Monasterio de San Cugat del Vallés para niños
Datos para niños Monasterio de SanCugat del Vallés |
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Monestir de Sant Cugat del Vallès | ||
bien de interés cultural y Bien Cultural de Interés Nacional | ||
Fachada principal del monasterio
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Localización | ||
País | ![]() |
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Comunidad | ![]() |
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Provincia | ![]() |
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Localidad | San Cugat del Vallés | |
Coordenadas | 41°28′27″N 2°05′08″E / 41.47425, 2.08546 | |
Información religiosa | ||
Culto | Iglesia católica | |
Orden | Orden de San Benito | |
Historia del edificio | ||
Fundación | Siglo IX | |
Construcción | Siglos IX-XVI | |
Datos arquitectónicos | ||
Tipo | Monasterio | |
Estilo | Románico y gótico | |
Año de inscripción | 3 de junio de 1931 | |
Bien de interés cultural Patrimonio histórico de España |
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Categoría | Monumento | |
Código | RI-51-0000433 | |
Declaración | 3 de junio de 1931 | |
El monasterio de San Cugat del Vallés (en catalán, monestir de Sant Cugat del Vallès) es un antiguo monasterio de la Orden de San Benito. Se encuentra en la localidad de San Cugat del Vallés, en Cataluña, España. Este monasterio, construido entre los siglos IX y XIV, es muy conocido por su impresionante claustro. Fue el monasterio más importante de toda la región del condado de Barcelona en su época.
El edificio fue declarado Bien Cultural de Interés Nacional en 1931, lo que significa que es un monumento muy valioso para la historia y la cultura.
Contenido
Historia del Monasterio de San Cugat
¿Cuándo se fundó el Monasterio de San Cugat?
Se cree que el lugar donde se asienta el monasterio fue una fortaleza romana llamada Castrum Octavianum. Los orígenes del monasterio se remontan al siglo IX. En ese tiempo, se unió una pequeña basílica paleocristiana (del siglo V) con una fortificación cercana.
Esta basílica guardaba las reliquias de san Cucufato (conocido como Cugat en catalán). Es probable que los primeros monjes aprovecharan las estructuras romanas. Después del Edicto de Milán, se construyó una iglesia para los cristianos que venían a honrar a los mártires.
En el siglo VII, esta capilla se amplió y quizás se estableció un pequeño monasterio. Sin embargo, fue destruido en el año 717. La comunidad de monjes se estableció de forma más sólida gracias a Carlomagno. En el año 785, el emperador puso al abad Deodato al frente con doce monjes benedictinos.
Les dio varias propiedades, incluyendo castillos e iglesias. A pesar de esto, la comunidad tuvo dificultades debido a los ataques. En el año 852, el lugar fue destruido, pero el abad Donadeu lo reconstruyó rápidamente.
Las primeras noticias escritas sobre el monasterio son del año 877. El emperador Carlos el Calvo confirmó las propiedades del monasterio. Un año después, Luis II de Francia lo puso bajo el control de los obispos de Barcelona. El primer abad conocido fue Ostofred.
¿Cómo creció y prosperó el Monasterio?
A principios del siglo X, el monasterio empezó a ser muy importante. Los abades participaban en eventos importantes y las propiedades del monasterio crecían. En el año 985, un ataque afectó al monasterio, pero no causó daños graves. El abad de esa época, Odón, comenzó las obras de reconstrucción.
El abad Odón fue clave para el crecimiento del monasterio. Se comportaba como un líder importante de su tiempo, combinando su rol religioso con la defensa del territorio. Murió en el año 1010 en una batalla. Su tumba se encuentra en la iglesia y es fácil de ver.
Su sucesor, el abad Guitard (1010-1053), vivió momentos difíciles. La nobleza feudal veía al monasterio como un rival por las tierras. En 1013, Guitard vendió propiedades para seguir restaurando el monasterio. Se cree que construyó un claustro anterior al actual.
Hacia el año 1063, se trabajó en la construcción de una iglesia. De esta solo queda la base del campanario. Varios abades de familias nobles dirigieron el monasterio entre los siglos XI y XIII. Su ingreso en la vida monástica era parte de las estrategias de poder de sus familias.
La prosperidad del monasterio se debió a su ubicación. Las tierras fértiles del Vallès le daban grandes cosechas. Su cercanía a Barcelona le dio el apoyo de la corte condal y episcopal. También, su posición estratégica le permitió participar en la expansión del condado de Barcelona.
En 1039, Ermessenda de Carcasona eligió el monasterio para la boda de su nieto, el conde Ramón Berenguer I. A finales del siglo XI, el monasterio de San Cugat quedó bajo el control de otro monasterio, lo que causó problemas. Sin embargo, el obispo de Barcelona reclamó sus derechos y el monasterio volvió a su control.
Bajo el abad Roland Oliver (1109-1131), el patrimonio del monasterio creció mucho. Después de una invasión, el monasterio sufrió daños. El abad, con el apoyo del obispo de Barcelona, Olegario, hizo donaciones para restaurar el culto.
Durante el mandato del abad Ermengol (1131-1145), el monasterio de San Cugat obtuvo el control del monasterio de Santa Cecília de Montserrat. Esto aumentó su importancia y sus ingresos. El conde de Barcelona, Ramón Berenguer IV, celebró las cortes (reuniones importantes) en el monasterio en 1143.
En 1145, se celebró un concilio para tratar temas importantes. Se decidió construir un castillo y masías en las tierras de la montaña. Esto serviría como fortaleza contra posibles ataques. Los dominios del monasterio también se ampliaron a otros monasterios.
Las propiedades crecieron tanto que, a finales del siglo XII, se dividieron en cuatro zonas para una mejor administración. A mediados del siglo XII, comenzaron las obras de un nuevo monasterio. De esta época son las galerías bajas del claustro y la parte románica de la iglesia.
A lo largo del siglo XIII, la iglesia se fue ampliando. Su construcción no terminó hasta el año 1337, por lo que ya se usó el nuevo estilo gótico. En el Archivo de la Corona de Aragón se conserva un manuscrito llamado Monasterii Sancti Cucuphatis. Fue escrito entre 1221 y 1223 por Pere Ferrer.
Este documento describe las costumbres del monasterio y aspectos de la vida diaria. Fue escrito para preservar las antiguas tradiciones. En la época de Jaime I de Aragón, el monasterio mantuvo buenas relaciones con la casa condal. El rey le dio privilegios para que fuera un contrapoder al obispo de Barcelona.
La relación entre el rey y el monasterio duró hasta 1243. El rey Jaime I eximió al monasterio de pagar impuestos. También ratificó las donaciones de bienes y puso las propiedades del monasterio bajo su protección.
A finales del siglo XII y principios del siglo XIII, el monasterio de San Cugat del Vallés tuvo un importante desarrollo musical. El monje Pere Ferrer, autor de himnos, es un ejemplo de esto.
En el año 1350, se iniciaron las obras para fortificar el monasterio. El rey Pedro III de Aragón añadió torres de guardia. Para mejorar el suministro de agua, se construyó un acueducto en el siglo XIV. De este acueducto aún se conserva el puente de Can Vernet.
En este periodo, el monasterio comenzó su declive. El abad Pere Busquets eliminó la elección directa de los abades por parte de los monjes. Los nuevos abades serían nombrados desde la diócesis.
¿Qué causó la decadencia del Monasterio?
A partir del abad Pere Bosquets (1385), los abades de San Cugat fueron nombrados por el papa o los reyes. De 1416 a 1419, el abad Estruch fue el sexto elegido directamente por Roma. Bajo su mandato, se celebraron las Cortes Catalanas en 1419.
En 1471, comenzaron a nombrarse abades comendatarios, que solían ser cardenales. Con la unión de la Corona de Aragón y la Corona de Castilla, el monasterio sufrió un proceso de influencia castellana. De este siglo son las galerías superiores del claustro y las partes superiores del campanario.
A partir de 1561, los abades eran nombrados solo por el rey de Castilla. Durante la Guerra de Sucesión Española, el monasterio fue ocupado por tropas, lo que causó graves daños. Se llevó a cabo una restauración que terminó en 1789.
Mucha información sobre la historia del monasterio se conoce gracias a la obra escrita en 1790 por el monje Benet de Moxó i de Francolí.
¿Cómo se recuperó el Monasterio?
La comunidad de monjes, que era de unos cincuenta en los siglos XII y XIII, se redujo a unos veinte a principios del siglo XIX. En 1835, los monjes abandonaron el monasterio. Esto fue debido a una ley que obligaba a las órdenes religiosas a dejar sus propiedades.
El monasterio quedó abandonado hasta 1851. En ese año, la Comisión de Monumentos Históricos decidió restaurarlo. Desde 1844 hasta 1931, el claustro se usó como escuela pública. También sirvió como cuartel de la policía local y sede del ayuntamiento.
Muchos elementos del monasterio fueron usados para nuevas construcciones. Parte de su riqueza artística se repartió entre museos y habitantes. Las continuas reparaciones hicieron que se vendieran muchas propiedades y obras de arte.
En 1931, fue declarado Monumento Histórico Artístico. Se iniciaron varias restauraciones. Fue usado como almacén agrícola y cuartel. Después de la guerra, en 1941, se creó el «Patronat del Monestir de Sant Cugat».
De 1968 a 1972, la facultad de Letras de la Universidad Autónoma de Barcelona se instaló en el claustro. En 1982, la Generalidad de Cataluña instaló en el edificio un servicio de restauración de bienes.
El Edificio del Monasterio
Alrededor del año 1000, bajo el abad Odón, comenzó la construcción de un nuevo monasterio. El proyecto integraba todas las construcciones alrededor de un claustro. En 1502, se contrató a Aine Bru para pintar el retablo del altar mayor. En su pintura, incluyó el monasterio tal como estaba en esa época.
El monasterio que vemos hoy es el resultado de un largo proceso de construcción. Desde su fundación en el siglo IX hasta la disolución de la comunidad en 1835, sufrió muchas transformaciones.
El Claustro: Un Tesoro Románico
Lo más destacado del monasterio de San Cugat es su impresionante claustro. Es un ejemplo claro del arte románico catalán y fue construido en el siglo XII. En el siglo XVI, se le añadió un segundo piso y se construyó el atrio de entrada. En su jardín se pueden ver los restos de la primera basílica del siglo V.
El claustro mide más de 30 metros de largo. Fue obra del artista Arnau Gatell y su discípulo Lluís Samaranch. Su planta es casi cuadrada y tiene arcos de medio punto que se apoyan en pares de columnas. Cada columna está decorada con capiteles muy detallados.
Estos capiteles, hechos entre 1190 y 1200, muestran animales, escenas bíblicas y oficios artesanos. Hay 71 pares de capiteles, más uno triple. Hacia 1190, llegó un grupo de escultores de la catedral de Gerona. Por eso, ambos edificios tienen muchas similitudes en sus capiteles.
Los muros exteriores tienen un friso de arcos ciegos con ménsulas decoradas con cabezas de animales. Este friso es parecido al del monasterio de San Pedro de Galligans. El piso superior se construyó en el siglo XVI.
Galerías del Claustro
- Galería norte
El muro de la galería norte es la parte más antigua. Sus ventanas son pequeñas y rústicas. Seguramente ya pertenecía al monasterio prerrománico. Se aprovechó un muro del siglo IX que era parte del edificio anterior.
También hay una puerta de dovelas, más baja que el nivel actual. Se cree que podría ser del antiguo claustro del siglo XI. Hay otra puerta de estilo neoclásico añadida en el siglo XVIII.
- Galería de levante
Aquí se encuentra un muro y una puerta del siglo XI. También está la antigua sala capitular del siglo XIII, que ahora es la capilla del Santísimo. Hay una escalera que lleva al claustro superior de estilo gótico.
A la capilla del Santísimo se accede por una puerta con arquivoltas. La antigua sala capitular era el lugar de reunión de los monjes. Allí se leía cada día un capítulo de la regla de san Benito.
- Galería de mediodía
La iglesia está adosada a esta galería y se comunican por una puerta. Esta puerta tiene arcos de medio punto concéntricos. Pertenece a la época de transición del románico al gótico. Se han descubierto restos de pinturas murales que cubrían la pared.
- Galería de poniente
Aquí está la puerta de acceso al claustro. El muro del siglo XI está hecho de pequeñas piedras. En el centro hay una gran puerta de arco de medio punto de una época posterior. Hay otras dos puertas del siglo XI en los ángulos.
- Claustro superior
Fue construido en la segunda mitad del siglo XVI. En sus galerías hay arcos de medio punto que descansan sobre capiteles toscanos. Estas influencias del Renacimiento italiano fueron introducidas por los abades de esa época. Las galerías están cubiertas con vigas de madera.
Los Capiteles del Claustro
Los 145 capiteles del claustro son de estilo románico. Fueron esculpidos con piedra de la cantera de Montjuic. Las columnas son de piedra de Gerona. Se distinguen dos fases en su creación: la primera a finales del siglo XII y la segunda a principios del siglo XIII.
Es notable que el autor, Arnau Cadell, firmara su obra. Se autorretrató en uno de los capiteles como un escultor trabajando. La firma está en latín y dice: "Esta es la forma del escultor Arnau Cadell, quien construyó este claustro para siempre".
Aunque Arnau Cadell firmó la obra, es probable que no fuera el único escultor. Se cree que él hizo la galería donde está la inscripción. La galería junto a la iglesia muestra diferencias de estilo. Arnau no parece haber sido un monje, ya que los religiosos solían indicar su condición al firmar.
Los capiteles se dividen en dos tipos: decorativos y narrativos. Los decorativos tienen motivos vegetales y animales. Los narrativos muestran escenas interpretables, la mayoría relacionadas con el cristianismo o la vida monacal.
Los capiteles vegetales tienen tallos entrelazados y palmas. Los de animales, muy abundantes, incluyen sirenas, peces, grifos, leones, águilas, dragones y pájaros.
- Ejemplos de capiteles figurativos
Imagen | Nombre | Descripción | Ubicación |
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Monjes en oración | Muestra ocho monjes. Uno toca la campana para llamar a la oración. Dos llevan un libro, símbolo de las escrituras. Otros dos llevan un pergamino, que representa la palabra de Dios. | Octavo capitel interior del ala norte | |
Lavado de pies de Cristo a los apóstoles | Representa la escena del evangelio de san Juan antes de la Última Cena. Hay ocho apóstoles sentados. Dos apóstoles traen un barreño. Jesús, agachado, seca el pie de san Pedro. | Decimoquinto capitel interior del ala este | |
Ciclo de la infancia de Cristo | Representa la natividad de Jesús. En una imagen, uno de los reyes magos señala la estrella. En otras caras, hay un ángel con un pergamino. María y san José aparecen junto al niño Jesús en la cuna. | Decimosexto capitel interior del ala este | |
Triunfo de las virtudes sobre los vicios | Siete figuras femeninas coronadas, con armadura, escudos y espadas, aplastan pequeños higos que representan los vicios. Una octava figura sin armas sostiene un libro. | Decimoséptimo capitel interior del ala sur | |
Músicos y juglares | Cuatro músicos tocan instrumentos. En los ángulos, cuatro juglares están boca abajo. Este capitel se interpreta de diversas maneras, pero podría aludir a los peligros de la vida frívola. | Undécimo capitel interior del ala este |
Exterior del Monasterio
La Cabecera: Un Viaje al Pasado
La cabecera se construyó en el siglo XII y es de estilo románico. Los tres ábsides (partes semicirculares o poligonales al final de la iglesia) se asientan sobre los restos de la antigua fortaleza romana. Los arcos de la cornisa están decorados con columnas y capiteles. El ábside lateral no tiene decoración. Las ventanas son estrechas, casi como aspilleras.
El gran ventanal central del ábside principal es posterior. Seguramente se añadió en el siglo XIII. A la derecha de los ábsides están los edificios del claustro. A la izquierda, hay restos de una torre romana y la antigua capilla de Tots els Sants, ahora convertida en sacristía.
Fachada Lateral y Campanario
La base cuadrada del campanario de la iglesia, del siglo XI, separa la parte románica de la gótica. Los tres pisos superiores del campanario, donde están las campanas, son de los siglos XVI y XVIII.
En esta zona gótica, destacan tres ventanales decorados. Corresponden a las capillas laterales del siglo XIV. Entre las ventanas se ven los contrafuertes, que son soportes que ayudan a sostener los arcos de la nave.
El Cimborrio: Una Torre de Luz
El cimborrio es una torre de ocho caras con grandes ventanales. Cada esquina está reforzada por un contrafuerte. Es una obra de principios del siglo XIII, con características del románico tardío y una transición al gótico.
Está coronado por un pequeño campanario de dos pisos. La cubierta piramidal de tejas y las almenas escalonadas son posteriores.
Fachada Principal: La Entrada al Monasterio
La fachada, construida en la primera mitad del siglo XIV, muestra las tres secciones de las naves. Destaca el gran rosetón (ventana circular decorada) de 8,2 metros de diámetro. Este rosetón ilumina la nave central con figuras que parecen flores.
Tiene otras tres aberturas: dos óculos (ventanas redondas) laterales y la puerta principal. La portada tiene arcos ojivales sobre capiteles. Estaba coronada por un tímpano con una pintura que aún se intuye.
Interior del Monasterio
El interior tiene tres naves de alturas similares y tres ábsides. Fue construido entre los siglos XII y XIV. Comenzó con estilo románico y se terminó en gótico. Tiene una cúpula y un cimborrio octagonal en el crucero.
La primera impresión al entrar es de sencillez. La decoración es mínima y la iluminación es discreta, especialmente en la cabecera románica. La ausencia del coro, desmontado en 1911, hace que el espacio parezca más vacío.
Ábsides y Presbiterio
Las tres naves terminan en tres ábsides. El central es más grande y tiene forma poligonal. Los laterales son más simples y semicirculares. Las aberturas son estrechas, excepto el gran ventanal central.
En 1798, el abad Josep Gregori de Montero cerró el presbiterio (zona alrededor del altar) con una balaustrada de mármol. Detrás del altar hay una estatua de san Cucufato (1942).
- Retablo de Todos los Santos
En el ábside de la derecha está el retablo de Santa María de todos los Santos (año 1375). Se atribuye a Pere Serra y es de estilo italogótico. Se llama así por la gran cantidad de santos que aparecen.
Las figuras están organizadas de forma jerárquica. En el centro está la Virgen entre ángeles. A los lados, las figuras se disponen en series. La obra está coronada por el calvario.
Los personajes del retablo representan la procesión que se hacía en la fiesta de Todos los Santos. Se cree que el retablo muestra los numerosos santos y mártires cuyas reliquias tenía el monasterio.
En el ábside izquierdo está la imagen románica del siglo XII de la Mare de Déu del Bosc. Proviene de una antigua ermita y fue venerada por siglos.
Capillas Laterales
Las capillas laterales se construyeron en el siglo XIV. Se transformaron y decoraron más tarde con el estilo barroco. Conservan restos de decoración pintada.
- Capilla de santa Escolástica
La preside el retablo de santa Escolástica del siglo XVII. También alberga un cuadro de san Medir y una pila bautismal del siglo XVI.
Aquí se encuentra el retablo dedicado a Benito de Nursia, fundador de la orden benedictina. Fue obra de los escultores Francesc Santacruz i Artigues y Francesc Santacruz i Gener, padre e hijo, y de Josep Sala i Gener. La imagen central representa a san Benito, rodeado de escenas de su vida.
- Capilla de san Bartolomé
En esta capilla se expone el retablo de san Bartolomé y una imagen de la virgen de Montserrat. También destaca un vitral de san Jorge.
- Capilla de la Piedad
Es una capilla abierta en la base del campanario. Era la antigua capilla donde se enterraba a los monjes. En 1706, se encargó a Josep Sala i Gener la construcción del pequeño retablo de la Piedad.
La restauración del órgano permitió estudiar las pinturas murales de la pared. Estas pinturas, del siglo XIII, fueron descubiertas en 1912. La capilla románica original fue dividida en el siglo XVI para instalar el órgano.
- Retablo de san Miguel
Es un retablo renacentista del siglo XVI. Se puede ver una imagen dorada de San Miguel. Está rodeada por escenas de la vida de san Plácido y otros santos benedictinos.
- Retablo de Nuestra Señora del Rosario
Como el de san Miguel, es un retablo renacentista del siglo XVI. Representa los quince misterios del rosario. Su autor es desconocido.
El Cimborrio Interior
El cimborrio se eleva sobre la parte central del crucero como una torre poligonal. Los cuatro pilares que lo sostienen son los más gruesos del edificio. Para pasar de una planta cuadrada a una octogonal, se usan unas estructuras llamadas trompas.
Los ocho nervios del cimborrio se apoyan en cuatro ojivas. Esto permite tener ocho grandes ventanales góticos. Probablemente fue la última parte del templo construida en época románica.
Palacio Abacial: La Residencia del Abad
El palacio abacial se construyó originalmente en el siglo XIV. Se usaron restos de las torres y murallas que rodeaban el monasterio. En el siglo XVIII, fue rehabilitado casi por completo. Era la casa del abad y, aunque parece una fortaleza, es sencilla. Hoy es la casa del rector y tiene servicios municipales.
En el exterior, se ven restos de la construcción defensiva. La torre de entrada o torre del homenaje tiene un matacán (estructura defensiva) sobre la puerta. También se observan restos de las almenas (partes elevadas de la muralla) en la parte superior de las fachadas.
El interior parece una casa señorial catalana de los siglos XVII-XVIII. Sin embargo, aún quedan restos del edificio original del siglo XIV. Destacan dos arcadas con decoración pintada en una sala de la planta baja.
Murallas: Protección del Monasterio
Se conservan restos de las murallas construidas a finales del siglo XIV. Las guerras de esa época hacían que la gente se sintiera insegura. Las mejor conservadas están en la zona este del monasterio y las que forman parte del palacio abacial.
El muro frente a la plaza Octavià se construyó en el siglo XVIII. Corresponde a una ampliación del "huerto del abad", que se convirtió en jardín botánico.
Galería de imágenes
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Lápida del monumento funerario del abat Odón, de principios del siglo XV, situada en la nave izquierda de la iglesia
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La urna de San Cándido se encontraba inicialmente en el monasterio
Véase también
En inglés: Monastery of Sant Cugat Facts for Kids