Multiculturalismo para niños
El multiculturalismo es una forma de entender cómo diferentes culturas pueden vivir juntas en un mismo lugar. Imagina una "ensalada de frutas" donde cada fruta (cultura) mantiene su sabor único, pero todas se mezclan para crear algo delicioso. Esto es diferente de un "crisol de razas", donde todas las culturas se funden en una sola.
En la sociedad, el multiculturalismo significa que personas de distintos orígenes étnicos, con sus propias tradiciones y costumbres, colaboran y se comunican sin tener que dejar de ser quienes son. Puede referirse a un barrio con muchas culturas o a un país entero.
Desde el punto de vista de la política, el multiculturalismo incluye ideas y acciones que buscan que todas las culturas en una sociedad sean respetadas por igual. También promueve que se mantenga la diversidad cultural.
Existen dos maneras principales de aplicar el multiculturalismo:
- Una se enfoca en la interacción y comunicación entre las culturas, lo que a veces se llama interculturalismo.
- La otra se centra en la diversidad y la singularidad de cada cultura, lo que a veces puede llevar a desafíos o desacuerdos.
Los defensores del multiculturalismo creen que ayuda a proteger la diversidad cultural global.


Contenido
¿Qué es el multiculturalismo?
En la filosofía política, el multiculturalismo explora cómo las sociedades pueden o deben responder a las diferencias culturales y religiosas. Se relaciona con la idea de reconocer la identidad de cada grupo y sus particularidades. También tiene que ver con los intereses económicos y el poder político.
Hoy en día, el multiculturalismo se usa para incluir y definir a grupos que han enfrentado desafíos, como los afroamericanos, las minorías étnicas y religiosas, los pueblos indígenas e incluso las personas con discapacidad.
El término se usa mucho en los países occidentales que, en los siglos XVIII y XIX, habían desarrollado una identidad nacional única. Desde la década de 1970, el multiculturalismo se ha convertido en una política oficial en varias naciones occidentales, en parte porque muchas grandes ciudades son ahora un mosaico de culturas.
El gobierno canadiense es conocido por impulsar la idea del multiculturalismo, destacando la importancia de la inmigración. Canadá adoptó el multiculturalismo como política nacional oficial en 1971, seguido por Australia en 1973. Muchos países de la Unión Europea también lo adoptaron. Sin embargo, algunos gobiernos europeos han cambiado esta política, volviendo a un enfoque más monocultural.
Muchos países en África, Asia y las Américas son naturalmente diversos en cultura. Las políticas que adoptan a menudo son similares a las multiculturales de Occidente, aunque sus razones históricas pueden ser diferentes.
Debates sobre el multiculturalismo
La mayoría de los debates sobre el multiculturalismo giran en torno a si es la mejor manera de manejar la diversidad y la integración de los inmigrantes.
Argumentos a favor del multiculturalismo
Quienes apoyan el multiculturalismo lo ven como un sistema más justo. Permite que las personas expresen su verdadera identidad dentro de la sociedad, promueve la tolerancia y ayuda a resolver problemas sociales. Argumentan que la cultura no se basa solo en la raza o la religión, sino que es el resultado de muchos factores que cambian con el tiempo.
Históricamente, el apoyo al multiculturalismo moderno surgió después de la Segunda Guerra Mundial, debido a la "revolución de los derechos humanos". Los horrores del racismo y la limpieza étnica se hicieron evidentes tras el Holocausto. También influyó el fin del sistema colonial europeo, cuando las naciones colonizadas lograron su independencia. En los Estados Unidos, el Movimiento por los Derechos Civiles criticó la idea de que todos debían ser iguales a la cultura dominante, lo que llevó al desarrollo de estudios sobre las diferentes etnias.
El multiculturalismo en los países occidentales buscaba combatir el racismo, proteger a las comunidades minoritarias y eliminar políticas que impedían a las minorías tener acceso completo a la libertad e igualdad. La idea de que la interacción cooperativa entre diferentes grupos reduce los prejuicios y la hostilidad también apoya el multiculturalismo.
C. James Trotman dice que el multiculturalismo es valioso porque "usa varias disciplinas para destacar aspectos olvidados de nuestra historia social, especialmente las historias de mujeres y minorías". Ayuda a "promover el respeto por la dignidad de las vidas y las voces de los olvidados".
Tariq Modood sostiene que el multiculturalismo es "muy oportuno y necesario" y que "necesitamos más, no menos", ya que es la forma de integración que mejor se ajusta a la igualdad y tiene "la mejor posibilidad de éxito".
Bhikhu Parekh aclara que el multiculturalismo "no se trata de minorías" que "demandan derechos especiales", sino de "los términos correctos de relación entre las diferentes comunidades culturales". Esto significa que las reglas para resolver diferencias deben surgir de un "diálogo abierto e igual" entre todas las culturas, no de una sola.
Aunque algunas investigaciones sugieren que la diversidad étnica puede presentar desafíos, otras muestran que la diversidad en sí misma no es perjudicial. Al contrario, promover la diversidad puede ayudar a los estudiantes que han tenido menos oportunidades.
Críticas al multiculturalismo
La crítica al multiculturalismo cuestiona la idea de mantener culturas étnicas distintas dentro de un país. Este debate es importante en algunas naciones europeas que se identifican con una única cultura nacional.
Los críticos argumentan que el multiculturalismo puede impedir que los diferentes grupos étnicos y culturales se integren completamente en las leyes y valores del país. En su lugar, proponen que estos grupos se asimilen a una única identidad nacional.
También debaten si la coexistencia pacífica de culturas que interactúan pero se mantienen distintas es sostenible o deseable. Sostienen que los países que antes tenían una identidad cultural propia pueden perderla debido a un multiculturalismo forzado, lo que, según ellos, debilita la cultura del país anfitrión.
El profesor de ciencias políticas de Harvard, Robert D. Putnam, investigó cómo el multiculturalismo afecta la confianza social. Descubrió que en comunidades más diversas, la confianza entre las personas y en las instituciones puede disminuir. Sin embargo, Putnam también ha dicho que "esta resistencia a la diversidad tiende a disminuir y desaparecer... Creo que a la larga todos estaremos mejor".
Multiculturalismo y género
Analizar el multiculturalismo desde la perspectiva de género implica conectar la cultura con el poder. Desde este punto de vista, las políticas de reconocimiento cultural no se oponen a las ideas feministas, sino que sitúan las estrategias de lucha en contextos específicos.
Las mujeres, como parte de una comunidad, han enfrentado desafíos y han sido excluidas de la construcción nacional en muchas sociedades. Dependiendo de su origen, clase social y cultura, las mujeres pueden sufrir trato injusto. Aunque las mujeres de todos los grupos sociales pueden enfrentar desafíos de género, las mujeres de países en desarrollo pueden verse aún más afectadas por desafíos generales hacia su nación y por los específicos de ser mujeres.
Moller Okin (1999) señala que puede haber una tensión entre el multiculturalismo y el feminismo. El multiculturalismo busca el respeto por las culturas minoritarias, mientras que el feminismo critica cualquier cultura que no trate a hombres y mujeres por igual. Sin embargo, algunas feministas argumentan que las culturas minoritarias también incluyen las voces y prácticas de las mujeres que luchan por la igualdad, y que la desigualdad de género funciona de manera diferente en cada contexto.
Las mujeres indígenas, como las del EZLN, han participado en debates importantes y han reclamado el derecho a tener su propia cultura y los derechos colectivos de su pueblo. También han luchado por los derechos de las mujeres indígenas a ocupar cargos públicos, heredar tierras y tener voz en las decisiones que les afectan. Estas mujeres están mostrando cómo repensar la autonomía indígena desde una visión dinámica de la cultura, que defiende el derecho a la autodeterminación mientras reconoce que la identidad es una construcción histórica que se forma y reforma cada día.
Países con multiculturalismo
Argentina
Aunque no se le llama directamente multiculturalismo, el inicio de la Constitución de Argentina fomenta la inmigración y reconoce que las personas pueden tener ciudadanía de otros países. La diversidad cultural es una característica de la cultura argentina, con festivales y celebraciones de otros países (como el Día de San Patricio), y una fuerte presencia de diferentes culturas en los medios de comunicación. Por ejemplo, es común encontrar periódicos o programas de radio en inglés, italiano, francés o portugués.
Según el censo de 2010, Argentina tenía 1.900.000 inmigrantes, y se estima que en 2015 superaban los 2.000.000. Esto convierte a Argentina en el país de Latinoamérica que más inmigrantes ha recibido.
Además, en Argentina existen 1779 comunidades indígenas registradas, pertenecientes a 39 pueblos diferentes.
Bolivia
Bolivia es un país muy diverso, con 36 tipos diferentes de grupos indígenas. Más del 62% de la población total de Bolivia pertenece a estos grupos, lo que lo convierte en el país con mayor población indígena de América Latina. Los aimaras y los quechuas son los grupos indígenas más grandes. El 30% restante de la población son mestizos, personas con ascendencia europea e indígena.
Las autoridades políticas de Bolivia han apoyado el multiculturalismo, y en 2009 la Constitución boliviana incluyó principios multiculturales. La Constitución reconoce 36 idiomas oficiales además del español, y cada idioma tiene su propia cultura y grupo indígena. La cultura boliviana se celebra en todo el país y tiene fuertes influencias de los pueblos aimara, quechua, español y otras culturas populares de América Latina.
Brasil
Las Américas son conocidas por ser lugares muy multiculturales, con diversidad de idiomas, religiones y etnias. Brasil también es un ejemplo de multiculturalismo y ha experimentado muchos cambios en las últimas décadas.
Ciudades como São Paulo son hogar de muchos inmigrantes de Japón, Italia y Líbano, por ejemplo. Esta diversidad cultural se ve en toda Brasil. Además, Brasil ha avanzado mucho en acoger las culturas de los migrantes, y con el aumento de personas afrodescendientes, se han hecho cambios para ser más conscientes y acogedores. Ha crecido la conciencia sobre la lucha contra la discriminación hacia los afrodescendientes, y se han buscado activamente formas de combatir el racismo en Brasil.
Canadá
La sociedad canadiense a menudo se describe como "muy avanzada, diversa y multicultural". El multiculturalismo fue adoptado como política oficial del gobierno canadiense durante la presidencia de Pierre Elliott Trudeau en los años setenta y ochenta. Esta política se refleja en la Ley Canadiense de Multiculturalismo y en la Sección 27 de la Carta Canadiense de Derechos y Libertades. La Ley de Radiodifusión de 1991 establece que el sistema de radio y televisión canadiense debe reflejar la diversidad de culturas del país.
El multiculturalismo canadiense es admirado fuera del país y se considera uno de los logros más importantes de Canadá, así como un elemento clave de la identidad canadiense. La revista The Economist elogió a Canadá en 2016 como la sociedad multicultural más exitosa de Occidente, argumentando que la diversidad de Canadá es una fuente de fortaleza que une a su población y atrae inmigrantes, impulsando el crecimiento económico.
México
En México, al igual que en otros países, los medios de comunicación masiva (cine, radio, televisión, Internet) han sido clave para los cambios culturales y el multiculturalismo.
En ciudades grandes como la Ciudad de México, los medios audiovisuales han ayudado a integrar social y políticamente a la población. El consumo en general también se ha vuelto más globalizado y accesible para la gente.
Esto ha influido en muchas culturas, ya que antes estaban más ligadas a otros medios. Al generalizar los medios en toda Latinoamérica, no solo en México, se generaron nuevas costumbres. El objetivo no es encerrar a todas las poblaciones en una misma cultura, sino diversificar la información para todas las culturas y así no excluir a ninguna.
Debido a su naturaleza plurilingüe (con 69 lenguas, 364 variantes y 11 familias según el INALI), el multiculturalismo ha sido un tema muy investigado en México desde diferentes puntos de vista.
Estados Unidos
Estados Unidos es un país étnica y culturalmente diverso debido a la gran cantidad de inmigrantes que han llegado de muchos países a lo largo de su historia.
Durante el siglo XX, la idea del multiculturalismo se extendió en países de habla inglesa como Canadá y Estados Unidos. En Estados Unidos, se sigue usando como una práctica educativa y política.
El debate sobre el multiculturalismo en Estados Unidos ha sido muy intenso. Se dice que en Estados Unidos no hubo una idea fundacional de mezcla de razas, es decir, nunca hubo una mezcla significativa entre la población blanca, nativa o negra.
El multiculturalismo empezó a surgir en Estados Unidos alrededor de los años sesenta, gracias al movimiento de los derechos civiles. Se vinculó con la política y el sistema educativo, y se relacionó con demandas legales para la igualdad de grupos minoritarios en el trabajo y la educación.
En 1964, se aprobó el Acta de Derechos Civiles, que eliminó la separación por raza en todas las escuelas públicas e instituciones de educación superior, y prohibió la discriminación por raza en el empleo.
El multiculturalismo estadounidense se caracteriza por pasar de un modelo que buscaba la asimilación (donde se esperaba que todos se volvieran como la cultura dominante) a uno que busca la integración, resistiéndose a la idea de una única cultura. Por lo tanto, la identidad y la diferencia son ideas centrales en el multiculturalismo y sus debates.
Perú
Perú es un país con un gran ejemplo de multiculturalismo. En 2016, el INEI informó una población total de 31 millones de personas, y ha recibido a muchos inmigrantes, creando una comunidad diversa.
Perú fue poblado inicialmente por pueblos amerindios. Después de la conquista española, los españoles trajeron personas de África y Asia, lo que creó una mezcla de grupos étnicos. Una vez que la esclavitud dejó de ser permitida en Perú, los afroperuanos y asiático-peruanos han contribuido mucho a la cultura peruana. Hoy en día, los amerindios representan el 12% de la población; los mestizos, entre el 50% y el 60%; los blancos, el 20%; y entre el 6% y el 20% está compuesto por personas de ascendencia africana, china y otras.
En 1821, el presidente de Perú, José de San Martín, permitió a los extranjeros iniciar negocios en suelo peruano. Dos años después, los extranjeros que vivían en Perú por más de 5 años fueron considerados ciudadanos, un plazo que luego se redujo a 3 años.
Venezuela
Venezuela, con una población estimada de treinta millones de habitantes, está formada por una gran variedad de grupos étnicos. Aproximadamente el 33% de su población es mestiza; el 32%, blanca; el 21%, mulata; el 8%, negra; y el 4%, indígena. La cultura venezolana es una mezcla de sus pueblos indígenas, españoles y africanos.
Los primeros inmigrantes que se establecieron en el país fueron los españoles desde el siglo XVI. Desde el siglo XX, el país recibió un importante flujo migratorio gracias al auge petrolero, con personas que llegaron principalmente de América, Europa y el este de Asia. Esto influyó directamente en la cultura, el idioma, las tradiciones y la gastronomía, entre otras cosas.
Se estima que en Venezuela residen aproximadamente 1.375.690 extranjeros, la mayoría de Italia, España, Portugal, Alemania, Colombia, Ecuador, China, Líbano, Siria, Polonia, República Checa, Francia, entre otros. Se calcula que unos 15 millones de personas en el país tienen ascendencia directa de países europeos, lo que representa aproximadamente el 50% de la población. Venezuela tiene la segunda comunidad portuguesa más grande de la región (después de Brasil) y la tercera comunidad más numerosa de italianos y sus descendientes (después de Argentina y Brasil). La influencia africana se puede ver en su música, con el uso de tambores. Aunque el español es el idioma principal de Venezuela, hoy en día se hablan más de 40 idiomas indígenas.
Colombia
Colombia, con una población estimada en 51 millones de habitantes, está formada por una gran variedad de grupos étnicos. Aproximadamente el 49% de su población es mestiza, el 37% blanca, el 10% afrodescendiente, el 3,4% indígena y el 0,6% gitana.
Se estima que 18,8 millones de colombianos tienen ascendencia directa de europeos, ya sea por uno de sus padres o abuelos. Principalmente provienen de España, Italia, Alemania, Polonia e Inglaterra, y representan el 37% de su población. La ascendencia árabe (de Asia) también es importante en el país. Los sirios, libaneses y palestinos fueron la mayor inmigración después de la independencia del país. Colombia tiene la segunda comunidad árabe más grande de América Latina, con más de 3,2 millones de descendientes, lo que representa el 6,4% de su población.
Galería de imágenes
Véase también
En inglés: Multiculturalism Facts for Kids
- Diversidad cultural
- Etnocentrismo
- Liberalismo
- Globalización
- Relativismo
- Tolerancia social
- Ciudadano del mundo o cosmopolita
- Interculturalidad
- Interculturalismo
- Plurinacionalismo