Primera expedición auxiliadora al Alto Perú para niños
Datos para niños Primera expedición auxiliadora al Alto Perú |
||||
---|---|---|---|---|
Guerra de Independencia de la Argentina Guerra de la Independencia de Bolivia Parte de Guerras de independencia hispanoamericana |
||||
![]() El Alto Perú, objetivo del Ejército del Norte, enviado desde Buenos Aires.
|
||||
Fecha | 14 de junio de 1810-26 de marzo de 1812 | |||
Lugar | Virreinato del Río de la Plata | |||
Resultado | Victoria realista | |||
Beligerantes | ||||
|
||||
Comandantes | ||||
Fuerzas en combate | ||||
|
||||
Bajas | ||||
|
||||
La Primera Expedición Auxiliadora al Alto Perú fue un importante evento durante la Guerra de Independencia de la Argentina. En 1810, las Provincias Unidas del Río de la Plata enviaron un ejército, conocido como el Ejército del Norte, a la región del Alto Perú (hoy Bolivia). El objetivo era expulsar a los grupos leales a la corona española y al rey Fernando VII de España.
Contenido
- ¿Cómo se formó el Ejército del Norte?
- ¿Qué pasó con los líderes opositores?
- ¿Cómo se organizó el ejército leal a la corona en el Alto Perú?
- La rebelión de Cochabamba
- Primeros enfrentamientos en el Alto Perú
- Captura de los líderes leales a la corona
- ¿Cómo se unió el Alto Perú a la Junta?
- El gobierno de Castelli en Charcas
- La derrota de Huaqui y la retirada del Alto Perú
- Véase también
¿Cómo se formó el Ejército del Norte?
El Ejército del Norte se formó por orden de la Primera Junta de Buenos Aires el 14 de junio de 1810. Su misión inicial era enfrentar a Santiago de Liniers, un exvirrey que lideraba un movimiento en contra de la Junta en Córdoba. Esta acción cumplía con el compromiso de la Junta de enviar tropas a las provincias.
El 23 de junio de 1810, Vicente Nieto, quien estaba a cargo de la Real Audiencia de Charcas en el Alto Perú, se enteró de la formación de la Primera Junta en Buenos Aires. Poco después, el 26 de junio, desarmó una unidad militar de Buenos Aires que estaba en Chuquisaca. Algunos de estos soldados fueron obligados a trabajar en minas.
El mismo día, Vicente Nieto ordenó que importantes prisioneros de la Revolución de Chuquisaca de 1809 fueran enviados a Lima, la capital del Virreinato del Perú.
A finales de julio de 1810, se supo en Córdoba que José Fernando Abascal, el virrey del Perú, no reconocía a la Junta de Buenos Aires. A pedido de Vicente Nieto, Abascal anexó temporalmente las regiones del Alto Perú al Virreinato del Perú. Estas regiones habían sido parte del Virreinato del Río de la Plata hasta hacía poco.
Abascal nombró a José Manuel de Goyeneche como jefe del ejército en el Alto Perú y le ordenó a otros líderes militares que se unieran a él con sus tropas.
¿Qué pasó con los líderes opositores?
La Junta de Buenos Aires organizó una colecta para equipar la expedición. Se formó un ejército de 1150 hombres, que se entrenó rápidamente en dos meses. El 6 de julio de 1810, el ejército partió de Buenos Aires hacia Córdoba para enfrentar a Liniers. Estaba al mando del coronel Francisco Ortiz de Ocampo, con Antonio González Balcarce como segundo.
Al igual que otros ejércitos de la época, iban acompañados por representantes políticos de la Junta. El 28 de julio, Mariano Moreno, uno de los líderes de la Junta, dio una orden estricta: los opositores capturados debían ser juzgados rápidamente.
El 31 de julio de 1810, los líderes opositores en Córdoba huyeron hacia el Alto Perú. Liniers fue capturado el 6 de agosto, y los demás líderes al día siguiente. Aunque inicialmente se les iba a enviar a Buenos Aires, el 26 de agosto, Juan José Castelli, enviado por Moreno, ordenó que fueran juzgados en el lugar. Liniers y otros líderes fueron juzgados, mientras que el obispo Rodrigo de Orellana fue enviado prisionero a Luján.
Después de estos eventos, Antonio González Balcarce tomó el mando de las tropas, con Juan José Viamonte como segundo. Juan José Castelli se convirtió en el delegado político.
Una vez que Córdoba fue controlada el 8 de agosto, el ejército continuó su marcha hacia el Alto Perú. Allí, el general español José de Córdoba y Rojas estaba al mando de las tropas leales a la corona.
Muchos pueblos del Alto Perú se unieron a las fuerzas de Antonio González Balcarce. Desde Salta, Martín Miguel de Güemes también aportó tropas. En otras ciudades como Santiago del Estero y Jujuy, se formaron batallones para apoyar a la Junta de Buenos Aires.
Así, el centro y noroeste de lo que hoy es Argentina quedaron bajo el control de la Junta, ya que varios cabildos (gobiernos locales) se declararon a favor de Buenos Aires.
¿Cómo se organizó el ejército leal a la corona en el Alto Perú?
Cuando los líderes leales a la corona en el Alto Perú se enteraron de los sucesos en Buenos Aires, comenzaron a organizar su propio ejército.
Las tropas leales a la corona ocuparon brevemente algunas zonas de Jujuy, pero se retiraron al Alto Perú cuando Salta se unió a la revolución.
Francisco de Paula Sanz, a cargo de Potosí, envió tropas a Tupiza. Vicente Nieto también envió fuerzas a Santiago de Cotagaita, donde se unieron a las tropas de Tupiza. Mientras tanto, en La Paz, Juan Ramírez Orozco reunió un ejército de 2000 hombres.
Vicente Nieto también ordenó el envío de milicias desde Cochabamba y Santa Cruz de la Sierra a Chuquisaca, pero estas tropas regresaron a sus lugares de origen al enterarse de los eventos en Cochabamba.
La rebelión de Cochabamba
El 14 de septiembre de 1810, ocurrió una rebelión en Cochabamba. Fue liderada por el coronel Francisco del Rivero, quien derrocó al gobernador y se unió a la Junta de Buenos Aires.
En agosto de 1810, José Andrés de Salvatierra lideró un movimiento en Santa Cruz de la Sierra. El 24 de septiembre, la ciudad fue tomada y se formó una junta provisional que apoyaba a Buenos Aires.
El 6 de octubre, Oruro también se declaró a favor de la Junta de Buenos Aires. Esteban Arze, con milicias de Cochabamba, llegó a Oruro y luego salió con 1500 hombres para enfrentar a las tropas leales a la corona enviadas por Juan Ramírez.
El 14 de octubre de 1810, se libró la batalla de Aroma, donde las fuerzas de Arze lograron una victoria. Esto permitió que las tropas de Cochabamba entraran en La Paz y Chuquisaca, mientras que Vicente Nieto se trasladaba a Cotagaita.
Primeros enfrentamientos en el Alto Perú
En septiembre de 1810, la vanguardia del Ejército del Norte entró en la quebrada de Humahuaca desde Salta. Martín Miguel de Güemes fue enviado a organizar un ejército local en los valles Calchaquíes.
El 14 de octubre de 1810, Antonio González Balcarce llegó a Yavi con 800 hombres, esperando refuerzos para alcanzar un total de 1900 hombres. Güemes ayudó a acelerar la llegada de estos refuerzos.
El 10 de octubre, las fuerzas leales a la corona abandonaron Tupiza, que fue ocupada por González Balcarce al día siguiente. El primer enfrentamiento del Ejército del Norte en el Alto Perú fue el combate de Cotagaita el 27 de octubre. La batalla no fue favorable para González Balcarce, quien tuvo que retroceder.
Antonio González Balcarce reorganizó su ejército en Tupiza, donde recibió muchos refuerzos de varias provincias.
El 5 de noviembre, las fuerzas leales a la corona avanzaron hacia Tupiza. González Balcarce se retiró a Nazareno, donde recibió más refuerzos. El 7 de noviembre, se enfrentaron nuevamente en la batalla de Suipacha, donde el ejército de las Provincias Unidas obtuvo su primera victoria. Esta victoria le valió a Antonio González Balcarce el ascenso a brigadier y la confianza para avanzar hacia el río Desaguadero, que marcaba el límite con el Virreinato del Perú.
El 9 de noviembre de 1810, Castelli ordenó a Güemes que fuera a Cinti para capturar a líderes opositores y evitar que huyeran.
Captura de los líderes leales a la corona
Al enterarse de la derrota, Vicente Nieto, que estaba en Cotagaita, entró en pánico y destruyó la fortaleza. Intentó huir hacia la costa del océano Pacífico, pero fue capturado y entregado a Castelli.
Después de la derrota, Córdoba huyó con los restos de su ejército. Intentó negociar con Castelli, pero al darse cuenta de que sería capturado, intentó escapar nuevamente. Fue apresado el 13 de noviembre cerca de Potosí.
Indalecio González de Socasa tomó el mando de los restos del ejército leal a la corona y se dirigió a Puno para unirse a José Manuel de Goyeneche, pero también fue capturado, aunque luego logró escapar.
Vicente Nieto había enviado órdenes a Francisco de Paula Sanz en Potosí para que tomara el dinero de la Casa de la Moneda y abandonara la ciudad. Sin embargo, Sanz se demoró. El 10 de noviembre, Castelli anunció su llegada a Potosí, y el cabildo de la ciudad se declaró a favor de la revolución. Francisco de Paula Sanz fue apresado y detenido junto a Nieto y Córdoba.
¿Cómo se unió el Alto Perú a la Junta?
Mientras las tropas de Cochabamba se acercaban a Chuquisaca, la gente de la ciudad pidió una reunión abierta del cabildo.
El 12 de noviembre de 1810, el Cabildo de Chuquisaca decidió convocar una reunión al día siguiente para reconocer a la Junta de Buenos Aires.
El 13 de noviembre, se juró obediencia a la Junta y se declaró nula la unión con el Virreinato del Perú. Se enviaron mensajes a los líderes leales a la corona, desconociendo su autoridad. La ciudad de Chuquisaca expresó su alegría por la llegada del ejército auxiliador.
La vanguardia del ejército auxiliador, comandada por Martín Miguel de Güemes, entró en Potosí, seguida por el resto del ejército. Sin embargo, debido a desacuerdos internos, Castelli despidió a Güemes, quien fue enviado a Salta.
El gobierno de Castelli en Charcas
Durante su tiempo en el Alto Perú, Castelli tomó medidas fuertes. El 15 de diciembre, en Potosí, ordenó el juzgado de Vicente Nieto, Francisco de Paula Sanz y José de Córdoba y Rojas por oponerse a la Junta. El perdón de la Junta para estos prisioneros llegó tarde.
Castelli también tomó propiedades de los españoles que habían huido y expulsó a muchos opositores. Estas acciones seguían órdenes de la Primera Junta, que buscaba infundir respeto en los oponentes.
Después de dejar a Feliciano Antonio Chiclana como gobernador de Potosí, Castelli llegó a Chuquisaca el 27 de diciembre de 1810, siendo recibido con entusiasmo. Castelli asumió la presidencia de Charcas, cargo que luego dejó a Juan Martín de Pueyrredón.
Entre las medidas de Castelli estuvo la creación de "Consejos de Provincia" en cada región, formados por miembros elegidos por los cabildos. También envió agentes a otras provincias del Virreinato del Perú para difundir las ideas de la revolución, lo que provocó algunos levantamientos que fueron rápidamente controlados.
El ejército auxiliador permaneció en Potosí hasta el 9 de enero de 1811, cuando comenzó a marchar hacia Oruro. A principios de abril, continuaron hacia La Paz.
En La Paz, un cabildo abierto el 16 de noviembre de 1810 reconoció a la Junta de Buenos Aires. Castelli fue recibido con alegría en La Paz y el 11 de mayo envió cartas al virrey del Perú. Al frente de la defensa leal a la corona estaba José Manuel de Goyeneche, quien aprovechó el tiempo que Castelli estuvo en Chuquisaca para reunir un gran ejército de 8.000 hombres.
Los cambios en el gobierno de Buenos Aires, con la salida de Mariano Moreno y el ascenso de Cornelio Saavedra, afectaron a Castelli y González Balcarce, generando divisiones en el ejército.
El 25 de mayo de 1811, Castelli se reunió con pueblos originarios en las ruinas de Tiahuanaco y proclamó su libertad en nombre de la Junta.
La derrota de Huaqui y la retirada del Alto Perú
Con permiso del virrey Abascal, Goyeneche y Castelli firmaron un acuerdo de paz temporal por 40 días el 16 de mayo de 1811. Castelli ordenó al ejército suspender las operaciones. Sin embargo, Goyeneche aprovechó este tiempo para recibir refuerzos y provisiones.
Castelli, al darse cuenta de los preparativos de Goyeneche, decidió mover su ejército a Huaqui en junio. Desde allí, podía vigilar el paso del río Desaguadero. Las fuerzas de Castelli en Huaqui eran de entre 6.000 y 7.000 hombres.
El 20 de junio de 1811, Goyeneche atacó al ejército revolucionario, dando inicio a la Batalla de Huaqui. Los 5.000 soldados patriotas y los pueblos originarios que los apoyaban no pudieron contra los 6.500 hombres leales a la corona, sufriendo una dura derrota. Como resultado, Goyeneche tomó La Paz y Cochabamba. Los restos del ejército revolucionario se retiraron rápidamente hacia Chuquisaca.
Después de estas derrotas, la ciudad de La Paz fue rodeada por rebeldes entre el 14 de agosto y el 28 de septiembre. Los habitantes de La Paz se negaron a rendirse y defendieron la ciudad. Aunque recibieron refuerzos, no lograron tomarla.
Goyeneche organizó un gran ejército de unos 20.000 hombres y marchó por el Desaguadero, obteniendo la victoria en Huaqui. Luego envió una avanzada que entró en La Paz y dispersó a los atacantes.
Cuando las noticias de Huaqui llegaron a Buenos Aires, Cornelio Saavedra, presidente de la Junta, culpó a Castelli por la pérdida del Alto Perú y ordenó su destitución. Poco después, Saavedra fue separado de la Junta y Juan Martín de Pueyrredón tomó el mando del ejército.
Avance de Díaz Vélez
Para apoyar una nueva rebelión en Cochabamba, Pueyrredón intentó avanzar nuevamente sobre el Alto Perú. Envió a Eustoquio Díaz Vélez con tropas. A mediados de diciembre, Díaz Vélez estaba acampando con 700 hombres.
El 12 de enero, ocurrió el combate de Nazareno. Díaz Vélez sorprendió a la vanguardia leal a la corona, pero una crecida repentina del río Suipacha aisló a parte de sus tropas, que fueron derrotadas. Pueyrredón ordenó a Díaz Vélez que se retirara.
Al mismo tiempo, Martín Miguel de Güemes fue enviado por Díaz Vélez a recuperar Tarija, lo que logró el 18 de enero de 1812.
Fin de la campaña
Cochabamba había sido liberada por Esteban Arze el 29 de octubre de 1811. Sin embargo, Goyeneche ocupó Cochabamba el 27 de mayo de 1812, después de que Esteban Arze fuera derrotado en varias batallas.
En marzo de 1812, la primera campaña de la expedición terminó oficialmente. Juan Martín de Pueyrredón fue reemplazado por el brigadier general Manuel Belgrano el 26 de marzo.
González Balcarce y Castelli fueron investigados por lo ocurrido. Castelli falleció antes de que se dictara sentencia, pero González Balcarce fue absuelto y continuó luchando bajo el mando del general José de San Martín. Manuel Belgrano se hizo cargo del ejército y comenzó la Segunda expedición auxiliadora al Alto Perú.
Véase también
En inglés: First Upper Peru campaign Facts for Kids