Historia de Sanlúcar de Barrameda para niños
La historia de Sanlúcar de Barrameda es muy larga y llena de acontecimientos. Se cree que esta zona ha estado habitada desde hace muchísimo tiempo, quizás desde la época de la civilización de Tartessos.
Sanlúcar aparece mencionada en textos antiguos de los romanos y en escritos medievales. En 1297, la villa de Sanlúcar fue entregada a Guzmán el Bueno, y desde entonces empezó una época de gran crecimiento de población y de la economía, gracias sobre todo a su puerto.
Por su ubicación estratégica, Sanlúcar fue muy importante en la exploración, llegada y establecimiento de los europeos en América entre los siglos XV y XVII. Sin embargo, la familia de los duques de Medina Sidonia perdió parte de su poder en 1645. Además, España en general pasó por un momento difícil bajo el rey Carlos II. El traslado de la Casa de Contratación a Cádiz en 1711 y el terremoto de Lisboa en 1755 afectaron mucho a Sanlúcar, que perdió gran parte de su importancia. A pesar de esto, los comerciantes que hacían negocios con América siguieron viviendo en la ciudad, construyendo hermosas casas-palacio, como la Casa de Arizón.
En el siglo XIX, la economía de la ciudad cambió y se centró en el cultivo de la vid para hacer vino y en el turismo de verano. En el siglo XX, Sanlúcar vivió los mismos cambios políticos que el resto de España, pero no sufrió grandes daños materiales durante la Guerra Civil Española. En 1973, fue declarada Conjunto Histórico-Artístico. Desde que se recuperó la democracia, varios partidos han gobernado el Ayuntamiento, que ha tenido problemas económicos. Sanlúcar es hoy una de las ciudades españolas con menos ingresos por persona.
Para los historiadores, el Archivo de la Casa de Medina Sidonia es muy importante. Se encuentra en el palacio del mismo nombre y lo gestiona la Fundación Casa Medina Sidonia.
Contenido
Prehistoria y Edad Antigua

Se cree que la ciudad de Sanlúcar de Barrameda está en el lugar donde estuvo el centro de la antigua civilización de Tartessos. Sin embargo, no se han encontrado restos arqueológicos de esa cultura en el municipio. Aun así, sí se han hallado objetos de la Prehistoria y la Antigüedad. Algunos ejemplos son el Dolmen de Hidalgo en El Agostado, el Ídolo cilíndrico del Cortijo de la Fuente, el Tesoro de Ébora (encontrado por casualidad en el Cortijo de Ébora), el Bronce de Bonanza, El Tesorillo (un lugar sagrado dedicado a Astarté), la Factoría romana de La Algaida y El pozo de los Caveros. Estos tres últimos están en el Pinar de La Algaida.
Antiguos geógrafos como Avieno, Estrabón y Pomponio Mela mencionan dos lugares importantes que estaban en la actual Sanlúcar: el Luciferi Fanum y la ciudad de Ebura o Ébora. El primero, "el templo del Lucero", podría ser el Santuario de El Tesorillo. La segunda parece que estuvo en el actual Cortijo de Ébora, que aún conserva parte de su nombre antiguo.
Edad Media
Siglos VIII al XIII
Durante el tiempo en que los musulmanes dominaron la península (conocido como al-Ándalus), la zona de la actual Sanlúcar pertenecía a la región de Sidonia. En los años 807, 812, 844 y 859, hubo ataques de vikingos por el río Guadalquivir, que posiblemente afectaron a los asentamientos que había en la zona.
Existió una fortaleza o rábida para defender la desembocadura del Guadalquivir. Aún se conserva un trozo de su muralla, que en parte se usó para construir el actual palacio de los Duques de Medina Sidonia. Quizás las "Torres de Solúcar" que mencionan las crónicas eran una serie de atalayas o torres de vigilancia repartidas por la costa de Sanlúcar.
Según el historiador Rodrigo Caro, Sanlúcar de Barrameda se llamó Masagued o Massagued durante la época musulmana. Este nombre, que significa "templos", podría recordar al Luciferi Fanum.
Siglos XIII y XIV
Cuando Fernando III tomó Sevilla en 1248, toda la zona de Jerez, incluyendo Sanlúcar, se unió a Castilla. Se llegó a un acuerdo que respetaba la vida y la religión de sus habitantes, que entonces eran llamados mudéjares.
Sin embargo, las condiciones de vida de los mudéjares empeoraron y en 1264 se rebelaron con ayuda de los benimerines del norte de África. La respuesta de Castilla fue rápida. En los meses siguientes, el rey Alfonso X reconquistó las fortalezas y expulsó a toda la población musulmana.
El nombre de Sanlúcar aparece en las Cantigas de Santa María, escritas por este rey, en la canción número 371. El 4 de abril de 1295, el rey Sancho IV prometió el Señorío de Sanlúcar a Guzmán el Bueno por su valiente defensa de Tarifa. Pero el rey murió antes de cumplir su promesa. Fue el rey Fernando IV quien confirmó la donación de la "Villa de Sanlúcar con todos sus habitantes, tierras y pertenencias" el 13 de octubre de 1297. Además de Sanlúcar, el señorío incluía Trebujena, Chipiona y Rota.
Guzmán el Bueno repobló la villa, dando ventajas fiscales a los nuevos habitantes. Construyó un castillo, conocido como el "Alcázar Viejo", y las murallas de Sanlúcar de Barrameda. Fuera de estas murallas crecieron varios barrios. Hoy en día se conservan algunos restos de estas murallas. Cuando Guzmán el Bueno murió, Sanlúcar se había convertido en un señorío rico, sobre todo por las posibilidades del Puerto de Barrameda, que más tarde se llamó Puerto de Bonanza.
En 1303, Rota y Chipiona se separaron del Señorío de Sanlúcar. En 1310, el duque de Bretaña visitó Sanlúcar, lo que abrió una ruta comercial importante entre Sanlúcar y Bretaña. Se cree que alrededor de 1360 se construyó la iglesia mayor parroquial de Nuestra Señora de la O.
Edad Moderna
Siglos XV y XVI

En la segunda mitad del siglo XV, Sanlúcar ya era un centro de comercio muy activo. El Puerto de Bonanza tenía importantes relaciones comerciales con puertos del norte de Europa y Génova. El vino era el principal producto que se exportaba y los textiles eran la principal importación. También era un puerto activo en la exploración y el comercio en el Atlántico. Además, se celebraban dos ferias anuales llamadas las Vendejas.
Entre 1477 y 1478, el II duque de Medina Sidonia mandó construir el Castillo de Santiago. Los Reyes Católicos se alojaron allí cuando visitaron la ciudad en 1477. En 1478, el duque dio el Privilegio de los Bretones, un documento que facilitaba a los comerciantes de Bretaña establecerse en la villa.
En 1497, una flota partió de Sanlúcar para la toma de Melilla, que pasó a formar parte de los dominios de la Casa de Medina Sidonia y de la corona de Castilla. En 1494, Trebujena se convirtió en municipio independiente de Sanlúcar.
Después del Descubrimiento de América en 1492, los reyes establecieron en Sevilla el control exclusivo del comercio con las "islas de Indias". Esto significó que la mayoría de los puertos de la costa andaluza perdieron importancia. Sanlúcar fue la única excepción, ya que logró mantener su libertad de comercio. En Sanlúcar se instaló una oficina de la Casa de Contratación de Sevilla, lo que facilitaba las cosas a los grandes barcos. Las comunidades de comerciantes bretones, flamencos, ingleses e italianos siguieron viviendo en la villa.
Los Pérez de Guzmán, que estaban a cargo de la Capitanía General del Mar Océano y Costas de Andalucía, acumularon importantes títulos nobiliarios. Estos grandes de España se establecieron en Sanlúcar, en el Palacio de los duques de Medina Sidonia. Así, Sanlúcar se convirtió en la capital de los territorios de esta familia noble, siendo un centro político y económico importante.
Sanlúcar siguió siendo un puerto famoso durante todo el Siglo de Oro. De su puerto salieron expediciones marítimas muy importantes, como el tercer viaje de Cristóbal Colón (1498). También fue el punto de partida y llegada de la primera vuelta al mundo, expedición que comenzó Fernando de Magallanes en 1519 y terminó Juan Sebastián Elcano en 1522.
Vienen de Sanlúcar,
rompiendo el agua,
a la Torre del Oro
barcos de plata.
Como era un lugar donde los misioneros que iban al Nuevo Mundo esperaban, y gracias al apoyo de la Casa de Medina Sidonia, muchas órdenes religiosas se establecieron en Sanlúcar. La ciudad llegó a tener muchos conventos y ermitas. En el Convento de las Carmelitas Descalzas se conserva el Manuscrito de Sanlúcar o Códice de Barrameda de San Juan de la Cruz.
En 1571 se construyó un muro para evitar que el agua salada entrara en las Marismas. En 1576 se instaló en la ciudad la segunda imprenta de la actual provincia de Cádiz. Sanlúcar dejó de ser una villa en 1579 al recibir el título de ciudad.
Siglos XVII y XVIII
En 1624, el rey Felipe IV visitó Sanlúcar. En 1645, tras algunos problemas con la corona, Sanlúcar pasó a ser parte directa de la Corona real. Los duques de Medina Sidonia dejaron de ser los señores de Sanlúcar y se fueron a vivir a la Corte, por orden de Felipe IV. La ciudad dejó de ser la sede de la Capitanía General del Mar Océano y Costas de Andalucía.
A lo largo de la segunda mitad del siglo XVII, Sevilla fue perdiendo importancia en el comercio con América en favor de Cádiz. Esto culminó en 1711 con el traslado de la Casa de la Contratación de Sevilla a Cádiz. Por esta razón, el puerto de Sanlúcar perdió gran parte de su valor estratégico y comercial, y muchos comerciantes se mudaron a Cádiz. Sin embargo, se siguieron construyendo hermosas Casas de Cargadores a Indias como la Casa de Arizón. También se construyó un nuevo edificio para el cabildo en la plaza de la Rivera. Del siglo XVIII son también los edificios de la Cárcel, del Pósito y de la plaza o mercado de abastos.
A mediados del siglo XVIII, Sanlúcar tenía unos 14.000 habitantes, 15 conventos, un colegio y un hospital. La única actividad económica importante era la producción de vino, que se exportaba a América. El comercio disminuía por la prohibición de descargar productos de importación en el puerto de Sanlúcar y por el mal estado de las carreteras. El ayuntamiento estaba en bancarrota.
El 1 de noviembre de 1755, la ciudad fue afectada por el terremoto de Lisboa. El temblor no causó daños en Sanlúcar, pero fue seguido por un tsunami que inundó la parte baja de la ciudad, causando la muerte de 10 personas. A pesar de esto, el cabildo decidió organizar una acción de gracias pública porque Sanlúcar salió mucho mejor parada del terremoto que otras poblaciones.
Edad Contemporánea

- Finales del siglo XVIII y principios del siglo XIX
La estancia del pintor Francisco de Goya en la casa de la XIII duquesa de Alba en el verano de 1796, dio como resultado el Álbum A o cuaderno pequeño de Sanlúcar y parte del Álbum B o de Sanlúcar-Madrid. En 1780 se fundó la Sociedad Económica de Amigos del País de Sanlúcar de Barrameda.
A principios del siglo XIX, se creó el jardín botánico de la Paz, se repobló el Pinar de la Algaida y se creó la Provincia Marítima de Sanlúcar de Barrameda, que duró de 1804 a 1808. También se construyeron el matadero municipal y el cementerio de San Antonio Abad.
Desde los años veinte del siglo XIX, Sanlúcar contó con varios barcos de vapor que conectaban Sevilla, Sanlúcar y Cádiz, permitiendo un rápido traslado.
Desde Sevilla a Sanlúcar, |
Con el Decreto de división en provincias de 1833, la ciudad quedó incluida definitivamente en la provincia de Cádiz. La producción del vino manzanilla, que había comenzado a finales del siglo XVIII, fue mejorando. En 1845 se creó la Sociedad de Carreras de caballos de Sanlúcar de Barrameda, que organiza las famosas carreras de caballos en la playa cada verano.
Después de su primera visita en 1848, los duques de Montpensier, Antonio de Orleans y María Luisa Fernanda de Borbón, construyeron en Sanlúcar su residencia de verano: el Palacio de Orleans-Borbón. Con ellos, llegó su pequeña corte de nobles, políticos y artistas, lo que dio a Sanlúcar un ambiente cosmopolita y la convirtió en el centro de veraneo de la alta sociedad sevillana. La ciudad recibió varias visitas reales en esta época.
- Cambios y Restauración
Después de la Revolución de 1868, Sanlúcar se declaró cantón independiente en 1873. El periodo de la Restauración estuvo marcado por problemas en el campo andaluz y la pérdida de las colonias de ultramar. A esta situación económica difícil se sumaba el problema del control de la política local por parte de personas poderosas.
Desde finales del siglo XIX hasta principios del siglo XX, se construyeron varias líneas de tren que unían Sanlúcar con lugares cercanos. Hoy en día, a pesar de la gran población del municipio, no queda ninguna de esas vías de ferrocarril.
En las décadas de 1910, 1920 y 1930, Sanlúcar se consolidó como el destino de veraneo más importante del sur de España. Se construyó la plaza de toros de El Pino y los "hoteles de la playa", lujosas residencias de verano. También se instaló el tranvía de la playa, que recorría el paseo de La Calzada, un símbolo de "la modernidad". En esta época, el pintor Joaquín Turina padre pintó su cuadro de la playa de Sanlúcar y el músico Joaquín Turina hijo compuso varias obras dedicadas a la ciudad. En 1933 se creó el Consejo Regulador de las Denominaciones de Origen Jerez-Xérès-Sherry y Manzanilla-Sanlúcar de Barrameda.
- Segunda República, Guerra Civil y Dictadura

Durante la Segunda República Española, el municipio participó en los acontecimientos que ocurrieron en toda España.
Al estallar la Guerra Civil, Sanlúcar cayó bajo el control de uno de los bandos. En los primeros momentos del conflicto, se controlaron los focos de resistencia. Durante el resto de la guerra, la ciudad no sufrió combates ni destrucciones materiales.
Durante el periodo del gobierno de entonces, la sociedad sanluqueña siguió dividida entre un pequeño grupo de dueños de tierras y bodegas, y una gran cantidad de trabajadores del campo, pescadores y pequeños comerciantes. La ciudad siguió siendo un destino turístico para muchos sevillanos.
En 1943, el alcalde de Sanlúcar, Tomás Barbadillo Delgado, fue elegido para representar a los municipios de la provincia de Cádiz en las Cortes Españolas.
La vida social se concentraba en los casinos de la ciudad: el Círculo Mercantil para la clase más acomodada y el Círculo de Artesanos para el resto de los sanluqueños. El Ateneo Sanluqueño también era un importante centro de reunión. La actividad cultural se limitaba a eventos tradicionales y otros actos que se ajustaban a las normas de la época. Los principales actos religiosos eran la procesión de Nuestra Señora de la Caridad Coronada, patrona de la ciudad, las procesiones de Semana Santa, la Velá de San Antonio, la Velá de la Divina Pastora (antecedente de la actual Feria de la Manzanilla) y la romería de El Rocío. En estos actos se dejaban ver el infante Alfonso y la infanta Beatriz, continuando la tradición de sus padres y abuelos.
- Transición y democracia
En 1973, Sanlúcar fue reconocida como Conjunto histórico-artístico de Sanlúcar de Barrameda. Por estos años, Luisa Isabel Álvarez de Toledo y Maura, XXI duquesa de Medina Sidonia, conocida como la Duquesita, comenzó la restauración de su palacio en Sanlúcar. Reunió allí una gran cantidad de obras de arte y documentos, que son la base de la actual Fundación Casa de Medina Sidonia. La novela Copa de sombra, escrita por José Luis Acquaroni en 1977, muestra aspectos interesantes de la historia reciente de Sanlúcar.
En las primeras elecciones municipales democráticas, fue elegido alcalde José Luis Medina Lapieza, del Partido Comunista. Desde entonces, se han sucedido en la alcaldía varios políticos. Este periodo democrático coincide con la creación del parque nacional y el parque natural de Doñana, parte del cual pertenece a Sanlúcar. La oferta cultural se amplió con la creación del Festival Internacional de Música "A orillas del Guadalquivir". En los años noventa, se restauraron varios edificios históricos de la ciudad.
Sin embargo, en todo el periodo democrático, el ayuntamiento ha tenido problemas económicos. El Conjunto Histórico-Artístico, declarado legalmente desde 1973, no ha sido protegido en su totalidad. A pesar de que la ley exige un Plan Especial de Protección, ninguno de los gobiernos municipales lo ha redactado. Esta situación, junto con el crecimiento de la construcción, ha afectado el patrimonio arquitectónico y urbanístico de Sanlúcar. Ha habido situaciones difíciles relacionadas con la gestión de la ciudad, que tuvieron gran impacto mediático.