Cuarta expedición auxiliadora al Alto Perú para niños
Datos para niños Cuarta expedición auxiliadora al Alto Perú |
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Guerra de Independencia de la Argentina Guerra de la Independencia de Bolivia Parte de las guerras de independencia hispanoamericana |
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Fecha | 18 de marzo de 1817-12 de junio de 1817 | |||
Lugar | Provincia de Salta (Jujuy), provincia de Tarija, región del Alto Perú: provincias de Chuquisaca y Potosí | |||
Resultado | Victoria realista | |||
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En 1817, durante la Guerra de Independencia Argentina, el comandante Manuel Belgrano del Ejército del Norte envió una pequeña división militar al Alto Perú. Esta división, liderada por el teniente coronel Gregorio Aráoz de Lamadrid, tenía la misión de frenar el avance del Ejército Real del Perú en el norte de lo que hoy es Argentina.
Aunque la división de Lamadrid logró llegar hasta Chuquisaca, fue rechazada y perseguida por tres grupos del ejército realista. A pesar de la derrota, la expedición cumplió su objetivo principal: ayudar a que la invasión realista retrocediera. A esta misión a veces se le llama la Cuarta Expedición Auxiliar al Alto Perú.
Contenido
¿Por qué se realizó esta expedición?
En septiembre de 1816, el general José de la Serna tomó el mando del Ejército Real del Alto Perú. Él planeó invadir las Provincias Unidas desde el norte. A principios de 1817, De la Serna avanzó sobre Jujuy con 5000 hombres.
Sin embargo, el avance realista fue frenado por las guerrillas del coronel Martín Miguel de Güemes. Además, el Ejército de los Andes, liderado por José de San Martín, entró en Santiago de Chile, frustrando los planes realistas.
Güemes propuso a Belgrano enviar una división para atacar la retaguardia realista. La idea era provocar una rebelión y tomar Potosí y Chuquisaca. Esto obligaría al ejército realista a retroceder. Belgrano eligió a Aráoz de Lamadrid para esta importante misión.
¿Cómo se formó la expedición?
El Escuadrón de Húsares de Tucumán fue creado en septiembre de 1816. Estaba formado por voluntarios de Tucumán y liderado por Aráoz de Lamadrid. Este escuadrón tenía unos 200 soldados.
Belgrano le propuso a Lamadrid ir hasta Oruro con sus húsares y tres compañías de infantería. El objetivo era sorprender a las guarniciones realistas, animar a la gente del lugar a levantarse contra los españoles y distraer al ejército enemigo.
Lamadrid aceptó el desafío. Belgrano le ordenó preparar la expedición, que incluía 400 caballos y 600 mulas. También llevarían 2 cañones ligeros. La división estaba formada por unos 300 soldados y 50 milicianos.
El viaje y el cambio de planes
La expedición partió de San Miguel de Tucumán el 18 de marzo de 1817. Al principio, la idea era ir por el desierto de Atacama. Sin embargo, Lamadrid recibió pocos caballos y mulas. Pensó que su división no sobreviviría en el desierto.
Por eso, Lamadrid cambió la ruta y se dirigió a Tarija, en el norte de Jujuy. Quería conseguir más caballos allí. Este cambio de planes molestó a Belgrano, pero Lamadrid le explicó que era necesario para el éxito de la misión.
En el camino, un ataque sorpresa a una guardia realista en Cangrejillos alertó al ejército español. A pesar de esto, la división de Lamadrid logró pasar cerca de Yavi sin ser vista.
La toma de Tarija
Lamadrid llegó a Tarija el 14 de abril. Se encontró con Francisco Pérez de Uriondo, quien le informó sobre la situación. El gobernador realista, Mateo Ramírez, estaba en la Villa de Tarija con sus tropas.
Lamadrid, con unos 400 hombres y 2 cañones, entró en Tarija sin ser detectado. Organizó a los gauchos de la zona para el ataque. Ramírez, al principio, subestimó a las fuerzas de Lamadrid. Pero al ver su despliegue, se dio cuenta de que no eran solo guerrilleros y se refugió en la villa.
Lamadrid ocupó una posición alta y comenzó a disparar con sus cañones. Luego, pidió la rendición de Ramírez, quien al principio se negó. Los gauchos de Uriondo, con más de mil hombres, rodearon Tarija.
Mientras tanto, las fuerzas realistas de Concepción se dirigieron a Tarija. Lamadrid salió a enfrentarlas con solo 46 hombres. En el Combate de La Tablada, lograron una victoria sorprendente, causando muchas bajas a los realistas.
Después de esta victoria, Lamadrid volvió a pedir la rendición de Ramírez. Esta vez, Ramírez aceptó, temiendo un ataque masivo de los gauchos. El ejército realista entregó sus armas. Los patriotas capturaron más de 300 prisioneros, 400 fusiles y mucha munición. Solo tuvieron 2 muertos y unos pocos heridos.
Lamadrid informó a Belgrano de la victoria. Belgrano le dio más libertad para tomar decisiones y lo ascendió a coronel.
Avance hacia el Alto Perú
Lamadrid permaneció en Tarija hasta el 5 de mayo de 1817. Nombró a Francisco Pérez de Uriondo como gobernador y continuó su marcha hacia el Alto Perú. Decidió ir a Chuquisaca en lugar de Oruro. Su ejército creció con prisioneros que se unieron voluntariamente.
El ataque en Cangrejillos hizo que los realistas reforzaran sus posiciones en Potosí. Lamadrid avanzó con unos 400 hombres hacia Potosí, pero su verdadero objetivo era Chuquisaca, donde sabía que había mucho dinero.
En el valle de Cinti, Lamadrid organizó a los grupos locales de guerrilleros. También se le unieron otros grupos de la región.
El ataque a Chuquisaca
El 20 de mayo, cerca de Yotala, Lamadrid se encontró con un escuadrón realista. Logró engañarlos haciéndoles creer que eran refuerzos españoles. Así, capturó a todo el escuadrón, incluyendo a 50 soldados de caballería, sin disparar un solo tiro.
La guarnición de Chuquisaca era pequeña. Lamadrid entró por sorpresa a la medianoche del 21 de mayo, llegando hasta el Monasterio de la Recoleta, un punto alto que dominaba la ciudad. Llevaba sus dos cañones y parte de sus tropas.
Lamadrid pidió la rendición al presidente Vivero dos veces, pero fue rechazada. Entonces, ordenó el ataque. Los defensores respondieron con disparos y arrojando piedras y agua caliente desde los techos. El ataque patriota no tuvo éxito, y Lamadrid tuvo que retirarse con heridos y muertos.
Desde La Recoleta, Lamadrid consideró sitiar la ciudad. Pero sabía que podían llegar refuerzos realistas de Potosí y de Tarabuco.
El ataque a Tarabuco
Lamadrid decidió atacar a las fuerzas realistas en Tarabuco antes de que se unieran a otros grupos. El 22 de mayo, se produjo el Combate de Yamparáez. Las fuerzas de Lamadrid fueron sorprendidas por los realistas.
Aunque parte de la división se dispersó, Lamadrid logró hacer huir a los realistas. Sin embargo, perdieron la mayoría de sus cargas y cañones. Durante la noche, lograron recuperar los cañones y las cargas.
Al día siguiente, la división volvió a avanzar sobre Tarabuco. Encontraron el fuerte abandonado. Chuquisaca recibió muchos refuerzos, sumando entre 1.700 y 1.800 soldados.
La sorpresa de Sopachuy
Después de unos días en Tarabuco, la división de Lamadrid regresó a Chuquisaca y la sitió. Al saber que venían refuerzos de Potosí, Lamadrid levantó el sitio y fue a su encuentro.
El 12 de junio, la división de Lamadrid fue sorprendida en Sopachuy por las fuerzas realistas. Fue derrotada casi sin combatir. Lamadrid perdió sus dos cañones y algunos soldados fueron hechos prisioneros. Tuvo que escapar hacia Tarija.
Los realistas recuperaron el escuadrón que Lamadrid había capturado en Tarija. O'Reylli regresó a Chuquisaca con los cañones capturados y una bandera argentina, que fue colgada en una horca.
Regreso a Tarija
La división de Lamadrid se reagrupó. Los líderes indígenas se dispersaron. Lamadrid se dirigió a Culpina. Allí, se enteró de que De la Serna había llegado a Cinti.
Lamadrid logró engañar a De la Serna y a Ricafort, pasando por un sendero desconocido. Continuó hacia Tarija, siendo perseguido de cerca.
La división llegó a Tarija el 7 de julio y siguió hacia Padcaya. El 11 de julio, Ricafort entró en Tarija y cometió actos de venganza contra la población, incendiando el Cabildo y el Archivo.
El 14 de julio, hubo un enfrentamiento en Padcaya. La división patriota tuvo que retirarse. Los líderes de los grupos de Tarija fueron derrotados uno tras otro.
Retorno a Tucumán
Con órdenes de Belgrano de regresar a Tucumán, la división de Lamadrid se recuperó en San Ramón de la Nueva Orán. Luego, partió por los caminos del Chaco.
Finalmente, la expedición llegó a San Miguel de Tucumán entre el 23 y el 24 de diciembre. De los soldados que salieron de Tucumán, unos 28 a 30 murieron en la campaña y 8 a 10 fueron hechos prisioneros. Aráoz de Lamadrid fue ascendido a coronel.
Balance de la expedición
Aráoz de Lamadrid consideró que su expedición fue un éxito. Logró internarse más de 200 leguas detrás del ejército español sin ser detectado. Obligó a todo el ejército realista a retroceder y dividirse en tres grupos para perseguirlo.
Al final, después de tres meses de campaña, Lamadrid logró regresar a su ejército con más hombres de los que había llevado. Esto lo hizo burlando a las tres divisiones realistas.