Bretones en Galicia y Asturias para niños

Los bretones de Hispania fueron un grupo de personas de origen celta-británico que se establecieron en el noroeste de la península ibérica durante los siglos V y VI. Venían de la provincia romana de Britania, que se había vuelto peligrosa debido a las invasiones de los pictos, los escotos y, sobre todo, de pueblos germánicos. Esto los obligó a buscar un nuevo hogar al otro lado del mar. Los bretones hispanos se asentaron principalmente en Galicia y la parte occidental de Asturias. Su integración fue muy lenta y dejaron una huella en el folclore de esta región.
Contenido
¿Por qué los bretones migraron en los siglos V y VI?
A mediados del V, varios pueblos germánicos como los anglos, los jutos, los sajones y los frisones empezaron a establecerse en el este de la isla de Britania. Al principio, su área de asentamiento era pequeña, pero pronto avanzaron hacia el interior. Llegaron especialmente al valle del río Támesis y al este de las Midlands.
Esto provocó que las poblaciones originales romano-británicas tuvieran que huir. Muchos se refugiaron en las zonas más occidentales del país, como Gales, Cornualles, Cumbria y Strathclyde (al suroeste de Escocia). Otros grupos decidieron viajar más lejos y cruzaron el mar. Se establecieron en la Armórica, una península a la que le dieron una nueva identidad celta con su cultura y su lengua. Desde entonces, esa península se llamó Bretaña. De hecho, el bretón es una lengua celta de las islas, más parecida a las lenguas celtas de Gran Bretaña que al galo o al celta continental.
¿Cómo se asentaron los bretones en Hispania?
Otros grupos de emigrantes navegaron aún más al sur. Se establecieron en las costas del norte de la Península ibérica. Allí fundaron un obispado llamado Britonia, que hoy se conoce como Santa María de Bretoña, en Pastoriza. También crearon un monasterio, el de Máximo, que se cree que es la actual Basílica de San Martín de Mondoñedo, en Foz.
Esta sede episcopal se menciona por primera vez en el primer concilio de Braga, celebrado en el año 561. En ese concilio, se nombra a un obispo llamado Maliosus. En los documentos del Concilio de Braga de 572, aparece el mismo obispo, cuyo nombre se escribe como Maeloc o Mahiloc. Parece que este obispado se organizaba de forma similar a las iglesias celtas de las islas británicas y Bretaña. Tenía un obispo que también era el líder del monasterio.
Según el Parroquial Suevo, un documento administrativo probablemente escrito para el Concilio de Lugo en 569, los bretones se asentaron en los territorios del Monasterio Máximo y en la zona de Asturias. El texto dice:
Ad sedem Britonorum ecclesias que sut intro Britones una cum monasterio Maximi et que in Asturiis sunt.
Los restos de construcciones y tumbas de los siglos VI y VII encontrados en la Basílica de San Martín de Mondoñedo sugieren que el monasterio Máximo pudo haber estado allí. Esto coincide con la época de mayor importancia del monasterio. Sin embargo, otros creen que pudo estar en la antigua iglesia parroquial de Santa María de Bretoña, por la similitud de los nombres.
En Galicia, la zona con más población bretona parece haber sido la costa norte y la región de Mondoñedo. Esta zona se extendía desde la comarca de Cavarcos (Barreiros), Sevios (Pol) y Carioca (Rivera Sacra), que pertenecía a la sede de Lugo. También incluía el territorio de los pésicos, que pertenecía a la diócesis de Astorga, según el Parroquial. En Asturias, es probable que se asentaran en la zona oriental, entre los ríos Nalón y Sella. Esto se debe a que la tierra de los pésicos al sur de la cordillera (actual Laciana) pertenecía a la diócesis de Astorga, no a la de Britonia. Hay muchos nombres de lugares en Asturias relacionados con la presencia bretona, como El Bretón (Avilés), la Fuente los Bretones, la playa de Bretones en Vidiago (Llanes) o el pueblo del mismo nombre en Belonciu (Piloña).
¿Qué fue la sede episcopal de Britonia?
La sede de Britonia siguió teniendo representantes en varios concilios que se celebraron entre los siglos VI y VIII en Toledo. Específicamente, se menciona a la sede de Britonia en el Segundo Concilio de Braga y en los Concilios Cuarto, Séptimo y Octavo de Toledo. El Padre Flórez también relacionó esta sede bretona con la de Laniobria. Esto se debe a que el obispo Ermerico estuvo presente por Laniobria en el Tercer Concilio de Toledo en 589 y no volvió a aparecer hasta cien años después. Esta relación plantea dudas sobre si eran dos nombres para la misma sede o si eran sedes diferentes en el mismo territorio. Algunos autores han identificado Laniobria con el valle del Bría. Por ejemplo, Reigosa Pedrosa cree que la palabra Lanobria podría venir de "Lan", que en celta significa tierra, y "Bría", que podría ser el río Bría. Este río recorre el valle de Mondoñedo y desemboca en Foz. Por eso, también se piensa que el monasterio de Máximo estaba en las tierras bañadas por el río Bría, entre los ríos Eo y Masma, según un documento del rey Silo.
Los obispos conocidos de esta sede Britonia-Laniobria fueron:
- Año 572 - MAILOC - Concilio II Bracarense. Obispo de Britonia.
- Año 589 – ERMERICO - Concilio III de Toledo. Obispo de Laniobria.
- Año 633 - METOPIO - Concilio IV de Toledo. Obispo de Britonia.
- Año 653 - SONNA - Concilio VII de Toledo. Obispo de Britonia.
- Año 675 - BELA - Concilio VIII de Toledo. Obispo de Britonia.
- Año 683 – BRANDILA - Concilio XIII de Toledo. Obispo de Laniobria.
- Año 693 – SUNIAGISIDO – Concilio XVI de Toledo. Obispo de Laniobria.
¿Qué pasó con la sede de Britonia?
Durante el IX, San Martín de Mondoñedo fue abandonado debido a los ataques de los normandos. Esto hizo que el obispado de Dumio se trasladara allí, con el abad Sabarico al frente y con el permiso del rey Alfonso III. Finalmente, en el año 1112, la sede diocesana se trasladó a Mondoñedo.
Es difícil saber hasta qué punto los bretones de la península ibérica mantuvieron su lengua y su identidad con el tiempo. La sede de Britonia dejó de existir en el VIII. Sin embargo, en el año 1233, un documento menciona una propiedad en el municipio de Castro de Rey (Galicia) que pertenecía "a aquellos hombres llamados bretones o biortos, y cuyas mujeres se llamaban chavellas".
¿Cómo era la cultura y las tradiciones de los bretones?
En las zonas del noroeste de Hispania donde se asentaron los bretones, se estableció una forma de cristianismo céltico. Sus características eran similares a las practicadas en otros países del Atlántico, como Irlanda o Bretaña.
Como se mencionó antes, la comunidad cristiana se organizaba alrededor del abad de un monasterio (en este caso, el monasterio Máximo), quien también era el obispo. Este sistema fue introducido por San Patricio durante la evangelización de Irlanda. Después se extendió a las demás islas británicas e incluso a las comunidades de misioneros irlandeses que se habían establecido en Germania.
En cuanto a los rituales, las comunidades celtas celebraban la Pascua en fechas diferentes a las de Roma. Además, sus monjes tenían un tipo de tonsura (corte de pelo religioso) distinto al de otras órdenes religiosas. En el año 598, el IV Concilio de Toledo condenó esta práctica de tonsura, que era muy común en la provincia de Gallaecia en ese momento.
Se conservan oraciones y canciones religiosas en la lengua de los bretones.
Véase también
En inglés: Britonia Facts for Kids