Carlos Fernández Casado para niños
Datos para niños Carlos Fernández Casado |
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Información personal | ||
Nacimiento | 4 de marzo de 1905 Logroño (España) |
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Fallecimiento | 3 de mayo de 1988 Madrid (España) |
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Nacionalidad | Española | |
Familia | ||
Hijos | Leonardo Fernández Troyano | |
Información profesional | ||
Ocupación | Ingeniero de caminos, canales y puertos | |
Miembro de | Real Academia de Bellas Artes de San Fernando | |
Carlos Fernández Casado (nacido en Logroño el 4 de marzo de 1905 y fallecido en Madrid el 3 de mayo de 1988) fue un destacado ingeniero de caminos, canales y puertos. También fue profesor universitario, miembro de la Academia de Bellas Artes de San Fernando y una persona con muchos intereses intelectuales en España.
Es considerado una figura clave en la ingeniería civil española de mediados del siglo XX. Diseñó y construyó muchas estructuras, principalmente de hormigón. Trabajó con la empresa Huarte y Cía.. Es muy conocido por sus estudios y la construcción de puentes. Fue uno de los pioneros en introducir y desarrollar la técnica del hormigón pretensado en España.
Su trabajo como profesor y sus libros sobre cálculo de estructuras fueron muy importantes. Desde su puesto en la Escuela de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de Madrid, ayudó a que la ingeniería de estructuras española alcanzara un nivel comparable al de otros países europeos. También formó a muchas generaciones de ingenieros y arquitectos de España y países latinoamericanos.
Además de su gran trabajo como diseñador y constructor, Carlos Fernández Casado tenía una mente muy curiosa. Le interesaban muchos campos del conocimiento. Quería tener un conocimiento universal, como los humanistas del Renacimiento. Sus intereses incluían la filosofía, la estética, la historia del arte, la psicología, el derecho y la música. Dedicó mucho tiempo al estudio de la estética y la historia de las obras públicas, especialmente la ingeniería romana. Publicó varios libros sobre este tema que siguen siendo muy importantes.
En 1964, fundó la empresa Carlos Fernández Casado S.L. Oficina de Proyectos con dos jóvenes colaboradores: Javier Manterola Armisén y su hijo Leonardo Fernández Troyano. Fue su presidente hasta su fallecimiento. Desde su creación, la empresa ha sido muy importante en el mundo de la Ingeniería Civil. Ha ganado una gran reputación nacional e internacional por su contribución al desarrollo de la ingeniería estructural y por sus diseños innovadores y bien cuidados.
En 1983, el Ministerio de Obras Públicas nombró el “Puente Ingeniero Carlos Fernández Casado” al puente atirantado sobre el embalse de Barrios de Luna. Este fue un reconocimiento a su trayectoria en el mundo de los puentes. El puente fue diseñado por Javier Manterola Armisén y, en su momento, tuvo el récord mundial de longitud en puentes atirantados con 440 metros de vano central.
En 1984, su ciudad natal, Logroño, le rindió homenaje. Colocaron una placa conmemorativa en la casa donde nació. El Ayuntamiento de Madrid también puso una placa en su domicilio. Además, el Ayuntamiento de Coslada nombró una calle en su honor.
El 4 de marzo de 2025, para celebrar el 120 aniversario de su nacimiento, el Ayuntamiento de Logroño le rindió homenaje. Nombró un paseo de la ciudad en su honor, con la presencia de su hijo Leonardo Fernández Troyano y otros familiares.
Contenido
Su Vida y Carrera
Primeros Años y Formación
Carlos Fernández Casado fue el cuarto de siete hijos de Tomás Fernández Jiménez, un General de Artillería, y Presentación Casado. Vivió en Logroño hasta 1914, cuando su padre fue trasladado a Madrid. Desde entonces, vivió principalmente en Madrid. Estudió en la Escuela de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de Madrid. Terminó sus estudios en 1924, con solo 19 años.
Después de estudiar en París sobre radiofaros y obtener el título de Ingeniero de Telecomunicaciones, regresó a España. Su primer trabajo como ingeniero independiente fue en la provincia de Granada, donde vivió cuatro años y realizó varios proyectos.
En 1933, se casó con Rita María Troyano de los Ríos. Tuvieron cuatro hijos: Carlos, Leonardo, Ritama y Juan Pablo.
Colaboración Profesional y Desafíos
Después de su trabajo en Granada, comenzó a colaborar con la empresa Huarte y Cía.. Esta empresa, fundada en 1932 por Félix Huarte Goñi, hoy forma parte del grupo OHL. En 1933, trabajó en las obras de la Ciudad Universitaria de Madrid. El ingeniero principal de este proyecto era Eduardo Torroja Miret. Su relación con él fue difícil.
Con Huarte y Cía., también construyó algunos de sus primeros puentes antes de la Guerra Civil. Durante la Guerra Civil, estuvo en Madrid en la División de Defensa Antiaérea. Allí diseñó algunos refugios antiaéreos de hormigón. Los primeros años después de la guerra fueron difíciles para él debido a su pasado. En esta etapa, Félix Huarte le dio un apoyo constante. Esto le permitió seguir trabajando y evitar el exilio o el aislamiento que sufrieron muchos profesionales de su generación.
Esta colaboración con Huarte y Cía. duró toda la vida de Fernández Casado. Primero fue personal y luego a través de su oficina de proyectos. De esta colaboración surgieron algunas de las obras más importantes del país después de la guerra. También desarrollaron una tecnología muy avanzada para la prefabricación de naves industriales y puentes. Esto ayudó a que Huarte y Cía. se convirtiera en una de las constructoras más importantes.
En 1949, se le levantó una sanción que tenía desde el final de la Guerra Civil. Pudo ingresar en la Jefatura de Puentes y Estructuras del Ministerio de Obras Públicas. Permaneció allí hasta 1963 y luego como asesor hasta 1968. En este puesto, diseñó más de treinta puentes. Algunos ejemplos son el puente arco de Mérida sobre el río Guadiana (1959) y el del río Palmones en Algeciras (1953).
Creación de su Propia Empresa
Al dejar la Jefatura, fundó la empresa Carlos Fernández Casado S.L. Oficina de Proyectos. Lo hizo con su hijo Leonardo Fernández Troyano y con Javier Manterola Armisén. Fue su presidente hasta su fallecimiento. Al principio, Huarte y Cía. tenía una parte de la empresa. La mayoría de los proyectos se hicieron para ellos. A partir de 1980, funcionó como una empresa independiente.
Desde su fundación, la empresa ha trabajado sin interrupción. Ha tenido un papel destacado a nivel nacional e internacional en el mundo de las estructuras. Sus obras son innovadoras y únicas. Hoy en día, es una referencia esencial en la ingeniería de estructuras y puentes a nivel mundial.
Entre las muchas obras importantes diseñadas por Carlos Fernández Casado y sus colaboradores, y luego por estos últimos, destacan: el edificio de Torres Blancas (1964) y la torre del Banco de Bilbao (1978), ambos en Madrid. También los pasos superiores de la A-6 en Madrid (1966), la pasarela de las Glorias de Barcelona (1973), el puente atirantado Sancho el Mayor en Castejón (Navarra) (1978), el puente Ingeniero Carlos Fernández Casado sobre el embalse de Barrios de Luna (1982), el puente Euskalduna en Bilbao (1998) y el nuevo puente sobre la bahía de Cádiz (2012).
Por problemas de salud, tuvo que retirarse de toda actividad en 1984. Falleció en Madrid el 3 de mayo de 1988. Está enterrado en Cercedilla, en la Sierra del Guadarrama. Este era un lugar que apreciaba mucho y donde pasó parte de su vida con su familia.
Innovaciones en Ingeniería

Las naves industriales prefabricadas son otro de los grandes logros de Fernández Casado. Después de la Guerra Civil, el acero era muy escaso y caro. Por eso, Fernández Casado y la empresa Huarte y Cía. desarrollaron soluciones prefabricadas de hormigón. Algunas de estas soluciones eran nuevas y únicas. Permitían construir con las ventajas del acero sin usarlo. Esta forma de trabajar, más industrial y eficiente, encajaba muy bien con su visión de la ingeniería.
Entre estas obras, se encuentran las cubiertas cilíndricas (naves de Ensidesa en Avilés, 1952). También la cubierta de la nave de trolebuses de Madrid (con arcos triarticulados de 42 metros, 1951). Otras son las naves de Española del Zinc (1952), la Sociedad Ibérica del Nitrógeno en La Felguera (1952). También hizo cubiertas rectas a dos aguas o en diente de sierra. Estas se hicieron con cerchas o pórticos. Ejemplos son la nave para montaje del INTA en Torrejón de Ardoz (1946), la nave de laminación de Ensidesa (1956) y las naves de Intelhorce (1962).
Puentes de Altura Estricta
Una de las primeras actividades de Fernández Casado en puentes fue estudiar soluciones para cruces de carreteras. Especialmente en zonas con ríos anchos o ramblas con caudales variables. También para cruces muy cerca del suelo o sobre vías de tren. El objetivo era minimizar la altura del puente. Esto también mostraba su forma de pensar: usar los materiales de forma precisa, con un diseño minimalista y con el menor impacto en el paisaje. Por todo esto, estos puentes son un gran ejemplo de su obra.
Él realizó un estudio sistemático de soluciones de tramo recto adintelado de hormigón armado. Algunas eran hiperestáticas. Las organizó en 10 series para que otros ingenieros pudieran usarlas.
Las primeras cuatro series eran soluciones de pórtico de uno o tres vanos. De la V a la X eran dinteles continuos de tres vanos. Las secciones transversales eran de losa o de vigas. Las luces máximas cubiertas eran de 12 metros y de 20 metros, ampliadas después a 30 metros.
Los dinteles eran más anchos en los extremos. Esta forma es una característica de los diseños de Fernández Casado. Le gustaba más que las formas curvas. Esto le daba a sus obras un aspecto limpio, esbelto y sereno.
Varias de estas series fueron aprobadas por el Ministerio. Se construyeron más de 50 estructuras con ellas. La escasez de acero después de la Guerra Civil limitó su uso. Obras importantes de este grupo son el Nuevo Puente de Hierro sobre el río Manzanares en Madrid (1932), el puente de Siles sobre el río Guadalimar (1934), el puente de El Pardo sobre el río Manzanares (1935, demolido), el puente sobre el río Guadalfeo en Salobreña (1944), el puente de San Ardían sobre el río Besós (1944) y el puente sobre el río Palmones en Algeciras (1954).
Puentes Arco
Puente en arco Aunque se le conoce por sus soluciones rectas, Fernández Casado también estudió los puentes en arco. Los usó en al menos 15 puentes y en muchos proyectos que no se construyeron. Su libro Cálculo de Arcos es resultado de sus estudios teóricos.
Para evitar las costosas estructuras temporales (cimbras) usadas en los arcos, exploró la prefabricación. Como la maquinaria no era muy potente, dividía la obra en dos o más partes ligeras.
Usó varias formas:
Puentes Arco de Hormigón en Masa
Después de la guerra, por la escasez de acero, se usaron arcos de hormigón en masa o con poca armadura. Fernández Casado los llamó "arcos anacrónicos". Con esta solución, hizo varias obras. Entre ellas, el puente sobre el río Tajo en Fuentidueña de Tajo (Madrid) (1957, 32 metros de luz máxima). También el puente en Torquemada sobre el río Pisuerga (1952/1960, 40 metros de luz máxima) y el puente en Gibraleón sobre el río Odiel (1956, 34 metros de luz máxima).
Puentes Arco con Tablero Rígido (Acueductos)
Usó la solución de arco delgado y tablero rígido en varios acueductos. Esta forma es muy adecuada por su carga uniforme y constante. La caja de la conducción se usa como dintel rígido. Las primeras obras fueron dos acueductos para el salto de la Retorna, sobre el río Najerilla (1944) y sobre el barranco Brieva (1944). Se construyeron con la técnica de armadura rígida Melán-Ribera. Después, hizo el acueducto del embalse de Cubillas (1954) con arcos prefabricados. También el acueducto del Embalse de Gabriel y Galán sobre el río Alagón (1969) con una solución tipo Maillart.
Puentes Arco Tímpano
Esta solución le gustaba mucho por su forma. Sin embargo, solo la usó en dos obras: el puente sobre el aliviadero del embalse de Cubillas (1954), una de sus obras favoritas, y sobre el río Caudal en Mieres (1969). Para construirlos, usó piezas delgadas prefabricadas. Estas se montaban sobre una estructura central auxiliar. Luego se hacían las paredes y la losa superior.
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Pasarela sobre la ría de Plencia
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Puente en la Chantrea (Pamplona)
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Viaducto sobre el embalse de Barrios de la Luna (León)
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Puente en calle Pío XII, Cartagena
Edificios y Cubiertas
Fernández Casado diseñó muchas estructuras de edificios. La mayoría eran de hormigón armado con entramados de vigas. Para calcularlos, usó el método de Cross, que él mismo había desarrollado. También exploró las losas sobre pilares con capiteles ("losas champiñón"). Las usó en algunos de sus puentes de altura estricta.
La mayoría de estas obras las hizo para la empresa Huarte y Cía. después de la guerra. Por ejemplo, las Residencias Sanitarias de Zaragoza, Barcelona, Gerona y Lérida (1946/1956). También el Ministerio del Aire en Madrid (1948) del arquitecto Luis Gutiérrez Soto.
Con los arquitectos Muñoz Monasterio y Luis Alemany, ganó el concurso para el nuevo estadio de Chamartín del Real Madrid, hoy estadio Santiago Bernabéu. Esto fue en 1947. La solución constructiva era de hormigón armado con elementos novedosos. En 1955, amplió la tribuna este. Esta estructura ligera fue visible hasta la última reforma del estadio en 2005.
Con los arquitectos José Antonio Domínguez Salazar, Ricardo Magdalena y Carlos de Miguel, ganó el concurso para el estadio de San Mamés en Bilbao. Allí diseñó su famosa cubierta. Al principio era de hormigón, pero se cambió a su conocido arco metálico. Esta es una de sus pocas obras con este material. Sigue siendo un elemento distintivo de la ciudad.
Con Huarte y Cía. y con su empresa de proyectos, participó en los primeros edificios altos de España en los años 1960 y 1970. Ejemplos son las Torres Blancas de Francisco Javier Sáenz de Oiza y las Torres Colón de Antonio Lamela.
No hizo muchas cubiertas laminares, que eran muy populares en su época. Probablemente porque sus ideas encajaban mejor con las construcciones rectas o reticulares. Sus únicas obras de este tipo son las cubiertas de láminas cilíndricas de la Escuela de Formación Profesional Obrera de Barcelona (1962) y las naves de HYTASA en Sevilla (1962).
También realizó dos obras con cubiertas colgantes: el pabellón del INI de la Feria de Campo de Madrid (1953) y la cubierta pretensada del picadero del Club de Campo Villa de Madrid (1968).
Puentes de Hormigón Pretensado
Puente de hormigón armado|Hormigón pretensado
Con más de 50 años, Fernández Casado comenzó a estudiar el hormigón pretensado. Esta técnica ya era común en Europa en la segunda mitad del siglo XX, pero llegó tarde a España. Esto se debió al aislamiento del país después de la Guerra Civil.
Fue uno de los principales promotores de esta técnica en España. Sus dos libros sobre Puentes de Hormigón Armado y Pretensado fueron muy importantes en el país y en muchos países de Latinoamérica. Por eso, su figura todavía es recordada allí.
Primeras Obras
Su primer contacto con el pretensado no fue en puentes, sino en cubiertas. Lo usó en las vigas triangulares de las naves de laminación de Ensidesa en Avilés en 1957.
Después, con Huarte y Cía., ganó un concurso para reconstruir puentes en Cuba en 1960. Se hicieron tres, usando vigas prefabricadas con luces de hasta 30 metros.
En España, el primer puente que hizo fue el puente sobre el Río Tinto en Huelva. Era un tablero de tres vanos con vigas pretensadas de 30 metros. Lo construyó la empresa Entrecanales y Távora en 1960.
Otra de sus primeras obras con vigas prefabricadas pretensadas es el pontón de acceso a la Central Térmica de Soto de Ribera en Asturias. Las vigas se construyeron dividiendo en dovelas.
Puentes por Avance en Voladizo
Puente por volados sucesivos La gran contribución de Fernández Casado a la técnica de los puentes construidos por avance en voladizo fue el desarrollo de la construcción con dovelas prefabricadas. Aprovechó su experiencia en proyectos de arcos y naves prefabricadas. Usó una solución novedosa con dovelas ligeras y pequeñas. Esto era lo único posible con la maquinaria de la época. Por eso, los tableros solían ser dobles. Sus primeras aplicaciones coinciden con las primeras obras de este tipo en el mundo, que se hicieron en la URSS. Esta técnica fue muy usada por ingenieros franceses en los años 1960 y 1970.
Su primera obra fue el puente de Almodóvar del Río sobre el Guadalquivir. Tenía una luz de 70 metros. Fue una obra pionera a nivel mundial en este tipo de construcción. Debido a su éxito, la usó en otros cuatro proyectos con sus colaboradores: el puente de Castejón sobre el río Ebro en Navarra (1966/1968) con 101 metros de luz, el viaducto de Iznájar (1965), el puente sobre la dársena del Guadalquivir en Sevilla (1972) y el puente de los Vados sobre el río Genil en Granada. También diseñó el puente sobre el barranco de Priego en el embalse de Iznájar (1970) con la solución de avance en voladizo, pero construido en el lugar.
Pasos Superiores y Puentes Urbanos
Con su empresa de proyectos, realizó muchos puentes de hormigón pretensado en los años 1960 y 1970. Estos resolvían cruces de autopistas o eran puentes urbanos. Usaba secciones de losas más ligeras. Destacan los pasos superiores de la A-6 Autopista del Noroeste, entre Las Rozas de Madrid y Collado Villalba en Madrid, terminados en 1966. Pudo diseñar todos los pasos de la nueva autopista. Esto le permitió sistematizar las soluciones y cuidar mucho los detalles. El resultado fue un conjunto de obras ejemplares y uniformes. Lo forman doce pasos, la mayoría con pórticos sobre células triangulares.
Entre los pasos urbanos, destaca su trabajo en el cinturón urbano de la M-30 en Madrid en los años 70. Su objetivo era resolver los cruces cerca de dos obras históricas: el puente de Toledo y el puente de Segovia. Para no competir con estas obras, las soluciones fueron muy cuidadosas y discretas. Los tableros eran muy delgados y las obras se situaron a una distancia adecuada para no interferir con las construcciones históricas.
Otra obra urbana interesante es el Paso en la calle Mauricio Legendre en Madrid de 1976. Tenía una solución única en el dintel, con un entramado triangular de vigas.
Finalmente, destaca por su singularidad otra obra de hormigón pretensado: el puente sifón del canal de la presa de Bembézar sobre el río Guadalquivir (1968). En su momento, fue el puente continuo más largo de España (245 metros).
En 1998, colaboró en el diseño del Puente de Ventas.
Presas
Aunque estudió y diseñó varias presas bóveda, que son muy complejas, solo construyó la del salto de la Retorna en el río Najerilla antes de fundar su oficina de proyectos.
Con su oficina de proyectos, construyó la presa de Quéntar en el río Genil en Granada, de 140 metros de altura. Participó en concursos para otros proyectos, pero no los ganó. Esta línea de trabajo fue finalmente abandonada.
Rehabilitación de Construcciones Antiguas
Otro de los grandes intereses de Fernández Casado fue el estudio y la conservación del patrimonio histórico. Esto incluía tanto la arquitectura como las obras públicas. En su época, estas últimas no solían considerarse dignas de protección.
En su trabajo en la Jefatura de Puentes del Ministerio de Fomento, dirigió o participó en muchos proyectos de refuerzo o reparación de puentes antiguos. Por ejemplo, el Puente de Piedra de Orense sobre el río Miño (1966) o el puente de Simancas sobre el río Pisuerga (1967). Colaboró activamente en la reparación de 1974 del acueducto de Segovia. En esta reparación, se reforzó esta importante construcción romana con inyecciones y bulones.
Con su oficina de proyectos, colaboró en la reparación y consolidación de otras estructuras. Un ejemplo es el Puente de Piedra de Zaragoza sobre el río Ebro (1980).
Cruz del Valle de los Caídos
La estructura de la Cruz del Valle de los Caídos fue calculada por Carlos Fernández Casado junto con el ingeniero Ignacio Vivanco Bergamín. Fue construida por Huarte y Cía., empresa para la que trabajaban en ese momento.
Extractos de Textos
- Noche del Gallo. <<Ingeniería. Maquinismo y arquitectura>>.
(Sobre la obra del ingeniero)..… sus obras responden a ideas claras y sencillas, al modo cartesiano ha de dar geometría a la función y encauzar esfuerzos que plasman la estructura, materializándola por los procedimientos constructivos más convenientes y empleando los materiales más adecuados en cantidades estrictas. Todo esto equivale a introducir la menor alteración en el orden universal……La obra de ingeniería se proyecta en el paisaje, ostentando las formas más puras y simples……
- Historia del puente en España. Puentes romanos. Instituto Eduardo Torroja 1980.
“…..que nadie construya puentes en España sin haber pasado por Alcántara”