robot de la enciclopedia para niños

Mozárabe para niños

Enciclopedia para niños
Archivo:Arcos de herradura mozárabe de Santiago de Peñalba
Arcos de herradura del templo mozárabe de Santiago de Peñalba.

La palabra mozárabe (que viene del árabe mustaʕrab, que significa «arabizado») se usa para referirse a los cristianos que vivían en Al-Ándalus, el territorio de la península ibérica que estuvo bajo dominio musulmán. Estos cristianos eran descendientes de los visigodos y, al igual que los judíos, tenían un estatus especial llamado dhimmis. Esto significaba que el estado musulmán protegía sus vidas, propiedades y libertad de religión, siempre y cuando fueran leales y pagaran un impuesto especial llamado yizia.

Es importante saber que el término «mozárabe» no lo usaban los musulmanes. Fueron los cristianos de los reinos del norte de España quienes lo emplearon para describir a los cristianos de Al-Ándalus que se mudaban a sus tierras. Este nombre indicaba que los mozárabes habían adoptado algunas costumbres y formas de vida de sus vecinos árabes. El primer documento conocido que usa la palabra «mozárabe» es del Reino de León y data del año 1024.

Durante el primer siglo de la presencia musulmana en la península, los mozárabes eran la mayoría de la población en Al-Ándalus. Sin embargo, su número fue disminuyendo poco a poco. Esto ocurrió porque muchos se fueron convirtiendo al islam, a menudo debido a impuestos altos y otras restricciones. Para el siglo X, los mozárabes ya eran una minoría, y la mayoría de la gente en Al-Ándalus era musulmana.

Hubo momentos de tensión con el poder musulmán, como el de los Mártires de Córdoba entre los años 850 y 859. La situación de los mozárabes cambió aún más con la llegada de los almorávides a finales del siglo XI. En 1126, muchos mozárabes fueron trasladados a la fuerza al norte de África. Esto hizo que casi desaparecieran de las ciudades de Al-Ándalus.

Historia de los mozárabes

Los mozárabes tenían un estatus legal especial en la sociedad musulmana, similar al de los judíos. Se les permitía mantener su cultura, su forma de organizarse y su religión. También contaban con ciertas leyes que los protegían. Sin embargo, tenían que pagar impuestos que los musulmanes no pagaban y enfrentaban otras limitaciones. Por ejemplo, no se destruyeron las iglesias que ya existían, pero no se les permitía construir nuevas ni ampliar las antiguas.

Por estas razones, a medida que la cultura islámica se hacía más fuerte en la península, muchos mozárabes adoptaron costumbres árabes y se convirtieron al islam. Los motivos solían ser económicos, ya que al convertirse, dejaban de pagar ciertos impuestos. La ley islámica protegía a los grupos no musulmanes, pero también animaba su integración al islam de diversas maneras. Las comunidades mozárabes se regían por sus propias leyes, el Liber Iudicorum, y tenían sus propios jueces para resolver disputas entre cristianos.

Archivo:Spagna, acquamanile a forma di pavone reale, 972, lega di rame,
Aguamanil en forma de pavo real del año 972, conservado en el Museo del Louvre. Tiene una inscripción bilingüe en árabe y latín que indica que fue hecho por un artista cristiano de Al-Ándalus.

Durante la conquista de la península ibérica que comenzó en el año 711, algunos nobles cristianos visigodos incluso colaboraron con los árabes en la lucha contra otros cristianos.

La mezcla de culturas en la península, debido a las fronteras cambiantes y la larga presencia árabe, favoreció la integración. Como la sociedad islámica era muy religiosa, la conversión al islam significaba mucho más que un cambio de fe; era una integración completa. Aunque hubo casos de "falsas conversiones", la mayoría de los cristianos se fueron adaptando al islam por razones sociales, económicas o simplemente por el paso del tiempo. Así, los cristianos bajo dominio musulmán se "arabizaron" culturalmente, por eso se les llamó mozárabes, aunque siguieron siendo cristianos.

Este proceso fue, en general, pacífico. Sin embargo, algunos mozárabes huyeron a los reinos cristianos del norte. A veces, las quejas de la comunidad cristiana no eran escuchadas por los jueces islámicos, y esta falta de justicia provocó algunas revueltas y actos de resistencia.

Restricciones y desafíos para los cristianos

Archivo:Elephant and Castle (Fresco in San Baudelio, Spain)
Pintura mural mozárabe de San Baudelio de Berlanga, actualmente en el Museo del Prado.

Durante el tiempo de dominio musulmán en Al-Ándalus, se aplicaron reglas conocidas como el Pacto de Omar. Estas reglas establecían cómo debían ser tratados los cristianos y judíos. El objetivo de estos pactos era mantener el control político en las regiones donde la mayoría no era musulmana. Las condiciones eran difíciles, y a pesar de los muchos cambios políticos en Al-Ándalus, los cristianos fueron perdiendo poco a poco sus derechos y sus propiedades. Situaciones similares ocurrieron con otros grupos cristianos en diferentes partes del mundo islámico, como los coptos en Egipto o los maronitas en el Líbano.

Los cristianos no tenían los mismos derechos que los musulmanes, y sus libertades, que al principio eran amplias, fueron disminuyendo con el tiempo. Se les permitía practicar su religión en privado, pero su autonomía cultural se redujo cada vez más. Los mozárabes perdieron estatus, pero mantuvieron su dignidad y su cultura, y nunca perdieron el contacto con el mundo cristiano.

Con el paso de las generaciones, los gobernantes musulmanes crearon nuevas leyes que eran desfavorables para los cristianos. Finalmente, se prohibió construir nuevas iglesias y tocar las campanas. Sin embargo, en el año 850, cuando Eulogio de Córdoba escribió sobre los Mártires de Córdoba, todavía había al menos cuatro iglesias cristianas en la ciudad y nueve monasterios. Pero su existencia se volvió cada vez más difícil.

Algunos líderes cristianos fueron ejecutados, como San Eulogio de Córdoba. También se registraron otras ejecuciones en Córdoba, incluyendo la de un joven llamado Pelayo en el año 925, por negarse a convertirse al islam. Las ejecuciones continuaron en los años siguientes.

Desde ese momento, los cristianos se sintieron cada vez más marginados. No solo no podían construir nuevas iglesias o tocar las campanas, sino que también fueron excluidos de la mayoría de los puestos importantes en la política, el ejército o la sociedad. Además, sufrían muchas otras injusticias bajo la ley islámica. A mediados del siglo IX, como se vio con los mártires de Córdoba, había una clara resistencia cristiana a la presión del islam, buscando evitar su conversión y la pérdida de su cultura.

La respuesta oficial a los mártires de Córdoba fue encarcelar a los líderes de la comunidad cristiana. Hacia el final de esa década, se empezaron a cerrar los monasterios cristianos, lo que llevó a una lenta pero constante desaparición del cristianismo en esas zonas.

Integración en los reinos cristianos

Con la Reconquista, cuando los reinos cristianos del norte recuperaron territorios, los mozárabes se unieron a ellos. Los reyes cristianos favorecieron a quienes se asentaron en las zonas de frontera. Algunos mozárabes también emigraron al norte, al reino de los francos, en tiempos de persecución.

Un número importante de mozárabes se estableció en el Valle del Ebro. El rey Alfonso VI de León animó a los mozárabes a asentarse allí, prometiéndoles tierras y recompensas. Se dice que Alfonso envió a unos 10.000 mozárabes para que se establecieran en el Ebro.

Arte mozárabe

Archivo:Arcos de herradura en la iglesia de Santiago de Peñalba
Arcos de herradura en la iglesia mozárabe de Santiago de Peñalba.

El arte mozárabe es un estilo artístico muy variado que se desarrolló principalmente en Al-Ándalus y en el Reino de León durante el siglo X. Se caracteriza por mezclar elementos de la tradición visigoda del norte con el arte hispanomusulmán del califato de Córdoba, que a su vez tenía raíces bizantinas.

En el Reino de León, las comunidades de monjes mozárabes que venían del sur ayudaron a construir iglesias sencillas y complejos monásticos. Algunos ejemplos importantes son Santiago de Peñalba, San Miguel de Escalada, San Cebrián de Mazote, Santa María de Wamba y San Salvador de Palat de Rey.

Las personas importantes de León, desde los reyes hasta figuras de la iglesia, apoyaron este arte. Aunque eran cristianos del norte, les gustaban las influencias de Al-Ándalus. Por ejemplo, el rey Alfonso III de Asturias incluso envió a su hijo a la corte de los Banu Qasi en Zaragoza.

En el territorio de Al-Ándalus, quedan pocos ejemplos de templos construidos por mozárabes. El más conocido son las iglesias excavadas en la roca de Bobastro, en Ardales, Málaga. Este lugar formó parte de un complejo defensivo y religioso durante la rebelión de Omar ibn Hafsún, un líder que se convirtió al cristianismo y desafió al emirato de Córdoba en el siglo IX. Bobastro no solo era un lugar de culto, sino también un símbolo de resistencia.

El arte mozárabe combina dos tradiciones, una cristiana del norte y otra musulmana del sur. A pesar de sus diferencias, ambas compartían una base clásica mediterránea. Este arte se distingue por su gran variedad de formas y por ser muy original dentro del arte prerrománico europeo. Las construcciones mozárabes experimentaban con estructuras abovedadas, cúpulas, capiteles y relieves, y usaban la técnica de pintura mural "a la romana" con influencia andalusí.

Lengua mozárabe

La lengua mozárabe estaba formada por diferentes dialectos romances, es decir, lenguas que vienen del latín. No había una única lengua mozárabe, sino varias. A diferencia de otras lenguas romances, los pocos textos que se conservan están escritos en alfabeto árabe en lugar de alfabeto latino. Se cree que el mozárabe era el habla de las comunidades cristianas que vivían en las grandes ciudades del antiguo reino visigodo, bajo dominio musulmán. Conocemos estos dialectos gracias a las jarchas, que eran las estrofas finales de unas poesías llamadas moaxajas. A veces, estas jarchas usaban frases en romance con algunas palabras árabes y hebreas.

Según el experto Sola-Solé, las palabras árabes que aparecen en las jarchas suelen estar relacionadas con el amor, que era el tema principal de estas poesías.

Sola-Solé también señala que la lengua mozárabe es una mezcla: un 40% de sus palabras son de origen oriental (árabe) y un 60% son de origen romance. La mayoría de las palabras orientales son sustantivos, mientras que los verbos son menos comunes.

Aquí tienes algunos ejemplos de palabras españolas modernas que vienen del árabe:

  • algodón < al-qutun
  • alfombra < al-ḥumra
  • alcoba < al-qubbah
  • aldea < ad-dayah
  • alcalde < al-qadi 'el juez'
  • albóndiga < al-bunduqa

Características de la lengua mozárabe

En algunos aspectos, el mozárabe se considera más antiguo que otras lenguas romances. Los pocos documentos escritos que se han identificado como mozárabe muestran características antiguas, como la conservación de grupos de consonantes del latín (CL, FL, PL) y de consonantes que no vibran entre vocales (P, T, C). Por ejemplo, se usaban palabras como lopa (loba), toto (todo) y formica (hormiga).

La forma de algunas palabras en mozárabe es más parecida al latín que a otras lenguas romances en general. Esta variedad de romance tuvo una gran influencia en la formación del portugués, el español y, en particular, el español de Andalucía. Por eso, estos idiomas tienen muchas palabras de origen árabe andalusí.

Desafíos en la traducción del mozárabe

La traducción del mozárabe es complicada, sobre todo porque se escribía en árabe, y en el alfabeto árabe las vocales no suelen escribirse. Esto significa que cada traducción de las jarchas puede ser un poco diferente, ya que depende de cómo cada experto interprete las consonantes. Además, como el mozárabe era una mezcla de lenguas, en cada región donde se hablaba tenía una combinación distinta. Por eso, hay mucho debate y dificultad al traducir el mozárabe y, especialmente, las jarchas.

Como explica el experto Galmés de Fuentes, las mayores dificultades para entender las palabras mozárabes están en las vocales. Esto se debe a que no siempre se escriben y a que el árabe clásico solo tiene tres vocales (a, i, u). Por lo tanto, es difícil representar las vocales "e" u "o" del romance usando los caracteres árabes.

Ejemplo de mozárabe del siglo XI

Mozárabe: Castellano: Ladino/
Judeoespañol
:
Gallego-
Portugués
:
Gallego: Catalán: Leonés/
Asturiano
:
Portugués: Latina:

Mio sîdî ïbrâhîm
yâ tú uemme dolge
fente mib
de nohte
in non si non keris
irey-me tib
gari-me a ob
legar-te

Mi señor Ibrahim,
¡oh tú, hombre dulce!
ven a mí
por la noche.
Si no, si no quisieres,
iré a ti,
dime dónde
encontrarte.

Mio sinyor Ibrahim,
Ay vos!, hombre dulse!
venite a mi
de noche.
Si non, si non keres,
ire a vos,
decime onde
toparte.

Meu senhor Ibrâhim,
ó tu, homem doce!
vem a mim
de noite.
Se non, se non queres,
ir-me-ei a ti,
diz-me onde
te encontro.

Meu señor Ibrahim,
oh ti/tu, home doce!
ven a min
de noite.
Se non, se non quixeres,
ireime a ti,
dime onde
te encontro.

Mon senyor Ibrahim,
oh tu, home dolç!
Vine a mi
de nit.
Si no, si no vols,
aniré a tu,
digues-me (dis-me) on
et trobo/e.

El mio señor Ibrahim,
á tu, home melgueru!
ven a min
pela nueche.
Si non, si nun quies,
dire a ti,
dime ónde
atopate.

Meu senhor Ibrahim,
ó tu, homem doce!
Vem a mim
de noite.
Senão, se não quiseres,
ir-me-ei a ti,
diz-me onde
te encontro.

O domine mi Ibrahim,
o tu, homo dulcis!
Veni mihi
nocte.
Si non, si non vis,
ibo tibi,
dic mihi ubi
te inveniam.

Los mozárabes hoy: una tradición viva

Los mozárabes que vivían en los territorios recuperados por los reinos cristianos del norte se unieron con los nuevos habitantes, ya que compartían la misma religión. Sin embargo, en algunos lugares, como la ciudad de Toledo, mantuvieron una identidad propia durante un tiempo.

Varias iglesias de Toledo usaban un rito mozárabe en sus ceremonias religiosas, que era diferente al del norte de España. Este rito todavía se mantiene por tradición en algunas iglesias de la ciudad. Por ejemplo, la Misa y el oficio se celebran diariamente en latín en la capilla del Corpus Christi de la Catedral Primada de Toledo. La misa en rito hispano mozárabe también se celebra en español semanalmente en un monasterio de Madrid, y mensualmente en el Monasterio de Santa María de Valdediós en Asturias.

En 1992, se presentó al papa Juan Pablo II el primer volumen del Nuevo Misal Hispano-Mozárabe. El propio papa celebró la Santa Misa con este rito el 28 de mayo de ese año, siendo la primera vez que un papa lo hacía.

En 2013, para celebrar el 800 aniversario de la conquista de Alcaraz (en la actual provincia de Albacete) por el rey Alfonso VIII de Castilla, se celebró una misa con este rito en la Parroquia de la Santísima Trinidad y Santa María. Esta celebración, presidida por el arzobispo de Toledo, fue un reconocimiento a los esfuerzos por conservar este legado a lo largo de los siglos.

Caballeros mozárabes de Toledo

Existen los Caballeros Mozárabes de Nuestra Señora de la Esperanza de San Lucas de la Imperial ciudad de Toledo. Estos caballeros son descendientes directos de los cristianos que vivieron bajo dominio musulmán en Toledo y que ayudaron al Rey Alfonso VI a conquistar la ciudad.

Alfonso VI reconoció la fe cristiana de estos caballeros y les concedió el "Fuero Mozarabus" en el año 1085. Este fuero les otorgaba el privilegio de ser armados caballeros, lo que en esa época significaba que se les reconocía como nobles, ya que solo los nobles podían ser militares.

El 20 de marzo de 2001, se conmemoraron en Toledo los 900 años de la concesión de este fuero por Alfonso VI. Este documento, llamado "Charta Firmitatis", liberaba a "todos los Mozárabes de Toledo, tanto Caballeros como Peones", de antiguas sujeciones y les daba libertad. Les permitía seguir rigiéndose por el "Libro del Fuero Judgo antiguo" y, lo más importante, les daba la libertad de que "si alguno fuere de entre ellos de pie y quisiere y tuviere poder, que sea Caballero". Esto equivalía a declararlos nobles. Es el fuero más antiguo de este tipo que se conserva.

De este fuero, que declara la hidalguía (nobleza) de los mozárabes, y que ha sido confirmado por la mayoría de los reyes de Castilla y de España, nace la Ilustre Comunidad Mozárabe de Toledo. Hoy en día, esta comunidad está formada por cerca de 2000 familias que mantienen esta tradición, rito y jurisdicción parroquial.

El título con el que se trata a estos caballeros es el de Ilustrísimo.

La comunidad Mozárabe, organizada por familias, tiene una rama social, la Hermandad de Caballeros y Damas Mozárabes. Ellos participan en la procesión del Corpus Christi, entre otros actos, y se agrupan en torno a las parroquias de Santas Justa y Rufina y de Santa Eulalia y San Marcos, en Toledo. La cabeza de la mozarabía es el Cardenal Primado de las Españas y Arzobispo de Toledo. También existe una rama cultural a través del Instituto de Estudios Visigótico-Mozárabes de Toledo.

El Cardenal Francisco Jiménez de Cisneros mandó construir en la Catedral de Toledo la capilla del Corpus Christi. En ella, por un permiso especial del papa, se celebra la misa y el oficio coral según el Rito Mozárabe o Liturgia Hispánica. Esta es una forma de mantener viva la liturgia visigoda, conservada por los cristianos que vivieron bajo el dominio árabe. La capilla tiene una reja gótica, un mosaico de la Virgen con el Niño y una gran pintura mural de Juan de Borgoña que conmemora la toma de Orán por el Cardenal Cisneros en 1509.

Actualmente, los Caballeros Mozárabes participan en la procesión del Corpus Christi de Toledo. Desde el año 2005, la entidad está hermanada con la Real Cofradía de Caballeros Cubicularios de Zamora.

Para estos actos, visten un manto de tela azul con un gorro del mismo color. Llevan bordada la cruz de Alfonso VI de León en el brazo izquierdo (el gorro y el manto tienen detalles dorados).

|

Véase también

Kids robot.svg En inglés: Mozarabs Facts for Kids

kids search engine
Mozárabe para Niños. Enciclopedia Kiddle.