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Cuenca minera de Tharsis-La Zarza para niños

Enciclopedia para niños
Vista del Filón Norte, junto a Tharsis.
Pozo Algaida, en la mina de La Zarza.

La cuenca minera de Tharsis-La Zarza, también conocida como las minas de Tharsis, es una importante zona de extracción de minerales en España, ubicada en la provincia de Huelva. Sus principales puntos se encuentran en los municipios de Alosno, Calañas, Cerro de Andévalo y La Zarza-Perrunal. Esta cuenca forma parte de una gran región geológica llamada la Faja pirítica ibérica.

Desde hace mucho tiempo, esta área ha sido utilizada para la minería, creando un gran complejo de industrias y minas. Se han encontrado pruebas de actividad minera desde la Edad Antigua, especialmente durante la época romana. Sin embargo, el momento de mayor actividad fue en los siglos XIX y XX, cuando la empresa británica Tharsis Sulphur and Copper Company Limited modernizó la extracción y comenzó a usar el sistema de "cortas" (minas a cielo abierto). En ese tiempo, también se construyeron grandes instalaciones industriales, vías de tren y pueblos para los mineros. Las minas de Tharsis son consideradas las segundas más importantes de Huelva, después de las de Riotinto.

Gracias a toda la actividad minera de la Edad Contemporánea, hoy existe un valioso patrimonio histórico e industrial, sobre todo de la época británica. Por eso, en las últimas décadas se han hecho esfuerzos para protegerlo y usarlo para el turismo. En 2014, la cuenca minera de Tharsis-La Zarza fue declarada Bien de Interés Cultural, una categoría que protege lugares importantes.

¿Qué hace especial a la cuenca minera de Tharsis-La Zarza?

La cuenca minera de Tharsis-La Zarza se encuentra al este de la provincia de Huelva, en la comarca del Andévalo, y se extiende hasta los ríos Odiel y Tinto. Es uno de los lugares mineros más importantes de la faja pirítica ibérica y una de las zonas mineras más occidentales de la Sierra Morena. A lo largo de su historia, la actividad principal ha sido extraer, transformar y transportar pirita (un mineral que contiene hierro, cobre y azufre).

En tiempos más recientes, los centros mineros más importantes fueron "Tharsis" y "La Zarza", ubicados en Alosno y Calañas. En Tharsis se encontraban las minas de Filón Sur, Filón Norte, Filón Centro, Esperanza, Sierra Bullones y Lagunazo. En La Zarza estaban los yacimientos de La Zarza y Perrunal.

En esta zona minera hay dieciséis grandes depósitos de sulfuros. Algunos de los más conocidos son "Filón Norte", "San Guillermo", "Sierra Bullones" y "Poca Pringue" en el norte; "Filón Centro", "Filón Sur", "Esperanza" y "Prado Vicioso" en el centro; y "Vulcano", "Almagrera" y "La Lapilla" en el sur. Aunque los depósitos de Lagunazo y Pozo San Jorge están cerca, técnicamente no forman parte de Tharsis. La pirita es el producto principal, pero también se han obtenido azufre, cobre, oro y plata. Los metales preciosos se sacaban de las capas superiores de los depósitos, mientras que el azufre venía del mineral principal.

¿Cómo ha evolucionado la minería en Tharsis?

Desde la Prehistoria hasta la época romana

Archivo:Cabezo Jure1
Piezas arqueológicas procedentes del yacimiento de Cabezo Juré.

Las minas de Tharsis y La Zarza son consideradas de las más antiguas del mundo. Hay pruebas arqueológicas de que los humanos ya extraían recursos aquí desde la Edad del Cobre. De hecho, el nombre "Tharsis" se ha relacionado con Tartessos, una cultura que floreció al final de ese período. En el sitio de Cabezo Juré, en Alosno, se han encontrado restos de fundiciones de cobre prehistóricas. La producción de metales fue muy importante entre los siglos VI y V a.C., gracias al comercio de la península ibérica con el Mediterráneo oriental.

Bajo el dominio romano, los yacimientos de Tharsis fueron explotados intensamente, sobre todo durante el Alto Imperio romano. Al principio, la actividad se centraba en Filón Sur, pero en la época de Augusto se extendió a Esperanza, Filón Norte, Filón Centro y Sierra Bullones. Los romanos usaban técnicas avanzadas: extraían minerales bajo tierra con túneles y sistemas de norias para mover el agua dentro de las galerías. Las condiciones de trabajo eran muy duras para los mineros, que en su mayoría eran esclavos, debido al polvo, la humedad, la poca luz y las altas temperaturas. Los estudios de los restos de escoria romana muestran que la plata y el cobre fueron los metales más producidos en esa etapa.

Las minas de Tharsis estuvieron activas hasta la crisis del Bajo Imperio romano (siglos III-IV) y se abandonaron definitivamente al inicio de la época visigoda. La minería en la Antigüedad fue tan grande que dejó enormes cantidades de escoria y cambió mucho el paisaje. En el siglo XIX, ingenieros y geólogos estudiaron estos yacimientos y calcularon que se habían generado unos veinte millones de toneladas de escoria en la Edad Antigua, de las cuales el 20% estaba en Tharsis.

Siglos de calma

En el siglo XVI, se hicieron algunas exploraciones en la zona, pero no se logró iniciar ninguna actividad minera importante. La mayoría de las minas de la faja pirítica ibérica estuvieron inactivas desde el final del período romano. Fue en el siglo XIX cuando ingenieros como Fausto Elhuyar y Joaquín Ezquerra visitaron de nuevo los yacimientos de la sierra de Alosno. Luciano Escobar incluso propuso un plan de explotación en 1850, pero no encontró apoyo económico. Al mismo tiempo, empresas extranjeras empezaron a interesarse por los yacimientos del Andévalo occidental, especialmente por las dificultades para adquirir las minas de Riotinto al Estado.

La reactivación: la época de mayor esplendor

La actividad minera en la cuenca se reactivó gracias al ingeniero francés Ernest Deligny, quien se interesó por la zona en 1853. Deligny decidió llamar a los yacimientos principales "minas de Tharsis", para recuperar su antiguo nombre. Se iniciaron trabajos de rehabilitación con la Compañía investigadora de Tharsis, que luego fue reemplazada en 1855 por la francesa Compagnie des Mines de Cuivre de Huelva. Esta empresa francesa logró poner en marcha las minas, vendiendo la pirita y el azufre a clientes británicos. Para 1858, unos 2500 trabajadores estaban en Tharsis, produciendo 9000 toneladas de mineral al mes. Sin embargo, problemas económicos llevaron a que en 1866 los franceses alquilaran la explotación a la Tharsis Sulphur and Copper Company Limited.

Durante el último tercio del siglo XIX y la primera mitad del siglo XX, la explotación de las minas creció mucho, introduciendo métodos modernos. La compañía británica construyó una línea de tren y un muelle en el río Odiel para transportar los minerales. También se levantaron talleres, almacenes de mineral, una central eléctrica y viviendas. En Corrales se instaló una planta para triturar el mineral de Tharsis y La Zarza. Otros yacimientos importantes, como la mina Lagunazo, también estuvieron activos hasta su cierre en 1902. Destacó también la mina Perrunal, que era subterránea y fue adquirida por la Sociedad Francesa de Piritas de Huelva en 1899.

Corta Filón Centro de Tharsis.
Las minas de Tharsis en 1986.

Al principio, se usaban galerías subterráneas, pero desde finales del siglo XIX se empezó a extraer mineral a cielo abierto, creando las "cortas". Con el tiempo, se formaron grandes explotaciones como Filón Sur, Filón Norte, Filón Centro, la Corta Sierra Bullones, la Corta Esperanza y la Corta de los Silos. En la mina de La Zarza, la extracción a cielo abierto comenzó en 1886, aunque también se mantuvo la minería subterránea. Algunas minas se agotaron y cerraron, como la mina del Perrunal en 1969.

El crecimiento de la minería hizo que se necesitaran más trabajadores, lo que cambió mucho la población de la zona. En Alosno, la población pasó de 3214 habitantes en 1850 a 12 045 en 1887. En Calañas, de 1872 a 9644 en el mismo período. En Calañas se construyeron dos pueblos obreros junto a los yacimientos de La Zarza y Perrunal. En Alosno, se levantó otro pueblo, llamado Tharsis, para los trabajadores. También hubo una pequeña colonia para los directivos e ingenieros británicos, en el Pueblo Nuevo de Tharsis.

En la década de 1970, el control de la cuenca minera pasó a manos españolas, creándose la Compañía Española de Minas de Tharsis. En ese momento, la actividad principal estaba en la Corta Filón Norte de Tharsis y el complejo de La Zarza. En Filón Norte, la extracción a cielo abierto producía un millón de toneladas de mineral al año. En La Zarza, las labores subterráneas producían unas 400 000 toneladas anuales. Un cambio importante fue que parte de la pirita ya no se exportaba, sino que se enviaba a las plantas del nuevo Polo Químico de Huelva. A principios de los años 80, se calculaba que las reservas de mineral en Tharsis y La Zarza eran de unos 120 millones de toneladas. Después del cierre de la Corta Atalaya de Riotinto en 1992, Tharsis fue la única mina de Huelva que seguía produciendo pirita.

La etapa más reciente

A partir de 1990, las minas de Tharsis entraron en un período de declive debido a la crisis del sector. En 1991, la actividad en La Zarza cesó y sus instalaciones quedaron abandonadas. El muelle del Odiel cerró en 1993, terminando la exportación de mineral por mar. Desde entonces, la producción de pirita de Tharsis se destinó casi exclusivamente al Polo Químico de Huelva, donde se usaba para fabricar ácido sulfúrico y fosfatos. La Compañía Española de Minas de Tharsis dejó de operar a finales de 1995 por los malos resultados económicos. Entonces, se formó una sociedad laboral, Nueva Tharsis, donde los trabajadores asumieron la gestión.

A finales del siglo XX, la caída del precio del cobre hizo que la minería dejara de ser rentable, lo que llevó a muchas pérdidas. Esta crisis contribuyó al cierre de la mayoría de los yacimientos de Tharsis, un proceso que terminó en 2001. En la Corta Filón Sur, la empresa Caledonia Mining siguió extrayendo el gossan hasta 2002. Como resultado, la línea de tren fue cerrada y desmantelada, y las instalaciones de la cuenca quedaron abandonadas. Socialmente, el fin de la principal actividad económica de más de un siglo fue un golpe para la población. La nueva situación llevó a que las instituciones públicas impulsaran la rehabilitación de las antiguas minas de Tharsis con fines recreativos. Esto incluyó la construcción de senderos en las cortas a cielo abierto y la reforestación de las antiguas escombreras. Otra iniciativa importante fue la creación en 2007 del museo minero de Tharsis, que exhibe material ferroviario y un extenso archivo documental.

¿Qué patrimonio histórico-industrial podemos encontrar?

Archivo:Locomotoras - Cocheras de Tharsis
Cocheras-talleres de Tharsis, 2009.

Desde que la cuenca se reactivó en el siglo XIX, se construyeron muchas instalaciones industriales para la extracción y el tratamiento de minerales: cargaderos, malacates (estructuras para subir y bajar cosas en las minas), vías de tren, centrales eléctricas, oficinas y embalses. En la zona de Filón Norte destacan construcciones como el complejo de las cocheras (donde se guardaban los trenes), el silo-cargadero de mineral, la central térmica y una estación de tren con muchas vías.

Junto a las minas de Tharsis, se construyó un pequeño asentamiento exclusivo para los técnicos y directivos británicos de la Tharsis Sulphur and Copper Company Limited. También se edificaron varios pueblos obreros en Tharsis, La Zarza y Perrunal para los mineros y sus familias. La arquitectura de la cuenca minera de Tharsis-La Zarza, al igual que en las minas de Riotinto, mostró muchas características de origen inglés.

Además, en Tharsis se levantaron plazas de calcinación (para tratar minerales con calor), fábricas, talleres y almacenes de mineral. Con el tiempo, también se construyeron sistemas de canales para obtener cobre por un método húmedo. El aumento de las actividades de tratamiento de metales con agua requirió más agua, un recurso escaso en la zona. A finales del siglo XIX, la compañía Tharsis Sulphur and Copper Company Limited (TOS) construyó varios embalses en la cuenca: Grande, Pino y Puerto León. En la mina del Lagunazo también se construyó otro embalse grande, con una presa de 14 metros de altura.

Después del cese de las actividades mineras alrededor del año 2000, el patrimonio industrial de la zona empezó a deteriorarse y a ser abandonado. Algunas instalaciones han sido desmanteladas y otras han sufrido el robo de sus piezas, como el ferrocarril. En la mina del Perrunal, el desmantelamiento ha sido aún mayor. En junio de 2014, la Junta de Andalucía incluyó la cuenca minera de Tharsis-La Zarza en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz como Bien de Interés Cultural (BIC).

¿Cómo era la red de trenes en la cuenca minera?

Archivo:Vista general estación de Tharsis
Playa de vías e instalaciones ferroviarias, estación de Tharsis.

Entre 1867 y 1870, los ingenieros de la Tharsis Sulphur and Copper Company Ltd construyeron el ferrocarril de Tharsis. Esta línea conectaba la cuenca minera con el mar a través de un muelle. Años después, en 1888, se añadió un ramal que unía la vía principal con la mina de La Zarza. Así se formó una red de vías, ramales y desvíos que conectaban los yacimientos y las instalaciones industriales. En Tharsis, con el tiempo, se desarrolló un gran complejo ferroviario con depósito de locomotoras, talleres y muchas vías para clasificar los trenes mineros. Dentro de la cuenca, también operó otro tren minero, construido en 1901, que conectaba las instalaciones de la mina Perrunal con la línea Zafra-Huelva.

Para saber más

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Cuenca minera de Tharsis-La Zarza para Niños. Enciclopedia Kiddle.