Historia de los judíos en Brasil para niños
Datos para niños Judíos en Brasil |
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יְהוּדִי ברזילאי (en hebreo) Judeus Brasileiros (en portugués) |
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judeobrasileños | ||
Sinagoga Kahal Zur Israel en Recife, Pernambuco. Dicha sinagoga es la más antigua del continente americano.
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Población censal | 107.329 (94.500 hacia 2015) |
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Población estimada | 91.000 (2019) | |
Cultura | ||
Idiomas | portugués brasileño, ladino, hebreo, ídish, lenguas de sus países de procedencia como el ruso, polaco, alemán, etc. | |
Religiones | judaísmo | |
Principales asentamientos | ||
51.050 | São Paulo | |
24.451 | Río de Janeiro | |
7.805 | Río Grande del Sur | |
4.122 | Paraná | |
3.509 | Minas Gerais | |
La historia de los judíos en Brasil es bastante larga y algo compleja, ya que se extiende desde el mismo comienzo de la colonización europea en el nuevo continente. Los judíos comenzaron a asentarse en Brasil desde que la Inquisición llegó a Portugal en el siglo XVI. Llegaron a Brasil durante el período bajo el gobierno neerlandés, asentándose en Recife, donde se llevó a cabo la construcción de la primera sinagoga de América a principios de 1636. La mayoría de estos judíos eran sefardíes que habían huido de la Inquisición en España y Portugal, que fueron expulsados fuera de Portugal durante la inquisición.
Varias olas de inmigración judía se produjeron durante el ascenso del nazismo en Europa. Existen en la actualidad varios grupos judíos y sionistas, clubes, escuelas, etc. Algunos eventos y actos antisemitas menores ocurrieron principalmente durante la Guerra del Líbano de 2006 como el vandalismo de cementerios judíos.El fuerte aumento de antisemitismo reciente ha sido denunciado por el Observatorio Judío de Derechos Humanos "Henry Sobel" que adjudicó en su informe la expansión de manifestaciones antisemitas a un avance del clima de intolerancia política, religiosa y racial diseminada tras la llegada al poder del excapitán del Ejército Jair Bolsonaro.
Brasil cuenta con la novena comunidad judía más grande a nivel mundial y la cuarta a nivel continental, después de Estados Unidos, Canadá y Argentina, contando con alrededor de 107.329 personas en 2010, según el Censo del IBGE. La Confederación Judía de Brasil (CONIB) estima que hay más de 120.000 judíos en Brasil. Hacia 2015 la población judía se había reducido a 94 500 miembros, principalmente debido a las bajas tasas de natalidad de la comunidad, el envejecimiento de la población judía y el proceso de secularización de los más jóvenes que abandonan los lazos con la comunidad.
En los últimos tres años cientos de judíos han hecho aliá desde Brasil huyendo de la inseguridad y violencia creciente y la crisis económica desatada en 2015.
En la actualidad, la mayor parte de la comunidad judía en Brasil se concentra principalmente en las regiones sudeste y sur del país.
La llegada de los primeros judíos
Ha habido judíos desde que los primeros portugueses. Tras la primera Constitución de Brasil de 1824 que concedió la libertad de religión, varios judíos comenzaron a llegar poco a poco a territorio brasileño. Muchos judíos marroquíes llegaron en el siglo XIX, principalmente debido a la fiebre del caucho.
Pueblos agrícolas
Debido a condiciones desfavorables en Europa, los judíos europeos comenzaron a debatir en la década de 1890 sobre el establecimiento de asentamientos agrícolas en Brasil. Al principio, el plan no funcionó debido a disputas políticas brasileñas.
En 1904, la colonización agrícola judía, apoyada por la Asociación de Colonización Judía, comenzó en el estado de Río Grande del Sur, el estado más austral de Brasil. La intención principal de la JCA al crear esas colonias era reasentar a los judíos rusos durante la inmigración masiva desde el hostil imperio ruso. Las primeras colonias fueron Philippson (1904) y Quatro Irmãos (1912). Sin embargo, estos intentos de colonización fracasaron todos debido a "inexperiencia, falta de fondos e insuficiente planificación", así como a "problemas administrativos, falta de instalaciones agrícolas y la atracción de los trabajos en las ciudades".
En 1920, la JCA comenzó a vender parte de la tierra a colonos no judíos. A pesar del fracaso, "las colonias ayudaron a Brasil y contribuyeron a cambiar la imagen estereotipada del judío improductivo, capaz de trabajar únicamente en el comercio y las finanzas. El principal beneficio de estos experimentos agrícolas fue la eliminación de las restricciones en Brasil a la inmigración judía procedente de Europa durante el siglo XX.