Primera persona (narrativa) para niños
En la primera persona en la narrativa, una historia se cuenta desde el punto de vista de uno de los personajes. Este personaje se refiere a sí mismo usando "yo" o "nosotros" todo el tiempo. Esto permite que el lector vea la historia y a los demás personajes a través de los ojos de quien la cuenta. Así, conocemos sus opiniones, pensamientos y sentimientos. Es una forma muy usada en las autobiografías, donde una persona cuenta su propia vida.
Cuando el narrador está en primera persona, es un personaje dentro de la historia. Actúa, juzga y tiene sus propias ideas sobre lo que sucede y sobre los otros personajes. Este narrador solo puede compartir la información que él mismo conoce o experimenta.
Este tipo de narrador es diferente del autor real del libro. Es un personaje más en la obra, y debe seguir las reglas de ser un personaje. Para saber algo, debe haberlo vivido con sus propios sentidos o que otro personaje se lo haya contado. Puede compartir sus propios pensamientos, pero no los de los demás, a menos que se los digan.
El narrador en primera persona puede ser el personaje principal de la historia, como Gulliver en Los viajes de Gulliver. También puede ser alguien muy cercano al protagonista, que conoce sus pensamientos y acciones, como el Doctor Watson en las novelas de Sherlock Holmes. O incluso puede ser un personaje secundario que tiene poco que ver con los hechos principales.
Contenido
¿Cómo se usa la Primera Persona Narrativa?
Como el narrador es parte de la historia y conoce los eventos, esta forma de narración se ha usado mucho en las novelas de misterio o detectivescas. Un buen ejemplo es el personaje del Doctor Watson en las historias de Arthur Conan Doyle sobre Sherlock Holmes.
Las obras literarias escritas en primera persona pueden tener diferentes estilos:
Formas Especiales de Narración en Primera Persona
Monólogo Interior
Aquí, el narrador expresa sus pensamientos como si el lector pudiera leer lo que el personaje está pensando. Un ejemplo es la obra Memorias del subsuelo (1864) de Fiódor Dostoyevski. El monólogo interior, también llamado "flujo de conciencia", es una técnica literaria que intenta mostrar cómo funciona el pensamiento en la mente, con ideas que se conectan de forma natural.
Monólogo Dramático
Este tipo de narración se encuentra en obras donde un personaje habla directamente, como si estuviera en una obra de teatro. Un ejemplo es La caída (1956) de Ulrich Nicolás.
Narración Explícita
Es cuando el narrador usa el "yo" de forma clara y directa para contar la historia, como en Las aventuras de Huckleberry Finn de Mark Twain.
Narrador Testigo
El narrador testigo es como un espectador de lo que ocurre. Es un personaje que cuenta la historia, pero no es el protagonista principal. Cuenta lo que ha visto o vivido desde su punto de vista, como alguien que estuvo allí pero no fue el centro de todo. Un ejemplo son los cuentos de Sherlock Holmes (1887) de Sir Arthur Conan Doyle. Otro ejemplo es Funes el memorioso, un cuento de Jorge Luis Borges de su colección Ficciones (1944):
"Esas cosas me dijo; ni entonces ni después las he puesto en duda (...) Me dijo que hacia 1886 había discurrido un sistema original de numeración y que en muy pocos días había rebasado el veinticuatro mil (...)"De Funes el memorioso, Jorge Luis Borges.
Narrador Protagonista
El narrador protagonista cuenta su propia historia. El narrador en primera persona ("yo") tiene un punto de vista personal. Esto significa que se identifica con el personaje principal y no puede contar los pensamientos o acciones de los otros personajes de forma totalmente neutral. Este tipo de narrador se usa en géneros como el diario o la autobiografía. Un ejemplo de narrador protagonista es la novela La tía Julia y el escribidor (1977), del escritor peruano Mario Vargas Llosa. En ella, Varguitas, un joven escritor, cuenta su propia historia.
Puntos de Vista del Narrador en Primera Persona
Existen dos formas principales de la "primera persona narrativa": el singular ("yo") y el plural ("nosotros").
En la primera persona plural, los narradores cuentan la historia no como una sola persona, sino como parte de un grupo que actúa unido. No es muy común en la literatura, pero cuando se usa, suele llamar mucho la atención. A veces, un escritor puede combinar la persona plural y la singular, empezando con la visión de un grupo y terminando con la de un solo individuo. Un ejemplo es la obra de William Faulkner, Una rosa para Emily.
El narrador en primera persona también puede ser múltiple. Esto significa que varios personajes cuentan la misma historia desde sus diferentes puntos de vista. Un ejemplo es el relato "En el bosque" (藪の中, Yabu no Naka, 1922) del escritor japonés Ryūnosuke Akutagawa. En esta historia, la muerte de un samurái se cuenta desde el punto de vista de siete personajes. Cada versión ayuda a entender o a complicar el misterio, mostrando cómo las personas pueden ver un mismo evento de diferentes maneras. El experimento de Akutagawa fue tan exitoso que fue llevado al cine por Akira Kurosawa con el título de Rashōmon.
El Papel del Narrador en Primera Persona
El narrador en primera persona es un personaje dentro de la historia que cuenta. Puede ser el personaje principal (protagonista) o no. Incluso puede ser un personaje con cierta distancia, pero su conocimiento de los eventos es valioso para entender la historia. Se puede hablar de "primera persona mayor" si es el protagonista o un personaje muy importante, y de "primera persona menor" si no es el personaje principal.
Un ejemplo de "primera persona menor" es la novela Cumbres Borrascosas de la escritora británica Emily Brontë. En ella, dos personajes, Ellen Dean y Lockwood, cuentan lo que sucede. Lockwood visita la casa Wuthering Heights y luego le pide a Nelly, la casera, que le cuente todo lo que sabe. Nelly se convierte en la narradora principal de lo que conoce de los personajes principales.
Para el escritor colombiano Fernando Vallejo, la primera persona narrativa tiene más ventajas que la segunda y la tercera:
"No concibo otra forma de escribir que en primera persona. Es la única real y sincera, porque ¡cómo va a saber un pobre hijo de vecino lo que están pensando dos o tres o cuatro personajes! ¡No sabe uno lo que está pensando uno mismo con esta turbulencia del cerebro va a saber lo que piensa el prójimo!"
Otros críticos dicen que la decisión de Vallejo de escribir en primera persona rompe con la tradición del "narrador omnisciente". Este es un narrador que lo sabe y lo ve todo, que puede leer los pensamientos de todos los personajes.
Conciencia del Narrador en Primera Persona
El narrador en primera persona, como personaje, puede saber que está contando una historia, como Nelly Dean en Cumbres Borrascosas, o puede que no lo sepa. Este personaje que cuenta sin saberlo, a veces se presenta a través de un "documento falso", como un diario personal.
Dos ejemplos clásicos son la obra Drácula (1897) de Bram Stoker y En busca del tiempo perdido (1913) de Marcel Proust. En estas novelas, la historia es contada por varios personajes, pero todos escriben lo que saben en sus diarios. De esta manera, el personaje no le cuenta la historia a nadie en particular, sino que lo hace para sí mismo, lo que da una sensación de gran intimidad. Otro documento usado es la carta a otro personaje, que tiene un mayor grado de conciencia. Este método hace que los hechos parezcan muy creíbles. En estos casos, el personaje puede ser protagonista o no. El escritor organiza los diarios y cartas de los personajes para dar una idea de lo que ha ocurrido.
Véase también
En inglés: First-person narrative Facts for Kids
- Persona gramatical
- Narratología
- Narrador
- Yo
- Sí mismo