Gálib para niños
Datos para niños Gálib Abu Tammam Al-Násiriغالب بن عبد الرحمن الناصري |
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Información personal | ||
Nombre de nacimiento | Ghālib ibn ʿAbd al-Raḥmān | |
Apodo | General Gálib | |
Nacimiento | c. 900 | |
Fallecimiento | 981 Torrevicente, Soria |
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Causa de muerte | Muerto en acción | |
Información profesional | ||
Ocupación | Militar | |
Años activo | 901 - 981 | |
Lealtad | Califato de Córdoba | |
Rango militar | General | |
Conflictos | Batalla de Torrevicente | |
Gálib Abu Tammam Al-Násiri (en árabe: غالب بن عبد الرحمن الناصري) fue un importante líder militar del Califato de Córdoba. Nació alrededor del año 900 y falleció en el 981.
Gálib, también conocido como General Gálib, era de origen eslavo. Fue liberado durante el gobierno de Abderramán III. Su carrera militar creció mucho bajo el califa Alhakén II. Falleció mientras gobernaba el califa Hisham II.
Los escritos de la época lo describen como un hombre valiente y leal a su califa. También se le recuerda por su respeto hacia los que eran vencidos en batalla.
Contenido
¿Qué logros militares tuvo Gálib?

Gálib fue un militar muy activo y exitoso en varias áreas. Sus principales misiones fueron:
- Proteger la frontera norte del Califato de Córdoba de los ataques de los reinos cristianos.
- Detener el avance de las fuerzas del Califato fatimí, que dominaba el norte de África.
- Defender las costas de las invasiones de los normandos (también conocidos como vikingos).
Gálib fue liberado por el califa Abderramán III, quien le dio importantes cargos militares. Su poder aumentó aún más con el hijo de Abderramán III, Alhakén II. Los califas solían dar puestos importantes a personas como Gálib para tener más control sobre el ejército.
Primeras misiones y defensas
En el año 942, Gálib recibió su primer mando militar importante. Entre 946 y 947, se le encargó fortalecer Medinaceli y fue nombrado jefe de la frontera.
A principios de los años 950, Gálib luchó varias veces contra los castellanos, obteniendo buenos resultados. En el mismo periodo, lideró una flota que navegó por las costas del norte de África, cerca de Susa y Tabarka. En 956, su flota derrotó a una flota cristiana.
Más tarde, el califa Abderramán III envió a Gálib con una gran flota. Su misión era proteger ciudades como Ceuta y Tánger en el norte de África, que estaban amenazadas por el Califato fatimí.
Victorias en la península ibérica y contra los vikingos
Cuando Gálib regresó en el año 960, conquistó Gormaz al conde de Castilla, Fernán González. En 965, ordenó reconstruir la fortaleza de Gormaz.
Durante el gobierno del nuevo califa Alhakén II, Gálib intensificó sus ataques contra los reinos cristianos de la península. En la campaña de 966, obtuvo un gran botín. En 968, viajó al norte para reforzar las defensas de Calahorra.
El 1 de julio de 971, Gálib participó en la recepción del conde Borrell II. Poco después, tuvo que partir rápidamente para enfrentar a una flota normanda que amenazaba las costas occidentales del califato. En septiembre, regresó a las provincias occidentales para coordinar la defensa contra los normandos.
En 972, los vikingos de Normandía atacaron Santiago de Compostela en 970 y las costas atlánticas en 971. Luego, devastaron las costas entre el río Duero y Santarem. En junio de ese año, una flota combinada, liderada por Gálib y el almirante Abd al-Rahman ibn Muhammad ibn Rumahis, se enfrentó a los invasores en el estuario del río Tajo. Lograron salvar la base naval de Sevilla y expulsaron a los vikingos. Los musulmanes persiguieron a los invasores por la costa para asegurar que no volvieran. Regresaron victoriosos a Córdoba en septiembre.
En 972, el califa Alhakén II envió a Gálib con la flota para combatir una invasión danesa de 28 barcos. Gálib los derrotó desde Silves (Shilb), en la desembocadura del río Arade, en el Algarve.
Comandante supremo y campañas en el Magreb
El 20 de enero de 972, el califa nombró a Gálib comandante supremo del ejército. El 15 de abril, dirigió al ejército que cruzó al norte de África para enfrentar a un rebelde llamado Al-Hasan ben Kannun.
En 973 y 974, Gálib se adentró en el norte de África, luchando contra el líder de la rebelión contra el califato de Córdoba. En junio de 973, recibió más tropas para continuar la campaña y dirigió operaciones cerca de Tánger. En octubre, tomó al-Basra.
Gálib sitió a Ben Gannun en su fortaleza de Hajar an-Nasar y logró que se rindiera en marzo de 974. En junio, anunció la rendición de Fez. En septiembre, regresó triunfante a Córdoba de sus campañas en el norte de África.
En noviembre y diciembre, Gálib envió documentos a los jefes de las zonas fronterizas para definir sus poderes. Para entonces, era el responsable general de esas áreas y vivía en Guadalajara. En marzo de 975, se le encargó organizar el regreso de las tropas del norte de África para usarlas en las fronteras.
Sus éxitos en la frontera norte y en el norte de África hicieron que Alhakén II lo nombrara jefe supremo y le diera el título de «poseedor de las dos espadas» el 22 de abril de 975. Poco después, se dedicó a reforzar las defensas de Zaragoza.
Cuando el conde castellano García Fernández atacó por sorpresa Deza, Gálib regresó a Medinaceli en mayo y junio de 975 para dirigir la respuesta. La fortaleza de Gormaz estaba siendo atacada. Gálib acudió con los gobernadores de Zaragoza y Lérida para ayudar a la fortaleza, que resistía los ataques de castellanos, leoneses y navarros.
Después de pasar por Barahona y Berlanga de Duero, Gálib derrotó a los atacantes. Volvió a vencerlos en Langa de Duero y cerca de Tudela, en Estercuel (hoy Ribaforada). El 15 de julio, informó a Córdoba de sus victorias sobre los castellanos.
¿Qué pasó con Gálib y Almanzor?
Cuando el califa Alhakén II falleció en 976, su hijo Hisham II fue proclamado califa. Esto ocurrió con el apoyo de su madre, la sultana Subh.
Después de un breve problema sobre quién debía gobernar, comenzó una rivalidad. Por un lado estaba el chambelán Yaáfar al-Mushafi, que era el favorito del califa fallecido. Por otro lado, estaba Almanzor, la mano derecha de la madre de Hisham. Gálib no se llevaba bien con el chambelán. Por eso, no reaccionó ante los ataques de los reinos cristianos, que aprovecharon la muerte de Alhakén para hacer incursiones.
La alianza y la ruptura
El ascenso de Almanzor hizo que el chambelán intentara reconciliarse con Gálib. Lo llamó a la capital, lo confirmó al frente de las fuerzas de la frontera y le dio un nuevo título: doble visir. Mientras tanto, Almanzor había logrado el mando de las tropas de la capital.
Ambos realizaron una segunda campaña en la primavera de 977. Durante esta campaña, acordaron eliminar a al-Mushafi. Gálib dirigía las fuerzas de la frontera, y Almanzor las de la capital. Gálib aconsejó a Almanzor que usara su prestigio militar para pedir ser el prefecto de Córdoba. Este puesto lo ocupaba uno de los hijos del chambelán. La destitución, aprobada por el califa sin consultar al afectado ni a su padre, causó una ruptura entre el chambelán y Almanzor.
Al-Mushafi intentó debilitar la alianza entre Gálib y Almanzor. Pidió la mano de una hija de Gálib para uno de sus hijos. Gálib aceptó al principio, pero luego cambió de opinión. Finalmente, casó a su hija con Almanzor, debido a las presiones de la corte, impulsadas por el propio Almanzor.
Después de la gran boda, Gálib y su yerno Almanzor partieron para una nueva expedición militar. Las relaciones entre Almanzor y al-Mushafi ya estaban rotas. Al regresar, la sultana Subh logró que Hisham nombrara a Gálib como segundo chambelán. Esto era algo nunca visto en la historia del califato. Al-Mushafi quedó sin poder, superado por la alianza de Gálib y Almanzor.
Tanto Gálib como Almanzor fueron nombrados háyib (chambelán), que era como un ministro principal. El general Gálib se fue a la frontera norte, mientras que Almanzor se quedó en Córdoba.
Pronto surgieron problemas entre Gálib y su ambicioso yerno. Almanzor realizaba varias acciones que molestaban a Gálib. Por ejemplo, construyó una residencia palaciega (Medina Alzahira), aumentó la llegada de tropas bereberes leales a él y controlaba estrictamente el acceso al califa.
Almanzor envidiaba el prestigio militar de Gálib, que hacía que sus propias victorias parecieran menos importantes. Gálib, por su parte, temía las acciones de su yerno y sus contactos con fuerzas bereberes.
La rivalidad estalló en el año 980, en Atienza, durante una campaña militar. En una discusión durante un banquete, Gálib atacó a Almanzor con su espada. Almanzor, herido, tuvo que huir rápidamente de la fortaleza para salvar su vida.
Almanzor reaccionó tomando la cercana Medinaceli y saqueando los bienes de Gálib que estaban allí. Gálib tuvo que refugiarse en territorio cristiano con sus seguidores. Se alió con castellanos y navarros. En abril de 981, logró derrotar a las fuerzas de Almanzor que habían salido a enfrentarlo.
Almanzor reunió tropas bereberes, cordobesas y de la frontera. Devastó la frontera oriental durante dos meses antes de prepararse para un nuevo enfrentamiento con su suegro cerca de la fortaleza de Torrevicente. Gálib marchaba con sus tropas leales y sus aliados navarros y castellanos.
La batalla entre los dos rivales ocurrió el 9 y 10 de julio de 981. Cuando Gálib estaba a punto de ganar, apareció muerto, al parecer por causas naturales. Esto desorganizó a sus fuerzas, y muchas se unieron a las de Almanzor.
El cuerpo de Gálib fue tratado de forma cruel por sus propios hombres, que querían demostrar su muerte al vencedor. Su cuerpo fue exhibido en la Puerta de la Victoria de Medina Alzahira, donde permaneció hasta que la ciudad fue destruida.
Gálib intentó recuperar Gormaz, que era leal a Almanzor. Para ello, se alió con el Conde de Castilla García Fernández y con el rey Sancho Garcés II de Navarra. Sin embargo, todos ellos fueron derrotados en Rueda por Almanzor.
Galería de imágenes
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Restos del Castillo de Medinaceli, desde donde Gálib dirigió una vez sus ejércitos.
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Medinaceli fue el último bastión de Gálib, desde donde combatió y perdió su pugna con Almanzor.
Véase también
En inglés: Ghalib ibn Abd al-Rahman Facts for Kids