Rosario (catolicismo) para niños
El rosario es una forma de oración muy importante en la Iglesia católica. Su nombre viene del latín rosarium, que significa "rosaleda" o "jardín de rosas". Los católicos lo llaman a menudo Santo Rosario.
Esta oración especial recuerda veinte momentos importantes de la vida de Jesucristo y de la Virgen María. Al rezar el rosario, se anuncian estos momentos, llamados "misterios", y luego se recitan oraciones como el padre nuestro, diez avemarías y un gloria al Padre.
También se le llama "rosario" a la sarta de cuentas que se usa para llevar la cuenta de las oraciones. Estas cuentas suelen estar separadas en grupos de diez por una cuenta más grande, y la sarta se une en sus extremos a una cruz.
Contenido
Orígenes del Rosario
El rosario tiene una historia muy antigua, que mezcla tradiciones de oración tanto de Oriente como de Occidente. Sus raíces se remontan al siglo IX, cuando la forma de honrar a María (madre de Jesús) en Oriente empezó a conocerse en Occidente.
Esta devoción se basa en la repetición de alabanzas que aparecen en el Evangelio de Lucas. Por ejemplo, el saludo del arcángel Gabriel a María y el saludo de Isabel a María. Estas frases se unieron para formar la oración del avemaría. También influyeron himnos y oraciones de las liturgias orientales, como el Akáthistos, un himno griego antiguo que reflexiona sobre la maternidad de María.
Algunos escritos antiguos, como un manuscrito de 1501, sugieren que el rosario pudo haber comenzado en la Orden de San Benito. Luego, fue impulsado por la Orden de los Cartujos y se hizo más conocido gracias a los dominicos.
En los monasterios, los monjes solían recitar los 150 salmos (conocidos como el salterio de David). Pero para las personas que no eran sacerdotes ni monjes y no sabían leer, se les enseñó una forma más sencilla: recitar 150 avemarías. A esta práctica se le llamó el "Salterio de la Virgen".
El Rosario y los Dominicos
La popularidad del rosario creció mucho en el siglo XIII. En ese tiempo, Domingo de Guzmán, fundador de la orden de los Predicadores (los dominicos), parece haber promovido una forma temprana del rosario en sus misiones. Como los dominicos eran predicadores que vivían entre la gente, esta devoción se hizo muy popular. Surgieron cofradías (grupos de devotos) y se contaban historias de milagros que aumentaron su fama.
Aunque la devoción disminuyó en el siglo XIV, la orden de los Predicadores siguió impulsándola. El beato Alano de la Roca fue clave para que resurgiera, y luego Jacobo Sprenger, un líder dominico en Colonia, Alemania, continuó su trabajo. Para el siglo XVI, el rosario ya tenía la forma que conocemos hoy: con la meditación de los "misterios", el credo, el padrenuestro y el avemaría como oraciones principales, y las cuentas para guiar la oración.
La segunda parte del avemaría se añadió en el siglo XIV. Su uso se hizo universal cuando el papa Pío V ordenó que se rezara al principio de cada hora del Oficio Divino.
La Batalla de Lepanto y el Rosario
La batalla de Lepanto fue un evento importante para el rosario. El 7 de octubre de 1571, las fuerzas cristianas lograron una gran victoria sobre los turcos. El papa Pío V atribuyó esta victoria a la intercesión de la Virgen María, gracias al rezo del rosario. Por ello, instituyó una fiesta anual el 7 de octubre, que primero se llamó "Nuestra Señora de las Victorias". Más tarde, el papa Gregorio XIII cambió el nombre a "Nuestra Señora del Rosario".

Un fenómeno importante fueron los rosarios públicos o callejeros, que comenzaron en Sevilla en 1690 y se extendieron por España y América. Eran procesiones con faroles y coros, donde la gente rezaba y cantaba las avemarías y los misterios por las calles.
Según la tradición católica, en Fátima (Portugal), en 1917, la Virgen María se apareció a tres niños pastores. Ella les dijo que cada avemaría rezada es como ofrecerle una rosa, y un rosario completo es como una corona de rosas.
El 16 de octubre de 2002, el papa Juan Pablo II publicó una carta llamada Rosarium Virginis Mariae. En ella, sugirió añadir cinco nuevos misterios al rosario, llamados "misterios luminosos".
La Corona del Rosario
La corona del rosario, también conocida como camándula en algunos lugares, es el objeto físico que se usa para rezar. Está hecha de cincuenta cuentas, divididas en grupos de diez (llamados "decenas"). Entre cada decena hay una cuenta un poco más grande o separada. La sarta se cierra y se une a una cruz o un crucifijo.
A veces, antes de la cruz, hay un pequeño tramo con cinco cuentas adicionales. Estas cuentas pueden representar las cinco llagas de Jesucristo y se usan para oraciones extra al principio o al final.
Antiguamente, las cuentas se hacían de semillas de caoba, perlas o incluso huesos de aceitunas (recordando los olivos del huerto de Getsemaní). Hoy en día, también se fabrican con materiales artificiales.
Tradicionalmente, se rezaban quince decenas, pero con la adición de los "misterios luminosos" en 2002, el número aumentó a veinte. Cada decena corresponde a uno de los "misterios" de la Redención.
Misterios del Santo Rosario
Cada serie de misterios tiene cinco temas diferentes para la meditación. Cada tema representa un momento importante en la vida de Jesús y de la Virgen María. El rosario simboliza las rosas que se ofrecen a la Virgen María a través de estas oraciones y meditaciones.
Tradicionalmente, el rosario se dedicaba a tres series de "misterios" que se rezaban en días específicos:
- Los "misterios gozosos" se rezaban los lunes y jueves.
- Los "dolorosos" se rezaban los martes y viernes.
- Los "gloriosos" se rezaban los miércoles, sábados y domingos.
El 16 de octubre de 2002, el papa Juan Pablo II añadió los "misterios luminosos" en su carta apostólica Rosarium Virginis Mariae. Él explicó que estos misterios ayudan a contemplar la vida pública de Jesús, desde su Bautismo hasta su Pasión, mostrando a Cristo como "luz del mundo".
Con esta adición, el orden semanal de los misterios cambió un poco:
Misterios | Días tradicionales | Días actuales |
---|---|---|
Gozosos | Lunes y jueves, y también en el tiempo de Adviento y Navidad | Lunes y sábados |
Dolorosos | Martes y Viernes, Semana Mayor | Martes y Viernes |
Gloriosos | Miércoles, Sábados y Domingos y en el tiempo de Pascua | Miércoles y Domingos |
Luminosos | — | Jueves |
Los temas de cada misterio son:
- Gozosos: El anuncio del ángel a María, la visita de María a su prima Isabel, el nacimiento de Jesús (Natividad), la presentación de Jesús en el Templo y el encuentro de Jesús en el templo.
- Dolorosos: La oración de Jesús en el huerto de Getsemaní, la flagelación, la coronación de espinas, el camino de Jesús con la cruz y la crucifixión y muerte de Jesús en el monte Calvario.
- Gloriosos: La resurrección de Jesús, la ascensión de Jesús al cielo, la llegada del Espíritu Santo sobre María y los Apóstoles, la asunción de María (María es llevada al cielo) y la coronación de la Virgen (María es coronada en el cielo).
- Luminosos: El bautismo de Jesús en el Río Jordán, la primera señal de Jesús en las bodas de Caná, la predicación del Reino de Dios, la transfiguración de Jesús en el Monte Tabor y la institución de la Eucaristía en la Última Cena.
Cómo se reza el Rosario
Para rezar el rosario, se sigue un orden específico:
- Se sostiene el crucifijo, se hace la señal de la cruz y se reza el Acto de Contrición.
- En la primera cuenta grande, se reza un padrenuestro.
- En cada una de las tres cuentas pequeñas siguientes, se reza un avemaría.
- Se reza un gloria antes de la siguiente cuenta grande.
- Se anuncia el primer misterio del rosario para ese día y se reza un padrenuestro.
- En cada una de las diez cuentas pequeñas siguientes (una decena), se reza un avemaría mientras se piensa en el misterio.
- Después de las diez avemarías, se reza un gloria. También se puede añadir la oración de Fátima.
- Las siguientes decenas se rezan de la misma manera: anunciando el misterio correspondiente, rezando un padrenuestro, diez avemarías y un gloria, mientras se medita en el misterio.
- Cuando se ha terminado el quinto misterio, el rosario suele finalizar con el rezo de la Letanía y la Salve Reina.
Existen otras formas de rezar el rosario, que varían según la meditación o las oraciones que se añaden. Por ejemplo, el "rosario misionero" o el "rosario de las familias".
Las Quince Promesas de la Virgen María
La Iglesia católica menciona quince promesas que el beato Alano de la Roca dijo haber recibido de la Virgen María. Estas promesas son para quienes recen el rosario con devoción. Alano de la Roca fue quien ayudó a que la devoción al rosario, enseñada por Domingo de Guzmán, volviera a ser popular.
Algunas de estas promesas son:
- Quien rece el rosario diariamente recibirá cualquier gracia que pida.
- La Virgen promete su protección especial y grandes beneficios a quienes recen su rosario con devoción.
- El rosario será un fuerte escudo contra el mal, ayudará a superar los vicios y los pecados.
- El rosario hará crecer las virtudes y ayudará a obtener la misericordia divina.
- El alma que se encomiende al rosario no se perderá.
- Quien rece el rosario con devoción, meditando los misterios, no sufrirá desgracias ni tendrá una mala muerte; si es pecador, se convertirá; si es justo, crecerá en gracia y será admitido a la vida eterna.
- Los verdaderos devotos del rosario no morirán sin recibir los auxilios de la Iglesia.
- Los devotos del rosario tendrán en vida y en muerte la luz y la gracia, y compartirán los méritos de los bienaventurados.
- La Virgen liberará pronto del purgatorio a las almas devotas del rosario.
- Los verdaderos hijos del rosario disfrutarán de una gloria especial en el cielo.
- Todo lo que se pida por medio del rosario se obtendrá rápidamente.
- La Virgen socorrerá en todas sus necesidades a quienes difundan su rosario.
- Quienes recen el rosario tendrán a los bienaventurados del cielo como hermanos en vida y muerte.
- Quienes rezan el rosario son hijos muy amados de la Virgen y hermanos de su único Hijo, Jesús.
- La devoción al santo rosario es una señal clara de que se está destinado a la gloria.
Galería de imágenes
-
Rosario católico de cuentas de madera, con una medalla de san Benito en el centro de la cruz. La crítica histórica atribuye a la Orden de San Benito el punto de origen del rezo del rosario.
Véase también
En inglés: Rosary Facts for Kids
- Nuestra Señora del Rosario
- Avemaría
- Rosario irlandés
- Rosario (anglicanismo)
- Rosario iniciático
- Coronilla de la Divina Misericordia
- Coronilla de Nuestra Señora de las Lágrimas
- Coronilla de San Miguel Arcángel
- Domingo de Guzmán
- Cordón de oración
- Letanías lauretanas
- Magnificat
- Meditación cristiana
- Oración
- Padre nuestro
- Salve
- Virgen de Fátima
- Virgen del Rosario de San Nicolás
- Rosarium Virginis Mariae