Historia de la Iglesia católica en Entre Ríos hasta 1810 para niños
La historia de la Iglesia católica en la provincia de Entre Ríos -República Argentina- comenzó con la llegada de los primeros exploradores españoles a los ríos de la cuenca del Plata. La primera misa en el territorio entrerriano pudo haber tenido lugar en 1607. Al finalizar el dominio español (1810-1811), el territorio de Entre Ríos se dividía en parroquias que dependían de la diócesis de Buenos Aires.
Contenido
- La Iglesia Católica llega a Entre Ríos
- Reducciones y comunidades indígenas
- La primera parroquia de Entre Ríos
- El territorio de las Misiones
- Capillas en Gualeguaychú, Arroyo de la China y Gualeguay
- Las villas de Entre Ríos
- Carmen de Nogoyá
- Disputas por los límites de las parroquias
- Rosario del Tala
- Otras capillas importantes
- Censo de 1803
- Propuesta de nuevas parroquias
La Iglesia Católica llega a Entre Ríos
Primeros pasos de la Iglesia en la región
En 1547, el papa Pablo III creó la diócesis del Río de la Plata, con sede en Asunción del Paraguay. Esta diócesis, que dependía del arzobispado de Lima, incluía teóricamente todo el territorio de Entre Ríos, aunque aún no había sido explorado por los españoles y estaba habitado por pueblos originarios.
En 1573, Juan de Garay fundó la ciudad de Santa Fe. Su cabildo (gobierno local) tenía autoridad sobre un área que se extendía hasta 50 leguas al este del río Paraná. Allí se estableció una parroquia llamada Todos los Santos, que cubría gran parte del centro y norte de Entre Ríos.
Más tarde, en 1580, Garay refundó Buenos Aires y estableció la iglesia principal de la Santísima Trinidad. Su jurisdicción incluía una parte del sur de Entre Ríos.
La primera misa en Entre Ríos
Hernandarias, quien fue gobernador de Asunción y luego de Buenos Aires, realizó varias expediciones a Entre Ríos. La primera fue en 1607. En esta expedición, cruzó el río Paraná y recorrió la provincia desde la actual localidad de Hernandarias hasta el salto Grande, desde donde cruzó el río Uruguay.
Hernandarias acampó en la zona del Rincón de Montiel, hoy Sauce de Luna. Allí encontró a guaraníes que trabajaban para los jesuitas del colegio de la ciudad de Corrientes y que entendían el idioma español. Como un sacerdote acompañaba a Hernandarias, los historiadores creen que allí se celebró la primera misa en Entre Ríos.
En 1609, se creó la arquidiócesis de Charcas, y la diócesis del Río de la Plata pasó a depender de ella.
Entre Ríos bajo la diócesis de Buenos Aires
El territorio de Entre Ríos pasó a formar parte de la gobernación del Río de la Plata en 1617. En 1620, el papa creó la diócesis de Buenos Aires (o del Río de la Plata), separándola de la de Asunción. Entre Ríos quedó bajo su autoridad. El primer obispo de Buenos Aires tomó posesión en 1621.
En 1659, los jesuitas recibieron tierras en Entre Ríos, formando la Estancia San Miguel. Más tarde, en 1679, estas tierras fueron intercambiadas, y una parte del noroeste entrerriano quedó bajo la propiedad de los jesuitas.
Reducciones y comunidades indígenas
Primeras comunidades religiosas
Al principio, hubo algunas comunidades indígenas llamadas "reducciones" en tierras entrerrianas, pero para 1610 ya no existían.
En 1662, el dominico Antonio Suárez estableció la reducción de Yaguarí Miní cerca de Puerto Landa, en el departamento Gualeguaychú. Allí vivían 200 indígenas de la zona y otros que habían llegado de Buenos Aires. Más tarde, en 1689, se unieron más indígenas chanás y charrúas a esta reducción y a la de Yaguarí Guazú.
Hacia 1664, existía otra reducción charrúa en la zona de Sauce de Luna, que pertenecía a los mercedarios de Santa Fe. Un sacerdote llamado Francisco estaba a cargo de ella.
La presencia jesuita en el este de Entre Ríos
Según el jesuita Guillermo Furlong Cardiff, al estudiar mapas antiguos, se encontró la palabra "Ytú" (que significa salto en idioma guaraní) en la margen occidental del río Uruguay, cerca de la actual Concordia. Esto sugiere que existía un lugar llamado Ytú desde al menos 1722.
En 1718, los jesuitas se establecieron en esta región. Construyeron un pequeño oratorio dedicado a San Antonio de Padua y plantaron los primeros naranjos.
La primera parroquia de Entre Ríos
Debido a los ataques indígenas en Santa Fe, algunas personas se establecieron en La Bajada, que hoy es Paraná. Un sacerdote llamado Miguel de Barcelona ofrecía servicios religiosos en la capilla de la Inmaculada Concepción. Esta capilla era muy sencilla, por lo que un militar, Esteban Marcos de Mendoza, construyó una nueva a su costo.
El gobierno eclesiástico de Buenos Aires convirtió esta capilla en parroquia, dedicada a la Virgen del Rosario. El 23 de octubre de 1730, se aprobó la creación de la parroquia de Nuestra Señora del Rosario en La Bajada. Su primer párroco, Francisco Arias Montiel, asumió el 27 de mayo de 1731.
El territorio de las Misiones
La parroquia de Yapeyú y el fuerte de San Antonio
La iglesia de la reducción de Yapeyú, llamada Nuestra Señora de los Reyes Magos, fue declarada parroquia en 1648. Durante la guerra Guaranítica, en 1757, se ordenó fundar el fuerte de San Antonio del Salto Chico en la Banda Oriental (actual Salto), bajo la jurisdicción de Yapeyú. La capilla del fuerte se dedicó a San Antonio de Padua, pero el fuerte fue abandonado en 1763.
La expulsión de los jesuitas y nuevas fundaciones
A mediados de 1768, los jesuitas fueron expulsados del Imperio español. Sus tierras en Entre Ríos, incluyendo una calera (lugar donde se produce cal) en el actual parque nacional El Palmar, pasaron a ser administradas por el gobierno.
En 1769, el cabildo indígena de Yapeyú decidió reconstruir el poblado del Salto Chico en la orilla occidental del río Uruguay, que hoy es Concordia. La nueva fundación mantuvo el oratorio dedicado a San Antonio de Padua.
Entre 1776 y 1777, Juan de San Martín (padre del general San Martín) ordenó ocupar tierras vacías y fundó las estancias ganaderas comunitarias de Concepción de Mandisoví y Jesús del Yeruá. Esto ayudó a restaurar la ruta de la yerba mate y el puerto de San Antonio del Salto Chico. Así, la región entre los ríos Uruguay y Gualeguay quedó bajo la parroquia de Yapeyú.
En la capilla de la estancia de Mandisoví se veneraba una imagen de la Inmaculada Concepción, tallada por indígenas misioneros. Esta imagen se encuentra hoy en la iglesia principal de Federación y fue declarada patrona de la diócesis de Concordia por el papa Juan Pablo II.
Capillas en Gualeguaychú, Arroyo de la China y Gualeguay
El crecimiento de nuevas comunidades
En 1771, unas 40 familias se establecieron en la actual Gualeguaychú. En 1777, construyeron una capilla pública dedicada a San José y a la Virgen del Rosario.
En 1776, se creó el virreinato del Río de la Plata, y Entre Ríos pasó a formar parte de él. Desde 1782, estuvo dentro de la intendencia de Buenos Aires. Las autoridades reales tenían un papel importante en el apoyo a la Iglesia católica y debían aprobar decisiones como la creación de lugares de culto o el nombramiento de sacerdotes.
En 1778, se autorizó la construcción de una capilla en el Arroyo de la China (hoy Concepción del Uruguay). Se construyó en 1779 y su primer sacerdote fue Antonio Mariano Alonso.
Antes de 1775, un centenar de personas se estableció cerca de la actual Gualeguay. Uno de ellos, Francisco Méndez, construyó una pequeña capilla de paja y barro. Allí se colocó una imagen de San Antonio de Padua. Este lugar se conoció como La Capilla y luego como Capilla Vieja.
En 1778, el territorio entre varios ríos y arroyos pasó a depender del cabildo de Buenos Aires.
Las villas de Entre Ríos
Creación de nuevas parroquias
En 1779, el obispo de Buenos Aires, Sebastián Malvar y Pinto, visitó la región. El 19 de junio de 1780, pidió al virrey que creara parroquias en tres lugares poblados, lo cual fue autorizado. El 28 de septiembre de 1780, el obispo estableció oficialmente las parroquias de:
- San Antonio del Gualeguay: Se instaló en 1781 en la Capilla Vieja, bajo el título de San Sebastián. Luego fue trasladada a la Villa de Gualeguay y pasó a llamarse San Antonio.
- Arroyo de la China: Se instaló en 1781. Sus límites eran muy amplios, lo que causó problemas más adelante.
- San José de Gualeguaychú: Se instaló en 1781, abarcando el territorio entre los ríos Gualeguay y Gualeguaychú.
La construcción de las iglesias tardó, y el obispo se quejó al rey Carlos III, quien ordenó al virrey Juan José de Vértiz y Salcedo que acelerara el proceso.
Carmen de Nogoyá
En 1781, el sacerdote Andrés Fernando Quiroga y Taboada llegó a Gualeguay Grande para ser párroco de una nueva parroquia. Como la capilla existente se inundaba, decidió trasladarla a La Cuchilla. También quiso cambiar el santo patrono a San Sebastián. Esto causó una disputa entre los pobladores y el párroco.
Para resolver el conflicto, el virrey envió al capitán Tomás de Rocamora en 1782. Rocamora fundó Gualeguay en un lugar intermedio. El párroco fue reemplazado y enviado a formar una viceparroquia en Nogoyá Abajo, donde se originó la capilla de Carmen del Nogoyá.
Disputas por los límites de las parroquias
Clarificación de las jurisdicciones
Los límites poco claros de la parroquia de Gualeguay causaron un conflicto con la parroquia de La Bajada en 1782. En 1784, el obispo Benito Lué y Riega aclaró los límites de Gualeguay.
El nuevo párroco de Concepción del Uruguay, José Bonifacio Redruello, quiso establecer los límites de su parroquia según lo decidido en 1780. Esto llevó a un estudio en 1805 que sugería que La Bajada y otras capillas quedaran bajo la jurisdicción de Concepción del Uruguay. Sin embargo, el obispo Lué y Riega no estuvo de acuerdo en 1808.
Finalmente, las autoridades fijaron los límites de las parroquias:
- La Bajada: entre los ríos Paraná y Gualeguay y el arroyo Nogoyá.
- Gualeguay: entre el río Gualeguay y el arroyo Nogoyá.
- Gualeguaychú: entre los ríos Gualeguay y Gualeguaychú.
Al norte, la zona seguía dependiendo de la parroquia de Yapeyú.
Rosario del Tala
En 1799, un grupo de vecinos pidió la construcción de una capilla en la zona del Tala. El 7 de noviembre, se autorizó la construcción de la capilla de San Bernardo Abad del Tala, que dio origen a la localidad de Rosario del Tala. En 1804, un sacerdote se hizo cargo de ella.
En 1805, el obispo Lué y Riega visitó Gualeguay y decidió que algunas zonas pasaran de la jurisdicción de La Bajada a la de la capilla de Tala.
Otras capillas importantes
Entre 1778 y 1780, se construyó un oratorio o capilla en la Estancia Grande, cerca de Santa Elena.
En 1797, se autorizó la construcción de un oratorio público en la propiedad de Francisco Colobrán y Andreu, dedicado a Nuestra Señora de los Dolores, cerca del arroyo Alcaraz. En 1804, un sacerdote se hizo cargo de este oratorio, que dependía de la parroquia de La Bajada. En 1805, el obispo ordenó que la capilla de Alcaraz fuera una ayuda de parroquia. Esta capilla funcionó hasta 1839, cuando la población se trasladó a la nueva villa de La Paz.
También entre 1778 y 1780, se construyó el oratorio de la Calera de Barquín en el actual parque nacional El Palmar. En 1805, la capilla de Mandisoví fue declarada tenencia de la parroquia de Yapeyú.
En 1805, el obispo autorizó la construcción de capillas en el arroyo Villaguay y en las puntas del Guayquiraró, pero no se llegaron a establecer.
En marzo de 1808, se autorizó la construcción de un oratorio en La Matanza (actual Victoria), que se erigió el 13 de mayo de 1810.
En 1809, el obispo Lué autorizó la construcción de una capilla en arroyo Palmar.
Censo de 1803
En 1803, el obispo de Buenos Aires ordenó realizar un censo en Entre Ríos. El párroco de Gualeguay lo llevó a cabo en septiembre de 1803, registrando 16 lugares poblados además de la villa de Gualeguay.
En la viceparroquia de Alcaraz, el censo se completó en 1805, incluyendo varios lugares como Arroyo Antonio Tomás, Arroyo Hernandarias, Arroyo Alcaraz, y otros.
Propuesta de nuevas parroquias
En 1806, el obispo Lué y Riega propuso al virrey Rafael de Sobre Monte la creación de 6 nuevas parroquias en Entre Ríos y Corrientes. Algunas de estas propuestas incluían:
- Santa Rita de la Esquina
- Nuestra Señora de los Dolores de Alcaraz
- Nuestra Señora de la Concepción de Mandisoví
- Nuestra Señora de la Merced (en Mocoretá)
- San Bernardo Abad del Tala
- Nuestra Señora del Carmen de Nogoyá
Sin embargo, el virrey no ordenó que se llevaran a cabo estas creaciones, por lo que no se concretaron.
El oratorio del campo de Francisco Candioti comenzó a construirse en 1807 y se inauguró sin terminar en 1829.