso fin al conflicto y permitió que el Partido Blanco y el Colorado compartieran el poder. Fue uno de los fundadores del «Club Nacional», que luego se convertiría en el Partido Nacional.

Primeros años

Infancia y educación

Archivo:Luis Alberto de Herrera a los 4 años
Luis Alberto de Herrera fotografiado a los 4 años de edad en el estudio Haut-Ton de la Ciudad Vieja, Montevideo.

Cuando Luis Alberto tenía menos de dos años, en 1875, su padre fue exiliado. Herrera creció en un ambiente político donde los cambios de gobierno y los exilios eran comunes. A pesar de esto, su vida familiar fue normal para alguien de su posición social. Estudió en Uruguay en el Elbio Fernández y, durante el exilio de su familia en Buenos Aires, en el Colegio Nacional de Buenos Aires.

Su familia vivió en varias casas en Montevideo y visitaban con frecuencia una quinta en Buceo. Su hermana Pilar, quien le enseñó a leer, se casó con Rodolfo de Arteaga.

Su madre, Manuela Quevedo Antuña, les enseñó a Luis Alberto y a sus hermanos el idioma inglés y los educó con valores de la época y en la religión protestante. Les hacía leer la Biblia en inglés todas las noches y los llevaba al Templo Inglés de la Ciudad Vieja los domingos. Esto se debía a que su madre era protestante de la Iglesia Anglicana y hablaba inglés, ya que había sido criada por su tía, casada con un importante empresario inglés en Uruguay, Samuel Lafonte.

Inicios en la política y el periodismo

Archivo:Rojo y Blanco Año I Numero VIII Pagina 25 recorte 01
Luis Alberto de Herrera a principios de los 1900s.

Entre 1891 y 1895, Luis Alberto de Herrera estudió en la Universidad de la República, aunque terminó su carrera de Derecho en 1903. En 1894, fue profesor de Historia.

En 1892, cuando los periódicos eran el principal medio de comunicación, Herrera se unió al periodismo. Editó el periódico Las Primeras Ideas y luego, en 1895, comenzó a escribir en el diario El Nacional.

También en 1892, a los diecinueve años, Luis Alberto de Herrera comenzó su carrera política como miembro del club «2 de enero». En 1893, a los veinte años, dio su primer discurso político en el club «Defensores de Paysandú», que él mismo ayudó a crear.

Herrera compartía la visión crítica del Partido Nacional hacia el gobierno de la época.

Revolución de 1897

Archivo:Herrera1897
Luis Alberto de Herrera como soldado nacionalista, durante la Revolución de 1897.

En 1896, debido a la tensión política, Herrera viajó a Melo para conocer al líder nacionalista Aparicio Saravia. Cuando comenzó un levantamiento en noviembre de ese año, Herrera se exilió en Buenos Aires con otros compañeros para evitar ser perseguido. Allí se unieron a las fuerzas del coronel Diego Lamas. El 5 de marzo de 1897, el grupo de Herrera, conocido como «los 22 de Lamas», desembarcó en el puerto del Sauce en Colonia. Durante el conflicto, Herrera fue ayudante del coronel Diego Lamas, participó como soldado en batallas y escribió en el periódico de la revolución, La Revolución Oriental. El 17 de marzo, Herrera participó en la batalla de Tres Árboles, donde los revolucionarios vencieron a las fuerzas del gobierno.

El presidente Juan Idiarte Borda no quería negociar la paz, pero fue asesinado el 25 de agosto de 1897. Entonces, Juan Lindolfo Cuestas, el presidente del Senado, asumió el cargo y reanudó las negociaciones de paz. Estas negociaciones terminaron con el Pacto de la Cruz, firmado el 18 de septiembre de 1897. Herrera escribió sobre sus experiencias en la revolución en su libro Por la Patria, publicado en 1898.

En febrero de 1898, el presidente Cuestas disolvió el Parlamento y creó un Consejo de Estado con miembros de ambos partidos. El padre de Luis Alberto de Herrera formó parte de este Consejo. Como resultado de esta reconciliación, se cambiaron las leyes electorales para permitir que los partidos minoritarios tuvieran representación en el Parlamento.

Misión en Norteamérica

Archivo:Luis Alberto de Herrera en Estados Unidos
Luis Alberto de Herrera como encargado de negocios de Uruguay en América del Norte. Estados Unidos, c. 1903.

En 1901, Herrera publicó el libro La Tierra Charrúa. Ese mismo año, el gobierno de Juan Lindolfo Cuestas lo nombró secretario de la misión diplomática en Estados Unidos y México. Entre 1902 y 1903, Herrera también fue encargado de negocios de Uruguay en Estados Unidos y Canadá. Publicó una serie de cartas en el diario El Día, que luego se convirtieron en el libro Desde Washington (1904). También escribió Labor diplomática en Norte América (1905), donde advirtió sobre el crecimiento de Estados Unidos como una potencia mundial.

En 1902, durante su misión, Herrera envió notas a la cancillería uruguaya (Ministerio de Relaciones Exteriores) alertando sobre el desarrollo de Estados Unidos como potencia y su influencia en América. Sin embargo, también mostró gran interés en la vida pública de Estados Unidos, especialmente en el voto libre y el respeto a las libertades.

En 1903, José Batlle y Ordóñez fue elegido presidente. Debido a tensiones políticas en Uruguay, Herrera regresó al país. Se graduó como doctor en Derecho y Ciencias Sociales en la Universidad de la República. En enero de 1904, estalló la Revolución de 1904. Herrera renunció a su cargo diplomático y se unió a la revolución. Fue arrestado brevemente, pero liberado a los 15 días.

Revolución de 1904

Archivo:Intervencion quirurgica al aire libre en la revolución de 1904
Tropas nacionalistas en la guerra de 1904.

Luis Alberto de Herrera participó en la guerra de 1904 como teniente. Estuvo en la batalla de Masoller, donde Aparicio Saravia fue herido de gravedad y falleció días después. Tras la muerte de Saravia, Herrera tuvo un papel importante al redactar las bases para las negociaciones de paz, que terminaron con el acuerdo de Paz de Acegúa el 24 de septiembre de 1904.

Ascenso político

Inicios en la actividad legislativa

Después de la guerra de 1904, Herrera y Carlos Roxlo fundaron el diario La Democracia. En 1905, a los 31 años, Herrera entró por primera vez al Parlamento como diputado por Montevideo.

Archivo:1891-1892, Almanaque Sud-americano, Carlos Roxlo (cropped)
Carlos Roxlo, cofundador de La Democracia junto a Herrera y compañero de este en el ámbito legislativo en sus primeros años.

El 23 de febrero de 1905, Luis Alberto de Herrera y Carlos Roxlo presentaron un proyecto de ley llamado «Ley del Trabajo». Este proyecto buscaba regular la jornada laboral, establecer condiciones de higiene en los talleres y limitar el trabajo de niños y mujeres.

En marzo de 1906, el diario La Democracia fue clausurado temporalmente por orden del presidente José Batlle y Ordóñez. Herrera y Roxlo desobedecieron la orden y continuaron publicando. Herrera fue arrestado, pero la Cámara de Representantes lo apoyó y fue liberado rápidamente.

Archivo:Luis Alberto de Herrera por Cao
Caricatura de Luis Alberto de Herrera que evoca el reto a duelo de este a José Batlle y Ordóñez, por el cual finalmente terminó batiéndose con un hijo de la esposa de Batlle, Ruperto Michaelson Pacheco, en 1906.

En 1906, un artículo en el diario La Democracia criticó al presidente Batlle y Ordóñez. Esto llevó a un fuerte intercambio de palabras entre Batlle y Herrera. Herrera desafió a Batlle a un duelo, pero Batlle se negó por ser presidente. Finalmente, Herrera se batió el 22 de abril de 1906 con Ruperto Michaelson Pacheco, hijo de la esposa de Batlle, sin que nadie resultara herido.

Herrera también redactó el programa del Partido Nacional de 1906, que incluía propuestas como la jornada laboral de nueve y ocho horas, el descanso dominical y la limitación del trabajo de niños y mujeres.

Archivo:Luis Alberto de Herrera (young)
Luis Alberto de Herrera.

El 27 de enero de 1908, Luis Alberto de Herrera se casó con Margarita Uriarte Olascoaga. Ese mismo año nació su única hija, María Hortensia de Herrera Uriarte. Después de su período legislativo en 1909, la familia viajó a París, donde Herrera continuó su trabajo intelectual. Publicó obras importantes como La Revolución Francesa y Sudamérica (1910) y El Uruguay Internacional (1912).

En 1910, Herrera entró por primera vez al Directorio del Partido Nacional. En septiembre de ese año, propuso la unión de los productores rurales para influir en la política. Colaboró en la fundación de la Federación Rural en 1915.

En 1913, el Presidente de los Estados Unidos, Theodore Roosevelt, visitó Uruguay y pidió reunirse con Herrera para hablar sobre su libro La Revolución Francesa y Sudamérica. En 1914, Herrera viajó a Paraguay y fue elegido diputado por Río Negro.

En 1914, un club de fútbol en Paraguay fue fundado con el nombre «Luis Alberto de Herrera» en agradecimiento por su apoyo a Paraguay.

El debate por la reforma constitucional de 1917

Archivo:Luis Alberto de Herrera parado

El 4 de marzo de 1913, el presidente Batlle y Ordóñez propuso una reforma constitucional para que el Poder Ejecutivo fuera ejercido por una Junta de Gobierno de nueve miembros (conocido como «el colegiado»). El Partido Nacional pensó que esto buscaba mantener al Partido Colorado en el poder. El debate se centró en cómo sería la reforma electoral. Batlle dejó la presidencia en 1915. A finales de 1915, se aprobó una ley para elegir una Convención Nacional Constituyente.

El 30 de julio de 1916, se realizó la elección de los miembros de la Constituyente, la primera en Uruguay con voto secreto y representación proporcional. Aunque el Partido Colorado obtuvo la mayoría, un sector de este partido se opuso al colegiado, lo que hizo necesarias las negociaciones. Las negociaciones llevaron a una solución innovadora: un Poder Ejecutivo bicéfalo (con dos cabezas). Seguiría existiendo el cargo de presidente de la República, pero con funciones limitadas, y coexistiría con el Consejo Nacional de Administración (CNA), compuesto por nueve miembros, encargado de funciones administrativas y de gobierno. Herrera no estuvo de acuerdo con esta solución. La nueva Constitución fue aprobada por la ciudadanía el 25 de noviembre de 1917 y entró en vigencia el 1 de marzo de 1919.

Con la nueva Constitución, Uruguay tuvo un período de votaciones frecuentes: cada cuatro años para presidente, cada tres para diputados, y cada dos para renovar parte del CNA y del Senado. Herrera se convirtió en una figura clave en este proceso electoral para el Partido Nacional.

Liderazgo en el Partido Nacional

Primera candidatura presidencial

En 1920, Herrera asumió por primera vez como presidente del Directorio del Partido Nacional. En 1921, organizó el traslado de los restos del líder Aparicio Saravia a Montevideo.

Archivo:Luis Alberto de Herrera tras su duelo contra Brum
Luis Alberto de Herrera saludado por personas tras culminar su duelo con el presidente colorado Baltasar Brum, el 13 de diciembre de 1922.

En 1922, se celebrarían elecciones generales para elegir presidente. El Partido Nacional eligió a Luis Alberto de Herrera como su candidato. El 20 de octubre, Herrera presentó su programa de gobierno, prometiendo garantizar elecciones justas. Una novedad en su campaña fue el «tren relámpago», que llevó a los candidatos por todos los departamentos.

El oponente de Herrera fue José Serrato, del Partido Colorado. Serrato ganó por pocos votos. Herrera denunció que hubo fraude en las elecciones de 1922 y acusó al presidente de ese momento, Baltasar Brum. Esto llevó a un duelo con pistola entre Herrera y Brum el 13 de diciembre de 1922. El duelo terminó sin que nadie resultara herido, pero tuvo un gran impacto público.

Presidente del Consejo Nacional de Administración

El 8 de febrero de 1925 se realizaron elecciones para renovar parte del Consejo Nacional de Administración. El Partido Nacional ganó, y Luis Alberto de Herrera fue elegido para integrar el CNA (donde estuvo hasta 1931) y para presidirlo entre el 1 de marzo de 1925 y el 1 de marzo de 1927.

Segunda candidatura presidencial

Archivo:Luis Alberto de Herrera y familia en Europa
Luis Alberto de Herrera y su familia en 1927, durante su viaje a Europa. En la fotografía fueron retratados a bordo Herrera, su esposa Margarita Uriarte, su hija María Hortensia y el «comandante» del barco.

Luis Alberto de Herrera, a los 56 años, fue nuevamente candidato presidencial del Partido Nacional en las elecciones generales de 1926. El Partido Nacional perdió por un margen muy estrecho. El Partido Colorado ganó, y Juan Campisteguy fue elegido presidente.

En 1927, Herrera y su familia viajaron a Italia. Allí, el cónsul uruguayo le informó que el presidente Juan Campisteguy lo había nombrado embajador ante el Rey de Gran Bretaña e Irlanda. Antes de ir a Inglaterra, Herrera se reunió con el rey Víctor Manuel III y con Benito Mussolini, y recibió una condecoración. En Londres, Herrera recopiló información para uno de sus principales trabajos históricos: La misión Ponsonby (1930).

En octubre de 1929, tras el fallecimiento de José Batlle y Ordóñez, Herrera votó a favor de los honores fúnebres, pero dejó claro que su voto no cambiaba su opinión sobre la gestión de Batlle.

Tercera candidatura presidencial

Archivo:Luis Alberto de Herrera votando
Luis Alberto de Herrera votando.

Herrera fue candidato por tercera vez en las elecciones generales de 1930. Fue el candidato nacionalista más votado, pero el abogado colorado Gabriel Terra ganó y fue elegido presidente.

En 1931, se aprobó una ley que repartía los cargos públicos proporcionalmente entre los partidos. Herrera se opuso a este acuerdo.

Herrera comenzó a criticar cada vez más al CNA y apoyó una nueva reforma constitucional para eliminar el Poder Ejecutivo compartido. En 1931, fundó el diario El Debate para expresar sus ideas. También se fundó el Comité Nacional Herrerista, que buscaba eliminar el colegiado.

En 1932, Herrera apoyó a Paraguay en la Guerra del Chaco contra Bolivia, incluso visitó el país y el frente de batalla. Ese mismo año, Herrera y su sector se abstuvieron de participar en las elecciones para el Consejo Nacional de Administración, como forma de protesta contra el sistema ejecutivo compartido.

Participación en el cambio de gobierno de Gabriel Terra y la Constitución de 1934

Archivo:Luis Alberto de Herrera y familia en ocasión del arribo de Getulio Vargas
Luis Alberto de Herrera, Margarita Uriarte y María Hortensia de Herrera, en el puerto de Montevideo, en ocasión del arribo del presidente de Brasil, Getúlio Vargas, en visita oficial, el 30 de mayo de 1935

Cuando ocurrió la Gran Depresión mundial, Uruguay también sufrió una crisis económica. Esto llevó a muchas críticas al Consejo Nacional de Administración, que manejaba la economía. Herrera estuvo de acuerdo con el presidente Gabriel Terra en que era necesario cambiar la Constitución de 1918 para eliminar el Poder Ejecutivo compartido, que consideraban ineficaz. Herrera apoyó un cambio drástico para salvar al país. La alianza entre Herrera y Terra se selló en una reunión el 13 de enero de 1933.

El 31 de marzo de 1933, el presidente Terra disolvió el Parlamento y el Consejo Nacional de Administración. Herrera, que estaba en Río de Janeiro, apoyó este cambio de gobierno.

El 25 de junio de 1933, se realizaron elecciones para elegir una Convención Nacional Constituyente. El 22 de marzo de 1934, la Convención Constituyente reeligió a Gabriel Terra como presidente. Dos días después, aprobó la nueva Constitución, que fue aprobada por la ciudadanía el 19 de abril de 1934. La nueva Constitución eliminó el CNA y regresó a un sistema presidencialista. También cambió la composición del Senado para favorecer al herrerismo y al sector de Terra. Herrera fue miembro de la Constituyente y senador, consolidando su liderazgo en el Partido Nacional.

En las elecciones generales de 1938, Herrera no fue candidato a presidente, pero buscó permanecer en el Senado. El Partido Colorado ganó, y Alfredo Baldomir asumió la presidencia.

Presidencia de Alfredo Baldomir: el debate sobre las bases extranjeras y el cambio de gobierno de 1942

La presidencia de Alfredo Baldomir (1938-1942) estuvo marcada por el inicio de la Segunda Guerra Mundial. En diciembre de 1939, el conflicto llegó a Uruguay con la llegada del acorazado alemán Graf Spee al puerto de Montevideo. Este evento, junto con la intención de Estados Unidos de instalar bases militares en países latinoamericanos, generó un gran debate.

En noviembre de 1940, un artículo del New York Times mencionó un posible acuerdo para establecer bases navales y aéreas de Estados Unidos en Uruguay. Esto causó un gran revuelo. El herrerismo, liderado por Luis Alberto de Herrera, lanzó su campaña ¡Bases no!. El 21 de noviembre, el Senado votó en contra de la instalación de bases extranjeras. Esta acción molestó a la embajada de Estados Unidos.

Archivo:Represiónaldr.herrera
Domicilio de Herrera durante el cambio de gobierno de 1942.

Las diferencias entre el herrerismo y el gobierno se hicieron más grandes. En 1940, Baldomir creó una Comisión de Reforma Constitucional sin la participación del herrerismo. En marzo de 1941, el herrerismo bloqueó la elección del candidato de Baldomir para la presidencia de la Cámara de Diputados. Como resultado, Baldomir cambió a los ministros herreristas por personas de su sector. Finalmente, el 21 de febrero de 1942, el presidente Baldomir disolvió el Parlamento y asumió plenos poderes. Este evento fue conocido como el cambio de gobierno de 1942, porque no hubo censura ni detenciones.

Cuarta y quinta candidatura presidencial

Archivo:Luis Alberto de Herrera de frente
Luis Alberto de Herrera.

En noviembre de 1942, se celebraron las elecciones generales. Luis Alberto de Herrera fue nuevamente candidato a la presidencia. Estas elecciones fueron un revés para el Partido Nacional, que no ganó en ningún departamento. El Partido Colorado obtuvo la victoria en todos los departamentos. Al mismo tiempo, se aprobó una reforma constitucional que mantuvo el presidencialismo, pero devolvió la proporcionalidad al Senado y mantuvo la participación de varios partidos en el gobierno. Durante el resto de la Segunda Guerra Mundial, Herrera y su sector fueron los únicos que defendieron la neutralidad de Uruguay.

En febrero de 1946, el herrerismo celebró la victoria de Juan Domingo Perón en las elecciones argentinas. El peronismo y el herrerismo compartían ideas sobre política exterior, especialmente su rechazo a la influencia de grandes potencias y la defensa de la soberanía de sus países.

En las elecciones generales de noviembre de 1946, Herrera fue candidato presidencial por quinta vez. El Partido Nacional tuvo un mejor resultado que en las elecciones anteriores, pero fue derrotado nuevamente por el Partido Colorado. Esta elección marcó el regreso del batllismo al poder. Tomás Berreta asumió como presidente el 1 de marzo de 1947, pero falleció pocos meses después, el 2 de agosto de 1947.

Durante el segundo batllismo: sexta candidatura y reforma constitucional de 1952

Tras la muerte de Tomás Berreta, su vicepresidente, Luis Batlle Berres, asumió la presidencia el 2 de agosto de 1947. Este período es conocido como «neobatllismo» o «segundo batllismo».

Archivo:Peloduro Portada No.91
Tapa de la revista Peloduro donde enseña una caricatura que hace parodia sobre quién posee el poder real dentro de la «coincidencia patriótica» pactada entre Batlle Berres y Herrera.

Ese mismo mes, el presidente Batlle se reunió con Luis Alberto de Herrera para buscar un acuerdo que diera estabilidad a su gobierno. Batlle ofreció a Herrera cargos en las direcciones de las empresas públicas a cambio de apoyo. Herrera llamó a este acuerdo «coincidencia patriótica», aunque popularmente también se le conoció como «el reparto». Este acuerdo permitió que el herrerismo volviera a ocupar cargos en la administración pública que había perdido en 1942.

En 1950, en Santiago de Chile, el historiador mexicano Silvio Zabala propuso que Herrera fuera reconocido como el «padre del revisionismo histórico americano», lo cual fue aprobado por unanimidad.

En las elecciones generales de 1950, Herrera fue candidato a la presidencia por sexta y última vez. Aunque su fórmula fue la más votada a nivel nacional, perdió nuevamente ante el Partido Colorado, que ganó con la fórmula Andrés Martínez Trueba - Alfeo Brum. Martínez Trueba asumió la presidencia el 1 de marzo de 1951 y propuso reformar la constitución para reemplazar el Poder Ejecutivo unipersonal por un colegiado. El herrerismo, para sorpresa de muchos, apoyó esta propuesta.

Una comisión de delegados de ambos partidos redactó un proyecto de reforma. La iniciativa fue presentada al Parlamento y aprobada a fines de octubre. El 16 de diciembre, fue ratificada en un plebiscito con baja participación ciudadana. La nueva constitución entró en vigencia el 1 de marzo de 1952, estableciendo un Consejo Nacional de Gobierno de nueve miembros, elegidos cada cuatro años. Martínez Trueba presidió el primer colegiado hasta 1955. Además, en abril de 1952, se publicó el segundo tomo de la obra Antes y después de la Triple Alianza, marcando el fin de la producción literaria de Herrera.

El Partido Nacional al poder

Archivo:Luis Alberto de Herrera

Durante el primer colegiado (1952-1955), comenzó a crecer la Liga Federal de Acción Ruralista, fundada en 1951 y dirigida por Benito Nardone. Este movimiento logró movilizar a muchos sectores del población rural.

En 1953, surgió una nueva división dentro del Partido Nacional, el Movimiento Popular Nacionalista (MPN). Sin embargo, este grupo siguió sumando votos al Partido Nacional. En las elecciones generales de 1954, el Partido Nacional participó con tres grupos: herrerismo, MPN y Reconstrucción Blanca. El Partido Colorado volvió a ganar. El segundo colegiado asumió el 1 de marzo de 1955. El Partido Nacional obtuvo tres consejeros, dos para el herrerismo (Luis Alberto de Herrera y Ramón Viña) y uno para el MPN.

Cuando asumió su puesto como consejero, Luis Alberto de Herrera tenía casi 82 años. Durante los cuatro años, asistió a todas las sesiones. En este período, el diario El Debate lo apodó «el fiscal de la Nación».

En octubre de 1956, se formó la Unión Blanca Democrática (UBD), que unió a varios grupos del Partido Nacional. Además, el movimiento ruralista de Benito Nardone se volvió más político y en agosto de 1958, se alió con el herrerismo. Esta alianza presentó a sus seis consejeros de forma intercalada. También se propuso un plebiscito constitucional para regresar a un sistema presidencialista y eliminar el sistema de lemas. Si el plebiscito ganaba, la fórmula propuesta era Herrera para presidente y Nardone para vicepresidente, siendo esta la séptima y última candidatura presidencial de Luis Alberto de Herrera.

Finalmente, en las elecciones generales de noviembre de 1958, el Partido Nacional y la alianza herrerismo-ruralismo ganaron, pero el plebiscito no fue aprobado. Fue la primera victoria electoral del Partido Nacional desde 1925, y significó que el Partido Colorado dejaría el gobierno después de 93 años consecutivos. El primer colegiado blanco asumió el 1 de marzo de 1959.

Herrera ayudó a formar el nuevo gobierno, eligiendo a personas que consideraba capaces, sin importar su partido. Sin embargo, en febrero de 1959, antes de que el gobierno asumiera, Nardone rompió su alianza con Herrera.

El 5 de abril de 1959, Herrera sufrió una neumonía y fue internado. Luis Alberto de Herrera falleció poco más de un mes después de la asunción del primer gobierno del Partido Nacional, el 8 de abril de 1959, a los 85 años.

Legado

Monumento a Luis Alberto de Herrera
Monumento L.A. de Herrera.png
Autor Edmundo Prati (1889-1970)
en colaboración con V. Habegger y Jorge Durán Mattos
Creación 18 de julio de 1970
Ubicación Av. Dr. Luis Alberto de Herrera en el cruce con la Av. Gral. Flores
Material Bronce y basamento de Mármol gris
Dimensiones Figura de Herrera de pie y en actitud de avanzar, vestido con ropa de calle, con el sombrero en la mano izquierda

Homenajes

En Montevideo, existe la Avenida Doctor Luis Alberto de Herrera en su honor. En esa misma avenida, hay una estatua de él, que lo representa caminando hacia su casa.

Familia

Luis Alberto de Herrera se casó con Margarita Uriarte, y tuvieron una hija, María Hortensia. Ella se casó con Carlos Lacalle, y tuvieron a Luis Alberto Lacalle de Herrera y a María Inés Lacalle de Herrera. Luis Alberto Lacalle de Herrera fue presidente de Uruguay entre 1990 y 1995.

Luis Alberto Lacalle de Herrera se casó con María Julia Pou, y tuvieron tres hijos: Pilar, Luis Alberto y Juan José. Su hijo mayor, Luis Lacalle Pou, bisnieto de Herrera, fue elegido presidente de Uruguay para el período 2020-2025.

Ideología

Antiimperialismo

Herrera defendió el nacionalismo y se opuso al imperialismo, que es cuando un país busca extender su poder sobre otros. No solo rechazó esta idea en teoría, sino que también investigó sus causas económicas y actuó en su contra en su trabajo diplomático, sus escritos y su actividad política. Esto le causó algunos conflictos con otros políticos.

Herrera tenía dos ideas claras sobre el antiimperialismo: desconfiaba de las ideologías abstractas y se oponía al panamericanismo, que él veía como una forma de control sobre América Latina.

A principios del siglo XX, cuando era diplomático en Norteamérica, advirtió sobre los peligros de la política del «big stick» de Estados Unidos. También conoció al presidente mexicano Porfirio Díaz y escuchó la famosa frase: «Pobre México, tan lejos de Dios y tan cerca de Estados Unidos». Denunció la intervención de Estados Unidos en Veracruz en 1914. En 1927, apoyó a Augusto Sandino, un líder nicaragüense que luchaba contra Estados Unidos. En 1940, se opuso a la instalación de bases militares de Estados Unidos en Uruguay. Su postura lo acercó a Juan Domingo Perón, a quien veía como un líder que defendía los intereses de América.

Herrera y la Revolución Francesa

En su obra La Revolución Francesa y Sudamérica (1910), Herrera argumentó que la Revolución Francesa no fue la principal inspiración para las revoluciones en América Latina. Según Herrera, si Francia influyó, fue más bien en aspectos autoritarios.

Herrera valoraba la experiencia de Estados Unidos, destacando la solidez de sus instituciones republicanas, pero rechazaba la intervención en otros países. Admiraba a figuras como Thomas Jefferson, Benjamin Franklin, James Madison, George Washington y Alexander Hamilton.

Visión sobre la educación

Archivo:Busto Luis Alberto de Herrera

Herrera elaboró varios documentos a principios del siglo XX donde analizaba la enseñanza secundaria y superior. En un ensayo de 1901, habló sobre las ventajas y desventajas de tener más profesionales universitarios en Uruguay. Mencionó la falta de médicos en el interior del país, la necesidad de atender las necesidades educativas del campo (que consideraba la verdadera fuente de riqueza) y la importancia de establecer carreras más cortas. Su visión educativa se basaba en tres principios: la educación debe formar a las personas, no solo darles información; los conocimientos deben reflejar la identidad nacional; y la educación no debe estar separada de la realidad.

En un informe de 1902, enviado desde Nueva York, analizó las deficiencias de la enseñanza secundaria, como la falta de internados, el exceso de información teórica y la falta de motivación de los profesores.

En una serie de artículos publicados en el diario El Día entre 1902 y 1903, Herrera expresó su preocupación por la falta de escuelas primarias en el interior, el estado de la Escuela de Artes y Oficios y la falta de formación para las mujeres.

Herrera enfatizó la importancia del trabajo manual. Creía que el trabajo manual ayudaba a descubrir el valor de las cosas, a desarrollar habilidades útiles y a fortalecer la vida familiar. También criticó que la educación secundaria solo preparara para carreras universitarias. Herrera advertía que un exceso de profesionales universitarios y la falta de enseñanza manual llevarían a la falta de empleo en sus profesiones y a la búsqueda desesperada de empleos públicos.

Se recuerda un debate parlamentario sobre este tema que Herrera tuvo con el diputado Atilio Narancio en 1915. Herrera dijo:

«Me parece que es lamentable la idea de que los jóvenes que estudian solo quieran aumentar el enorme número de empleados públicos del país: ¡unirse a la Administración!».

El diputado Narancio no estuvo de acuerdo. Herrera mencionó que Narancio había dicho que le gustaría que hubiera «millares de bachilleres». Herrera le respondió:

«Yo creo que ese país, con dos o tres millones de bachilleres, sería un país de personas con dificultades para ganarse la vida [...] Pasará, señor diputado, lo que ha pasado en Córdoba, donde hay zapateros que son bachilleres; y eso es lamentable, señor diputado, y me parece un problema social importante [...]».

La oposición difundió una versión falsa de que Herrera había dicho que «el hijo del zapatero no puede ser doctor». La respuesta de Herrera fue malinterpretada durante años y usada para perjudicarlo políticamente. Sin embargo, en la versión original de la sesión parlamentaria, Herrera sostenía que lo grave no era que alguien de origen humilde llegara a ser bachiller, sino que un graduado universitario, por falta de trabajo en su profesión, se viera obligado a hacer trabajos que no deseaba, como el de lustrabotas.

Concepción económica

Ruralismo

Herrera defendió al sector agropecuario. Se le considera una figura que apoyaba el ruralismo o agrarismo político-económico tradicional. Criticó fuertemente cualquier intento de industrialización, a la que consideraba «artificial». Sin embargo, esto no significa que apoyara solo a los grandes propietarios de tierras. Fue consejero de la primera directiva de la Federación Rural, que defendía a los productores rurales de todo Uruguay.

Anticentralismo

Herrera fue influenciado por Alexis de Tocqueville y su obra La Democracia en América. De allí, Herrera tomó la idea de la diferencia entre el modelo autónomo y federal de Estados Unidos y el centralismo francés. La propuesta de Herrera era un país con autonomías locales, que fueran autosuficientes y capaces de generar empleo para retener a las nuevas generaciones. En resumen, quería un Uruguay con una distribución de la población más equilibrada y no tan concentrada en la capital.

Obras

Todas las obras

  • Por la Patria - 1899
  • El acuerdo de los Partidos - 1900
  • La tierra Charrúa - 1901
  • Ventajas e inconvenientes en nuestro país del aumento del número de personas que adquieren títulos para ejercer profesiones liberales - 1901
  • El programa de la Revolución - 1904
  • Las verdaderas bases de paz - 1904
  • Desde Washington - 1904
  • Labor Diplomática en N. América - 1905
  • La Doctrina Drago y el interés del Uruguay - 1908
  • La Diplomacia Oriental en el Paraguay (I) - 1908
  • La Revolución Francesa y Sudamérica - 1910
  • La Diplomacia Oriental en el Paraguay (II) - 1911
  • El Uruguay Internacional - 1912
  • Acción Parlamentaria - 1917
  • Tres años de Cámara - 1917
  • Buenos Aires, Urquiza y el Uruguay - 1919
  • Uno que Vio - 1919
  • La Clausura de los Ríos - 1920
  • La encuesta Rural - 1920
  • Una Etapa - 1923
  • En la Brecha - 1923
  • El Drama del 65: la culpa Mitrista - 1926
  • Sin nombre - 1928
  • La Misión Ponsonby - 1930
  • La Paz de 1828 - 1940
  • Orígenes de la Guerra Grande - 1941
  • El Canadá, visto y leído de cerca - 1946
  • La Seudo-historia para el Delfín - 1947
  • Antes y después de la Triple Alianza - 1951

Clasificación de obras

Eduardo Víctor Haedo clasificó las obras de investigación histórica de Herrera en cinco grupos:

  • Observación de hechos y eventos vividos.
  • Definición y compromiso con su nacionalismo.
  • Razones para su ideología en la región del Río de la Plata.
  • Visión y análisis de eventos internacionales que confirman su nacionalismo.
  • La importancia de su nacionalismo para los países del sur del continente.

Una comisión especial en 1986 dividió sus obras en tres series: revisión histórica, teoría política y actividad política.

Considerando el tema histórico principal de cada obra, se pueden identificar tres ciclos, además de dos estudios sobre la naturaleza del pasado histórico o «teorización política»:

  • Dos libros sobre el papel de la diplomacia británica en la independencia de Uruguay.
  • Tres obras sobre el período de la Guerra Grande.
  • El ciclo que abarca el gobierno de los presidentes Berro y Aguirre y la guerra del Paraguay.

Tabla con obras históricas ordenadas por la cronología de los hechos que tratan y la fecha de publicación:

Ciclos Título Fecha de publicación
Las bases de su pensamiento La tierra charrúa 1901
La Revolución francesa y Sudamérica 1910
El Uruguay internacional 1912
Independencia de Uruguay La misión Ponsonby 1930
La paz de 1828 1940
La Guerra Grande La tierra charrúa (capítulo 3) 1901
Orígenes de la Guerra Grande 1941
Por la verdad histórica 1946
La seudo-historia para el Delfín 1947
El gobierno de los presidentes Berro

y Aguirre y la guerra del Paraguay

La tierra charrúa (capítulos 4 y 5) 1901
La diplomacia oriental en el Paraguay. Tomo I 1908
La diplomacia oriental en el Paraguay. Tomo II 1911
Buenos Aires, Urquiza y el Uruguay 1919
La clausura de lo ríos 1920
El drama del 65. La culpa mitrista 1926
Antes y después de la Triple Alianza 1951

Galería de imágenes

Véase también

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Luis Alberto de Herrera para Niños. Enciclopedia Kiddle.