Dispositivo de almacenamiento de datos para niños
Un dispositivo de almacenamiento de datos es como un cuaderno digital donde las computadoras guardan información. Estos dispositivos pueden leer y escribir datos de forma temporal o permanente. Son esenciales para que las computadoras funcionen, ya que permiten guardar todo, desde tus juegos favoritos hasta tus trabajos escolares.
Piensa en cómo guardamos información en la vida real: escribimos en papel, grabamos sonidos en discos de vinilo o cintas. En el mundo digital, usamos la electricidad para guardar y recuperar datos. Los datos digitales son la información que se guarda en un formato que las máquinas pueden leer. Guardar documentos en una computadora ocupa mucho menos espacio que tener montones de papeles.
Contenido
- ¿Cómo se clasifican los dispositivos de almacenamiento?
- Dispositivos magnéticos: guardando datos con imanes
- Dispositivos ópticos: leyendo con luz láser
- Unidades magneto-ópticas: lo mejor de dos mundos
- Unidades de estado sólido (SSD): el almacenamiento más rápido
- El desafío de guardar tanta información
- Otros tipos de almacenamiento
- ¿Cómo se recuperan los datos?
- La historia del almacenamiento
- Galería de imágenes
- Véase también
¿Cómo se clasifican los dispositivos de almacenamiento?
Podemos clasificar los dispositivos de almacenamiento de varias maneras, pero una forma sencilla es dividirlos en dos grupos principales, según qué tan rápido acceda a ellos el cerebro de la computadora (el microprocesador).
Almacenamiento primario: la memoria rápida del ordenador
Los dispositivos de almacenamiento primario son como la memoria a corto plazo de tu cerebro. El microprocesador puede acceder a ellos de forma súper rápida. Un ejemplo es la memoria RAM. La información en estos dispositivos se pierde cuando apagas la computadora, por eso se les llama "volátiles".
Almacenamiento secundario: donde guardas tus cosas para siempre
Los dispositivos de almacenamiento secundario son como tu mochila o tu estantería. Guardan la información de forma permanente o por mucho tiempo, incluso cuando apagas la computadora. Por eso se les llama "no volátiles". Aquí es donde se guardan tus archivos, programas y el sistema operativo. Ejemplos comunes son los discos duros, las memorias USB y los discos ópticos.
Dentro del almacenamiento secundario, hay dos formas de acceder a la información:
Acceso secuencial: como rebobinar una cinta
Con el acceso secuencial, para encontrar un dato específico, la computadora tiene que leer toda la información que está antes. Imagina que buscas una canción en una cinta de casete: tienes que adelantar o rebobinar hasta encontrarla. Las cintas magnéticas son un ejemplo de esto. Son más lentas y hoy en día se usan menos.
Acceso aleatorio: ir directo al grano
El acceso aleatorio es como buscar una canción en una lista de reproducción digital: puedes ir directamente a la que quieres sin escuchar las anteriores. Los discos duros, las memorias USB y los discos ópticos funcionan así. Son mucho más rápidos y los más usados actualmente.
Los dispositivos de almacenamiento secundario también se pueden clasificar por la tecnología que usan: magnéticos, ópticos, magneto-ópticos y de estado sólido.
Dispositivos magnéticos: guardando datos con imanes
El soporte magnético es uno de los tipos de medios o soportes de almacenamiento de datos en los que se utilizan las propiedades magnéticas de los materiales para almacenar información digital.
Estos dispositivos usan las propiedades magnéticas de ciertos materiales para guardar información.
Cintas magnéticas: el almacenamiento del pasado
Las cintas magnéticas de almacenamiento de datos han sido usadas para el almacenamiento de datos durante los últimos 50 años. En este tiempo se han hecho varios avances en la composición de la cinta, la envoltura, y la densidad de los datos. La principal diferencia entre el almacenamiento en cintas y en discos es que la cinta es un medio de acceso secuencial, mientras que el disco es un medio de acceso aleatorio. Se empezaron a utilizar en las décadas de 1980 y 1990.
Hay dos características clave para clasificar las tecnologías de cintas magnéticas. La primera es la anchura de la cinta. La anchura más común de una cinta de alta capacidad ha sido como máximo media pulgada. Existen muchos otros tamaños y la mayoría han sido desarrollados para tener menor encapsulado o mayor capacidad.
La segunda clasificación es según el método de grabación. Más específicamente, la diferencia radica en si los datos son escritos linealmente o por escaneo 'helical'. El método lineal ordena en pistas paralelas a la longitud de la cinta. El escaneo 'helical' escribe pequeñas pistas curvada desde un borde de la cinta hasta el otro. Originalmente, la grabación lineal significaba ocupar completamente la anchura de la cinta y escribiendo o leyendo todas las pistas a la vez. Una variación de esta tecnología, es la llamada grabación lineal 'serpentine' que solo graba una fracción de las pistas en la cinta a la vez. Después de realizar una pasada completa, la cabeza se desplaza ligeramente y hace otra pasada en la dirección contraria. Este procedimiento es repetido hasta que todas las pistas han sido leídas o escritas. Usando este método, la cinta puede tener más pistas que las usadas con el método linear normal. En contraste a esto, el método de escaneo 'helical' solo necesita una pasada para leer o escribir toda la cinta.
Las cintas magnéticas se han usado para guardar datos por más de 50 años. Son un tipo de almacenamiento de acceso secuencial, lo que significa que para encontrar un dato, hay que "rebobinar" o "adelantar" la cinta. Se usaron mucho en los años 80 y 90.
Disquetes: los discos flexibles que ya no se usan
El disquete (en inglés diskette) o disco flexible es un soporte de almacenamiento de datos obsoleto de tipo magnético, formado por una fina lámina circular (disco) de material magnetizable y flexible (de ahí su denominación), encerrada en una cubierta de plástico, cuadrada o rectangular, que se utilizaba en la computadora, por ejemplo: para disco de arranque, para trasladar datos e información de un ordenador a otro, o simplemente para almacenar y resguardar archivos.
La llamada «disquetera», «unidad de disquete» o «unidad de disco flexible» es el dispositivo o unidad de almacenamiento que lee y escribe los disquetes, es decir, es la unidad lectograbadora de disquetes.
Este tipo de soporte de almacenamiento es vulnerable a la suciedad y los campos magnéticos externos, por lo que deja de funcionar con el tiempo o por el desgaste.
Los disquetes eran discos pequeños y flexibles, protegidos por una cubierta de plástico. Se usaban para guardar archivos, mover datos entre computadoras o iniciar sistemas. La "disquetera" era el aparato que los leía y escribía. Eran sensibles a la suciedad y los imanes, por lo que se dañaban fácilmente. Hoy en día, ya no se usan.
Discos duros (HDD): el almacén principal de tu PC
En informática, unidad de disco duro o unidad de disco rígido (en inglés: hard disk drive, HDD) es un dispositivo de almacenamiento de datos que emplea un sistema de grabación magnética para almacenar y recuperar archivos digitales. Se compone de uno o más platos o discos rígidos, recubiertos con material magnético y unidos por un mismo eje que gira a gran velocidad dentro de una caja metálica sellada. Sobre cada plato, y en cada una de sus caras, se sitúa un cabezal de lectura/escritura que flota sobre una delgada lámina de aire generada por la rotación de los discos. Permite el acceso aleatorio a los datos, lo que significa que los bloques de datos se pueden almacenar o recuperar en cualquier orden y no solo de forma secuencial. Las unidades de disco duro son un tipo de memoria no volátil, que retienen los datos almacenados incluso cuando están apagados.
El primer disco duro fue inventado por IBM, en 1956. A lo largo de los años, han disminuido los precios de los discos duros, al mismo tiempo que han multiplicado su capacidad, siendo la principal opción de almacenamiento secundario para computadoras personales, desde su aparición en los años 1960. Los discos duros han mantenido su posición dominante gracias a los constantes incrementos en la densidad de grabación, que se ha mantenido a la par de las necesidades de almacenamiento secundario.
Mejorados continuamente, los discos rígidos han mantenido esta posición en la era moderna de los servidores y las computadoras personales. Más de 224 compañías han fabricado unidades de disco duro históricamente, aunque después de una extensa consolidación de la industria, la mayoría de las unidades son fabricadas por Seagate, Toshiba y Western Digital. Los discos duros dominan el volumen de almacenamiento producido (exabytes por año) para servidores. Aunque la producción está creciendo lentamente, los ingresos por ventas y los envíos de unidades están disminuyendo debido a que las unidades de estado sólido (SSD) tienen mayores tasas de transferencia de datos, mayor densidad de almacenamiento de área, mejor confiabilidad, y tiempos de acceso y latencia mucho más bajos.
Los ingresos por discos duros SSD, la mayoría de los cuales utilizan tecnología flash NAND, exceden ligeramente los de los discos duros HDD. Aunque los SSD tienen un costo por bit casi 10 veces mayor, están reemplazando a los discos duros HDD en aplicaciones donde la velocidad, el consumo de energía, el tamaño pequeño y la durabilidad son importantes.
Los tamaños también han variado mucho, desde los primeros discos IBM hasta los formatos estandarizados actualmente: 3,5 pulgadas para PC y servidores, y 2,5 pulgadas para dispositivos portátiles(LAPTOPS, NOTEBOOK). Todos se comunican con la computadora a través del controlador de disco, empleando una interfaz estandarizada. Los más comunes hasta los años 2000 han sido IDE (también llamado ATA o PATA), SCSI/SAS (generalmente usado en servidores y estaciones de trabajo). Desde el 2000 en adelante ha ido masificándose el uso de los SATA. Existe además los discos de canal de fibra (FC), empleados exclusivamente en servidores. Las unidades externas se conectan principalmente por USB.
Para poder utilizar un disco duro, un sistema operativo debe aplicar un formato de bajo nivel que defina una o más particiones. La operación de formateo requiere el uso de una fracción del espacio disponible en el disco, que dependerá del sistema de archivos o formato empleado. Además, los fabricantes de discos duros, unidades de estado sólido y tarjetas flash miden la capacidad de los mismos usando prefijos del Sistema Internacional, que emplean múltiplos de potencias de 1000 según la normativa IEC e IEEE, en lugar de los prefijos binarios, que emplean múltiplos de potencias de 1024, y son los usados por sistemas operativos de Microsoft. Esto provoca que en algunos sistemas operativos sea representado como múltiplos 1024 o como 1000, y por tanto existan confusiones, por ejemplo, un disco duro de 500 GB, en algunos sistemas operativos será representado como 465 GiB (es decir gibibytes; 1 GiB = 1024 MiB) y en otros como 500 GB.
El rendimiento de un disco duro se especifica por el tiempo requerido para mover las cabezas a una pista o cilindro (tiempo de acceso promedio) agregando el tiempo que toma para que el sector deseado se mueva debajo de la cabeza (latencia media, que es una función de la velocidad de rotación física en las revoluciones por minuto) y, finalmente, la velocidad a la que se transmiten los datos (velocidad de datos).
Existen diferentes tipos de discos duros, como los discos duros internos y los discos duros externos. Los discos duros internos son aquellos que se instalan dentro de la computadora y son utilizados para almacenar el sistema operativo, archivos y programas. Por otro lado, los discos duros externos son dispositivos portátiles que se conectan a la computadora a través de un cable y se utilizan para almacenar y transferir datos de manera externa.
Además, es importante mencionar que existen diferencias entre los discos duros HDD (Hard Disk Drive) y los discos duros SSD (Solid State Drive). Los discos duros HDD utilizan piezas mecánicas y el magnetismo para grabar y leer datos, mientras que los discos duros SSD utilizan memoria flash para almacenar datos de forma electrónica. Los discos duros SSD suelen ser más rápidos y duraderos que los discos duros HDD, pero también suelen ser más costosos.
Un disco duro (HDD) es un dispositivo que usa la grabación magnética para guardar y encontrar archivos digitales. Dentro de una caja sellada, tiene varios discos rígidos que giran muy rápido. Unas "cabezas" leen y escriben la información en estos discos.
El primer disco duro fue creado por IBM en 1956. Con el tiempo, su capacidad ha crecido mucho y su precio ha bajado. Han sido la opción principal para guardar información en computadoras personales desde los años 60.
Hoy en día, aunque los discos duros siguen siendo importantes, las unidades de estado sólido (SSD) están ganando terreno. Los SSD son más rápidos y duraderos, aunque suelen ser más caros.
Los discos duros vienen en diferentes tamaños, como 3.5 pulgadas para computadoras de escritorio y 2.5 pulgadas para laptops. Se conectan a la computadora usando diferentes tipos de cables, como SATA o USB para los externos.
Para que un disco duro funcione, el sistema operativo debe prepararlo, un proceso llamado "formateo". Esto crea espacios donde se guardarán los archivos. La capacidad de los discos duros se mide en gigabytes (GB), aunque a veces puede haber una pequeña diferencia en cómo la computadora muestra esa capacidad.
El rendimiento de un disco duro se mide por la rapidez con la que puede encontrar y transferir datos. Hay discos duros internos (dentro de la computadora) y externos (portátiles).
Dispositivos ópticos: leyendo con luz láser
En informática, la unidad de disco óptico es la unidad de disco que utiliza una luz láser como parte del proceso de lectura o escritura de datos desde un archivo a discos ópticos a través de luz que interpretan las refracciones provocadas sobre su propia emisión.
Los discos compactos (CD), discos versátiles digitales (DVD) y discos Blu-ray (BD) son los tipos de medios ópticos más comunes que pueden ser leídos y grabados por estas unidades.
El “almacenamiento óptico” es una variante de almacenamiento informático surgida a finales del siglo XX. La historia del almacenamiento de datos en medios ópticos se remonta a los años comprendidos en las décadas de 1970 y 1980. Se trata de aquellos dispositivos que son capaces de guardar datos por medio de un rayo láser en su superficie plástica, ya que se almacenan por medio de ranuras microscópicas (o ranuras quemadas). La información queda grabada en la superficie de manera física, por lo que solo el calor (puede producir deformaciones en la superficie del disco) y las ralladuras pueden producir la pérdida de los datos, en cambio es inmune a los campos magnéticos y la humedad.
Las unidades de discos ópticos son una parte integrante de los aparatos de consumo autónomos como los reproductores de CD, reproductores de DVD y grabadoras de DVD. También son usados muy comúnmente en las computadoras para leer software y medios de consumo distribuidos en formato de disco, y para grabar discos para el intercambio y archivo de datos. Las unidades de discos ópticos (junto a las memorias flash) han desplazado a las disqueteras y a las unidades de cintas magnéticas para este propósito debido al bajo coste de los medios ópticos y la casi ubicuidad de las unidades de discos ópticos en las computadoras y en hardware de entretenimiento de consumo.
La grabación de discos en general es restringida a la distribución y copiado de seguridad a pequeña escala, siendo más lenta y más cara en términos materiales por unidad que el proceso de moldeo usado para fabricar discos planchados en masa.
Una unidad de disco óptico usa un rayo láser para leer o escribir datos en discos especiales. Los discos compactos (CD), los discos versátiles digitales (DVD) y los discos Blu-ray (BD) son los tipos más comunes.
Estos dispositivos guardan la información en la superficie del disco mediante pequeñas marcas o "ranuras" hechas con el láser. La información queda grabada físicamente. Son resistentes a los campos magnéticos y la humedad, pero pueden dañarse con el calor o los arañazos.
Las unidades ópticas se encuentran en reproductores de CD/DVD y en computadoras. Se usan para instalar programas, ver películas o guardar copias de seguridad de archivos. Han reemplazado a los disquetes y las cintas magnéticas porque los discos ópticos son económicos y las unidades son muy comunes.
Unidades magneto-ópticas: lo mejor de dos mundos
Un disco magneto-óptico (MO) es un tipo de medio de almacenamiento que permite la escritura, borrado y reescritura de datos, combinando tecnologías magnéticas y ópticas. Funciona mediante un proceso en el cual un rayo láser calienta un punto específico del disco, permitiendo que un campo magnético modifique su polaridad. La lectura, por otro lado, se realiza mediante un sistema óptico, similar al de los discos compactos.
Este tipo de discos puede utilizarse para almacenar tanto datos informáticos como contenido de audio, al igual que los CD-RW. Uno de sus principales beneficios es la durabilidad y estabilidad del almacenamiento a largo plazo.
Un disco magneto-óptico (MO) combina lo mejor de las tecnologías magnéticas y ópticas. Permite escribir, borrar y reescribir datos. Para escribir, un láser calienta una parte del disco, y un campo magnético cambia su polaridad. Para leer, se usa un sistema óptico, como en los CD. Estos discos son muy duraderos para guardar información a largo plazo.
Unidades de estado sólido (SSD): el almacenamiento más rápido
La unidad de estado sólido o SSD (del inglés Solid State Drive) es un tipo de dispositivo de almacenamiento de datos que utiliza memoria no volátil, como la memoria flash, para almacenar datos, en lugar de los platos o discos magnéticos de las unidades de disco duro (HDD) convencionales.
En comparación con los discos duros, las unidades de estado sólido son menos sensibles a los golpes al no tener partes móviles, son inaudibles, más livianas y poseen un notablemente menor tiempo de acceso y de latencia, lo que se traduce en una mejora sustancial en el rendimiento, en cuanto a la carga de sistemas operativos, software y transferencia de datos. En contrapartida, su vida útil puede ser inferior, ya que tienen un número limitado de ciclos de escritura, pudiendo producirse la pérdida absoluta de los datos de forma inesperada e irrecuperable. Sin embargo, por medio del cálculo del tiempo medio entre fallos y la administración de sectores defectuosos dicho problema puede ser mitigado razonablemente.
Las unidades SSD pueden usar la misma interfaz SATA que los discos duros, por lo que son fácilmente intercambiables sin tener que recurrir a adaptadores o tarjetas de expansión para compatibilizarlos con el equipo, también pueden usar la interfaz PCIe para obtener velocidades mayores de lectura/escritura, pudiendo superar los 10 GB/s, si bien esto depende de la generación de PCIe que utilice y otros factores de su diseño. Aunque en sus inicios el formato físico más común de estas unidades era el de un disco duro estándar de 2.5 o 3.5 pulgadas, actualmente existen otros formatos de consumo en uso como mSATA o M.2, y otros empresariales como NF1.
A partir de 2010, la mayoría de las SSD utilizan memoria flash basada en puertas NAND, que retiene los datos sin alimentación eléctrica. Para aplicaciones que requieren acceso rápido, pero no necesariamente la persistencia de datos después de la pérdida de alimentación, las SSD pueden ser construidos a partir de memoria de acceso aleatorio (RAM). Estos dispositivos pueden emplear fuentes de alimentación independientes, como baterías, para mantener los datos después de la desconexión de la corriente eléctrica.
Se han desarrollado y están disponibles en el mercado dispositivos que combinan ambas tecnologías, discos duros con memorias flash, en una única unidad, que se denomina disco duro híbrido (HHDD o Hybrid Hard Disk Drive), con la intención de mejorar la velocidad pero manteniendo la capacidad del disco duro, y a precios inferiores a los de estado sólido. Se logra así una solución de compromiso con una tasa de transferencia mayor que la de un disco duro convencional pero menor a la de un SSD.
Una unidad de estado sólido (SSD) es un tipo de almacenamiento que usa memoria flash, como la de las memorias USB, para guardar datos. A diferencia de los discos duros, no tiene partes móviles.
Esto hace que los SSD sean más resistentes a los golpes, no hagan ruido, sean más ligeros y mucho más rápidos para iniciar el sistema operativo, cargar programas y transferir archivos. Sin embargo, tienen un número limitado de veces que se pueden escribir datos, lo que podría afectar su vida útil.
Los SSD pueden conectarse a la computadora de la misma forma que los discos duros (con cables SATA) o usar conexiones más rápidas como PCIe. Al principio, se veían como discos duros normales, pero ahora hay formatos más pequeños como mSATA o M.2.
La mayoría de los SSD usan memoria flash NAND, que guarda los datos sin necesidad de electricidad. También existen discos híbridos (HHDD) que combinan un disco duro con memoria flash para ofrecer una buena velocidad y capacidad a un precio más bajo.
Memorias USB: el almacenamiento portátil
La memoria USB (Universal Serial Bus), conocida también con los nombres locales: lápiz de memoria, dedo USB, pincho USB, lápiz USB, memoria externa, memoria flash, memoria flash con puerto USB, pendrive o pen drive, es un tipo de dispositivo de almacenamiento de datos que utiliza circuitos de estado sólido para guardar datos, imágenes e información.
Las memorias USB, también conocidas como pendrives o lápices de memoria, son dispositivos pequeños y portátiles que usan circuitos de estado sólido (memoria flash) para guardar datos. Son muy útiles para llevar archivos de un lado a otro.
El desafío de guardar tanta información
Los seres humanos siempre hemos creado información, pero con la llegada de las computadoras, la cantidad de datos que generamos ha crecido muchísimo. Se calcula que en 2010 se produjo un zettabyte (un billón de billones de caracteres) de datos en el mundo.
El almacenamiento de información ha mejorado constantemente, desde las antiguas tabletas de arcilla hasta los pequeños discos duros y las memorias USB de hoy. La cantidad de información que podemos guardar en un espacio pequeño ha aumentado mucho.
Se están investigando nuevas formas de almacenamiento, como usar nanotecnología para guardar datos en átomos o incluso en moléculas de ADN artificial.
¿Qué tan confiables son los dispositivos de almacenamiento?
Todos los dispositivos de almacenamiento tienen una vida útil limitada, lo que significa que con el tiempo pueden fallar y podrías perder tu información. Para evitar esto, es importante revisar tus dispositivos y hacer copias de seguridad de tus datos en otros lugares. Existen técnicas especiales que ayudan a recuperar información si se daña una parte.
¿Cómo se protege la información?
Para mantener la información privada y segura, se usa la criptografía. Esto significa "cifrar" los datos, es decir, transformarlos para que solo las personas autorizadas puedan leerlos. Hay diferentes métodos de cifrado.
El almacenamiento en la nube, donde guardas tus archivos en servidores remotos, también plantea desafíos de privacidad, por lo que existen reglas especiales para proteger tus datos.
¿Qué tan rápido es el almacenamiento?
La velocidad con la que puedes acceder a la información y el rendimiento de un dispositivo de almacenamiento varían mucho según el tipo de información y el dispositivo que uses.
Otros tipos de almacenamiento
- Almacenamiento en la nube: Es una forma de guardar tus archivos en discos duros que están en internet, en servidores remotos. Esto te permite liberar espacio en tu computadora y acceder a tus archivos desde cualquier lugar con conexión a internet. Puede ser para guardar cosas por poco tiempo o para almacenar información a largo plazo.
¿Cómo se recuperan los datos?
Es muy importante tener un plan para recuperar la información guardada en cualquier dispositivo. Si algo le pasa a tus archivos originales, necesitas poder acceder a una copia de seguridad que hayas hecho antes. Esto se puede hacer con comandos sencillos o con programas especiales.
La historia del almacenamiento
- 1947: Tubo Williams, el primer dispositivo de almacenamiento digital de acceso aleatorio.
- 1950: Tambor magnético, el antecesor de los discos duros modernos.
- 1951: Primera cinta magnética comercial.
- 1956: IBM 350, el primer disco duro "moderno" con 4.4 MB.
- 1971: El disquete y la disquetera.
- 1990: El Disco compacto (CD) con 700 MB.
- 1995: La grabadora de DVD con 4.7 GB.
- 1999: IBM 170 Microdrive, un disco duro muy pequeño de 170 MB.
- 2000: Memoria USB (DiskOnKey) con 8 MB y Tarjeta de memoria SD con 32 MB.
- 2008: Las primeras Unidad de Estado Sólido (SSD) con 64 GB.
- Presente: El Almacenamiento en la nube, que ofrece gran flexibilidad.
Galería de imágenes
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Unidades de disquetes de 8"; 5¼" y 3½".
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Disquetes de 8", de 5¼" y de 3½".
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Unidad Zip externa (izq.) y disco Zip de 100 MB (der).
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Discos Zip de 100 MB y 750 MB.
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Bandeja abierta de la lectora de CD.
Véase también
- Memoria (informática)
- Memoria secundaria
- Unidad de estado sólido