Julio Antonio Mella para niños
Datos para niños Julio Antonio Mella |
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Información personal | ||
Nombre de nacimiento | Nicanor McPartland | |
Nacimiento | 25 de marzo de 1903 La Habana, Cuba |
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Fallecimiento | 10 de enero de 1929 Ciudad de México, México |
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Causa de muerte | Herida por arma de fuego | |
Sepultura | Memorial Julio Antonio Mella | |
Nacionalidad | Cubana | |
Familia | ||
Cónyuge | Oliva Zaldívar Freyre | |
Educación | ||
Educado en | Universidad de La Habana | |
Información profesional | ||
Ocupación | Periodista, político | |
Partido político | Partido Comunista de Cuba | |
Julio Antonio Mella McPartland (nacido en La Habana, Cuba, el 25 de marzo de 1903 y fallecido en Ciudad de México, México, el 10 de enero de 1929) fue un periodista, líder estudiantil y una figura importante en los movimientos de cambio social en Cuba. Fue uno de los fundadores y principales líderes del Partido Socialista Popular.
Contenido
La vida temprana de Julio Antonio Mella
Mella nació en La Habana, Cuba, el 25 de marzo de 1903. Sus padres fueron Nicanor Mella Brea, un sastre de República Dominicana, y Cecilia Magdalena McPartland Reilly, de Irlanda.
En 1910, su madre los registró como "nativos de la República de Santo Domingo". El propio Antonio Nicanor Mella Brea fue testigo de estas declaraciones. Su abuelo fue Matías Ramón Mella, una figura importante en la historia dominicana.
En 1915, Julio Antonio viajó a Nueva Orleans con su hermano Cecilio y su madre. Allí, intentó unirse al Ejército de Estados Unidos, diciendo que era mayor de lo que realmente era. Un amigo de su padre lo ayudó a salir del Ejército y lo hizo regresar a Cuba.
De vuelta en Cuba, Mella estudió en la Academia Newton y luego en el Instituto de La Habana. A los 17 años, en 1920, viajó a México para intentar ingresar al Colegio Militar de San Jacinto, pero no pudo porque la ley mexicana no permitía a extranjeros servir en el ejército en tiempos de paz.
Regresó a Cuba y terminó sus estudios de bachillerato en el Instituto de Segunda Enseñanza de la provincia de Pinar del Río. Después, se matriculó en Derecho y Filosofía y Letras en la Universidad de La Habana. En la universidad, Julio Antonio Mella se destacó como líder estudiantil y también como deportista.
En noviembre de 1921, Mella firmó un documento en el que los estudiantes de Derecho se oponían a que el general estadounidense Enoch Herbert Crowder fuera nombrado rector honorario de la universidad.
Su papel como líder estudiantil y social
Mella fundó la revista Alma Mater, donde era administrador y uno de los principales escritores. Firmaba sus artículos con el nombre de Lord Mc Partland.
En diciembre de 1922, se fundó la Federación Estudiantil Universitaria (FEU). Felio Marinello fue el primer presidente y Mella fue el secretario. A mediados de 1923, Julio Antonio se convirtió en el presidente de la FEU.
El Primer Congreso Nacional de Estudiantes
Por sugerencia de Mella, la FEU decidió organizar el Primer Congreso Nacional de Estudiantes en marzo de 1923. Uno de los acuerdos más importantes de este congreso fue la creación de la Universidad Popular José Martí. Esta universidad buscaba llevar el conocimiento universitario a los trabajadores y al pueblo.
También se creó la "Declaración de Derechos y Deberes del Estudiante", escrita por Mella. Esta declaración decía que los estudiantes tenían el deber de compartir sus conocimientos con la sociedad, especialmente con los trabajadores. El congreso también se opuso a la influencia del gobierno de Estados Unidos en los asuntos de Cuba y a la Enmienda Platt.
En esa época, Mella también fue el primer director de la revista Juventud. Esta revista se imprimía en la imprenta de los trabajadores del tabaco, donde Julio Antonio conoció a Carlos Baliño. Baliño fue una figura importante en las luchas por la independencia de Cuba en el siglo XIX y fue el primero en difundir ideas sobre cómo organizar la sociedad de manera más justa en Cuba.
Activismo y fundación de partidos
En 1924, Mella creó la Liga Anticlerical y se unió a la Agrupación Comunista de La Habana. Desde allí, trabajó activamente con los trabajadores. En 1925, fundó la sección cubana de la Liga Antimperialista de Las Américas.
También fue uno de los fundadores del primer partido cubano que seguía las ideas de cómo organizar la sociedad y la economía de una manera específica, junto con Carlos Baliño, José Miguel Pérez y Alfonso Bernal del Riesgo. Este partido fue el Partido Comunista Cubano.
En diciembre de 1925, Mella fue arrestado, acusado de poner una bomba en el teatro Payret. Para protestar por esta acusación, inició una huelga de hambre hasta que fue liberado bajo fianza.
Debido a su activismo, fue expulsado de la Universidad en 1926. Después, se fue a México, donde fundó la Asociación de Nuevos Emigrados Revolucionarios Cubanos (ANERC). En 1927, asistió al Congreso contra la Opresión Colonial en Bruselas, Bélgica, y luego visitó la Unión Soviética como delegado a un congreso sindical.
El gobierno de Gerardo Machado en Cuba ordenó vigilar la Universidad José Martí, considerándola un lugar de ideas peligrosas. La policía entró en los locales de la universidad, confiscó libros y procesó a los profesores, que en su mayoría eran estudiantes.
Huelga de hambre y desafíos políticos
Julio Antonio Mella fue parte de la fundación del Partido Comunista de Cuba y fue miembro de su primer comité directivo. Sin embargo, Mella era muy independiente y fue expulsado del partido.
El 31 de agosto de 1925, el secretario general del Partido, José Miguel Pérez, fue arrestado. Se incautaron documentos, incluyendo la lista de miembros del partido. Pérez fue deportado. Se ordenó el arresto de varios activistas, incluyendo a Mella, acusados de conspiración. Todos fueron liberados bajo fianza.
El 17 de septiembre, hubo explosiones en el teatro Payret. El 27 de noviembre, Mella fue arrestado de nuevo, acusado de estas explosiones. Junto a él, fueron detenidos otros 50 activistas.
El arresto de Mella mostró las divisiones en el movimiento contra el gobierno. La Federación Estudiantil Universitaria se mantuvo al margen, pero un grupo de estudiantes creó el "Comité Pro Libertad de Mella" para protestar. Entre sus miembros estaban Rubén Martínez Villena y Oliva Zaldívar, la esposa de Mella.
El 5 de diciembre de 1925, Mella comenzó una huelga de hambre indefinida para protestar por su detención y la de sus compañeros. La noticia de su huelga apareció en los periódicos durante 18 días, causando muchas protestas.
El Partido Comunista de Cuba le ordenó a Mella que detuviera la huelga, pero él no obedeció. Esto fue una de las razones de su expulsión del Partido por "indisciplina". No se sabe si Mella recibió la orden o si decidió ignorarla.
La salud de Mella empeoró y fue llevado al hospital de la prisión. El 22 de diciembre, sufrió un problema cardíaco. Las opiniones sobre la huelga estaban divididas: algunos querían que la detuviera, otros que aumentara la presión sobre el gobierno.
El 23 de diciembre de 1925, el tribunal cambió la orden de arresto contra Mella y lo liberó bajo fianza de 1000 pesos. La orden no incluía a los demás presos.
El "Comité Pro Libertad de Mella" y el propio Mella pidieron a la gente que siguiera protestando hasta que todos los presos fueran liberados. Las organizaciones de trabajadores continuaron las movilizaciones hasta el 19 de enero de 1926, cuando todos los presos fueron puestos en libertad.
Entre el 10 y el 13 de enero de 1926, el Partido Comunista inició un proceso contra Mella por haber hecho la huelga de hambre sin permiso. Lo acusaron de indisciplina y de ir en contra de los intereses del Partido.
Mella fue expulsado en 1926 del Partido Comunista de Cuba por dos años. Un año después, en enero de 1927, una instancia superior de la Internacional Comunista dijo que la expulsión de Mella había sido un error y pidió que se revisara la decisión. En 1927, fue readmitido en el partido.
Mella tuvo que huir de Cuba debido a la persecución del gobierno de Machado. Fue citado de nuevo ante un tribunal el 18 de enero de 1926, lo que parecía un intento de encarcelarlo de nuevo. Por eso, Mella decidió escapar con la ayuda de sus amigos en un barco hacia Honduras. Llegó a México a principios de febrero de 1926.
Mella en México
La noticia de la huelga de hambre de Mella se extendió por América Latina y el mundo. En países como Bolivia, Perú y Venezuela hubo manifestaciones. En México, estudiantes y sindicatos protestaron frente a la Embajada de Cuba. El senado mexicano incluso pidió al presidente Plutarco Elías Calles que interviniera ante el gobierno cubano.
Cuando Mella llegó a México, el Partido Comunista Mexicano (PCM) estaba pasando por un momento difícil. Había diferencias entre la dirección del partido y un grupo que quería aliarse con el gobierno. En un congreso del PCM en abril de 1928, Mella y su grupo propusieron organizar la lucha sindical, pero no tuvieron éxito.
En esta época, también había diferencias importantes en el movimiento internacional de ideas sobre la sociedad. Vittorio Vidali, un agente, fue enviado a México para controlar a las figuras que no seguían la línea principal.
En 1927, Vidali viajó a México pasando por Cuba. En la isla, contactó con el partido cubano. Algunos creen que el partido cubano le advirtió a Vidali sobre Mella.
Algunas personas describieron a Vidali como alguien que realizaba "trabajos difíciles" para el grupo político al que servía.
Mella quería derrocar al gobierno de Gerardo Machado en Cuba, pero sus planes eran bloqueados por la dirección internacional. Apoyar un levantamiento en Cuba significaba desafiar los intereses de Estados Unidos, y la dirección internacional no quería que Washington viera a su grupo como una amenaza en su área de influencia.
En un congreso sindical, Mella conoció a Andrés Nin, quien le habló de ideas diferentes sobre la política. Mella compartía algunas de estas ideas, pero decidió no apoyarlas abiertamente para no aislarse.
En julio de 1928, Mella, junto con Diego Rivera, logró que se permitiera la creación de la Confederación Sindical Unitaria de México, que se opondría a la organización sindical oficial. Esto no fue bien recibido por la dirección internacional.
En septiembre de 1928, se pidió la expulsión de Mella del partido por "trabajar contra la línea del partido". Mella fue destituido de su cargo y aislado. Ante la prohibición de organizar una expedición a Cuba, dejó de colaborar con el partido y siguió con su proyecto.
En diciembre de 1928, un mes antes de su muerte, en una reunión, Vittorio Vidali se acercó a Mella y le dijo: "De la Internacional se sale de dos maneras, ¡o expulsado o muerto!".
Es claro que Vidali tenía la misión de controlarlo, aunque esto no prueba que lo haya matado. El asesinato de Mella nunca fue completamente aclarado.
El asesinato de Mella
Julio Antonio Mella fue asesinado la noche del 10 de enero de 1929 en una calle de Ciudad de México. Recibió dos disparos de revólver. La primera bala le hirió el codo izquierdo y el intestino, y la segunda le perforó un pulmón.
El juez interrogó a Tina Modotti, quien estaba con Mella. Ella dio varias versiones que se contradecían. Modotti dijo que el disparo vino de un automóvil en la oscuridad mientras ella caminaba del brazo de Mella, lo cual era difícil porque la primera bala lo hirió en ese brazo, y Mella estaba corriendo.
Hubo tres testigos: el panadero Luis Herberiche y los jóvenes Anacleto Rodríguez y José Flores. Los tres dijeron que vieron a "tres personas, dos hombres y una mujer", discutiendo, y que uno de los hombres sacó una pistola y disparó mientras el otro corría. En un careo con Tina Modotti, Herberiche dijo que no tenía motivos para mentir y que lo que dijo era la verdad.
Tina Modotti fue considerada sospechosa, pensando que conocía al asesino o era cómplice. Esto hizo que el caso se enfocara en un motivo personal, lo que pudo haber desviado la atención de otras posibilidades.
La policía decidió no tomar en cuenta las declaraciones de los tres testigos y se basó en la de Tina Modotti. Esto pudo deberse a la influencia de Diego Rivera, amigo personal del Presidente, quien apoyaba a Modotti.
El propio presidente de México ordenó el cierre de la investigación solo seis días después del asesinato. La versión oficial fue que agentes enviados desde La Habana lo hicieron, aunque nadie los vio en la escena del crimen. Así, los seguidores de Mella tuvieron un mártir, y Tina Modotti quedó libre de sospechas.
En 1941, poco antes de morir, Tina Modotti le dijo a Jesús Hernández Tomás sobre Vittorio Vidali: "No es más que un asesino, y me arrastró a un crimen terrible. Lo odio con toda mi alma. Pero estoy obligada a seguirlo hasta el final. Hasta la muerte".
La muerte de Tina Modotti ocurrió en un taxi la noche del 5 de enero de 1942. La causa oficial fue "congestión visceral generalizada", pero la prensa anunció: "ENVENENADA TINA MODOTTI, TÍPICA ELIMINACIÓN". Nunca se supo realmente de qué murió.
Es probable que el misterio del asesinato de Mella nunca se aclare por completo. Algunos no descartan que el crimen fuera cometido por grupos políticos. El asesinato de Mella muestra lo complicado de aquellos tiempos y la habilidad de Vittorio Vidali para ocultar sus acciones.
Oficialmente, José Agustín López fue acusado del asesinato, pero otros dos hombres, Jose Magriñat y Antonio Sanabria, también fueron considerados sospechosos. Magriñat fue arrestado y luego liberado. Fue asesinado en Cuba en 1933.
Nunca se explicó cómo estos hombres, supuestamente del gobierno de Gerardo Machado, pudieron actuar de forma independiente en un ambiente tan político como el de Ciudad de México en ese momento. Además, según algunas fuentes, Magriñat y Diego Rivera habían advertido a Mella que estaba en peligro.
Los restos de Julio Antonio Mella fueron cremados en el Panteón Francés de la capital mexicana. Luego se realizó una despedida de sus cenizas en el Anfiteatro Bolívar de la Escuela Nacional Preparatoria, parte de la Universidad Autónoma de México. Sus cenizas fueron llevadas a Cuba el 29 de septiembre de 1933.
Galería de imágenes
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David Alfaro Siqueiros y otras personalidades en un homenaje a Julio Antonio Mella alrededor de 1930.
Véase también
En inglés: Julio Antonio Mella Facts for Kids