Mercurio (mitología) para niños

En la mitología romana, Mercurio (en latín, Mercurĭus) era un dios muy importante relacionado con el comercio y los viajes. Era uno de los hijos del poderoso dios Júpiter. Su nombre viene de la palabra latina merx, que significa ‘mercancía’. En sus orígenes, Mercurio se parecía a la deidad etrusca Turms, pero la mayoría de sus características se tomaron del dios griego Hermes.
Mercurio era conocido por ser el mensajero de los dioses, llevando sus mensajes rápidamente entre ellos y a los humanos. También ayudaba a que las negociaciones fueran exitosas con su elocuencia. Se dice que enseñó a las personas a escribir, organizó los meses, descubrió las constelaciónes e inventó la lira, un instrumento musical. Además de ser el dios de los negocios, también se le asociaba con los viajes y, a veces, con los robos. Se le representa con un bastón llamado caduceo (con dos serpientes entrelazadas), sandalias con alas y, a veces, una cabeza de perro. Su piel se veía bronceada por estar siempre bajo el sol.
El nombre de Mercurio ha sido usado en varios campos de la ciencia. Por ejemplo, el planeta Mercurio, el elemento químico mercurio y la planta mercurial llevan su nombre. La palabra «mercurial» se usa para describir a algo o alguien que cambia rápidamente o es impredecible, lo que viene de la velocidad con la que Mercurio volaba de un lugar a otro.
Contenido
Mitología de Mercurio
Según el escritor Cicerón, existieron varios dioses llamados Mercurio en la antigüedad. El más conocido es el hijo de Júpiter y Maya.
¿Quiénes fueron los hijos de Mercurio?
Mercurio tuvo varios hijos en la mitología. Con la diosa Venus, tuvo a Cupido, el dios del amor, y a Atlantio. Con Penélope, tuvo a Pan, el dios de los pastores. También se le atribuyen otros hijos como Autólico, Éurito, Equión, Etálides y Mírtilo.
Historias y aventuras de Mercurio
Mercurio participó en muchas historias importantes:
- Ayudó a Anfión a no matar a Lico y le dio el reino de Tebas.
- Vendió a Hércules a la reina Ónfale.
- Por orden de Júpiter, llevó a Ixión al mundo de los muertos, donde fue atado a una rueda que gira sin parar.
- Le prestó sus sandalias aladas a Perseo para que pudiera volar en busca de Andrómeda.
- Llevó a Paris Alejandro al monte Ida para que fuera juez en un concurso de belleza entre diosas.
- Trajo de vuelta del inframundo a Protesilao para que su esposa Laodamía pudiera verlo por última vez.
- Guió a Príamo para que pudiera recuperar el cuerpo de Héctor.
- Le dio un antídoto a Ulises para que la hechicera Circe no lo transformara en animal. También le pidió a Calipso que lo liberara.
- Se dice que separó a los hombres en diferentes lenguas, lo que antes era una sola, para evitar conflictos.
- Aprisionó a Prometeo en el monte Cáucaso.
- Mató a Argos Panoptes, un sirviente de Juno, liberando así a Io.
- Cuando Neptuno y Minerva compitieron por ser protectores de Atenas, Mercurio, por orden de Júpiter, impidió que Neptuno inundara las tierras.
- Rescató a Libero del fuego y se lo entregó a Niso para que lo criara.
- Se cree que Mercurio fue el primero en llevar algunas letras griegas a Egipto, y de allí Cadmo las llevó a Grecia, y Evandro a Italia. Su madre Carmenta las modificó en quince letras latinas.
- Mercurio también fue el primero en enseñar los ejercicios de la palestra (un lugar para entrenar) a los mortales.
El culto a Mercurio

Mercurio era una de las deidades más antiguas de la religión romana. Cuando la religión romana se mezcló con la religión griega (un proceso llamado sincretismo) a principios del siglo III a. C., Mercurio adoptó muchas características del dios griego Hermes. Por eso, a menudo se le representaba con las talarias (sandalias aladas), el pétaso (sombrero alado) y el caduceo, una vara con dos serpientes entrelazadas que Apolo le había regalado a Hermes. A veces, también se le veía con un gallo, que simbolizaba el nuevo día, una cabra o un cordero que representaban la fertilidad, y una tortuga, en referencia a que Mercurio inventó la lira usando un caparazón de tortuga.
Al igual que Hermes, Mercurio era el mensajero de los dioses y el dios del comercio, especialmente del comercio de cereal. Se le consideraba un dios de la abundancia y del éxito en los negocios, sobre todo en la región de la Galia. También, como Hermes, era el guía de las almas de los recién fallecidos hacia el más allá. El poeta Ovidio escribió que Mercurio llevaba los sueños desde el valle de Somnus (el sueño) a los humanos que dormían.
El templo de Mercurio en el Circo Máximo, entre el Aventino y el Palatino, fue construido en el año 25 a. C.. Este lugar era perfecto para adorarlo como un dios rápido del comercio y los viajes, ya que era un centro importante de comercio y también una pista de carreras. Al estar entre el área de los plebeyos (gente común) y los patricios (nobles), el templo también destacaba el papel de Mercurio como mediador.
Mercurio era tan importante que tenía su propio sacerdote, llamado flamen. Además, tenía una fiesta especial el 15 de mayo, conocida como la Mercuralia. Durante esta celebración, los comerciantes se rociaban agua de un pozo sagrado cerca de la Porta Capena para pedir buena suerte en sus negocios.
Mercurio en otras culturas

Cuando los romanos describían a los dioses de las tribus celtas y germánicas, no los veían como deidades completamente diferentes, sino como versiones locales de sus propios dioses. Esto se conoce como interpretatio romana. Mercurio se hizo muy popular entre las naciones que el Imperio romano conquistó. Julio César escribió que era el dios más popular en Bretaña y Galia, y se le consideraba el inventor de todas las artes. Esto probablemente se debe a que los romanos asociaron a Mercurio con el dios celta Lugus. En este aspecto, a menudo se le representaba junto a la diosa celta Rosmerta.
Mercurio también se relacionó mucho con el dios germánico Wodanaz. El escritor romano Tácito, del siglo I, los identificó como el mismo dios, describiéndolo como el dios principal de los pueblos germánicos.
En algunas regiones celtas, Mercurio se representaba a veces con tres cabezas o caras. El número tres se consideraba mágico, y estas estatuas se veían como amuletos de buena suerte. Los romanos también popularizaron el uso de pequeñas estatuas de Mercurio, siguiendo una antigua tradición griega de las hermas.
Nombres y títulos de Mercurio
Mercurio, conocido por los romanos como Mercurius, tenía varios epítetos o títulos que representaban sus diferentes aspectos o su relación con otras deidades.
Galería de imágenes
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Figurilla en bronce de Mercurio, con un gallo en la mano izquierda y un monedero en la mano derecha, 100 - 250 A.D., encontrado en Tongeren, ca 8,8 cm Museo Galorromano, Tongeren (B)
Véase también
En inglés: Mercury (mythology) Facts for Kids