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Trastorno de ansiedad para niños

Enciclopedia para niños
Datos para niños
Trastorno de ansiedad
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Especialidad Psiquiatría, psicología crítica
Síntomas Preocupación, taquicardia, inestabilidad
Complicaciones Depresión, insomnio, mala calidad de vida, problemas de bienestar
Inicio habitual 15-35 años
Duración > 6 meses
Causas Factores genéticos, ambientales y psicológicos.
Factores de riesgo Experiencias difíciles en la infancia, historia familiar, pobreza
Diagnóstico test psicológico
Diagnóstico diferencial hipertiroidismo, enfermedades cardiovasculares, cafeína, abstinencia de ciertas sustancias
Tratamiento cambios en el estilo de vida, psicoterapia, medicamentos
Medicación antidepresivos, ansiolítico, betabloqueador
Pronóstico 12 % por año

Un trastorno de ansiedad es un tipo de enfermedad mental que se caracteriza por mucha ansiedad, miedo y cambios en el comportamiento. La ansiedad es como una preocupación por algo que podría pasar en el futuro. El miedo es una emoción fuerte que sentimos ante un peligro que está ocurriendo ahora.

Estas emociones pueden causar síntomas físicos. Por ejemplo, el corazón puede latir muy rápido (taquicardia) o puedes sentir temblores. A menudo, las personas intentan evitar las situaciones que les causan estos sentimientos.

Existen varios tipos de trastornos de ansiedad. Algunos de ellos son:

Antes, el trastorno por estrés postraumático y el trastorno obsesivo-compulsivo se consideraban trastornos de ansiedad. Ahora se clasifican en otras categorías.

Los trastornos de ansiedad se han estudiado desde finales del siglo XIX. Se pueden clasificar en dos grupos: los que tienen síntomas continuos y los que tienen síntomas que aparecen en episodios. Se ha encontrado que hasta un 18% de la población en Estados Unidos y un 20% en España pueden tener uno o más de estos trastornos. También se ha visto que los genes que influyen en la ansiedad son los mismos que los que influyen en la depresión y el trastorno bipolar.

La ansiedad puede manifestarse de cuatro maneras:

  • preocupación mental
  • tensión física
  • síntomas físicos
  • ansiedad que te hace sentir desconectado de la realidad

Cada una tiene sus propias características y puede necesitar tratamientos diferentes. Las emociones pueden ir desde un simple nerviosismo hasta ataques de terror o pánico. Hay cuestionarios especiales que ayudan a detectar los síntomas de ansiedad. Si se detectan, se recomienda una evaluación más profunda para saber si hay un trastorno. Los trastornos de ansiedad suelen durar un tiempo.

Tipos de Trastornos de Ansiedad

¿Qué es el Trastorno de Ansiedad Generalizada?

El trastorno de ansiedad generalizada (TAG) es un problema común y duradero. Se caracteriza por una ansiedad que no se enfoca en una cosa o situación específica. Las personas con TAG sienten preocupaciones y miedos constantes sobre cosas de la vida diaria.

Este trastorno es el más común en adultos mayores. A veces, la ansiedad puede ser un síntoma de otras condiciones o del uso de ciertas sustancias. Los médicos deben tener esto en cuenta. Se diagnostica TAG cuando una persona se ha preocupado demasiado por uno o más problemas casi todos los días durante seis meses o más. La persona puede tener dificultades para concentrarse y tomar decisiones.

¿Cómo se manifiesta el Trastorno de Pánico?

En el trastorno de pánico, una persona sufre ataques repentinos de miedo y terror muy intensos. Estos ataques suelen ir acompañados de síntomas como temblores, agitación, confusión, mareos, desmayos, náuseas y dificultad para respirar.

Los ataques de pánico aparecen de repente y alcanzan su punto máximo en menos de diez minutos. Pueden durar varias horas y ser provocados por el estrés, el miedo o incluso el ejercicio. La causa exacta no siempre es clara.

Para diagnosticar el trastorno de pánico, además de los ataques, la persona debe preocuparse mucho por las consecuencias de estos episodios. También puede tener miedo de futuros ataques o cambiar su comportamiento para evitarlos. A menudo, quienes lo padecen interpretan los latidos normales del corazón como una señal de que algo anda mal. Esto lleva a un miedo anticipado a sufrir otro ataque.

¿Qué es el Trastorno de Pánico con Agorafobia?

El trastorno de pánico con agorafobia es una variante que a menudo se presenta junto con el trastorno de pánico. Después de un ataque de pánico inesperado, la persona siente un gran temor a tener otro.

Por eso, la persona teme y evita cualquier situación que pueda provocarle un ataque de pánico. En casos graves, la persona puede no querer salir de casa para evitar un posible ataque.

¿Qué son los Trastornos Fóbicos?

Las fobias, o trastornos fóbicos, son la categoría más grande de trastornos de ansiedad. Incluyen todos los casos en los que el miedo y la ansiedad son provocados por un estímulo o situación específica. Entre el 5% y el 12% de la población mundial sufre de fobias.

Las personas con fobias suelen anticipar consecuencias terribles al encontrarse con el objeto de su miedo. Este puede ser cualquier cosa: un animal, un objeto, una persona, una situación o incluso un fluido corporal. Quienes lo padecen saben que su miedo es irracional y no proporcional al peligro real. Sin embargo, se sienten abrumados por un miedo que no pueden controlar.

¿Qué es el Trastorno de Ansiedad Social?

El trastorno de ansiedad social (TAS), también conocido como fobia social, es un miedo intenso y duradero. Se caracteriza por el temor a ser juzgado, avergonzado o humillado en situaciones sociales. Este miedo puede afectar el estudio, el trabajo y otras actividades diarias. Incluso puede dificultar hacer y mantener amigos.

La ansiedad social puede causar síntomas físicos como rubor, sudoración, temblores, taquicardia y dificultad para hablar. Al igual que con otras fobias, quienes sufren de ansiedad social a menudo intentan evitar las situaciones que les causan ansiedad. En casos graves, esto puede llevar al aislamiento social.

¿Qué es el Trastorno Obsesivo-Compulsivo?

El trastorno obsesivo-compulsivo (TOC) es un tipo de trastorno de ansiedad. Se caracteriza por la presencia de obsesiones (pensamientos o imágenes angustiantes, persistentes e intrusivos) y compulsiones (impulsos de realizar ciertos actos o rituales). Afecta a aproximadamente el 3% de la población mundial.

A menudo, las obsesiones y compulsiones son ilógicas. La persona siente la necesidad de completar un ritual para reducir la ansiedad causada por la obsesión. En algunos casos, las personas con TOC pueden tener obsesiones sin compulsiones.

Las obsesiones son pensamientos, impulsos o imágenes repetidas que la persona siente como ajenas a sí misma. No son solo preocupaciones excesivas sobre problemas reales. La persona reconoce que son producto de su mente e intenta suprimirlas.

Las compulsiones son comportamientos que se realizan para prevenir o reducir la ansiedad. Una persona con compulsiones se siente obligada a seguir reglas estrictas. Por ejemplo, lavarse las manos continuamente por una obsesión con la limpieza, o repetir ciertas palabras sin parar. Esto causa mucho malestar y puede interferir en la vida diaria, ocupando mucho tiempo.

¿Qué es el Trastorno de Estrés Postraumático?

El trastorno de estrés postraumático (TEPT) es un trastorno de ansiedad que surge después de una experiencia muy difícil o traumática. Puede ser el resultado de vivir situaciones extremas, como desastres naturales, accidentes graves o situaciones de acoso. También puede ocurrir por una exposición prolongada a estrés crónico.

Los síntomas comunes incluyen estar muy alerta (hipervigilancia), revivir el evento traumático (flashbacks), evitar ciertas situaciones, ansiedad, enojo y depresión. Hay varios tratamientos que ayudan a las personas con TEPT. Estos incluyen diferentes tipos de psicoterapia, como la terapia cognitivo-conductual (TCC), terapias de grupo y el apoyo de familiares y amigos. También pueden beneficiarse de medicamentos.

¿Qué es el Trastorno de Ansiedad por Separación?

Quien padece un trastorno de ansiedad por separación siente una ansiedad muy intensa y fuera de lo normal al separarse de una persona o un lugar. Es normal que los bebés y niños pequeños sientan ansiedad al separarse. Pero solo se considera un trastorno cuando este sentimiento es excesivo o inapropiado para su edad.

Este trastorno afecta a aproximadamente el 7% de los adultos y el 4% de los niños. Los casos en niños suelen ser más graves. A veces, incluso una separación corta puede provocar sentimientos de pánico.

Trastornos de Ansiedad en la Infancia

Los niños, al igual que los adultos, experimentan ansiedad, preocupación y miedo. Esto es especialmente cierto cuando se enfrentan a nuevas experiencias. Sin embargo, si la ansiedad dura mucho tiempo e interfiere con las actividades diarias del niño, se considera un problema.

Cuando los niños tienen ansiedad severa, afecta su pensamiento, toma de decisiones, percepciones, aprendizaje, atención y concentración. Además del miedo y el nerviosismo, pueden empezar a evitar lugares o situaciones. La ansiedad puede causar muchos síntomas físicos, como aumento de la presión arterial, taquicardias, náuseas, vómitos, dolor de estómago, úlceras, diarrea, hormigueo, debilidad y sensación de falta de aire. Otros síntomas pueden ser inseguridad, autocrítica, irritabilidad, problemas para dormir y pensamientos muy tristes o desesperanzadores.

Si no se detecta o se trata a tiempo, aumenta el riesgo de fracaso escolar y de evitar actividades sociales. También pueden desarrollar otros problemas de salud mental, como depresión, trastornos de la conducta alimentaria y trastorno obsesivo-compulsivo.

Alrededor del 13% de los niños y adolescentes entre 8 y 17 años experimentan algún tipo de ansiedad. La ansiedad es uno de los problemas de salud mental más comunes en la infancia y adolescencia. La cantidad de casos varía, pero muchos no son diagnosticados ni tratados. El temperamento de un niño puede influir en el desarrollo de estos trastornos.

Es difícil investigar la ansiedad en niños porque su psicología cambia muy rápido. Por ejemplo, entre los 6 y 8 años, el miedo a la oscuridad disminuye, pero pueden preocuparse por el rendimiento escolar o las relaciones sociales. Si los niños experimentan mucha ansiedad en esta etapa, podría ser una señal de riesgo para desarrollar un trastorno de ansiedad en la vida adulta. Se cree que tanto factores biológicos como psicológicos influyen. Los niños con padres que han tenido trastornos de ansiedad tienen más riesgo de padecerlos. El estrés también es un factor importante, ya que los niños y adolescentes son más vulnerables a él.

Trastornos de la Ansiedad en los Jóvenes

La ansiedad es un sentimiento de inquietud, nerviosismo, preocupación o pánico por algo que podría ocurrir. Mientras que el miedo es la emoción que sentimos ante una amenaza presente, la ansiedad es la sensación de un peligro o problema que está por suceder.

Los sentimientos de ansiedad pueden ser leves o intensos. La ansiedad leve puede sentirse como inquietud. La ansiedad más intensa puede sentirse como miedo o pánico. La preocupación y la tensión también son formas de ansiedad. El miedo escénico o la timidez al conocer gente nueva también lo son.

Es normal sentir ansiedad ante situaciones nuevas, desconocidas o desafiantes. Por ejemplo, un examen, una fecha especial o una presentación escolar pueden causar ansiedad normal. Aunque estas situaciones no son una amenaza real, pueden hacer que alguien se sienta "amenazado" por la posible vergüenza o por cometer un error. También pueden aparecer sensaciones físicas como palpitaciones, manos sudorosas o molestias en el estómago.

La ansiedad puede ayudarnos a estar alerta y prepararnos para enfrentar problemas. Sin embargo, una ansiedad demasiado fuerte puede impedirnos rendir al máximo. Demasiada ansiedad puede hacer que una persona se sienta abrumada e incapaz de hacer lo que necesita.

La Adolescencia y la Ansiedad

La adolescencia puede ser un período de mucha sensibilidad emocional. Los estudiantes de secundaria que tienen dificultades de aprendizaje o atención pueden experimentar más estrés que sus compañeros. También pueden ser más propensos a desarrollar ansiedad.

Trastorno de Ansiedad Social en Jóvenes

El trastorno de ansiedad social es un miedo intenso y persistente a ser observado y juzgado por otros. Este miedo puede afectar el estudio y otras actividades diarias. Incluso puede dificultar hacer y mantener amigos. Sin embargo, el trastorno de ansiedad social no tiene por qué impedir que los jóvenes alcancen su potencial. El tratamiento puede ayudar a superar los síntomas.

Los trastornos de ansiedad afectan a muchas personas. Los jóvenes son un grupo vulnerable debido a la cantidad de cambios que experimentan en esta etapa de sus vidas.

Es normal sentirse ansioso a veces, especialmente si la vida es estresante. Pero la ansiedad y preocupación excesivas y continuas, que son difíciles de controlar e interfieren en las actividades diarias, pueden ser señal de un trastorno de ansiedad generalizada. Este trastorno puede aparecer en la niñez o en la edad adulta. Tiene síntomas similares a los del trastorno de pánico y el trastorno obsesivo-compulsivo, pero son diferentes. Vivir con TAG puede ser un desafío a largo plazo. A menudo, se presenta junto con otros trastornos de ansiedad o emocionales. En la mayoría de los casos, el TAG mejora con psicoterapia o medicamentos. También es útil hacer cambios en el estilo de vida, aprender a manejar los desafíos y practicar técnicas de relajación.

¿Qué Causa los Trastornos de Ansiedad?

Como muchas condiciones de salud mental, la causa de los trastornos de ansiedad probablemente surge de una combinación compleja de factores. Estos pueden incluir:

  • Diferencias en la química y el funcionamiento del cerebro.
  • Diferencias en cómo una persona percibe las amenazas.
  • El desarrollo personal y la personalidad.

Factores de Riesgo de la Ansiedad

A las mujeres se les diagnostica trastorno de ansiedad generalizada un poco más a menudo que a los hombres. Los siguientes factores podrían aumentar el riesgo de padecer un trastorno de ansiedad generalizada:

  • Personalidad: Una persona que es tímida, que tiene un temperamento más negativo o que evita situaciones que considera peligrosas, puede ser más propensa a tener un trastorno de ansiedad generalizada.
  • Genética: El trastorno de ansiedad generalizada puede ser hereditario, es decir, puede pasar de padres a hijos.
  • Experiencias: Las personas con trastorno de ansiedad generalizada pueden tener antecedentes de cambios importantes en la vida, experiencias difíciles o traumáticas durante la infancia, o un evento difícil reciente. Las enfermedades crónicas u otros problemas de salud mental podrían aumentar el riesgo. El trastorno de ansiedad generalizada a menudo se presenta junto con otros problemas de salud mental, lo que puede hacer que el diagnóstico y el tratamiento sean más difíciles. Algunos problemas de salud mental que a menudo aparecen junto con el trastorno de ansiedad generalizada incluyen:
    • Fobias
    • Trastorno de pánico
    • Trastorno de estrés postraumático (TEPT)
    • Trastorno obsesivo-compulsivo (TOC)
    • Depresión
    • Pensamientos muy tristes o desesperanzadores.

Causas Biológicas de la Ansiedad

Se sabe que niveles bajos de GABA, un neurotransmisor que calma el sistema nervioso, contribuyen a la ansiedad. Muchos medicamentos para la ansiedad funcionan al influir en los receptores de GABA.

Los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS), que son medicamentos usados para la depresión, también son el primer tratamiento para los trastornos de ansiedad. Un estudio de 2004 sugirió que los ISRS alivian la ansiedad al actuar directamente sobre las neuronas GABA.

El consumo excesivo de ciertas sustancias puede causar o empeorar la ansiedad y los ataques de pánico. Incluso cantidades moderadas pueden aumentar la ansiedad en algunas personas.

En un estudio de 1988-1990, se encontró que en la mitad de los pacientes con trastornos de ansiedad, la causa era el consumo de ciertas sustancias. En estos pacientes, la ansiedad aumentaba durante la abstinencia y luego desaparecía.

La exposición a ciertos químicos en el trabajo también se ha relacionado con el desarrollo de trastornos de ansiedad.

Las personas con trastorno obsesivo-compulsivo muestran cambios en el volumen de ciertas partes del cerebro. Esto es diferente a otros trastornos de ansiedad, donde también se observan cambios en el volumen de la materia gris en otras áreas.

La Amígdala y la Ansiedad

La amígdala es una parte del cerebro que procesa el miedo y la ansiedad. Su funcionamiento puede alterarse en los trastornos de ansiedad. La información sensorial llega a la amígdala, que la procesa y comunica su importancia a otras partes del cerebro.

Otra área importante es el núcleo central de la amígdala, que controla las respuestas específicas al miedo. En personas con trastornos de ansiedad, esta área puede mostrar diferencias. También hay una menor conexión entre la amígdala y otras áreas del cerebro que controlan los estímulos generales, mientras que mantiene una alta conexión con las áreas que controlan las funciones ejecutivas. Esto podría ser una forma en que el cerebro intenta compensar el mal funcionamiento de la amígdala.

Estudios en animales y personas relacionan los trastornos de ansiedad con dificultades para mantener un equilibrio adecuado en el sistema nervioso.

El Hipocampo y la Ansiedad

Un estudio de 2010 mostró la relación entre el hipocampo (una estructura relacionada con el aprendizaje y la memoria) y la corteza cerebral para controlar los comportamientos relacionados con la ansiedad en ratones. El hipocampo envía información a la corteza sobre las emociones del entorno, lo que ayuda a la corteza a reconocer una amenaza. La corteza, a su vez, influye en otras zonas del cerebro, como la amígdala, para producir ansiedad como respuesta de defensa. Sin embargo, se necesitan más estudios para confirmar esta conexión en humanos.

Enfermedades que Pueden Causar Ansiedad

Hay muchas enfermedades que pueden causar síntomas similares a los de un trastorno mental. A veces, es difícil identificarlas. Entre ellas se incluyen ciertos trastornos hormonales, metabólicos y neurológicos, así como algunas enfermedades del sistema inmune, digestivas, cardíacas o infecciosas, y la falta de ciertas vitaminas.

A veces, los síntomas de ansiedad aparecen antes que otros síntomas de la enfermedad. Incluso pueden ser las únicas señales de una enfermedad, como en algunos casos de enfermedad celíaca. Por eso, a menudo el diagnóstico correcto se retrasa.

Los síntomas de ansiedad también pueden ser una señal de un síndrome de activación mastocitaria (MCAS).

Otros Factores de Riesgo

A veces, el consumo de ciertas sustancias como la cafeína, llevar un estilo de vida estresado, tener situaciones económicas o familiares complicadas, problemas en el trabajo, pasar por una crisis importante en la vida o tener una enfermedad física crónica, pueden provocar un trastorno de ansiedad.

Ciertos rasgos de la personalidad, especialmente el neuroticismo (tendencia a experimentar emociones negativas), aumentan las probabilidades de desarrollar un trastorno de ansiedad.

¿Qué Tan Comunes Son los Trastornos de Ansiedad?

Los porcentajes de personas que tienen estos trastornos varían mucho entre estudios. Esto se debe a factores como el país, el sexo y la edad, o a cómo se realizó el estudio. La mayoría de los estudios se centran en pacientes de atención médica general. En países occidentales, entre el 5% y el 30% de la población puede tener un trastorno de ansiedad.

La ansiedad puede presentarse junto con otros trastornos o condiciones, como la depresión, los trastornos del espectro autista o el TDAH.

En personas mayores con demencia, es común que desarrollen problemas de ansiedad. Además de no ser diagnosticados, los trastornos de ansiedad pueden ser mal diagnosticados. Esto ocurre cuando los síntomas físicos (como taquicardias por problemas del corazón) se confunden con ansiedad.

¿Cómo se Desarrollan los Trastornos de Ansiedad?

Los trastornos de ansiedad suelen ser condiciones que pueden dificultar la vida diaria. Tienden a volverse crónicos con el tiempo y empeoran en situaciones de estrés. Pueden aparecer a edades muy tempranas o de repente después de un evento desencadenante. Al principio, a menudo vienen acompañados de dolores de cabeza, sudoración, taquicardia, palpitaciones y presión arterial alta. En algunos casos, esto lleva a la fatiga física y mental.

A menudo se confunden los términos ansiedad y miedo, pero clínicamente tienen significados diferentes. La ansiedad es un estado emocional desagradable y difuso, cuya causa es difícil de identificar y se siente incontrolable. El miedo es una respuesta emocional y física a una amenaza identificable, real o supuesta. El término trastorno de ansiedad incluye tanto miedos (fobias) como estados de ansiedad.

La depresión a menudo se presenta junto con estos trastornos. Alrededor del 60% de las personas diagnosticadas con trastornos de ansiedad también tienen depresión. En algunos casos, la depresión es una consecuencia de sufrir ansiedad. No es raro que a estas personas se les diagnostique un "trastorno mixto ansioso-depresivo". La gran similitud entre los síntomas de ansiedad y depresión, y el hecho de que los mismos factores de estrés ambiental puedan causar síntomas en ambos, explica esta alta tasa de coexistencia.

Los estudios clínicos han relacionado la probabilidad de sufrir alguno de estos trastornos en familias con antecedentes de otros trastornos de ansiedad. Esto es especialmente cierto para el trastorno obsesivo-compulsivo o el trastorno de ansiedad generalizada.

Tratamientos para la Ansiedad

Psicoterapia

La terapia cognitivo-conductual (TCC) ha demostrado ser muy efectiva para los diversos trastornos de ansiedad. Esta terapia trabaja en dos aspectos principales de la mente humana: los pensamientos (cogniciones) y el comportamiento. Por ejemplo, en el caso de la fobia social, la TCC ayuda al paciente a cuestionar sus miedos, como el de sentirse observado o juzgado. El componente conductual busca cambiar las reacciones de ansiedad, principalmente a través de estrategias de exposición y desensibilización sistemática. La terapia cognitiva intenta identificar y cambiar los pensamientos negativos o irracionales que generan respuestas poco útiles.

Medicamentos

Cuando los psiquiatras especialistas indican medicamentos, generalmente se recomiendan los antidepresivos conocidos como ISRS como primera opción. Las benzodiazepinas a veces se usan para tratamientos de corta duración. Actualmente se consideran medicamentos de segunda opción debido a sus efectos secundarios, como el deterioro de las funciones cognitivas y el riesgo de dependencia.

Libros de Autoayuda

Los libros de autoayuda y las guías para pacientes son una opción de tratamiento para las personas con trastornos de ansiedad. Siempre deben complementar otras medidas terapéuticas.

¿Cuál es el Pronóstico de los Trastornos de Ansiedad?

La mayoría de los trastornos de ansiedad suelen ser crónicos, con períodos en los que los síntomas empeoran debido al estrés o a alguna enfermedad. La terapia psicológica y los medicamentos son efectivos a corto plazo para aliviar los síntomas. A largo plazo, el pronóstico depende del tipo de trastorno y de su gravedad. Actualmente, se sabe poco sobre el pronóstico a largo plazo.

Véase también

Kids robot.svg En inglés: Anxiety disorder Facts for Kids

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Trastorno de ansiedad para Niños. Enciclopedia Kiddle.