Prehistoria de Australia para niños
La prehistoria de Australia es el largo periodo que va desde la llegada de los primeros seres humanos al continente australiano hasta el momento en que los europeos lo avistaron por primera vez en 1606. Este evento marca el inicio de la historia más reciente de Australia.
Se calcula que la prehistoria australiana comenzó hace entre 50.000 y 70.000 años. Sin embargo, algunas pruebas científicas sugieren que podría haber sido hace unos 45.000 a 50.000 años. Este periodo se considera "prehistórico" porque no existen registros escritos de las actividades humanas en Australia antes de la llegada de los europeos.
Contenido
La llegada de los primeros pobladores
En Australia, la prehistoria abarca desde la llegada de los primeros habitantes hasta el primer avistamiento confirmado por europeos en 1606. Este avistamiento se considera el comienzo de su historia escrita. La prehistoria de Australia es más larga que en otras partes del mundo porque no había escritos sobre los eventos humanos antes del contacto con los europeos.
Recientes estudios sugieren que los primeros europeos en avistar la isla pudieron ser navegantes españoles en el Océano Pacífico. Incluso se han encontrado cascos que podrían pertenecer a soldados españoles del siglo XVI en Australia.

La fecha exacta de los primeros asentamientos humanos en Australia sigue siendo un tema de debate. Se cree que los humanos han habitado esta tierra desde hace al menos 42.000 años. Algunos investigadores incluso dicen que fue hace 48.000 años, coincidiendo con un gran cambio en el ambiente que pudo ser causado por la actividad humana.
Los primeros australianos fueron los antepasados de los aborígenes australianos de hoy. Llegaron desde el sudeste asiático usando puentes de tierra y cruces marítimos cortos. La mayoría de estas personas eran cazadores-recolectores. Hombres, mujeres y niños tenían roles específicos en sus comunidades. Poseían una rica tradición oral y creencias espirituales centradas en la adoración de la tierra y el Tiempo del Sueño.
Se acepta que los primeros pobladores llegaron a Australia entre el 70.000 y el 40.000 antes de Cristo. Durante la última glaciación, el nivel del mar era mucho más bajo. La costa australiana estaba cerca de Timor, y Australia y Nueva Guinea formaban un solo continente llamado Sahul. Estaban unidas por una franja de tierra donde ahora están el mar de Arafura, el Golfo de Carpentaria y el Estrecho de Torres.
Según la teoría actual, los antepasados de los aborígenes australianos navegaron distancias cortas desde islas de la actual Indonesia hasta llegar a Sahul. Luego, se dispersaron por tierra por todo el continente. Pruebas arqueológicas muestran presencia humana cerca del río Swan, en Australia Occidental, hace unos 40.000 años. Parece que Tasmania también era accesible por tierra en ese entonces.
La existencia de plantas y animales similares en Australia, Nueva Guinea y las islas indonesias cercanas es otra prueba de estas antiguas conexiones terrestres. Estas conexiones desaparecieron cuando el nivel del mar subió al final de la última era glacial. Desde entonces, el nivel del mar se ha mantenido estable, cubriendo el paso que unía Australia y Nueva Guinea. Esto separó a sus habitantes, excepto a los isleños del estrecho de Torres, que son de origen melanesio y viven en las islas del estrecho de Torres y partes del norte de Queensland. Ellos tienen costumbres diferentes a las de otros grupos aborígenes australianos.
Consecuencias en el medio ambiente
El hallazgo de cenizas por arqueólogos sugiere que, después de la llegada de los primeros pobladores, los incendios aumentaron en la Australia prehistórica. Se cree que usaban el fuego para asustar a los animales hacia los cazadores, para abrirse paso en bosques densos o para ayudar a que la vegetación creciera de nuevo.
Las zonas con muchos árboles se convirtieron en bosques más abiertos, y algunos bosques se transformaron en praderas. Las especies que resisten el fuego, como el eucalipto, la acacia y las plantas crasas, se hicieron más comunes.
La fauna sufrió cambios más grandes: los animales más grandes desaparecieron rápidamente, junto con muchas especies más pequeñas. Se han contado 60 especies de vertebrados extintos. Entre ellos, destacan los diprotodons, que eran marsupiales herbívoros del tamaño de un hipopótamo. También desaparecieron algunas aves, un tipo de canguro carnívoro, un lagarto de unos cinco metros y una tortuga del tamaño de un coche pequeño.
La causa exacta de estas extinciones masivas no se sabe con certeza. El fuego, la caza, los cambios climáticos o una combinación de estos factores pudieron ser la causa. Sin embargo, se piensa que la actividad humana contribuyó de alguna manera. Sin los grandes herbívoros para controlar la vegetación y devolver nutrientes al suelo con sus excrementos, la erosión se aceleró y los incendios se hicieron más destructivos, cambiando rápidamente el paisaje.
Es difícil saber cuántas personas vivían en Australia antes de la llegada de los europeos. Hay teorías que sugieren tres grupos étnicos distintos y otras que apoyan un origen único, pero ninguna tiene pruebas suficientes para ser la definitiva. Los estudios genéticos no han resuelto si hubo varias oleadas de migración o una sola. Sin embargo, el estudio de haplogrupos (marcadores genéticos) sugiere que una sola migración de varios grupos hace más de 40.000 años fue el evento principal que formó la base de la población aborigen del continente. Estos eran humanos modernos sin mezcla con otras especies como el Homo erectus.
Cambios climáticos, aislamiento y contactos con otros pueblos
Entre el 18.000 a.C. y el 15.000 a.C., el continente se volvió más seco. El clima era más frío y menos húmedo que hoy. Al final del Pleistoceno, hacia el 13.000 a.C., la franja de tierra que cruzaba el Estrecho de Torres quedó sumergida de nuevo. El final de la era glacial fue bastante rápido. Algunos autores creen que esta época se recuerda en las leyendas aborígenes, con poemas que hablan de peces cayendo del cielo y tsunamis.
Entonces, los aborígenes de Tasmania quedaron aislados geográficamente. Hacia el siglo IX a. C., las poblaciones que vivían en la Isla Canguro y las pequeñas islas del Estrecho de Bass desaparecieron.
La lingüística y la genética indican que, durante mucho tiempo, hubo contactos entre los aborígenes del norte de Australia y las poblaciones melanesias de la actual Nueva Guinea y las islas cercanas. Sin embargo, el comercio parece haber sido la actividad principal, sin que hubiera matrimonios entre grupos o colonizaciones. Se sabe de la presencia temporal de un asentamiento melanesio en la costa norte de Australia y, a la inversa, de asentamientos aborígenes en el archipiélago indonesio.
Cultura y técnicas

Nyulnyulana Worrorrana Bunubana Jarrakana Mindi (2 regiones) Daly (4 familias) Wagiman Yangmánica | Tiwi (insular) Región de Darwin Iwaidjana Giimbiyu Arnhem, incl. Gunwinyguana Garawa y Tángkica Pama-Ñung (3 regiones) |
Los últimos 5.000 años se caracterizaron por un clima mejor, con más calor y lluvia, y el desarrollo de una cultura tribal compleja. Las tribus aborígenes intercambiaban principalmente cantos y danzas, pero también piedras, semillas, armas y alimentos.
El tipo lingüístico Pama-Nyung se extendió por casi todo el continente, excepto en el sudeste y en la Tierra de Arnhem. Algunos expertos creen que la expansión de los pueblos Pama-Nyung se debió a mejores técnicas agrícolas. Esta difusión también pudo influir en que las creencias religiosas se volvieran más uniformes en toda Australia.
La iniciación de los jóvenes se celebraba con fiestas y ritos especiales. Los comportamientos estaban sujetos a reglas estrictas sobre la responsabilidad dentro de la familia extendida (tíos, primos, hermanos y familia política). El sistema de parentesco en la mayoría de las comunidades dividía a la gente en dos grupos, con reglas sobre con quién podían casarse.
El poder político lo tenían los ancianos del grupo, no los jefes hereditarios. Las disputas se resolvían dentro del grupo según un complejo sistema de leyes tribales. Las venganzas eran comunes, pero las guerras organizadas a gran escala eran raras, probablemente debido a los muchos lazos familiares entre las diferentes comunidades.
Algunas innovaciones importantes ocurrieron unos 3.000 años antes de la colonización europea de Australia. Se empezó a usar el cuarzo para fabricar herramientas con gran habilidad. El dingo llegó desde el sudeste asiático, probablemente traído por pueblos austronesios. También se desarrolló la agricultura a pequeña escala en la zona de Victoria Occidental.
Se calcula que en 1788 había alrededor de medio millón de aborígenes (algunas estimaciones más optimistas hablan de un millón). Estaban divididos en diferentes grupos culturales y lingüísticos. La mayoría vivía de la caza y tenía un rico patrimonio cultural transmitido oralmente, así como técnicas avanzadas para manejar la tierra. En las regiones más fértiles y pobladas, la gente vivía de forma semi-permanente. En la cuenca del río Murray, la economía se basaba en la pesca, a diferencia de la caza y recolección que dominaban en el resto del continente.
No se sabe mucho sobre el número exacto de pueblos aborígenes y la diversidad de sus culturas y lenguas. Al igual que en el continente americano, las enfermedades traídas por la colonización redujeron drásticamente las poblaciones indígenas, incluso antes de que tuvieran contacto directo con los europeos. En la época de James Cook, pudo haber hasta 500 tribus distintas, que hablaban cientos de lenguas diferentes.
Contactos con pueblos no australianos
Los pueblos que vivían en la costa norte de Australia (Kimberley (Australia Occidental), Golfo de Carpentaria y Península del Cabo York) recibieron muchas visitas desde tiempos antiguos. Personas y mercancías se movían con frecuencia entre Australia y Nueva Guinea antes de que el istmo que las unía desapareciera por la subida del nivel del mar hace unos 6000 años.
Después de la subida del nivel del mar, el comercio y los intercambios culturales continuaron a través del Estrecho de Torres. Este estrecho, de 150 km, está lleno de islas y arrecifes que facilitaban la navegación entre el continente australiano y Nueva Guinea. Las islas estaban pobladas por pueblos de cultura melanesia.
Los viajes tradicionales entre Australia, Nueva Guinea e Indonesia hacen más probable la idea de que comerciantes chinos y árabes visitaron el norte de Australia desde el siglo IX. Las figuras "de Bradshaw" encontradas en la región de Kimberley también parecen indicar el movimiento de personas en el Paleolítico.
Los pescadores indonesios "Bajini" de las Molucas han pescado a lo largo de las costas australianas durante siglos. Los comerciantes de las Islas Célebes llegaban regularmente a la costa norte de Australia para pescar pepinos de mar y venderlos en China, donde eran muy valorados. Hay registros de esta actividad desde principios del siglo XVII.
Los intercambios culturales parecen haber sido intensos. Esto se ve en las pinturas sobre roca y corteza de los aborígenes, el uso del tabaco y la pipa, el vocabulario que llegó de las Islas Célebes, y la presencia de personas de origen malayo en las comunidades aborígenes y viceversa.
Véase también
En inglés: Prehistory of Australia Facts for Kids