robot de la enciclopedia para niños

Burro para niños

Enciclopedia para niños
Datos para niños
Symbol question.svg
 
Asno/burro
Equus asinus asinus.JPG
Estado de conservación
Domesticado
Taxonomía
Reino: Animalia
Filo: Chordata
Clase: Mammalia
Orden: Perissodactyla
Familia: Equidae
Género: Equus
Especie: E. africanus
Subespecie: E. a. asinus
Linnaeus, 1758
Sinonimia
  • Equus asinus
Archivo:Burro gris blanco
Burro, Ecoparque, Colima, México.

El burro, también conocido como asno o borrico (nombre científico: Equus africanus asinus), es un animal doméstico que pertenece a la familia de los équidos. Los ancestros salvajes de los burros, que vivían en África, fueron domesticados por primera vez hace unos 7000 años. Esto ocurrió casi al mismo tiempo que los caballos en Eurasia. Desde entonces, los humanos han usado a los burros para transportar cargas y como animales para montar. Con la llegada de la maquinaria agrícola, el número de burros ha disminuido mucho.

¿De dónde viene la palabra "asno"?

La palabra «asno» viene del latín asinus, que es el mismo término que se usa en su nombre científico para la subespecie doméstica. Los nombres latinos de su género y especie, Equus africanus, significan «caballo africano».

Las palabras «burro» o «borrico» vienen del latín tardío burricus, que significaba «caballo pequeño». En cambio, caballus se refería a un caballo usado para tirar o cargar. Desde el siglo I, aunque asinus seguía siendo el nombre de la especie, el asno común de trabajo se llamaba normalmente asellus en latín.

Clasificación de los burros

Archivo:Burros en un relieve egipcio en piedra caliza, Imperio Antiguo, Museo Egipcio de Berlín
Relieve de burros de la Necrópolis de Guiza, tumba de Seshemnefer IV, del Imperio Antiguo, Museo Egipcio de Berlín.
Archivo:Donkeys eating
Los burros domésticos provienen de los burros africanos.

Al principio, los burros domésticos se clasificaron como una especie separada, Equus asinus. Esta clasificación se mantuvo por mucho tiempo. Sin embargo, se demostró que los asnos domésticos y los salvajes africanos (Equus africanus) pertenecen a la misma especie. Por eso, debían tener el mismo nombre científico.

Normalmente, se usa el nombre más antiguo. Pero en 2003, la Comisión Internacional de Nomenclatura Zoológica decidió que los asnos domésticos, junto con otras diecisiete especies domesticadas, debían llevar el nombre de su variedad salvaje, Equus africanus. Así, los burros domésticos se llaman Equus africanus asinus. Esta decisión se tomó para evitar que los animales salvajes, que son los originales, fueran nombrados como subespecies de sus descendientes domésticos.

Los asnos pertenecen al orden de los perisodáctilos y a la familia de los équidos. A esta familia también pertenecen el caballo (Equus ferus caballus), el onagro o kulán (Equus hemionus), el kiang (Equus kiang) y las cebras. Todos están muy relacionados porque pertenecen al único género que aún existe, Equus.

Características de los burros

Archivo:Alboxmonachilmotril 037
Semental de asno de raza andaluza-cordobesa.

Los burros varían mucho de tamaño. La mayoría de los burros domésticos miden entre 0,90 y 1,40 m hasta la cruz (la parte más alta de su espalda). Sin embargo, hay razas más grandes, como la andaluza-cordobesa y la zamorano-leonesa, que pueden superar los 1,60 m. El burro mamut americano más grande llegó a medir 1,73 m, y el burro catalán puede alcanzar los 1,65 m.

El color y la longitud de su pelo también son muy variados. Lo más común es que sean grises en diferentes tonos, desde el blanco hasta el negro, y también hay tonos pardos. A menudo tienen el pelaje más claro o blanco alrededor del hocico, los ojos y el vientre. Frecuentemente, tienen dos franjas oscuras en forma de cruz en su espalda. Sus crines (el pelo del cuello) son más cortas que las de los caballos, por lo que se mantienen erguidas en lugar de caer.

Archivo:Equus asinus Kadzidłowo 001
Pollino de tres semanas.

Los burros viven más tiempo que los caballos, llegando hasta los cuarenta años. Alcanzan la madurez para reproducirse entre los dos y dos años y medio. Pueden aparearse en cualquier época del año, aunque suele ser en primavera. La gestación (el tiempo que la cría está en el vientre de la madre) dura entre doce y catorce meses. Normalmente nace una sola cría, rara vez dos, que se alimenta de leche materna entre seis y nueve meses.

Los burros se adaptaron para vivir en zonas cercanas a los desiertos. Por eso, tienen características únicas entre los équidos. Los asnos salvajes viven separados, a diferencia de los caballos y cebras que viven en manadas. Los burros pueden emitir rebuznos muy fuertes que les permiten comunicarse a distancias de hasta tres kilómetros. Sus orejas largas les ayudan a escuchar mejor y a liberar el calor de su cuerpo.

Se defienden dando fuertes patadas con sus patas traseras, algo que los burros domésticos siguen haciendo si se sienten molestos. También pueden golpear con las patas delanteras y morder.

¿Qué comen los burros?

Archivo:Burro mexicano
Burro alimentándose.

Los burros tienen un sistema digestivo muy resistente, que les permite comer una gran variedad de plantas y extraer el agua de los alimentos de forma muy eficiente. Son menos propensos a los cólicos que los caballos. En promedio, los burros necesitan menos comida que los caballos de su mismo tamaño y peso. Todo esto les permite vivir en lugares donde otros animales con necesidades alimenticias más exigentes no podrían.

Su dieta incluye pastos, alfalfa, arbustos y plantas del desierto. Es una alimentación herbívora muy rica en fibra.

Historia de los burros

Archivo:Maler der Grabkammer des Panehsi 001
Burro en una pintura egipcia datada entre 1298-1235 a. C.

Los burros domésticos descienden de las subespecies de asnos salvajes africanos: la nubia y la somalí. Los asnos salvajes fueron domesticados alrededor del año 5000 a. C. Los burros se volvieron muy importantes para las personas que vivían en Egipto y Nubia, ya que pueden cargar entre el 20% y el 30% de su propio peso. También se usaban para arar la tierra y para obtener leche. Para el año 1800 a. C., los burros ya se habían extendido por Oriente Medio y Próximo. La ciudad comercial de Damasco incluso era llamada la «ciudad de los asnos» en textos antiguos.

Archivo:3209 - Athens - Stoà of Attalus Museum - Kylix - Photo by Giovanni Dall'Orto, Nov 9 2009
Cílica griega con un sátiro sobre un burro, datado alrededor del 510 a. C.

Los antiguos griegos relacionaban a los burros con el dios Dioniso. Los romanos también usaban los burros para transportar cargas por todo su imperio. Además, el burro estaba dedicado a Príapo.

Los équidos (caballos, burros, cebras) se habían extinguido en el continente americano al final de la última glaciación. Los caballos y los burros fueron traídos a América por los exploradores españoles. La primera vez que un burro llegó al Nuevo Mundo fue en 1495, cuando Colón llevó cuatro machos y dos hembras en su expedición. Después, los colonos europeos siguieron importando burros de España y Francia, principalmente para criar mulas. Además de su uso tradicional en la agricultura y el transporte, los burros se usaron en la minería a partir del siglo XIX.

Con la llegada de la maquinaria agrícola y los medios de transporte modernos, los burros se usaron cada vez menos en los países ricos desde principios del siglo XX. Sin embargo, comenzaron a usarse para el turismo y como mascotas. En los países en desarrollo, siguen siendo animales de trabajo muy importantes. Las razas de burros más pequeñas son las más populares como mascotas.

En países con más recursos, el bienestar de los burros se ha vuelto una preocupación. Se han creado refugios para burros mayores o que necesitan ayuda.

Otra forma en que se usa el asno hoy en día es como animal guardián contra lobos y otros depredadores. El burro puede detectar la presencia de estos animales más fácilmente que el ganado. Con sus rebuznos, alerta tanto a los ganaderos como a los animales con los que vive, como las vacas, que así pueden proteger mejor a sus terneros.

Los burros también se crían para consumir su carne, que es parte de la gastronomía en algunas regiones de España y países como China.

Burros en la cultura y el arte

Archivo:Donkeys posing
Burros en la localidad argentina de Tilcara.
Archivo:Monumento a Cervantes (Madrid) 10b
Estatua de Sancho Panza y su rucio en Madrid.

La larga historia de los burros con los humanos ha hecho que aparezcan en muchas historias y expresiones culturales.

  • En las fábulas de Esopo, el burro a menudo representa a los personajes humildes. A veces se cree importante y los poderosos lo ponen en su lugar, como en El asno y el león. Otras veces, el humilde asno da una lección a los poderosos, como en El asno y el lobo. También puede ser un compañero confiado que es traicionado, como en La zorra y el burro.
  • Los romanos pensaban que encontrarse con un asno era señal de mala suerte.
  • En el cuento Los músicos de Bremen, el burro es quien inicia el grupo de músicos.
  • El asno de oro es una novela antigua donde un hombre se convierte en asno y vive muchas aventuras.
  • El burro ha sido por mucho tiempo un símbolo de ignorancia. Un ejemplo se ve en la obra Sueño de una noche de verano de Shakespeare y en la fábula El burro flautista de Iriarte. En la historia de Pinocho, los niños que iban a la "isla de los juegos" se convertían en asnos por dejar de estudiar y solo divertirse. Por esta razón, a veces se llama "burro" a una persona que no sabe mucho o es poco inteligente.
  • El burro es un personaje principal o un fiel compañero en muchas obras literarias:
  • Aparece muchas veces en el arte y las historias cristianas.
Desde el nacimiento de Jesús en Belén, donde un asno y un buey lo acompañan, según antiguas profecías.
Durante la celebración del Domingo de Ramos, se recuerda la entrada de Jesús de Nazaret a Jerusalén montado en un burro, recibido por la gente con hojas de palma. Las estatuas de esta procesión son conocidas popularmente en Andalucía como la borriquita. La huida a Egipto de la Sagrada Familia también se representa a lomos de un burro. Los asnos se mencionan muchas veces en la Biblia hebrea.

Híbridos de burro

Archivo:Momo 260905
Mulo, híbrido entre burro y yegua.

Un burro macho puede reproducirse con una yegua (caballo hembra); su descendiente se llama mula o mulo. Si un caballo macho se reproduce con una burra (burro hembra), el descendiente se llama burdégano. Ambos híbridos casi siempre son estériles, lo que significa que no pueden tener crías. Esto se debe a que los burros tienen 62 cromosomas y los caballos tienen 64. Sus descendientes tienen un número impar, 63, lo que dificulta la formación de células reproductivas funcionales.

Archivo:Zeedonk 800
Cebrasno: híbrido entre burro y cebra, en el zoológico de Colchester, Inglaterra.

Históricamente, se han criado más mulos que burdéganos. Esto es porque las yeguas son más grandes que las burras, y sus crías (los mulos) son más grandes y fuertes.

Los mulos son animales fuertes y resistentes. Por eso, desde la antigüedad, los humanos los han considerado muy útiles para llevar cargas pesadas a largas distancias y en terrenos montañosos. Esta característica, que hace a los híbridos más resistentes que sus padres, se llama vigor híbrido.

También se han logrado híbridos entre asnos domésticos y varias especies de cebras. Estos se conocen como ceburros o zebrasnos.

Archivo:Donkey catalan
Burros de raza catalana.

Razas de burros en España

En España, existen seis razas de burros reconocidas:

  • el burro andaluz-cordobés
  • el burro majorero
  • el burro catalán
  • el burro mallorquín
  • el burro de las Encartaciones
  • el burro zamorano-leonés

¿Cuántos burros hay en el mundo?

Archivo:Ass (Equus africanus asinus) Population 2003
Población mundial del burro doméstico en 2003, expresada como porcentaje de su mayor población nacional (China, con 8.499.000 ejemplares).

Actualmente, hay alrededor de 44 millones de burros en el mundo. La población de estos animales ha crecido desde mediados del siglo XX. Entre 1961 y 1980, pasó de 37 millones a 40 millones. Se mantuvo estable hasta un rápido crecimiento en la segunda mitad de la década de 1980.

En África, la población de burros creció de 8,5 millones a 13,7 millones entre 1949 y 1997. Hoy en día, hay 5 millones de asnos en Etiopía, 1,69 millones en Egipto, 1 millón en Nigeria, 678.000 en Sudán, 611.000 en Malí, 455.000 en Burkina Faso, 450.000 en Níger y 300.000 en Kenia.

En América Latina, hay 7,7 millones de burros actualmente. La mayoría se encuentran en México (3,25 millones), Colombia (710.000), Bolivia (720.000), Perú (520.000) y Venezuela (440.000).

En Asia, hay más de 20 millones de burros. De estos, unos 11 millones están en China. El resto se encuentra, en su mayoría, en Pakistán (3,9 millones) e India (1,6 millones).

En algunos países, la población de burros se ha reducido mucho hasta 1996. Esto se debe a varias razones, como la modernización de los medios de transporte. Ejemplos son Irán (que pasó de 2,16 millones a 1,4 millones desde 1976), Irak (que bajó de 530.000 a 145.000 en tres décadas), Turquía (que disminuyó de 1,97 millones en 1966 a 800.000), Yemen (de 790.000 en 1976 a 500.000), Marruecos (de 1,2 millones en 1976 a 880.000), Sudáfrica (de 310.000 a 100.000 en solo 10 años) y Brasil (de 1,46 millones a 1,37 millones desde 1976). Otras razones para esta reducción son las sequías y las malas condiciones de vida.

La reducción más grande se ha dado en Europa. Los burros pasaron de dos millones a medio millón en tres décadas. Varias razas autóctonas españolas están en peligro de extinción, especialmente la raza zamorano-leonesa y la catalana. Esto ha llevado a la creación de iniciativas para protegerlos. Incluso se ha empezado a usar la burroterapia para niños con discapacidades.

Refranes populares sobre el burro

  • A asno lerdo, arriero loco: Significa que si alguien es perezoso, quien lo dirige se desesperará.
  • Al asno muerto, la cebada al rabo: El remedio llega cuando ya es demasiado tarde.
  • Asno con oro, alcánzalo todo: Una persona rica puede conseguir lo que quiera, aunque no sea muy inteligente.
  • Asno de Arcadia, lleno de oro, y come paja: Se refiere a la persona avara que, aunque tiene riquezas, vive de forma miserable.
  • Asno de muchos, lobos lo comen: Cuando algo está a cargo de muchas personas, nadie se ocupa realmente de ello.
  • Asno lerdo, tú dirás lo tuyo y lo ajeno: Las personas indiscretas no saben guardar secretos, ni siquiera los suyos.
  • Asno que entra en dehesa ajena, volverá cargado de leña: Quien entra en un lugar prohibido se arriesga a ser castigado.
  • Asno sea quien asno batea: Critica a quienes dan trabajos importantes a personas que no son capaces de hacerlos.
  • Bien sabe el asno en cuya cara o casa rebuzna: La confianza excesiva con personas de menor rango puede llevar a faltas de respeto.
  • Burlas con el asno, daros ha en la barba con el rabo: No es bueno bromear con quien no tiene buenos modales.
  • Burro cargado de letras: Se dice de alguien que ha estudiado mucho pero no tiene sentido común ni habilidad para la vida práctica.
  • Cada asno con su tamaño: Cada persona debe estar con alguien de su mismo nivel o condición.
  • Caerse de un burro o de un asno: Reconocer un error o cambiar de opinión sobre algo.
  • Do vino el asno vendrá la albarda: Lo accesorio suele acompañar a lo principal.
  • El asno que no está hecho a la albarda, muerde la atafarra: Quienes no están acostumbrados a las dificultades las llevan muy mal.
  • Es un borrico: Se usa para decir que alguien es muy resistente al trabajo o, más comúnmente, que es tonto.
  • Mas quiero asno que me lleve, que caballo que me derrueque: Es mejor conformarse con una situación modesta que buscar grandes puestos que pueden ser peligrosos.
  • No compres asno de recuero, ni te cases con hija de mesonero: Advierte sobre el riesgo de elegir algo o a alguien que ha tenido mucho uso o experiencia.
  • No se hizo la miel para la boca del asno: Las cosas buenas o delicadas solo son apreciadas por quienes tienen buen gusto.
  • No ver siete sobre un asno o tres en un burro: Tener muy mala vista.
  • Poner a alguien a caer de un burro: Insultar o regañar a alguien con mucha dureza.
  • Poner a alguno sobre un borrico: Amenazar con un castigo público.
  • Por dar en el asno, dar en la albarda: Confundir las cosas sin saber lo que se hace.
  • Puesto en el borrico, igual da ciento que ciento y pico: Una vez que se ha dado el primer paso en algo difícil, lo demás parece más fácil.
  • Quien no puede dar en el asno, da en la albarda: Algunas personas, al no poder vengarse directamente de su enemigo, lo hacen dañando sus pertenencias.

Galería de imágenes

Véase también

Kids robot.svg En inglés: Donkey Facts for Kids

kids search engine
Burro para Niños. Enciclopedia Kiddle.