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Enrique de Castilla el Senador para niños

Enciclopedia para niños
Datos para niños
Enrique de Castilla el Senador
Infante Enrique de Castilla el Senador (1230-1304). Detalle del cuadro de Gisbert.jpg
Información personal
Nombre en español Enrique de Castilla
Nacimiento 6 de marzo de 1230
Burgos (España)
Fallecimiento 8 de agosto de 1303
Roa (España)
Sepultura Convento de San Francisco
Familia
Familia Casa de Borgoña
Padres Fernando III de Castilla
Beatriz de Suabia
Cónyuge Juana Núñez de Lara (desde 1300)
Hijos Enrique Enríquez el Viejo
Información profesional
Ocupación Político y militar
Cargos ocupados

Enrique de Castilla el Senador (nacido el 6 de marzo de 1230 y fallecido el 11 de agosto de 1303 en Roa) fue un importante personaje de la historia de Castilla. Era hijo del rey Fernando III de Castilla y de la reina Beatriz de Suabia. Se le conoce como el Senador porque llegó a ser senador de Roma.

Enrique de Castilla fue señor de varias ciudades como Écija, Roa y Medellín. Durante el reinado de su hermano, Alfonso X de Castilla, viajó por Inglaterra, Túnez e Italia. Después de una derrota en la batalla de Tagliacozzo, fue prisionero durante 23 años.

En 1291, fue liberado y regresó a Castilla en 1294. Su sobrino, el rey Sancho IV de Castilla, le dio el señorío de Vizcaya. Tras la muerte de Sancho IV en 1295, Enrique fue nombrado tutor del joven rey Fernando IV de Castilla hasta 1302. Durante este tiempo, gobernó junto a la reina María de Molina, madre de Fernando IV. Falleció a los 73 años.

¿Quiénes eran los padres y hermanos de Enrique de Castilla?

Enrique de Castilla era hijo del rey Fernando III de Castilla y de su primera esposa, la reina Beatriz de Suabia. Sus abuelos paternos fueron el rey Alfonso IX de León y Berenguela de Castilla. Por parte de su madre, sus abuelos fueron Felipe de Suabia, rey de Romanos, e Irene Ángelo.

Entre sus hermanos se encontraban Alfonso X el Sabio y el infante Manuel de Castilla, padre del famoso escritor Don Juan Manuel.

La juventud de Enrique y sus viajes (1230-1294)

Enrique de Castilla nació el 6 de marzo de 1230. Desde joven, participó en importantes eventos, como la conquista de Sevilla. En esta campaña, defendió el campamento del rey y logró una victoria importante. Como recompensa, su padre le prometió varios señoríos, aunque aún no habían sido conquistados.

Cuando su padre, Fernando III, falleció en 1252, su hermano Alfonso X el Sabio se convirtió en rey. Alfonso X le encargó conquistar algunas ciudades, pero luego no le entregó los señoríos prometidos por su padre. Esto causó problemas entre los hermanos. Enrique también tuvo un encuentro secreto con Jaime I de Aragón para hablar de un posible matrimonio, lo que molestó aún más a Alfonso X.

En 1259, Enrique de Castilla se rebeló contra su hermano el rey. Aunque logró algunas victorias, tuvo que buscar refugio en el reino de Aragón. Como no fue bien recibido allí, decidió pedir ayuda a los reyes de Francia e Inglaterra.

Enrique pasó varios años en Inglaterra, donde fue huésped del rey Enrique III de Inglaterra. Allí conoció a su media hermana Leonor de Castilla, casada con el futuro Eduardo I de Inglaterra. Aunque al principio no le dieron mucho apoyo, Enrique III le permitió conseguir tropas y barcos. Durante su estancia en Inglaterra, Enrique fue testigo de importantes eventos políticos, como la creación del Parlamento Inglés.

¿Cómo fue la estancia de Enrique en Túnez? (1259-1266)

En 1259, Enrique de Castilla viajó a Túnez y se puso al servicio del sultán al-Mustansir. Su hermano, el infante Fadrique de Castilla, también se unió a él. El sultán recibió muy bien a Enrique por ser hijo de un rey. Enrique y sus caballeros lucharon contra los enemigos del sultán y ganaron mucha riqueza y popularidad.

Sin embargo, la popularidad de Enrique causó envidia entre los súbditos del sultán, quienes presionaron para que lo expulsaran. Según algunas historias, Enrique escapó de un intento de asesinato antes de ser expulsado de Túnez.

¿Por qué fue Enrique Senador de Roma? (1266-1268)

Después de Túnez, Enrique de Castilla se fue a Italia alrededor de 1266. Allí apoyó a Carlos de Anjou, rey de Sicilia, en su lucha contra Manfredo de Sicilia. Enrique, que había acumulado una gran fortuna en Túnez, usó su dinero y su ejército para ayudar a Carlos de Anjou y al papa Clemente IV.

Enrique esperaba que el papa lo nombrara rey de Cerdeña. Incluso le prestó a Carlos de Anjou una gran suma de dinero con esa condición. Sin embargo, Carlos de Anjou también quería el trono de Cerdeña, y el papa pospuso su decisión.

Enrique se enojó mucho al saber las intenciones de Carlos de Anjou. Por eso, cambió de bando y se unió a Conradino de Hohenstaufen. Luego, se instaló en Roma, donde fue nombrado Senador o gobernador único. Al principio, los romanos lo recibieron bien, pero pronto mostró un carácter autoritario.

Enrique se unió a otros grupos y convenció a Conradino de Hohenstaufen, un joven de dieciséis años, de que fuera a Italia para tomar el reino de Sicilia. Enrique prometió levantar la ciudad de Roma a su favor. También ordenó detener a algunos nobles y se apropió de fondos de iglesias y monasterios.

El papa Clemente IV excomulgó a Enrique y a sus aliados. La batalla final entre los partidarios de Carlos de Anjou y Conradino de Hohenstaufen, conocida como la batalla de Tagliacozzo, ocurrió el 23 de agosto de 1268. El ejército de Conradino fue derrotado. Enrique de Castilla también fue vencido después de varias horas de combate.

El cautiverio de Enrique y su regreso a Castilla (1268-1291)

Después de la batalla de Tagliacozzo, Enrique de Castilla buscó refugio en la abadía de Montecasino. Sin embargo, fue capturado y entregado a Carlos de Anjou. Carlos de Anjou lo encerró en el castillo de Canosa di Puglia, donde permaneció hasta 1280, cuando fue trasladado a otro castillo.

Durante su cautiverio, Enrique recibió la visita de su hermanastra Leonor de Castilla, esposa del rey Eduardo I de Inglaterra. Los reinos de Castilla y Aragón intentaron negociar su liberación, pero Carlos de Anjou se negó. En 1286, el papa Honorio IV levantó la excomunión que pesaba sobre Enrique.

Finalmente, en 1291, Enrique fue liberado, siete años después de la muerte de su hermano Alfonso X el Sabio. Regresó a Túnez y luego a Castilla en 1294. Su sobrino, el rey Sancho IV de Castilla, lo recibió bien y le dio varios señoríos. Enrique tenía 64 años y había estado prisionero durante 26 años.

¿Cómo fue Enrique tutor del rey Fernando IV? (1295-1303)

El 25 de abril de 1295, el rey Sancho IV de Castilla falleció, dejando como heredero a su hijo, el infante Fernando IV de Castilla, que era muy joven. La reina María de Molina, madre de Fernando IV, tuvo que enfrentar muchos problemas para mantener a su hijo en el trono. Había conflictos con la nobleza y con otros reinos como Aragón y Portugal.

En las Cortes de Valladolid de 1295, Enrique de Castilla fue nombrado tutor del rey. Sin embargo, la reina María de Molina logró que la custodia de su hijo le fuera confiada a ella. Durante este tiempo, la reina y Enrique se reunieron con el rey Dionisio I de Portugal para hacer acuerdos de paz y matrimonios entre sus hijos.

A principios de 1296, hubo más rebeliones en Castilla. El infante Juan, tío de Fernando IV, se proclamó rey de León y Galicia. Alfonso de la Cerda, otro pretendiente al trono, fue proclamado rey de Castilla. Enrique de Castilla viajó al Reino nazarí de Granada para buscar la paz.

La reina María de Molina logró que el rey de Portugal retirara su apoyo a los rebeldes. Poco después, el infante Juan y Alfonso de la Cerda también se retiraron. Enrique de Castilla regresó a Castilla, temiendo perder su cargo de tutor.

El Tratado de Alcañices (1297)

En 1297, se firmó el Tratado de Alcañices entre Castilla y Portugal. Este tratado estableció las fronteras entre ambos reinos, que se mantuvieron casi sin cambios durante siglos. Portugal recibió algunas ciudades a cambio de dejar de apoyar a los enemigos de Castilla.

También se confirmaron los matrimonios entre Fernando IV y Constanza de Portugal, y entre la infanta Beatriz (hermana de Fernando IV) y el infante Alfonso (heredero de Portugal). Este tratado ayudó a asegurar la posición de Fernando IV en el trono y dio más libertad a la reina María de Molina para gobernar.

Últimos años de la minoría de edad de Fernando IV (1297-1301)

A finales de 1297, la reina María de Molina siguió luchando contra los rebeldes. En 1298, algunos nobles comenzaron a fabricar moneda falsa para desestabilizar la economía. Enrique de Castilla volvió a sugerir vender la ciudad de Tarifa a los musulmanes, pero la reina se opuso.

La reina María de Molina se reunió con el rey de Portugal para pedirle ayuda contra el infante Juan. Sin embargo, el rey de Portugal y Enrique de Castilla querían que Fernando IV llegara a un acuerdo con el infante Juan. La reina, que no estaba de acuerdo, llegó a un pacto con Enrique de Castilla, dándole algunas ciudades para que no apoyara ese plan.

En 1299, la hermana de Juan Núñez de Lara, Juana Núñez de Lara, se casó con el infante Enrique de Castilla. Enrique tenía 69 años en ese momento. No tuvieron hijos.

En las Cortes de Valladolid de 1300, la reina María de Molina logró que el papa Bonifacio VIII legitimara su matrimonio con el difunto rey Sancho IV. Esto significaba que sus hijos eran legítimos. En estas Cortes, el infante Juan renunció a sus pretensiones al trono y juró lealtad a Fernando IV.

¿Qué hizo Enrique durante el reinado de Fernando IV? (1301-1303)

En noviembre de 1301, el papa Bonifacio VIII hizo pública la bula que legitimaba el matrimonio de la reina María de Molina y el rey Sancho IV de Castilla. Esto significó que Fernando IV era un rey legítimo. También se declaró que Fernando IV ya era mayor de edad.

Enrique de Castilla, molesto por esta legitimación, se alió con otros nobles para intentar enemistar a Fernando IV con su madre, la reina María de Molina. Enrique y sus aliados presionaron al rey para que les diera más tierras.

El 23 de enero de 1302, Fernando IV se casó con Constanza de Portugal. En las Cortes de Medina del Campo de 1302, Enrique y otros nobles intentaron acusar a la reina de haber malgastado dinero, pero se demostró que era falso.

En julio de 1302, se reunieron las Cortes en Burgos. Fernando IV y su madre, que ya habían mejorado su relación, asistieron junto con Enrique de Castilla. Enrique siguió presionando a la reina y al rey con sus demandas.

A principios de 1303, Enrique de Castilla, Diego López V de Haro y Don Juan Manuel se reunieron en Roa. Planearon que Alfonso de la Cerda fuera rey de León y que el infante Pedro, hermano de Fernando IV, fuera rey de Castilla. La reina María de Molina se negó a apoyar este plan, ya que significaría dividir el reino.

Mientras la reina trabajaba para evitar la división del reino, Enrique de Castilla enfermó gravemente. La reina intentó que Enrique dejara sus bienes a la Corona, pero él se negó. Sin embargo, en su último testamento, Enrique dispuso que sus bienes volvieran a Fernando IV y que algunas de sus villas fueran devueltas a la reina María de Molina y a la Orden de Calatrava.

El 11 de agosto de 1303, dos días después de hacer su testamento, el infante Enrique falleció en Roa a los 73 años. Fue el último hijo vivo del rey Fernando III el Santo. Cuando Fernando IV supo de su muerte, se mostró complacido y concedió la mayoría de las tierras de Enrique a otros nobles, devolviendo la villa de Écija a su madre.

¿Dónde fue sepultado Enrique de Castilla?

El infante Enrique fue sepultado en el convento de San Francisco de Valladolid, como había pedido en su testamento. Al principio, sus vasallos no mostraron mucho duelo, por lo que la reina María de Molina ordenó que se le hicieran honras fúnebres adecuadas.

Sus restos fueron colocados en la misma tumba que los de su sobrino, el infante Pedro de Castilla. Sin embargo, el convento de San Francisco fue demolido en 1837, por lo que no se conservan su sepulcro ni sus restos.

¿Qué se sabe de su matrimonio y descendencia?

El infante Enrique se casó en 1299 con Juana Núñez de Lara. Él tenía 69 años y no tuvieron hijos. Después de la muerte de Enrique, Juana Núñez de Lara se casó con Fernando de la Cerda y tuvo descendencia con él.

Enrique de Castilla tuvo un hijo fuera de su matrimonio con Mayor Rodríguez Pecha:

Galería de imágenes


Predecesor:
Diego López V de Haro
Señor de Vizcaya
1294 - 1295
Sucesor:
Diego López V de Haro
Predecesor:
Juan Núñez II de Lara
Adelantado mayor de la frontera de Andalucía
1298 - 1299
Sucesor:
Juan Osórez
Predecesor:
Juan Núñez II de Lara
Mayordomo mayor del rey
1302
Sucesor:
Pedro Ponce de León
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