Guerras fernandinas para niños
Datos para niños Guerras fernandinas |
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Parte de Guerra de los Cien Años | ||||
![]() Ejército portugués e inglés derrotando a vanguardia francesa
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Fecha | 1369-1371 1372-1373 1381-1382 |
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Lugar | Portugal, Castilla | |||
Casus belli | Lucha por el trono de Castilla tras la muerte de Pedro I de Castilla | |||
Resultado | Victoria castellana | |||
Consecuencias | Crisis portuguesa de 1383-1385 | |||
Beligerantes | ||||
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Comandantes | ||||
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Las Guerras Fernandinas fueron una serie de conflictos que ocurrieron entre 1369 y 1382. Enfrentaron a Fernando I de Portugal contra los reyes de la Casa de Trastámara de Castilla. La razón principal de estas guerras fue la disputa por el trono de Castilla, después de que el rey Pedro I de Castilla fuera asesinado por su hermanastro, Enrique II de Castilla.
Contenido
¿Por qué se lucharon las Guerras Fernandinas?
Cuando el rey Pedro I de Castilla murió en 1369 sin hijos directos, varios nobles y reyes reclamaron el trono. Fernando I de Portugal, que era bisnieto de Sancho IV de Castilla, se declaró heredero. Otros que también querían el trono eran Pedro IV de Aragón, Carlos II de Navarra y Juan de Gante, un duque inglés. Juan de Gante estaba casado con Constanza, la hija mayor de Pedro I.
Sin embargo, Enrique de Trastámara, el hermanastro de Pedro I, ya había tomado la corona y se había proclamado rey. Esta situación llevó a tres guerras entre Portugal y Castilla.
La Primera Guerra: Un trono en disputa (1369-1371)
El reinado de Fernando I de Portugal comenzó con esta guerra. Varios nobles de Castilla apoyaron a Fernando I. Por ejemplo, Men Rodríguez de Sanabria le ayudó con ochenta soldados.
Esta primera guerra terminó con la batalla del Puerto de los Bueyes en marzo de 1371, cerca de Lugo. La derrota de Fernando de Castro, un partidario de Pedro I, marcó el fin de la resistencia en Castilla. Después de esta batalla, se firmó el Tratado de Alcoutim.
El Tratado de Alcoutim y un matrimonio fallido
El Tratado de Alcoutim, firmado en 1371, buscaba resolver la disputa por el trono. Una de sus condiciones era que Fernando I se casaría con Leonor de Castilla, la hija de Enrique II. Como parte del acuerdo, Leonor traería varios territorios fronterizos como dote, que pasarían a ser de Portugal.
Pero antes de la boda, Fernando I se enamoró de Leonor Téllez de Meneses, que ya estaba casada. Fernando logró que el primer matrimonio de Leonor fuera anulado y se casó con ella, haciéndola su reina. Esto causó problemas en Portugal, pero Enrique II de Castilla lo aceptó a cambio de que Fernando I renunciara a los territorios castellanos que se habían acordado en el tratado. Después, Fernando I prometió a su propia hija en matrimonio al rey Carlos III de Navarra.
La Segunda Guerra: Nuevas alianzas (1372-1373)
La paz no duró mucho. El duque de Lancaster, que seguía queriendo el trono de Castilla, convenció a Fernando I para que se uniera a un plan secreto. Querían quitar a Enrique II del trono.
Nobles castellanos que habían apoyado a Pedro I y se habían refugiado en Portugal, como Fernando Alfonso de Valencia y Men Rodríguez de Sanabria, invadieron Galicia. Querían atacar a Enrique II por el noroeste de su reino. Las ciudades fronterizas apoyaron a estos nobles. Rodríguez de Sanabria y Juan Alfonso de Zamora lograron controlar temporalmente algunas tierras en Valdeorras y Verín.
Sin embargo, Enrique II era más fuerte y los partidarios de Pedro I fueron derrotados de nuevo. Además, los ingleses no pudieron enviar ayuda a Portugal porque habían sufrido una derrota en la Batalla de La Rochelle. Por estas razones, Enrique II invadió Portugal en diciembre de 1372. Llegó hasta las puertas de Lisboa, y después de que la flota portuguesa fuera vencida, impuso la firma del Tratado de Santarém en 1373.
El Tratado de Santarém y sus consecuencias
El Tratado de Santarém puso fin a la resistencia de los partidarios de Pedro I en Portugal. Enrique II de Castilla exigió que Fernando I expulsara a estos nobles de Portugal. También se acordaron matrimonios entre las dos familias reales. Esto hizo que muchos nobles castellanos exiliados tuvieran que irse a otros lugares, perdiendo su influencia.
La reina Leonor Téllez de Meneses se volvió muy influyente en la política, lo que la hizo impopular. Fernando I parecía no poder mantener un gobierno fuerte, y había muchas intrigas en la corte.
La Tercera Guerra: El final de los enfrentamientos (1381-1382)
Cuando Enrique II murió en 1379, el duque de Lancaster volvió a reclamar el trono de Castilla. En 1380, encontró de nuevo un aliado en Fernando I, quien quería vengarse de las derrotas anteriores. Con la ayuda de Juan Fernández de Andeiro, una persona muy cercana a la reina, Fernando I hizo un acuerdo con el duque de Lancaster. El duque prometió enviar un ejército inglés para ayudar a Fernando I contra Castilla. Fernando I aceptó y cumplió el acuerdo al año siguiente.
Sin embargo, algunos historiadores dicen que las tropas inglesas fueron tan problemáticas para Fernando I como para sus enemigos. Además, la flota portuguesa fue destruida por la castellana en la batalla de la isla Saltés. Esto puso a Lisboa en peligro por mar al año siguiente. Por todo esto, Fernando I, que ya estaba enfermo, tuvo que actuar contra los ingleses y firmar la paz con Castilla en el Tratado de Badajoz de 1382.
El Tratado de Badajoz y el futuro de Portugal
Las condiciones del Tratado de Badajoz establecieron que Beatriz, la hija y heredera de Fernando I de Portugal, se casaría con el rey Juan I de Castilla. Esta unión, acordada con la ayuda de Juan Fernández de Andeiro, significaba que, a pesar de algunas cláusulas, el reino de Portugal podría unirse a la Corona de Castilla. Por esta razón, la nobleza portuguesa no recibió bien la noticia. Finalmente, Beatriz y Juan I se casaron en 1383, y la paz se llevó a cabo.
¿Qué pasó después? Las consecuencias de las Guerras Fernandinas
Cuando Fernando I murió, Juan I de Castilla reclamó abiertamente el trono de Portugal. Esto iba en contra de lo acordado en el tratado. La regente (la reina Leonor) y su consejero, Juan Fernández de Andeiro, apoyaron esta reclamación.
Esto provocó un gran levantamiento en Lisboa, que se extendió por todo el país. Este levantamiento fue liderado por Juan de Avís, el medio hermano de Fernando I, y se conoce como la Crisis Portuguesa de 1383-1385. Durante esta crisis, Juan Fernández de Andeiro fue asesinado y la regente tuvo que exiliarse. Los intentos de Juan I de Castilla de tomar el control de Portugal terminaron con su gran derrota en la batalla de Aljubarrota en 1385.
Las Guerras Fernandinas también marcaron el fin de la Casa de Borgoña en Portugal. Esta dinastía fue reemplazada por la Casa de Avís, llamada así por Juan de Avís, quien fue proclamado rey de Portugal. Desde entonces, se le conoció como Juan I de Portugal.
Galería de imágenes
Véase también
En inglés: Fernandine Wars Facts for Kids