Filosofía china para niños

La filosofía china es el conjunto de ideas y pensamientos que se desarrollaron en China a lo largo de miles de años. Su historia es muy antigua, y se cree que comenzó alrededor del siglo XII antes de Cristo con un libro llamado I Ching (El libro de los cambios). Este libro antiguo, que se usaba para adivinar el futuro, introdujo algunos de los conceptos más importantes de la filosofía china. Sin embargo, muchas de estas ideas ya existían de forma oral desde tiempos muy remotos.
La historia de la filosofía china se puede dividir en cuatro grandes etapas. La primera etapa incluye las primeras ideas de la dinastía Shang, que hablaban sobre los ciclos de la naturaleza, y el I Ching. La segunda etapa es la de la filosofía clásica china, famosa por la gran cantidad de escuelas de pensamiento que surgieron. Entre las más importantes estaban el confucianismo, el taoísmo, el moísmo, el legalismo y la Escuela de los Nombres.
La tercera etapa comenzó cuando la dinastía Qin adoptó el legalismo como su filosofía principal y no permitió otras ideas como el confucianismo y el moísmo. Luego, la dinastía Han hizo del confucianismo y el taoísmo las ideas oficiales, y estas siguieron siendo muy importantes hasta el siglo XX. La última etapa, la moderna, se caracteriza por la llegada de ideas de la filosofía occidental a China.
Durante la dinastía Zhou occidental y los años siguientes, hubo un periodo muy creativo conocido como las cien escuelas del pensamiento (del siglo VI a.C. al 221 a.C.). En esta época, surgieron las principales filosofías chinas: el confucianismo, el legalismo y el taoísmo, junto con muchas otras. Estas ideas desarrollaron conceptos sobre el universo, la política y la forma de vivir, como el Tao, el Yin y yang, el Ren (bondad) y el Li (normas de conducta). Estas ideas, junto con el budismo chino, influyeron mucho en la filosofía de Corea, Vietnam y Japón.
El budismo llegó a China durante la dinastía Han (206 a.C.-220 d.C.) a través de la Ruta de la Seda. Con el tiempo, el budismo se adaptó a la cultura china y dio origen a formas propias, como el Zen, que se extendieron por toda Asia Oriental. En dinastías posteriores, como la dinastía Ming (1368-1644), y también en la dinastía coreana de Joseon (1392-1897), el neoconfucianismo se volvió muy importante, impulsado por pensadores como Wang Yangming.
En la era moderna, los pensadores chinos empezaron a incorporar ideas de la filosofía occidental. Filósofos europeos como Gottfried Leibniz ya habían reconocido el valor del pensamiento chino. Más tarde, pensadores chinos como Hu Shih y Xiong Shili también aportaron nuevas ideas.
Contenido
Historia de la filosofía china
Primeras ideas y creencias
Las primeras ideas de la dinastía Shang se basaban en el concepto de lo cíclico. Esto significa que veían la vida como un ciclo que se repite, como el día y la noche, las estaciones o las fases de la luna. Esta idea, que siguió siendo importante en la filosofía china, muestra cómo entendían el orden de la naturaleza. Es diferente de la filosofía occidental, que a menudo ve el tiempo de forma lineal, como una línea recta.
En esa época, se creía que los dioses podían influir en el destino. Se respetaba mucho a los antepasados y se les ofrecían sacrificios.
Cuando la dinastía Shang fue reemplazada por la dinastía Zhou, se introdujo un nuevo sistema llamado el "mandato del cielo". Se decía que los gobernantes perdían este mandato si no actuaban de forma justa, lo que justificaba que otros tomaran el poder.
Período clásico: Las Cien Escuelas

Alrededor del año 500 a.C., cuando el gobierno de la Dinastía Zhou se debilitó, China entró en un periodo de muchos cambios. Fue entonces cuando comenzó el periodo clásico de la filosofía china, que duró hasta el siglo III a.C., cuando Qin Shi Huang unificó el país.
A este tiempo se le conoce como el de las Cien escuelas del pensamiento, porque surgieron muchísimas ideas y filósofos. Las cinco escuelas más importantes fueron el confucianismo, el taoísmo, el mohismo, el legalismo y la Escuela de los Nombres.
En este periodo, muchos reinos luchaban por el control de China. La mayoría de los pensadores chinos eran consejeros de los reyes o viajaban de un reino a otro para ofrecer sus ideas a los gobernantes.
Era imperial: Confucianismo y Taoísmo
Durante la corta dinastía Qin, el legalismo fue la filosofía oficial. Las ideas del mohismo y el confucianismo fueron perseguidas. Sin embargo, cuando llegó la dinastía Han, los emperadores adoptaron el taoísmo y el confucianismo como doctrinas principales. Estas dos filosofías dominaron el pensamiento chino hasta el siglo XX. El budismo también llegó a China durante la dinastía Tang y se integró poco a poco, ya que se parecía al taoísmo en algunos aspectos.
El neoconfucianismo fue un movimiento que revivió los principios confucianos durante la dinastía Song, pero con algunas ideas del budismo, el taoísmo y el legalismo. Se hizo muy popular durante la dinastía Ming.
Una frase popular describe la influencia del taoísmo y el confucianismo: "Los chinos son confucianistas durante el día y taoístas por la noche". Esto significa que seguían las reglas sociales del confucianismo en su vida diaria y laboral, pero buscaban la libertad y la conexión con la naturaleza del taoísmo en su tiempo libre.
Era moderna: Nuevas ideas
En la Edad Moderna y la Edad Contemporánea, la filosofía china empezó a incorporar ideas de la filosofía occidental, buscando modernizarse. A principios del siglo XX, hubo grandes cambios en China, como la Revolución de Xinhai, que eliminaron muchas de las antiguas costumbres imperiales.
En esta época, pensadores como Sun Yat-sen intentaron incluir conceptos como la democracia y la industrialización en la filosofía china. Otros, como Chen Tu-Hsiu, introdujeron ideas como el marxismo. Más tarde, Mao Zedong desarrolló su propia versión de estas ideas, conocida como "Pensamiento Mao Zedong".
Cuando el Partido Comunista de China llegó al poder, algunas escuelas filosóficas antiguas fueron suprimidas durante la Revolución Cultural. Sin embargo, las ideas antiguas todavía influyen en la filosofía china actual. Hoy en día, el gobierno chino busca promover un "socialismo de mercado".
Desde la Revolución Cultural, el gobierno chino ha sido más abierto con las prácticas filosóficas y religiosas tradicionales. La constitución de 1978 garantiza la "libertad de culto", siempre que no afecte la soberanía del país. Se ha permitido que se restablezcan instituciones espirituales y filosóficas, aunque el Estado las supervisa. Las antiguas ideas siguen muy presentes en la cultura china. Al igual que la filosofía japonesa, la filosofía china es una mezcla de ideas: acepta lo nuevo, pero no olvida lo antiguo.
Principales escuelas filosóficas
Las diferentes escuelas de filosofía china tienen sus propias ideas, pero también comparten un vocabulario y preocupaciones comunes.
Confucianismo

El confucianismo (en chino: 儒家, pinyin: rújiā ‘doctrina de Confucio’), también conocido como ruismo (rújiào, ‘doctrina de los eruditos’), es un sistema de pensamiento con aplicaciones rituales y morales, predicadas por los discípulos y seguidores de Confucio tras su muerte.
Las ideas del confucianismo se centran en valores humanos como la armonía familiar y social, el respeto a los padres y mayores (孝, Xiao), ren (仁, «bondad» o «humanidad») y Lǐ (禮 / 礼), que son normas de conducta para vivir en armonía con el orden del universo. El confucianismo cree que estos valores se basan en un principio superior llamado Cielo (天, Tiān) y también incluye la creencia en espíritus o dioses (shén). El confucianismo se puede entender como una ética social y humanista, que se enfoca en los seres humanos y sus relaciones. En el confucianismo se da mucha importancia a las ceremonias y a la cortesía en todos los aspectos de la vida, desde las ceremonias hasta el respeto a los mayores y al Estado (representado por el emperador).
Esta tradición se desarrolló a partir de las enseñanzas de Confucio (Kǒng Fūzǐ, «Maestro Kong», 551-479 a.C.), quien se veía a sí mismo como alguien que transmitía los valores de los sabios antiguos. Otros filósofos confucianos importantes fueron Mencio y Xun Zi, quienes tenían diferentes ideas sobre la naturaleza de los humanos. El confucianismo fue una idea muy importante para el Estado imperial durante la dinastía Han (206 a.C.-220 d.C.) y resurgió como neoconfucianismo durante la dinastía Tang (618-907). En dinastías posteriores, como la dinastía Song (960-1297) y la dinastía Ming (1368-1644), y también en la dinastía Joseon coreana (1392-1897), un renacimiento neoconfuciano liderado por pensadores como Zhu Xi (1130-1200) y Wang Yangming (1472-1529) se convirtió en la forma de pensamiento principal y fue apoyado por el Estado. A partir de la dinastía Song, los escritos confucianos fueron la base de los exámenes para funcionarios y se convirtieron en la filosofía central de los estudiosos. El confucianismo tuvo dificultades en el siglo XX, pero recientemente ha vuelto a resurgir, lo que se conoce como Nuevo Confucianismo.
El confucianismo ha influido mucho en China, Corea, Vietnam, Japón, Taiwán, Hong Kong y Macao, así como en lugares con muchos chinos, como Singapur. Fue la filosofía oficial de China hasta 1912. Los textos principales de la filosofía confuciana son los Cuatro Libros. Su pensamiento se formó durante un largo periodo, desde el siglo VII al III a.C. Cuando China fue unificada por Qin Shi Huang (221 a.C.), ya era una doctrina bien establecida con muchos seguidores. Después de la corta dinastía Qin, sus ideas principales se mantuvieron.
Para los confucianos, el cosmos (el universo) es algo armonioso que regula las estaciones, la vida de los animales, las plantas y los humanos. Si esta armonía se altera, hay problemas graves. Por ejemplo, un mal gobernante que lleva a su pueblo a la ruina con su conducta. Un mal gobierno va en contra del orden natural y viola el Mandato del Cielo. Un gobernante que actúa así pierde su derecho a gobernar y puede ser reemplazado por otro que reciba este mandato.
Neoconfucianismo
El pensamiento confuciano ha cambiado y se ha adaptado a lo largo del tiempo. Uno de los cambios más importantes ocurrió después de que el budismo se volviera muy influyente en China, desde el siglo IV d.C. hasta el siglo XI. En ese momento, varios filósofos ayudaron a transformar el confucianismo para que pudiera competir mejor con el budismo, desarrollando ideas más profundas sobre la realidad y sobre los peligros de los deseos humanos. El término «neoconfucianismo» es moderno y no lo usaban los pensadores de esa época, pero se ha aceptado para referirse al gran renacimiento del pensamiento confuciano que surgió en la dinastía Song y que fue central para la cultura china y gran parte de Asia Oriental durante los siguientes ocho siglos. La mayoría de los principales pensadores confucianos de las dinastías Song, Yuan y Ming son considerados hoy como neoconfucianos. En un sentido más estricto, el término «neoconfuciano» se refiere a un grupo de pensadores del siglo XI, como Zhou Dunyi (1017-1073), Zhang Zai (1020-1077) y los hermanos Cheng Hao (1032-1085) y Cheng Yi (1033-1107). Casi todos los pensadores confucianos más importantes del periodo Song-Ming fueron neoconfucianos; buscaban restablecer el confucianismo y veían el estudio del Camino moral (en chino: 道學, Daoxue) como el objetivo principal de una buena educación.
Taoísmo

El taoísmo es el nombre de:
- Una escuela de filosofía basada en los libros Dào Dé Jing y Libro de Zhuangzi. Esto se conoce como Taoísmo Filosófico (en chino Dàojia).
- Un conjunto de movimientos religiosos chinos, como las sectas Zhengyi o Quanzhen. Esto es el taoísmo religioso (en chino Dàojiào).

La palabra "Tao" (o "Dao") significa literalmente "Camino" o "Manera". Pero en la filosofía y religión china, tiene significados más profundos.
El taoísmo filosófico surgió en el siglo VI a.C. gracias a las enseñanzas de Lao-Tsé (que significa Anciano Maestro). Él vivió en un tiempo de muchas guerras en la Antigua China. Lao-Tsé escribió un libro donde comparaba el comportamiento conflictivo de los humanos con la armonía de la naturaleza. Mostraba cómo los ciclos naturales, los elementos y los animales vivían en perfecto equilibrio, y pensaba que los humanos debían seguir ese ejemplo.
En su libro Tao Te King, Lao-Tsé decía que la ambición y el deseo de poder eran las causas de los problemas en la sociedad. Criticaba a los gobernantes que imponían leyes estrictas, cobraban muchos impuestos y causaban guerras para dominar a otros reinos.
Lao-Tsé no estaba de acuerdo con la lealtad ciega a un gobernante o a una nación, porque creía que eso llevaba a más guerras y sufrimiento. Él había trabajado como archivista para la dinastía Zhou, pero criticaba incluso a esa dinastía.

Siguiendo el ejemplo de la naturaleza, Lao-Tsé propuso el Tao como la idea máxima de plenitud y totalidad universal. Explicaba que en la naturaleza, las diferentes partes interactúan para beneficiarse mutuamente, lo que permite que todo se desarrolle. Por eso, el ser humano debería adoptar un nuevo orden social donde la interacción mutua busque el bienestar de todos, en lugar de un sistema donde unos pocos se benefician a costa del sufrimiento de la mayoría. Así, el taoísmo propone un orden espontáneo de la naturaleza como modelo de conducta para la humanidad.
El símbolo del Yin y Yang fue creado por el taoísmo. Representa dos fuerzas opuestas que están en constante interacción, lo que lleva al cambio continuo. Estas fuerzas no son absolutamente opuestas, sino que se complementan y pueden transformarse una en la otra. El taoísmo anima a las personas a analizar cada situación para encontrar el "camino" correcto según las circunstancias.
Muchas disciplinas como la alquimia, la astrología, la cocina, varias artes marciales, la medicina tradicional, el Feng Shui y el Qi-Gong tienen relación con el taoísmo, ya que sus ideas principales se originaron en los postulados taoístas.
Legalismo
El legalismo o legismo (chino 法家; pinyin fǎjiā, escuela de 'métodos' o estándares') fue una escuela filosófica china que se enfocaba en la filosofía política, las leyes y la gestión del gobierno. En lugar de centrarse en la moralidad o en cómo debería ser una sociedad ideal, los legalistas se enfocaban en gobernar de manera práctica a través del poder del gobernante y del estado. Su objetivo principal era lograr el orden social, la seguridad y la estabilidad. Siglos después, las ideas del legalismo influyeron en el régimen de Mao Zedong.
Una figura importante de esta escuela fue el administrador y filósofo político Shen Buhai (c. 400-337 a.C.). Otra figura central, Shang Yang (390-338 a.C.), fue un reformador destacado que transformó el estado Qin en la potencia dominante que conquistó el resto de China en 221 a.C. El sucesor de Shen, Han Fei (c. 280-233 a.C.), unió las ideas de otros legalistas en su texto, el Han Feizi. Este fue uno de los textos legalistas más influyentes y fue usado por futuros gobernantes chinos como guía para el gobierno y la organización del estado imperial.
Sus teorías representaban los intereses de los terratenientes. Tenían una visión práctica del mundo, expresada en la frase El hombre vence al cielo (tian), lo que se oponía claramente al confucianismo. También defendían el Gobierno mediante las leyes, que se oponía al Gobierno mediante los ritos de los confucianos.
Una idea clave del legalismo era «cuando la época cambia, las maneras cambian». Su principio fundamental era la jurisprudencia (el estudio de las leyes). En este contexto, legismo significa «filosofía política que defiende el gobierno de la ley».
Moísmo
El moísmo o mohismo (chino: 墨家; pinyin: Mòjiā; literalmente: 'Escuela de Mo') fue una escuela filosófica china fundada a finales del siglo V a.C. por Mozi y sus estudiantes. Ellos defendían una sociedad igualitaria que promovía el bienestar de todos y el amor mutuo entre las personas.
Fue una escuela de pensamiento importante y rival del confucianismo y el taoísmo durante los periodos de las Primaveras y Otoños y de los Reinos Combatientes (770-221 a.C.). Sus críticos la consideraban una forma de confucianismo diferente, que, además de promover el amor universal y la paz, también organizaba grupos para la defensa, rechazaba algunos ritos antiguos y se dedicaba por completo al bien común.
El texto principal de esta escuela es el libro Mozi. Las ideas administrativas del moísmo fueron luego incorporadas por el legalismo, su ética fue absorbida por el confucianismo y sus libros también se unieron al canon taoísta. El moísmo casi desapareció como escuela independiente después de la era de la dinastía Qin.
El moísmo es conocido por la idea de «amor imparcial» (chino: 兼愛; pinyin: jiān ài; lit. amor inclusivo). Según el maestro Mozi, las personas deberían preocuparse por igual por todas las demás, sin importar su relación con ellas. Mozi también defendía un gobierno justo basado en el talento, no en el parentesco. Mozi estaba en contra de los rituales confucianos y, en cambio, enfatizaba la importancia de la agricultura, la defensa y el buen gobierno para la supervivencia.
En el moísmo, la moral no se define por la tradición, sino por una guía moral constante similar al utilitarismo (buscar el mayor bien para el mayor número). Para el moísmo, la tradición puede ser inconsistente, y los seres humanos necesitan una guía externa para saber qué tradiciones son aceptables. La guía moral debe promover comportamientos sociales que maximicen el beneficio general.
Al igual que el taoísmo, el moísmo criticaba al legalismo por su idea de sumisión total al poder imperial. También criticaba al confucianismo por creer que la educación académica era la única forma de conocimiento y que solo los letrados tenían derecho a gobernar a los demás. Aunque fue una escuela importante en la China antigua, el moísmo no sobrevivió a lo largo de los milenios y no se volvió tan grande como el taoísmo ni tan popular como el confucianismo.
El moísmo también se relacionó e influyó en una escuela filosófica diferente conocida como la Escuela de los Nombres (Míngjiā, también llamada "Lógicos"), que se centraba en el lenguaje, las definiciones y la lógica.
Budismo
El budismo es una filosofía práctica, una forma de vida y, para muchos, una psicología basada en las enseñanzas de Buda Gautama, quien vivió en la India. Cuando se usa en sentido general, Buda es alguien que descubre la verdadera naturaleza de la realidad después de años de desarrollo personal, estudio y meditación. Para Buda, cualquiera puede seguir su ejemplo, entender sus palabras ("dharma") y ponerlas en práctica, lo que lleva a una vida buena y a la purificación de la mente.
Buda no es un dios, ni un salvador, ni un profeta. Buddha es un título en los antiguos idiomas pali y sánscrito, que significa "el que ha despertado". En el budismo, el término no solo se refiere al personaje histórico, sino también a cualquier otra persona que haya logrado el mismo descubrimiento personal que él. Los seguidores no ven las enseñanzas como revelaciones divinas ni como dogmas de fe, sino como ideas para investigar e interpretar. Se cree que se comprenden mejor a través de la práctica y la experiencia.
El único propósito de estas enseñanzas es eliminar por completo el sentimiento de insatisfacción o frustración. Según el budismo, la causa real de la insatisfacción es el deseo excesivo o el apego, que a su vez provienen de la ilusión y la ignorancia (entender mal la verdadera naturaleza de la existencia). Por eso, el fin de esta situación se llama el despertar. Para lograrlo, el budismo ofrece prácticas de entrenamiento mental y emocional, disciplina ética y estudio.
El budismo es la cuarta religión organizada del mundo por el número de sus seguidores, la mayoría en Asia, con unos 380 millones (o unos 700 millones si se incluye la religión tradicional china). Las tendencias del budismo actual se clasifican en dos grandes grupos: el Budismo del Sur (o Theravāda) y el Budismo del Este (o Mahāyāna). Una tercera corriente, llamada Budismo del Norte o Tántrico (Vajrayāna), que incluye prácticas del tantrismo hindú, se considera filosóficamente parte del Mahāyāna.
Maoísmo
El maoísmo o pensamiento Mao Zedong (en chino simplificado, 毛泽东思想; en chino tradicional, 毛澤東思想; pinyin, Máo Zédōng Sīxiǎng) es una corriente de pensamiento desarrollada por el líder Mao Zedong en el contexto de la revolución china.
En la República Popular China es una doctrina oficial del Partido Comunista de China. Sin embargo, después de las reformas iniciadas por Deng Xiaoping en 1978, que llevaron a una economía de mercado, la política aplicada en el país ha sido el socialismo con características chinas. La definición oficial y el papel del Pensamiento de Mao Zedong en China han cambiado mucho, aunque su imagen todavía está presente en la Plaza de Tiananmen de Pekín.
El término maoísmo nunca ha sido usado oficialmente por el Partido Comunista de China, excepto como una palabra derivada. El término preferido siempre ha sido Pensamiento Mao Zedong. De la misma forma, algunos grupos fuera de China a veces se llaman a sí mismos marxistas-leninistas, lo que refleja su idea de que Mao no cambió las ideas de Lenin, sino que las desarrolló y adaptó a la Revolución China.
Sin embargo, otros grupos consideran que Mao hizo contribuciones importantes que significaron un gran avance en el pensamiento, por lo que se llaman a sí mismos marxistas-leninistas-maoístas o simplemente maoístas. Por ejemplo, el Partido Comunista de Nepal (Maoísta) se diferencia de otras organizaciones con este adjetivo. Hay grupos maoístas que creen que hoy en día es imposible entender las ideas de Karl Marx y Lenin sin estudiar las contribuciones de Mao y la experiencia de la Revolución China en cuanto a la continuación de la lucha de clases en la construcción de una sociedad socialista.
Fuera de China, el término maoísta se usó desde la década de 1960 para describir a los grupos y personas que apoyaban a Mao Zedong y su forma de pensamiento, en contraste con la forma aplicada en la URSS (considerados, después de la muerte de Iósif Stalin, revisionistas por los maoístas).
Conceptos clave de la filosofía china
Aunque las escuelas filosóficas chinas tienen diferencias, comparten un vocabulario y temas comunes.
Algunos términos que se encuentran a menudo en la filosofía china son:
- Tao (El camino, o su enseñanza)
- De (virtud, energía)
- Li (principio, orden)
- Qi (Energía o fuerza vital de la materia)
- Taiji (Gran eje divino): forma una unidad de la que surgen dos conceptos, el Yin y el Yang.
- El nombre (míng 名) y lo que las cosas son en realidad (shí 實).
Las grandes preguntas de la filosofía china son:
- La relación entre el principio (la idea) y la materia.
- Cómo descubrir la verdad.
- La naturaleza de los seres humanos.
Las ideas en común de las diferentes filosofías chinas son:
- Optimismo epistemológico: Creen que las grandes preguntas tienen respuesta, aunque no se conozcan aún.
- La tendencia a ver al ser humano como parte de la naturaleza.
- La tendencia a no hablar de una fuerza superior unificada y con forma de persona. Las preguntas sobre la existencia de un dios, que son muy importantes en la filosofía occidental, casi no tienen importancia en la filosofía china.
- La creencia de que el propósito de la filosofía es ser una guía práctica y moral.
- Se ocupan mucho de temas relacionados con el gobierno y la sociedad.
Comparación de la filosofía china con la occidental
La filosofía occidental y la china tienen ideas diferentes, pero muchas de ellas se parecen o buscan el mismo objetivo. Sin embargo, hay grandes diferencias, sobre todo en la idea oriental de que el origen de la naturaleza es una energía inmaterial y abstracta, pero natural, el Chi. Este concepto es casi desconocido en la filosofía occidental, salvo por algunas ideas antiguas que hablaban de algo similar llamado Pneuma.
En general, en Occidente, las preguntas sobre el origen de la naturaleza se debaten entre ideas muy opuestas, como la creencia en un dios (Teísmo) o la no creencia (Ateísmo). En China, la filosofía lo ve de otra manera: considera que la naturaleza y lo que existe, aunque al principio no tuviera forma material y se manifestara de forma etérea, es perfectamente natural porque es simplemente Energía (Chi). Por eso, la filosofía china no asocia lo etéreo con lo espiritual ni con creencias en dioses. La visión china de la naturaleza es que incluso lo abstracto y etéreo, como el Chi, es natural y no depende de ninguna jerarquía divina.
Tanto la filosofía china como la europea han influido mucho en la forma de pensar de sus sociedades.
La filosofía occidental a menudo debate entre ideas opuestas como la ambición y la modestia, el individualismo y el colectivismo, lo espiritual y lo material, el sujeto y el objeto. Siempre busca determinar cuál es el "correcto" o el "incorrecto", el "verdadero" o el "falso", cuál prevalece y cuál desaparece. En cambio, la filosofía china tiende a ver los opuestos como elementos complementarios que no son absolutos. Ambos forman parte de un todo y se relacionan entre sí, afectándose mutuamente. Por eso, ninguno es absoluto, y sus interacciones generan cambios que reestructuran las ideas. La filosofía china busca entender cómo funciona realmente la naturaleza para determinar qué ideas son correctas y en qué situaciones, no desde la confrontación de absolutos, sino desde la forma en que ambos forman parte de un Todo. A este funcionamiento verdadero del "Orden Natural", los orientales lo llaman Armonía, y la búsqueda de la armonía es el objetivo de la mayoría de las corrientes filosóficas orientales. Conocer esa verdadera naturaleza se entiende como sabiduría, y es el camino para lograr un desarrollo correcto del conocimiento.
Sin embargo, la forma de entender estas ideas y los objetivos varían según las diferentes escuelas de pensamiento, tanto en Europa como en China. Por ejemplo, el Confucianismo valora la lealtad a la familia y el respeto a los antepasados, y entiende la "sabiduría" como la educación académica y cultural. El Taoísmo, en cambio, rechaza estas ideas, diciendo que la lealtad y el respeto a la familia pueden limitar la libertad de pensamiento. Para el Taoísmo, la "sabiduría" se basa en no apegarse a ideas preconcebidas, ni siquiera a la educación formal o a las creencias ciegas. El conocimiento debe alcanzarse a través de la libertad y el cuestionamiento personal. Por eso, los taoístas consideran "sabio" a quien aprende mediante la observación propia e imparcial, y no a quienes estudian doctrinas parciales o aceptan creencias ciegamente por sumisión a la autoridad.
En muchos puntos, las filosofías occidental y china son muy diferentes. Por ejemplo, el realismo occidental enfatiza el Estado de Derecho, mientras que el Confucianismo promovía una sociedad gobernada por la ética. Mientras que la Ilustración occidental buscaba la libertad y la democracia, el legalismo chino exigía una lealtad total al poder imperial. Mientras que la competencia es clave en el capitalismo, la cooperación se considera esencial para la armonía en Oriente. La principal diferencia entre ambas filosofías radica en las ideas iniciales de sus pensadores. Los filósofos orientales suelen partir de conceptos abstractos y cosmológicos como base de la vida, como el Chi. En cambio, los filósofos occidentales suelen partir de ideas más específicas y relacionadas con su contexto histórico, como la materia para Marx o la vida para Nietzsche, enfocándose en un punto de vista menos global y atemporal.
En otros casos, las filosofías de China y Europa tienen similitudes interesantes, llegando a las mismas conclusiones por caminos diferentes. Por ejemplo, el concepto taoísta del Yin y Yang describe una mecánica donde la existencia se basa en elementos opuestos que se complementan y se suceden. El aumento de uno no es absoluto, y acabará por disminuir para dar paso a su contraparte. Este ciclo se repite indefinidamente, una idea similar al concepto de la Dialéctica desarrollada por Hegel en Occidente.
Otro ejemplo son las rivalidades entre las filosofías de cada continente. Las ideas del Legismo suelen ser muy a favor de la monarquía y el estado, y coinciden con el Confucianismo en la idea de una sociedad con diferentes clases. Esto tiene semejanzas con pensadores occidentales como Maquiavelo, e incluso con algunos partidarios del liberalismo, ya que en la estructura social, pensadores como Thomas Malthus y Adam Smith coinciden con Confucio y Mencio en la idea de mantener el poder de las clases altas sobre las bajas, a las que consideran incapaces de gobernarse solas. Esto contrasta con ideas como las de Karl Marx y Mijaíl Bakunin, que coinciden con Lao-Tsé y Chuang-Tsé en la postura de que el pueblo debe organizarse y autogestionarse para establecer un orden social sin gobernantes con privilegios.
Así, el concepto de Armonía de los filósofos orientales impulsa la idea de que solo se logra si existe el Equilibrio. Para los taoístas, el equilibrio entre Yin y Yang es fundamental. Por eso, una sociedad equilibrada no tiene clases sociales donde una oprime a la otra. Lao-Tsé y Chuang-Tsé plantean que una sociedad jerarquizada es un desequilibrio, ya que el gobernante consume en exceso a costa de la explotación del pueblo. En este punto, se parecen a pensadores occidentales como Karl Marx y Pierre-Joseph Proudhon, al sostener que la igualdad solo se logrará aboliendo el poder jerárquico y creando un nuevo orden social sin clases.
También hay similitudes en temas religiosos. Las creencias de los sectores filosóficos más conservadores de ambos continentes suelen promover la creencia en un dios y el respeto a las autoridades religiosas, como sucede en el Legalismo, el Confucianismo, el Monarquismo y el Capitalismo. Sus opositores, en cambio, proponen ideas donde critican el poder religioso por considerarlo un engaño y defensor de las clases dominantes, y no creen en la existencia o intervención de divinidades, inclinándose hacia pensamientos que no creen en dioses, como sucede en el Taoísmo, el Budismo, el Marxismo y el Anarquismo.
A pesar de sus muchas diferencias en los conceptos sobre la realidad, la filosofía europea y china desarrollaron similitudes en sus rivalidades y en su impacto político y social. Ambas filosofías exploraron profundamente y usaron argumentos similares en esas áreas. Por ejemplo, en China, hubo filósofos, como los de la escuela de la lógica, que hicieron de la razón científica su principal forma de pensar. En Occidente, filósofos como Marco Aurelio vieron la meditación como el camino hacia la sabiduría. Es precisamente en lo que las hace tan diferentes donde las escuelas filosóficas occidental y china suelen parecerse, según las ideas que hayan surgido y quienes las hayan promovido.
Es importante mencionar que las filosofías más radicales de ambos continentes han sido vistas como algo negativo por las sociedades establecidas y han sido perseguidas, tanto los taoístas y budistas, como los marxistas y anarquistas.
Además, algunos líderes han usado estas filosofías de forma incorrecta para crear cultos a la personalidad o para imponer ideas absolutas a la gente, contradiciendo los principios originales de libertad y cuestionamiento que proponían. Esto se puede ver en cómo algunos líderes han fomentado el culto a figuras como Buda y Lao-Tsé, considerándolos deidades, cuando en realidad estos filósofos promovían la independencia del pensamiento y la búsqueda del conocimiento personal, dudando y cuestionando, en lugar de aceptar dogmas religiosos.
Véase también
En inglés: Chinese philosophy Facts for Kids
- Cultura de China
- Historia de China
- Interpretaciones de la Historia de China
- Buda Gautama
- Budismo
- Confucio
- Confucianismo
- Lao-Tsé
- Taoísmo
- Principio de Wu Xing
- Anexo:Cronología de los filósofos orientales