Antonio de Arjona para niños
Datos para niños Antonio de Arjona |
||
---|---|---|
![]() |
||
Información personal | ||
Nacimiento | 12 de mayo de 1810![]() |
|
Fallecimiento | 20 de junio de 1873![]() |
|
Nacionalidad | Española | |
Información profesional | ||
Ocupación | Militar | |
Años activo | 1834–1841 1872–1873 |
|
Lealtad | Carlismo | |
Rango militar | Brigadier | |
Conflictos | Primera guerra carlista Tercera guerra carlista |
|
Miembro de | Orden de Santiago | |
Antonio de Arjona y Tamariz (nacido en Badajoz el 12 de mayo de 1810 y fallecido en Madrid el 20 de junio de 1873) fue un militar español. Apoyó la causa carlista y fue representante de Carlos María Isidro de Borbón.
Su padre, José Manuel de Arjona, era una persona importante en la corte del rey Fernando VII de España. Antonio también era tío de Emilio de Arjona y Carló, quien fue secretario de Carlos María de Borbón.
Contenido
¿Quién fue Antonio de Arjona?
El padre de Antonio de Arjona quería que su hijo siguiera una carrera en el ejército. Por eso, Antonio recibió una educación militar desde muy joven.
Los primeros años de su carrera militar
Antonio mostró mucho interés y habilidad. A los catorce años, ya era cadete en el cuerpo de Artillería. Con quince años, se convirtió en alférez de la Guardia Real. A los diecinueve, ya era capitán de caballería, y a los veintiuno, teniente de la Guardia Real.
¿Cómo participó Antonio de Arjona en las guerras carlistas?
Antonio de Arjona fue una figura importante en las guerras carlistas, que fueron conflictos en España.
Su papel en la Primera Guerra Carlista
Después de servir bajo el general Rodil, Antonio fue enviado a Andalucía en 1834. Sin embargo, decidió unirse al bando carlista en Portugal. Allí fue nombrado capitán del regimiento de granaderos a caballo de la guardia de Carlos María Isidro de Borbón.
Después de un tiempo en el extranjero, regresó a España para unirse al ejército carlista. En febrero, fue nombrado comandante de escuadrón. Participó en batallas importantes como Larraga, Arroniz y Aldama.
Tomás de Zumalacárregui, un líder carlista, lo llamó para que trabajara directamente con él. Arjona participó en combates como los de las Amézcuas y Artaza. También estuvo en el primer sitio de Bilbao. En esta batalla, no solo luchó con valentía, sino que también realizó misiones importantes. Por ejemplo, entró varias veces a la ciudad como negociador.
Después de la muerte de Zumalacárregui, Arjona siguió participando en batallas como Castrejana y Mendigorría. Fue ascendido a primer ayudante de Estado Mayor general en 1835.
En la Batalla de Luchana, Arjona comandó una brigada. A pesar de la derrota carlista, logró salvar la artillería para que no cayera en manos del enemigo.
Más tarde, Arjona se unió a una expedición de Don Carlos. Fue nombrado secretario militar del Infante Don Sebastián Gabriel. Participó en batallas como Huesca y Barbastro. En la batalla de Mosqueruela, fue herido dos veces. Por su valentía, fue ascendido a brigadier y recibió una condecoración.
Aunque no estaba completamente recuperado, siguió luchando en encuentros como los de Teruel y Aranzueque. Cuando la expedición carlista se retiró, Arjona recibió la misión de buscar al primer cuerpo del ejército.
Después de que el cuerpo de Don Sebastián se disolviera, Arjona dejó su cargo y se fue a Cestona para recuperarse de sus heridas. En ese momento, se firmó el Convenio de Vergara, un acuerdo de paz. Arjona no lo aceptó y se fue a Francia.
En 1841, cuando la guerra había terminado, Arjona pidió permiso para regresar a España como civil. Se lo concedieron. Más tarde, se acogió a un decreto que le permitió legalizar su situación. Esto le ayudó a trabajar por la causa carlista en el ámbito político. En Madrid, actuó como una especie de representante de la corte de Don Carlos ante la corte de Isabel II.
Su trabajo en el Carlismo político
En 1844, Antonio de Arjona fundó el periódico La Esperanza. Su objetivo principal era lograr la unión de las dos ramas de la familia Borbón en España. Esto se haría a través del matrimonio de Isabel II con su primo Don Carlos Luis.
Sin embargo, esta unión no se realizó. El partido carlista volvió a luchar en 1847, 1848, 1855 y 1860. Antonio de Arjona no participó en estas revueltas. Por ello, el gobierno lo desterró a Palma y La Coruña.
A principios de la década de 1850, la propiedad del periódico La Esperanza pasó a Pedro de la Hoz. Esto causó un desacuerdo entre Arjona y La Hoz, y Arjona se separó del periódico. Sin embargo, se reconciliaron unos años después.
Después de la revolución de 1868, Arjona se dedicó a trabajar por su causa. En ese momento, estaba representada por Don Carlos de Borbón y de Este, quien lo nombró capitán general de Andalucía.
En 1871, fue candidato a diputado en las Cortes por Marchena.
La Tercera Guerra Carlista
Cuando estalló la tercera guerra carlista en 1872, Antonio de Arjona ya era conocido en Andalucía. Un amigo cercano suyo escribió que Arjona creía que toda Andalucía lo apoyaba. Sin embargo, la región no respondió al llamado a la lucha.
En abril de 1872, Arjona tuvo que huir de Madrid. Fue acusado de conspiración y tuvo que esconderse en varios pueblos.
Según la biografía de su amigo, después del fracaso del levantamiento, Arjona fue acusado injustamente por algunas personas de su propio partido. Esto lo puso en una situación difícil y lo llevó a enfermar gravemente. Convencido de que su enfermedad era seria, regresó a Madrid para estar con su familia antes de morir.
A su funeral, en la iglesia de las Comendadoras de Santiago, asistieron más de 200 personas importantes de diferentes grupos, incluyendo varios generales.