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Antonín Dvořák para niños

Enciclopedia para niños
Datos para niños
Antonín Dvořák
Dvorak.jpg
Retrato de Antonín Dvořák en 1882.
Información personal
Nombre de nacimiento Antonín Leopold Dvořák
Nacimiento 8 de septiembre de 1841
Nelahozeves (Imperio austríaco)
Fallecimiento 1 de mayo de 1904
Praga (Imperio austrohúngaro)
Causa de muerte Accidente cerebrovascular
Sepultura Cementerio de Vyšehrad
Familia
Padres František Dvořák
Anna Dvořáková
Cónyuge Anna Čermáková
Hijos 9
Educación
Educación profesor de música
Educado en Escuela de Órgano de Praga
Información profesional
Ocupación Compositor de música clásica, organista, catedrático, pedagogo, director de orquesta, musicólogo, violinista, violista, compositor, profesor y pianista
Área Artes escénicas
Cargos ocupados Member of the House of Lords (Austria) (desde 1901)
Empleador
  • Teatro Provisional
  • Iglesia de San Adalberto
  • National Conservatory of Music of America
  • Conservatorio de Praga
Estudiantes Vítězslav Novák, Oskar Nedbal, Josef Suk, Rudolf Friml, Franz Lehár y Will Marion Cook
Movimiento Romanticismo
Género Música clásica y ópera
Instrumentos Órgano, piano, violín y viola
Obras notables
  • Sinfonía n.º 1
  • Sinfonía n.º 9
  • Stabat Mater
  • Santa Ludmila
  • Réquiem
  • Te Deum
  • El campesino astuto
  • El jacobino
  • El diablo y Catalina
  • Rusalka
  • Concierto para violonchelo
  • Danzas eslavas
Miembro de Academia de las Artes y de las Ciencias de Serbia
Distinciones
  • Orden de la Corona de Hierro
  • Orden de la Corona de Hierro (Austria)
Firma Antonin dvorak signature.svg

Antonín Leopold Dvořák (pronunciación en checo: /ˈantoɲiːn ˈlɛopolt ˈdvor̝aːk/ Nelahozeves, 8 de septiembre de 1841-Praga, 1 de mayo de 1904) fue un compositor posromántico natural de Bohemia —territorio entonces perteneciente al Imperio austríaco—, uno de los primeros compositores checos en lograr el reconocimiento mundial y uno de los grandes compositores de la segunda mitad del siglo XIX. Empleó con frecuencia ritmos y otros aspectos de la música folclórica de Moravia y su Bohemia natal, siguiendo el ejemplo de su predecesor, el nacionalista de la era romántica Bedřich Smetana. Se ha descrito al estilo de Dvořák como «la recreación más completa de un idioma nacional con el de la tradición sinfónica, absorbiendo influencias populares y encontrando formas efectivas de usarlas».

Dvořák mostró sus dotes musicales a una edad temprana, siendo un buen estudiante de violín desde los seis años. Las primeras representaciones públicas de sus obras fueron en Praga en 1872 y, con especial éxito, en 1873, cuando tenía 31 años. Buscando reconocimiento más allá del área de Praga, presentó una partitura de su Primera Sinfonía a un concurso de premios en Alemania, pero no ganó, y el manuscrito no devuelto se perdió hasta que fue redescubierto muchas décadas después. En 1874 hizo una presentación al Premio Estatal de Composición de Austria, incluyendo partituras de dos sinfonías más y otras obras. Aunque no lo sabía, Johannes Brahms fue el miembro principal del jurado y quedó muy impresionado. Le otorgaron el premio en 1874 y nuevamente en 1876 y en 1877, cuando Brahms y el destacado crítico Eduard Hanslick, también miembro del jurado, se presentaron a él. Brahms recomendó a Dvořák a su editor, Fritz Simrock, quien poco después encargó lo que se convirtió en Danzas eslavas, op. 46. Fueron muy elogiadas por el crítico musical de Berlín Louis Ehlert en 1878, la partitura (de la versión original para piano a cuatro manos) tuvo excelentes ventas y lanzó su reputación internacional.

La primera pieza de carácter religioso de Dvořák, su arreglo de Stabat Mater, se estrenó en Praga en 1880. Fue interpretado con gran éxito en Londres en 1883, lo que dio lugar a muchas otras representaciones en el Reino Unido y Estados Unidos. En su carrera, realizó al menos nueve visitas como invitado a Inglaterra, a menudo dirigiendo representaciones de sus propias obras. Su Séptima Sinfonía la escribió para Londres. Al visitar Rusia en marzo de 1890, dirigió conciertos de su propia música en Moscú y San Petersburgo. En 1891 lo nombraron profesor en el Conservatorio de Praga. Entre 1890 y 1891, escribió su Trío Dumky, una de sus piezas de música de cámara de mayor éxito.

En 1892, se mudó a Estados Unidos y se convirtió en el director del Conservatorio Nacional de Música de América en Nueva York. La presidenta del Conservatorio Nacional, Jeannette Thurber, le ofreció un salario anual de 15 000 dólares, veinticinco veces lo que le pagaban en el Conservatorio de Praga. Mientras estuvo en Estados Unidos, escribió sus dos obras orquestales más exitosas: la Sinfonía del Nuevo Mundo, que difundió su reputación en todo el mundo, y su Concierto para violonchelo, uno de los más respetados de todos los conciertos para violonchelo. En el verano de 1893, se mudó de Nueva York a Spillville (Iowa), siguiendo el consejo de su secretario, Josef Jan Kovařík. Dvořák había planeado originalmente regresar a Bohemia, pero Spillville estaba compuesto en su mayoría por inmigrantes checos, por lo que sintió menos nostalgia; se refirió a ella como su «Vysoká de verano». Allí fue donde escribió su pieza de música de cámara más famosa, su Cuarteto de cuerda en fa mayor, op. 96, que más tarde fue apodado como Cuarteto Americano. Poco después de su estancia en Iowa, extendió su contrato con el Conservatorio Nacional por otros dos años. Sin embargo, la crisis económica de abril de 1893 provocó la pérdida de ingresos del marido de Thurber e influyó directamente en la financiación del Conservatorio Nacional. El déficit en el pago de su salario, junto con el creciente reconocimiento en Europa y un principio de nostalgia, lo llevaron a dejar Estados Unidos y regresar a Bohemia en 1895.

Todas sus nueve óperas, excepto la primera, tienen libretos en checo y estaban destinadas a transmitir el espíritu nacional checo, al igual que algunas de sus obras corales. La más exitosa de las óperas es Rusalka. Entre sus obras más pequeñas, la séptima Humoresca y la canción «Canciones que me enseñó mi madre» también son ampliamente interpretadas y grabadas. Ha sido descrito como «posiblemente el compositor más versátil de su tiempo».

El Festival Internacional de Música de Dvořák de Praga es una importante serie de conciertos que se celebran anualmente para homenajear la vida y la obra del compositor.

Biografía

Archivo:Nelahozeves, Dvořákův dům - celek
Casa natal de Antonín Dvořák en Nelahozeves.

Antonín Dvořák nació en un pequeño pueblo llamado Nelahozeves, en Bohemia, que hoy es parte de la República Checa, el 8 de septiembre de 1841. Su padre trabajaba en un hotel y también tocaba la cítara y trabajaba como carnicero. Su madre era la hija de un bailío. Dvořák era el mayor de catorce hermanos y recibió una educación religiosa y musical en su pueblo. Aprendió a tocar el violín y mostró un gran talento desde joven. A los 13 años, fue enviado a vivir con su tío para aprender alemán. A esa edad, compuso su primera pieza musical, una polka llamada "Polka Pomnenka".

Archivo:Antonín Dvořák chlapec
Antonín Dvořák de niño.

Antonín Dvořák aprendió música desde joven, recibiendo clases de piano, órgano y violín de su profesor Antonín Liehmann, quien también le enseñó teoría musical y lo introdujo a compositores de la época. Aunque Liehmann era estricto, Dvořák lo respetaba mucho. Después, continuó sus estudios de órgano y teoría con Franz Hanke en otra ciudad. A los 16 años, decidió convertirse en músico a pesar de la resistencia inicial de su padre.

Estudió en la Escuela de Órgano en Praga, donde aprendió canto, teoría y órgano. También tocó el violín en diferentes bandas y orquestas. Después de graduarse, tocó en la orquesta de Karel Komzák y luego en la Orquesta del Teatro Provisional de Bohemia. Componía música mientras trabajaba como músico. Durante este tiempo, compartió un apartamento con otros músicos.

En 1873, Dvořák se casó con Anna Čermáková y tuvieron nueve hijos juntos. Uno de sus hijos, Otýlie, se casó con el compositor Josef Suk, quien también fue su alumno. Dvořák continuó componiendo música durante su vida, y sus composiciones se volvieron muy conocidas y apreciadas en todo el mundo.

En sus primeros años, Antonín Dvořák compuso varias obras musicales. Numeró su Quinteto de cuerda en la menor y su Primer cuarteto de cuerda como op. 1 y op. 2, aunque en realidad hubo composiciones anteriores sin números de opus. También intentó componer sinfonías en la década de 1860, pero algunas las destruyó. Una de sus sinfonías tempranas en do menor, conocida como Primera sinfonía, se conserva y es considerada su Sinfonía n.º 1.

Hasta 1870, muchas de sus composiciones no se estrenaron públicamente o se estrenaron mucho después. Por ejemplo, su Tercer cuarteto de cuerda fue compuesto alrededor de 1869, pero se estrenó en 1969. En 1870, Dvořák compuso su primera ópera llamada Alfred. Durante este tiempo, comenzó a recibir más atención en la prensa musical.

En 1871, dejó la orquesta del Teatro Provisional para tener más tiempo para componer. A partir de este momento, comenzó a numerar sus obras con números de opus. Su primera composición interpretada públicamente fue la canción Vzpomínání en 1871. Compuso la ópera El rey y el carbonero, pero tuvo problemas con su representación y reajustó su libreto en una nueva versión llamada El rey y el carbonero II, que se estrenó en 1874.

Dvořák experimentó con varios géneros y estilos musicales en sus primeros años, y sus obras comenzaron a recibir más reconocimiento con el tiempo.

Archivo:Josefina a Anna Cermakovy
Josefína Čermáková (de pie) y Anna Čermáková (sentada), cuñada y esposa de Antonín Dvořák.

Después de dejar la Orquesta Nacional del Teatro, Dvořák se convirtió en organista en una iglesia en Praga. A pesar de ganar poco dinero, pudo componer muchas piezas musicales en ese momento. Algunas de sus obras comenzaron a ser interpretadas en conciertos, como su Quinteto para piano y su cantata patriótica checa llamada "Los herederos de la montaña blanca".

En 1872, su Quinteto para piano fue tocado en público por primera vez. En 1873, su cantata recibió una cálida respuesta de la audiencia y los críticos, lo que le dio reconocimiento en Praga. Sin embargo, fuera de esa ciudad, seguía siendo desconocido.

En 1874, Dvořák ganó un premio de composición y finalmente recibió algo de apoyo financiero. En ese mismo año, presentó varias obras al concurso, incluyendo dos sinfonías. Aunque Brahms estaba impresionado por su talento, no ganó el premio. En los años siguientes, Dvořák continuó componiendo y ganó el premio en 1876. Esto le permitió dejar su trabajo como organista y dedicarse por completo a la composición. Durante este período, creó varias obras importantes como su Quinteto de cuerdas n.º 2 y su Quinta Sinfonía.

Johannes Brahms recomendó a Dvořák a su editor, Fritz Simrock. Dvořák presentó sus obras al concurso del Premio Austriaco en 1877 y ganó nuevamente. Recibió una carta de Eduard Hanslick y Brahms ofreciendo ayudarle a promover su música fuera de Chequia. En ese año, Dvořák compuso su Cuarteto de cuerda n.º 9 dedicado a Brahms y sus Duetos moravos, que Brahms recomendó a Simrock. Luego, escribió las Danzas eslavas, que tuvieron un gran éxito, incluso en otros países.

En 1879, Dvořák compuso su Sexteto de cuerdas, estrenado por el violinista Joseph Joachim. También escribió su Concierto para violín, dedicado a Joachim, aunque fue estrenado por otro violinista. Hans Richter le pidió que compusiera su Sinfonía n.º 6 para la Orquesta Filarmónica de Viena, pero debido a la resistencia en interpretar obras checas dos años seguidos, no fue estrenada en Viena. Su estreno ocurrió en Praga en 1881.

Archivo:Antonín Dvořák with his wife Anna in London, 1886
Dvořák con su esposa Anna en Londres en 1886.

Dvořák viajó varias veces a Inglaterra entre 1884 y 1886, donde dirigió sus propias obras musicales. Ya era conocido en Londres por sus piezas como las Danzas eslavas y Rapsodias eslavas, que habían tenido buenas críticas. En 1883, su Stabat Mater fue interpretado con éxito en el Royal Albert Hall de Londres. Dvořák se convirtió en un héroe musical en Inglaterra y fue honrado por la Royal Philharmonic Society.

En 1884, durante su primer viaje a Inglaterra, dirigió varias de sus obras en diferentes conciertos. La gente en Londres lo celebró como un importante músico. En 1885, durante su segundo viaje, presentó su cantata La novia del espectro con gran éxito. Dvořák también compuso su Séptima Sinfonía en re menor, que fue bien recibida en su estreno en 1885.

En 1886, durante su quinto viaje, presentó su oratorio Santa Ludmila en Leeds. Esto lo ayudó a lograr independencia financiera y a escribir más música. En 1888, enfrentó críticas en Viena por su Stabat Mater, pero aún así tuvo éxito en presentaciones en Londres.

Durante esos años, Dvořák siguió componiendo obras importantes como la Misa en re mayor, la ópera El jacobino y la Octava Sinfonía. También visitó Rusia y recibió honores en Inglaterra. Finalmente, Dvořák aceptó un puesto en el Conservatorio de Praga y continuó estrenando obras en varios lugares antes de partir hacia Estados Unidos.

Archivo:Dvorak Antonin rodina USA
La familia Dvořák con sus amigos en Nueva York en 1893. De izquierda a derecha: su esposa Anna, su hijo Antonín, Sadie Siebert, Josef Jan Kovařík (secretario), madre de Sadie Siebert, su hija Otýlie y Antonín Dvořák.

Entre 1892 y 1895, Dvořák fue el director de una escuela de música en Nueva York. Lo contrató una mujer rica llamada Jeannette Thurber para dar prestigio a la escuela. Durante ese tiempo, Dvořák enseñó a compositores jóvenes, incluyendo a Horatio Parker. Aunque comenzó ganando 15,000 dólares al año, el pánico económico de 1893 afectó el dinero de la escuela y redujeron su salario. Dvořák tenía un objetivo: quería explorar la música de Estados Unidos y mezclarse con las influencias musicales locales, como lo había hecho con la música folclórica checa.

En 1893, Dvořák escribió su famosa Sinfonía del Nuevo Mundo mientras estaba en Nueva York. Esta sinfonía fue muy aplaudida cuando se estrenó. Durante su tiempo en Estados Unidos, Dvořák también conoció a músicos afroamericanos y nativos americanos, y se interesó por su música. Pensaba que la música de estos grupos podría ayudar a desarrollar un estilo musical propio para Estados Unidos.

Dvořák también pasó un tiempo en una comunidad checa en Iowa. Durante este período, compuso música como el Cuarteto Americano y el Quinteto de cuerda. Después de unos años en Estados Unidos, Dvořák regresó a Europa en 1895 y continuó componiendo óperas y música de cámara. También dio clases en el Conservatorio de Praga.

Dvořák regresó a Bohemia en 1895 y continuó su trabajo musical. Brahms, otro famoso compositor, trató de persuadirlo para que se mudara a Viena, pero Dvořák prefirió quedarse en su tierra natal. En sus últimos años, Dvořák se centró en componer óperas y música de cámara.

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Funeral de Dvořák el 5 de mayo de 1904.

En 1897, la hija de Dvořák, Otilie, se casó con un alumno suyo llamado Josef Suk, quien también era compositor. Ese mismo año, Dvořák visitó al famoso compositor Brahms mientras estaba enfermo y asistió a su funeral cuando murió en abril. Dvořák recibió reconocimientos importantes: le otorgaron una medalla de oro y fue nombrado miembro de una organización musical en Viena. En 1900, dirigió su último concierto con la Filarmónica Checa, y en 1901 fue elegido como miembro de la Cámara de los Señores. También se convirtió en el director del Conservatorio de Praga.

En sus últimos años, Dvořák enfermó varias veces. En 1904, un festival de música checa se centró en su música, pero él no pudo asistir debido a su enfermedad. Dvořák sufrió un ataque de gripe en abril y murió el 1 de mayo de 1904, a los 62 años. Fue enterrado en Praga y dejó muchas obras musicales sin terminar.

Archivo:DvorakTomb
Tumba de Dvořák en el cementerio de Vyšehrad en Praga.

Obra

Estilo musical e influencias

La música de Dvořák combina los estilos clásico y romántico. Aunque usó estructuras musicales tradicionales, como la forma sonata y el rondó, también introdujo elementos nuevos en esas estructuras. Siguiendo a Bedřich Smetana, quien modernizó la música checa, Dvořák se inspiró en música folclórica eslava y también en la música afroamericana y nativa americana durante su tiempo en Estados Unidos.

Sus obras están llenas de melodías impactantes y ritmos interesantes. Su música puede expresar desde la alegría hasta la meditación profunda. Dvořák era fan de Richard Wagner y esto influyó en sus óperas y algunas piezas orquestales. A lo largo de los años, su estilo musical se movió hacia modelos más clásicos, y admiraba a compositores como Bach, Mozart, Beethoven y Schubert.

Composiciones

Antonín Dvořák creó más de 400 obras musicales en diferentes formas. Compuso nueve sinfonías que siguen modelos clásicos, además de cinco poemas sinfónicos. Sus composiciones están influenciadas por los ritmos y melodías de la música folclórica checa. Creó danzas eslavas, rapsodias eslavas, variaciones sinfónicas y muchas canciones que reflejan esta influencia. También escribió más de 50 piezas orquestales, once óperas (la más famosa es "Rusalka"), suites, serenatas, conciertos y música de cámara. Sus obras incluyen casi 60 composiciones de música de cámara, como cuartetos y quintetos. También produjo música para piano, violín y voces, incluyendo canciones bíblicas y gitanas.

Además, dejó muchos bocetos de obras planeadas, reducciones para piano de sus propias piezas y arreglos de composiciones de otros músicos.

Sinfonías

Durante la vida de Dvořák, solo cinco de sus sinfonías eran ampliamente conocidas. Su editor, Fritz Simrock, no prefería publicar obras sinfónicas grandes porque eran difíciles de vender. La primera en ser publicada fue la sexta, ya que la fama internacional de Dvořák estaba creciendo y directores famosos como Hans Richter querían estrenar nuevas sinfonías. Después de su muerte, se descubrieron cuatro sinfonías inéditas, lo que llevó a confusiones sobre el número de sus sinfonías.

El estilo de Dvořák se caracteriza por su accesibilidad y melodías cautivadoras. Sus sinfonías están influenciadas por la música folclórica checa y utilizan formas cíclicas, lo que les da un toque especial. Compuso su primera sinfonía a los 24 años, la "Sinfonía n.º 1" subtitulada "Las campanas de Zlonice". A lo largo de su carrera, compuso varias sinfonías, algunas de las cuales fueron influidas por la música de Wagner.

Sus sinfonías tempranas no se incluyen con frecuencia en el repertorio estándar, pero su "Sinfonía n.º 6" le dio fama internacional. Sus sinfonías intermedias, como la "Sinfonía n.º 5" y la "Sinfonía n.º 6", tienen un carácter bucólico y están influenciadas por Brahms. La "Sinfonía n.º 7" es altamente apreciada por su calidad y se compara con las grandes obras de Beethoven. La "Sinfonía n.º 8" tiene un tono más cálido y optimista, mientras que la "Sinfonía n.º 9" es conocida como la "Del Nuevo Mundo" y tiene elementos de música estadounidense.

Diversos directores han grabado ciclos completos de las sinfonías de Dvořák, y varios directores históricos estrenaron sus sinfonías en su época.

Obras corales

Archivo:Remembrance of the performance of Stabat Mater in Worcester on 12 September, 1884.
Portada de la partitura del Stabat Mater. Recuerdo de la actuación en Worcester el 12 de septiembre de 1884, con las firmas de Dvořák y los miembros de la orquesta.

Entre las obras corales más destacadas de Dvořák se encuentran sus arreglos del "Stabat Mater", el "Réquiem", el "Te Deum" y la "Misa en re mayor".

El "Stabat Mater" es una pieza larga de música sacra para solistas, coro y orquesta, basada en un himno litúrgico del mismo nombre. Dvořák compuso esta obra en memoria de su hija fallecida y se inspiró en la tristeza de su pérdida. Se suele interpretar en la República Checa durante la Pascua.

El "Réquiem" fue compuesto en 1890 y refleja las cuestiones fundamentales sobre la vida, la muerte y la fe religiosa de Dvořák. Fue estrenado en Birmingham en 1891 y recibió elogios por su profundidad espiritual.

El "Te Deum" es una cantata para solistas, coro y orquesta, basada en el himno latino "Te Deum laudamus". Fue compuesto en 1892 y dedicado al aniversario del descubrimiento de América. Aunque no es tan extenso como el "Réquiem" o el "Stabat Mater", también contiene momentos de reflexión profunda.

La "Misa en re mayor", originalmente escrita para órgano, solistas y coro pequeño, fue arreglada para orquesta sinfónica en 1892. Dvořák respondió a una solicitud de la editorial Novello de Londres para hacer esta adaptación.

El oratorio "Santa Ludmila" tuvo éxito en eventos en honor a Dvořák y en Inglaterra en la década de 1880. Otras obras corales incluyen el "Himno de los campesinos checos", la cantata "La novia del espectro" y otras composiciones.

Estas obras corales muestran la habilidad de Dvořák para expresar emociones profundas y espirituales a través de su música.

Conciertos

Dvořák compuso tres conciertos para instrumento solista y orquesta: el de piano en sol menor, el de violín en la menor y el de violonchelo en si menor.

El "Concierto para piano" en sol menor, op. 33, es el primero de estos conciertos y es menos conocido que los otros dos. Los conciertos de violín y violonchelo son muy apreciados por su belleza y expresión.

El "Concierto para violín" en la menor, op. 53, fue escrito en 1878 para el violinista Joseph Joachim. Aunque inicialmente Joachim no estaba seguro de la obra, finalmente fue estrenada por el violinista František Ondříček en 1883.

El "Concierto para violonchelo" en si menor, op. 104, fue el último que compuso Dvořák y se lo dedicó a su amigo Hanuš Wihan. Aunque inicialmente Dvořák no estaba convencido de escribir un concierto para violonchelo, finalmente lo compuso en Nueva York en 1894. Fue estrenado en Londres en 1896 y se convirtió en uno de los conciertos más populares para violonchelo.

Dvořák también compuso un "Concierto para violonchelo en la mayor" en sus primeros años de carrera, pero fue revisado y orquestado por otros músicos en años posteriores.

Estos conciertos demuestran la habilidad de Dvořák para crear música emotiva y hermosa para solistas acompañados por una orquesta. El concierto para violonchelo en si menor es especialmente apreciado y sigue siendo interpretado con frecuencia en la actualidad.

Música de cámara

Dvořák, que también tocaba la viola, sentía una afinidad natural por escribir para cuerdas. Su música de cámara está fuertemente inspirada en la cultura popular estadounidense, al mismo tiempo que mantiene sus raíces checas. Durante un período de treinta años, compuso más de cuarenta obras de música de cámara.

Quintetos de cuerda

En 1860, justo después de completar su educación en la Escuela de Órgano de Praga, compuso su Quinteto de cuerda n.º 1 en la menor, op. 1. Le seguirían dos más, de los cuales el Quinteto de cuerda n.° 2 en sol mayor, op. 77 de principios de 1875, destaca por el uso de un contrabajo. Este quinteto lo escribió hacia el final de su etapa de transición, incorporando una densidad temática a sus obras. Se caracteriza por un delicado estilo de opereta poco común en su obra instrumental. La extensión de una variación a toda la sección recuerda a su literatura sinfónica. Lo escribió para un concurso de música de cámara patrocinado por Umělecká beseda (Círculo artístico), donde se le otorgó por unanimidad un premio de cinco ducados por la «distinción del tema, la destreza técnica en la composición polifónica, el dominio de la forma y el conocimiento de los instrumentos» desplegados. El Quinteto de cuerda n.° 3 en mi mayor, op. 97, con una segunda viola añadida, lo compuso cerca del final de su período estadounidense en 1893, durante unas vacaciones de verano en Spillville. La influencia que tuvo la música folclórica de los nativos americanos en su obra también fue evidente en este quinteto; hay un ritmo de tambor común en la música nativa americana que se presenta en todos los movimientos, excepto en el «Larghetto».

Cuartetos de cuerda

En la década de 1880, Dvořák destruyó algunas de sus composiciones, como cuartetos de cuerda en diferentes tonos. Lo hizo después de que se hubieran impreso copias debido a la gran cantidad de errores en ellas. Conservó los manuscritos de estos cuartetos, pero no les asignó números de opus. Estos cuartetos tenían influencia de la música de Wagner y se numeran como B.17, B.18 y B.19 en el catálogo de Burghauser.

Los cuartetos n.º 2, 3 y 4 muestran cómo Dvořák progresó como compositor. Utilizó la melodía de una canción eslava llamada "Hej Slovane" en su cuarteto en re mayor, variando su estilo. También compuso un cuarteto en mi menor con un movimiento lento que utiliza repetitivamente el pedal de fa sostenido.

Durante su estancia en Estados Unidos en 1893, Dvořák compuso el popular "Cuarteto Americano" en solo tres días. Se inspiró en la libertad que sentía en ese país y lo escribió en Spillville. A diferencia de sus otros cuartetos, este es más simple en su escritura y utiliza ritmos de salto y registros altos del violín. Los movimientos están unidos por relaciones clave, excepto uno. Aunque tiene menos desarrollo temático, se basa en la repetición y tiene menos atención en el desarrollo musical.

Otras obras de cámara

También compuso dos quintetos para piano (op. 5 y op. 81), ambos en la mayor, de los cuales el segundo es el más conocido. Dejó un Terzetto para dos violines y viola (op. 74); dos cuartetos de piano (op. 23 y op. 87), un sexteto de cuerda, op. 48; y cuatro tríos para piano, incluido el Trío Dumky, op. 90. También escribió un conjunto de Bagatelas, op. 47, para la inusual combinación de dos violines, violonchelo y armonio. Las Bagatelas son cíclicas y similares a una suite, haciéndose eco de melodías de gaitas checas. Escribió dos valses para cuarteto de cuerdas y arregló un conjunto de doce canciones de amor para el cuarteto de cuerdas titulado Cypřiše (B.152), tomado de su conjunto de dieciocho canciones originalmente compuestas en 1865 titulado Cipreses. Sus obras para violín y piano incluyen las Piezas románticas, la Sonatina para violín y la Sonata para violín.

Poemas sinfónicos

Franz Liszt había inventado la forma musical poema sinfónico, que era entonces relativamente nueva, y nunca fue adoptada por compositores románticos más conservadores como Brahms. Dvořák compuso cinco poemas sinfónicos, todos entre 1896 y 1897, y tienen números de opus consecutivos: El duende de las aguas (Vodník), op. 107; La bruja del mediodía, op. 108; La rueca de oro, op. 109; La paloma del bosque, op. 110; y El canto del héroe, op. 111. Los primeros cuatro se basan en baladas de la colección Kytice del folclorista checo Karel Jaromír Erben. El canto del héroe se basa en un programa concebido por Dvořák y se cree que es autobiográfica.

Óperas

En una entrevista de 1904, Dvořák afirmó que la ópera era «la forma más adecuada para la nación». Si este sentimiento nacionalista estaba en el corazón de sus composiciones de ópera, luchó por encontrar un estilo a caballo entre la melodía tradicional checa y el estilo de grand opéra de Giacomo Meyerbeer, que experimentó como viola solista en la orquesta del Teatro Provisional de Praga entre 1862 y 1871, y cuya influencia es evidente en sus obras, como Vanda y Dimitrij. Su interés posterior en la música de Richard Wagner también influyó en sus óperas, evidente en su extensa reescritura de Dmitrij en 1894, tras su fracaso en Viena.

De todas sus óperas, sólo Rusalka, op. 114, que contiene la conocida aria «Měsíčku na nebi hlubokém» («Canción a la luna»), se toca en escenarios de ópera contemporáneos con frecuencia fuera de la República Checa. Esto se debe a su invención y libretos desiguales, y quizás también a sus requisitos de puesta en escena: El jacobino, Armida, Vanda y Dimitrij necesitan escenarios lo suficientemente grandes como para representar a los ejércitos invasores.

Expertos en Dvořák, como Michael Beckerman, especulan que el segundo movimiento de su Novena Sinfonía fue adaptado de los estudios para una ópera nunca escrita sobre Hiawatha.

Canciones

El ciclo de canciones de diez Canciones bíblicas, op. 99, B.185, lo escribió en marzo de 1894. Alrededor de esa época, Dvořák fue informado de la muerte del famoso director de orquesta y su amigo personal cercano, Hans von Bülow. Un mes antes, se había apenado al saber que su padre estaba al borde de la muerte, muy lejos en Bohemia. Dvořák se consoló en los Salmos. La obra resultante, considerada la mejor de sus ciclos de canciones, está basada en el texto de la Biblia checa de Kralice. El padre de Dvořák murió el 28 de marzo de 1894, dos días después de la finalización de la obra.

Otro ciclo muy conocido es el de las siete Canciones gitanas (Cikánské melodie) B.104, op. 55, que incluye «Canciones que me enseñó mi madre» (la cuarta del conjunto).

Creó muchas otras canciones inspiradas en la música tradicional nacional checa, como las «Canciones de amor», las «Canciones nocturnas», etc.

Otras obras

De otras obras que muestran la influencia de los ritmos folclóricos checos y formas melódicas, quizás los ejemplos más conocidos son los dos conjuntos de Danzas eslavas. El primer libro, op. 46 (1878), tiene una forma predominantemente checa. Fue creado para dúo de pianos (para piano a cuatro manos), pero luego Dvořák orquestó todo el conjunto, completándolo el mismo año. El segundo libro, op. 72 (también compuesto originalmente para piano a cuatro manos), compuesto ocho años después, incluye formas autóctonas de otras tierras eslavas Serbia, Polonia y Ucrania, aunque algunas «fusionan características de más de una danza». No usó melodías folclóricas reales, sino que creó sus propios temas al estilo de la música folclórica tradicional y utilizó los ritmos de las danzas folclóricas originales.

Humorescas, op. 101, es un ciclo de piano que escribió durante el verano de 1894. Según el crítico musical David Hurwitz, «la séptima Humoresca es probablemente la obra para piano pequeña más famosa jamás escrita después de Para Elisa de Beethoven».

Una obra que no encaja en las otras categorías son las Variaciones sinfónicas de 1877. Las variaciones orquestales sobre un tema original, compuestas como una obra independiente, eran un género bastante inusual. Originalmente sin éxito y revivido sólo después de diez años, desde entonces se ha establecido en el repertorio.

Frases célebres

  • "La música es el lenguaje universal de la humanidad."
  • "Es mi deseo que mis obras permanezcan vivas después de mí."
  • "No importa lo lejos que vayamos, nuestra patria y nuestra infancia siempre permanecerán en nuestro interior."
  • "La melodía es el alma de la música."
  • "La inspiración se encuentra en todas partes, y cuanto más original sea uno, más allá encontrará lo familiar en lo nuevo."
  • "Creo que la verdadera inspiración proviene de uno mismo. Uno debe ser capaz de ver cosas que los demás no ven y luego tomar una dirección completamente nueva."
  • "La música debería ser algo que hable directamente al corazón de las personas."
  • "No escribo para elogios o para el efecto; escribo para expresar mi propia alma."
  • "La música debe ser sentida por el corazón y el alma, no solo escuchada por los oídos."
  • "La música es la revelación más profunda de la vida interior, y nos ayuda a entender el alma y sus manifestaciones."

Datos de interés

  • Dvořák nació en Nelahozeves, un pequeño pueblo en Bohemia (hoy parte de la República Checa), en una familia de origen humilde. A pesar de esto, logró alcanzar fama y reconocimiento internacional como compositor.
  • Antes de dedicarse por completo a la música, Dvořák trabajó como aprendiz en una carnicería y como organista en una iglesia. Estas experiencias tempranas influyeron en su comprensión de la música y la vida cotidiana.
  • Dvořák tenía un profundo interés en la música folclórica checa. Incorporó elementos de esta tradición en muchas de sus composiciones, lo que le otorgó un sonido distintivamente checo.
  • Dvořák tuvo una relación cercana con Johannes Brahms. Brahms fue un gran admirador de la música de Dvořák y lo ayudó a ganar reconocimiento internacional. Dvořák también admiraba a Brahms y le consultaba sobre sus composiciones.
  • Dvořák pasó un período en los Estados Unidos, donde trabajó como director del Conservatorio Nacional de Música de Nueva York. Durante este tiempo, compuso algunas de sus obras más conocidas, incluyendo la "Sinfonía del Nuevo Mundo".
  • La Sinfonía No. 9 en mi menor, Op. 95, conocida como la "Sinfonía del Nuevo Mundo", es una de las obras más famosas de Dvořák. Fue influenciada por su experiencia en América y presenta elementos musicales que reflejan la cultura y el ambiente del país.
  • Dvořák era un entusiasta de los trenes y disfrutaba viajar en ellos. Se dice que su pasión por los trenes se refleja en el ritmo y la energía de algunas de sus composiciones.
  • Aunque es más conocido por su música orquestal, Dvořák también compuso óperas, música de cámara, música coral y piezas para piano. Su catálogo incluye una amplia variedad de géneros musicales.
  • Durante su estadía en Estados Unidos, Dvořák mostró interés por el folclore americano y afroamericano. Utilizó algunas de estas influencias en sus composiciones, aunque también fue criticado por no entender completamente las tradiciones locales.
  • Dvořák tuvo un impacto significativo en la música checa y en compositores posteriores, como Bedřich Smetana y Leoš Janáček. Su legado perdura en la música checa y en la escena musical internacional.

Galería de imágenes

Véase también

Kids robot.svg En inglés: Antonín Dvořák Facts for Kids

  • Museo Antonín Dvořák
  • Concurso internacional de composición Antonín Dvořák
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Antonín Dvořák para Niños. Enciclopedia Kiddle.