Nuestra Señora de Talavera para niños

Nuestra Señora de Talavera del Esteco es el nombre de una de las ciudades más antiguas fundadas por los conquistadores españoles en lo que hoy es Argentina.
Esta ciudad cambió de lugar varias veces y tuvo diferentes nombres, aunque el más usado fue Esteco. Todas sus ubicaciones estuvieron en el sureste de la actual provincia de Salta.
Contenido
Historia de Esteco: Una Ciudad en Movimiento
Esteco Vieja o Esteco El Viejo: El Primer Asentamiento
En 1566, un grupo de españoles, liderados por Jerónimo de Holguín, Diego de Heredia y Juan de Berzocana, fundaron un poblado. Esto ocurrió en la orilla oriental del río Salado. Ellos se habían separado del gobernador del Tucumán, Francisco de Aguirre.
Al principio, la nueva ciudad se llamó Cáceres. Sin embargo, fue fundada oficialmente con el nombre de Nuestra Señora de Talavera el 15 de agosto de 1567. Esto lo hizo el gobernador Diego Pacheco.
La ubicación de este primer asentamiento está a unos tres kilómetros al este de la actual zona boscosa de El Vencido. Se encuentra a unos 30 km al este de la localidad de El Quebrachal en el departamento Anta.
La antigua Nuestra Señora de Talavera estaba en una llanura, cerca de las sierras subandinas. Tenía una pequeña población europea, que era la que mandaba. La mayoría de sus habitantes eran pueblos originarios, como los toconotés, lules y matarás. Ellos trabajaban para los españoles.
Gran parte de la población de pueblos originarios estaba formada por mujeres. Ellas cultivaban y cosechaban algodón y lo tejían en telares. La ciudad fue abandonada en 1609. Esto se debió a que la ruta comercial por el río Salado perdió importancia. También hubo problemas por el trabajo de los pueblos originarios, especialmente en un canal de riego que necesitaba muchas reparaciones.
Aunque casi todos se fueron a Talavera de Madrid, algunos habitantes se quedaron en una estancia llamada Esteco El Viejo. Cerca de allí, estaban los rancheríos de Culicas y Yatasto.
En un informe de 1580, Pedro Sotelo y Narváez escribió sobre esta ciudad:
Esta ciudad está a cincuenta leguas de Santiago del Estero, río Salado arriba, camino que se usa ahora para ir al Perú. Tendrá cuarenta vecinos [españoles] que tenían a su cargo a los pueblos originarios. Está en los llanos y tiene el mismo clima que Santiago. Se cultiva lo mismo que en Santiago. Unos seis a siete mil toconotes y lules trabajaban para estos vecinos. Los lules viven cerca del río y de las zonas con agua. Son personas que cultivan la tierra, principalmente con las lluvias. Todos se visten con algodón y lana que les dan los españoles. También siembran y cosechan miel, cera, grana y resina, como en Santiago.
Madrid de las Juntas: Un Nuevo Comienzo
En 1592, Juan Ramírez de Velasco fundó una nueva población. La llamó Nueva Madrid de las Juntas porque estaba donde se unen los ríos Pasaje y Piedras. Sus ruinas se encuentran hoy en el actual departamento Metán.
Talavera de Madrid o Esteco Nueva: La Ciudad Próspera
En 1609, las dos ciudades anteriores se unieron por orden del gobernador Alonso de Rivera. Se trasladaron y formaron una nueva ciudad. Su nombre oficial fue Nuestra Señora de Talavera de Madrid de Esteco. Sin embargo, la gente la conocía más como Esteco, Esteco Nueva o Talavera del Esteco.
Esta ciudad se ubicó a orillas del río Salado, en un cruce de caminos importante. Conectaba el Camino Real desde el Río de la Plata hasta el Alto Perú, y desde Chile hasta el Paraguay. Gracias a su ubicación y a la buena producción de algodón y textiles, a finales del siglo XVII sus habitantes europeos eran muy ricos. La ciudad llegó a ser famosa por su gran riqueza. Tenía fortificaciones construidas por Alonso Mercado y Villacorta, y un colegio y seminario fundado por el obispo Hernando de Trejo y Sanabria.
Se cree que en el siglo XVII pudo haber tenido unos 40.000 habitantes, aunque esta cifra parece muy alta. El 13 de septiembre de 1692, un terremoto destruyó esta ciudad. Sin embargo, la decadencia de Talavera de Madrid o Esteco Nueva se debió a muchos factores. Entre ellos, hubo enfermedades, problemas con el riego y el cierre de la ruta entre Tucumán y Paraguay por levantamientos de los pueblos originarios del Chaco. Además, el Camino Real se movió más hacia el oeste.
Gran parte de los que sobrevivieron a Esteco se fueron a San José de Metán y a Rosario de la Frontera. Esteco Vieja y Esteco Nueva están separadas por unos 80 km. Las ruinas de Esteco Nueva se encuentran en el actual municipio del Río Piedras. El 25 de noviembre de 2014, arqueólogos argentinos encontraron importantes ruinas de Esteco que habían estado enterradas por siglos.
Esteco (actual): Un Nombre Compartido
Hoy en día, en el departamento de Metán, existe una estación de tren abandonada llamada Esteco. Está cerca de la antigua ciudad, pero no tienen relación histórica, solo comparten el nombre. La estación fue abandonada el 15 de julio de 1975, después de un accidente de trenes.
Nuestra Señora de Talavera (actual): Otra Localidad con el Mismo Nombre
Actualmente, hay una pequeña localidad en el Chaco salteño, cerca de los límites con Santiago del Estero y Chaco. Se encuentra junto a la RN 16 y una vía del Ferrocarril General Belgrano. Esta nueva Nuestra Señora de Talavera solo comparte el nombre con la primera ciudad.
Los Mitos de Esteco: Historias y Leyendas
Con el paso del tiempo, la gente del norte de Argentina creó muchas historias y mitos alrededor de Esteco. Se decía que cada parte de la ciudad tenía un significado misterioso o incluso malo.
Hay muchísimos mitos sobre Esteco. Sin embargo, los documentos históricos no siempre coinciden con ellos. Los documentos describen una comunidad que sufrió por calamidades naturales.
El punto de partida de todos los mitos parece ser su destrucción por un terremoto el 13 de septiembre de 1692. Se cuenta que la ciudad de Salta se salvó milagrosamente. Esto fue gracias a la Virgen María, en su advocación de Nuestra Señora del Milagro, y a que sacaron en procesión al "Cristo del Milagro".
La imaginación popular cambió la historia, dándole un sentido negativo. Por ejemplo, una copla popular salteña dice: "No sigas ese camino / no seas orgulloso y terco / no te vaya a suceder / como a la ciudad de Esteco". Otra dice: "Salta saltará / Tucumán florecerá / Esteco perecerá".
Emilio Morales, quien intentó desenterrar las ruinas de Esteco a principios del siglo XX, decía que era difícil encontrar trabajadores para esa tarea. La leyenda popular hacía creer que quienes removieran las ruinas serían perseguidos por espíritus y sufrirían desgracias.
Solo podemos mencionar los principales mitos sobre Esteco. Es importante saber que muy pocos tienen un respaldo en documentos. A menudo, las calamidades naturales que ocurrieron no justifican que se comparen con grandes desastres.
Mito de las plagas: El obispo fray Melchor Maldonado y Saavedra en 1636, pensó que las catástrofes naturales que afectaban a Esteco eran un castigo divino por los errores de la gente. Decía que la ciudad sufría "enfermedad continua, sapos, culebras, tigres, un monte en toda la ciudad y los mayores temblores que yo he visto en las Indias". Hacia 1654, creía que la ciudad estaba bajo la influencia de supuestas prácticas de hechicería. El obispo presentó una queja contra las autoridades, pero no pudo probar sus acusaciones.
Mito de su riqueza fabulosa: Se decía que Esteco había alcanzado una gran riqueza muy rápido, superando a otras ciudades del Tucumán. Esto se atribuía a la fertilidad de su tierra y al trabajo de los pueblos originarios. La llamaron "Reina de los Chacos" y se decía que sus riquezas venían de yacimientos secretos. Se hablaba de que sus habitantes eran muy vanidosos y amantes de la riqueza.
Mito del castigo divino: Se decía que los excesos y la vida de placer de la ciudad habían provocado la ira divina, que se manifestó en el terremoto de 1692.
Mito de la mujer de piedra: También existe el mito de una mujer de piedra que se aparece a los vecinos de Metán o Cachi. Se dice que avanza lentamente hacia la ciudad de Salta cada año. Cuando llegue, se producirá el fin del mundo.
El Proceso de Creación de Mitos y los Rituales
Según Mircea Eliade, un mito existe cuando se descubre un misterio o se revela un hecho muy importante que dio origen a algo. En las sociedades antiguas, el mito era considerado una verdad absoluta porque contaba una historia sagrada. Al ser real y sagrado, el mito se convertía en un ejemplo a seguir y se podía repetir, sirviendo de modelo para las acciones humanas.
En cuanto a cómo se crean los mitos, el recuerdo de un evento histórico o de una persona real no dura más de dos o tres siglos en la memoria popular. La gente tiende a recordar categorías en lugar de eventos individuales, y modelos en lugar de personas reales. Así, un personaje se convierte en un héroe mítico, y los eventos se incluyen en la categoría de acciones míticas.
Los mitos pueden tomar características o símbolos de situaciones similares. Por ejemplo, el mito de Esteco se mezcla con el famoso espejismo de la ciudad de los Césares o ciudades legendarias llenas de riquezas. Esto impulsó a los españoles a explorar el continente.
Parece claro que Esteco y Salta son como dos caras de una misma moneda, una positiva y otra negativa. Salta triunfó por ayuda divina, justo cuando Esteco fue destruida.
Por eso, las tradiciones sobre Esteco son mitos. Cumplen con sus características principales: tienen una idea de lo divino o sagrado, el mito se revive con un ritual, y ocurren en un tiempo y espacio míticos. La característica más importante es el ritual. Este permite revivir los eventos originales, haciendo que el tiempo normal desaparezca y permitiendo a las personas conectarse con un "gran tiempo" eterno.
Cuando se recrea el ritual, al repetirse, coincide con su modelo original. Esto borra el tiempo histórico y revive el poder creativo y ejemplar del mito. Esto es lo que sucede cada 15 de septiembre. El pueblo salteño saca en procesión a sus figuras religiosas. Con cánticos y rezos, les agradecen su triunfo sobre la naturaleza y las fuerzas que destruyeron la ciudad de Esteco.
Y siempre será así. Salta "limpia" sus errores cada vez que recrea la destrucción de la mítica Esteco. De esta forma, niega la posibilidad de su propia destrucción por un terremoto (La Mujer de Piedra).
Así, el pueblo salteño justifica su existencia y puede mirar al futuro con esperanza.
Véase también
En inglés: Nuestra Señora de Talavera Facts for Kids