Alonso Berruguete para niños
Alonso Berruguete (nacido en Paredes de Nava, entre 1486 y 1490, y fallecido en Toledo en 1561) fue un importante pintor y escultor español. Se le considera una de las figuras clave del Renacimiento en España. Berruguete ayudó a traer a España el estilo artístico del Renacimiento italiano, usando un lenguaje muy expresivo y dinámico en sus obras.
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¿Quién fue Alonso Berruguete?
Alonso Berruguete fue hijo del también pintor Pedro Berruguete. Se cree que aprendió sus primeras lecciones de arte con su padre.
Su formación en Italia
Alonso viajó a Italia para continuar su formación artística. Estuvo allí entre 1506 y 1514. En Roma, pudo conocer a grandes artistas como Bramante y Rafael Sanzio. Incluso participó en un concurso para copiar una famosa escultura llamada el Laocoonte, donde Rafael fue el juez.
También estuvo en Florencia, donde estudió los frescos de la Capilla Brancacci. Se cree que Miguel Ángel lo conoció y lo ayudó a ver sus dibujos. Berruguete estudió el famoso cartón de La batalla de Cascina de Miguel Ángel, que era como una escuela para muchos artistas de la época.
Durante su estancia en Italia, Berruguete se dedicó principalmente a la pintura. Se le atribuyen varias obras pictóricas de ese periodo. Por ejemplo, se cree que terminó parte de la Coronación de la Virgen en Florencia. Sus pinturas de esta época muestran un estilo muy personal, con figuras que parecen moverse y colores intensos.
Entre sus obras más conocidas de este periodo están la Visitación (hacia 1512), la Salomé con la cabeza del Bautista (hacia 1515) y la Virgen con el Niño y san Juanito (conocida como Tondo Loeser). Recientemente, el Museo del Prado adquirió una Alegoría de la Templanza que también se le atribuye.
Es interesante que, aunque en España se le conoció más tarde como escultor, la mayoría de los documentos de su tiempo en Italia lo mencionan como pintor.
Regreso a España y primeros trabajos
Berruguete regresó a España en 1518. Su primer encargo importante fue el sepulcro del canciller Jean Sauvage en Zaragoza. Este sepulcro fue destruido más tarde, pero se conserva un fragmento.
En 1519, hizo un acuerdo con el escultor Felipe Bigarny. Es posible que Berruguete necesitara la ayuda de Bigarny para trabajar la piedra, ya que su experiencia en Italia había sido más en pintura.
En 1521, Berruguete se encontró de nuevo con Bigarny en Granada. Allí, Berruguete iba a pintar frescos en la Capilla Real de Granada, pero el proyecto no se pudo completar por falta de fondos.
También tuvo encargos de pintura en Oviedo y Valladolid, pero algunos de estos trabajos tuvieron problemas, como la madera que se deformó en un retablo de Valladolid.
Berruguete en Valladolid
En 1523, el emperador Carlos V nombró a Berruguete escribano del crimen de la Real Audiencia y Chancillería de Valladolid. Este cargo le dio una buena posición social y económica. Aunque era artista, también tenía responsabilidades administrativas.
Se estableció en Valladolid y construyó su propia casa-taller. Allí se casó con Juana de Pereda y compró propiedades, lo que muestra su ascenso social.
Su primera obra importante de escultura documentada fue el retablo del Monasterio de Santa María de la Mejorada de Olmedo, terminado en 1526. Esta obra, que ahora se encuentra en el Museo Nacional de Escultura de Valladolid, muestra su estilo único: figuras con mucha emoción, cuerpos elásticos y ropajes que parecen moverse.
En 1526, Berruguete comenzó a trabajar en el retablo mayor del monasterio de San Benito el Real en Valladolid. Este fue un proyecto enorme y complejo, con muchas esculturas y pinturas. El contrato especificaba que las figuras principales y las pinturas debían ser hechas por su propia mano, mientras que sus ayudantes podían trabajar en otras partes.
El retablo de San Benito es una de sus obras más destacadas. Aunque ahora está desmontado y sus piezas se exhiben en el Museo Nacional de Escultura, se pueden apreciar la fuerza y el movimiento de sus figuras. En algunas de las tallas pequeñas, como el Sacrificio de Isaac o el San Sebastián, se ven las influencias de su estudio de la escultura clásica en Italia.
En 1529, Berruguete también contrató el retablo del colegio de Santiago Zebedeo en Salamanca. Esta obra, aunque ha sufrido cambios, comparte el estilo dinámico y expresivo del retablo de San Benito.
En 1537, realizó un retablo para la iglesia de Santiago de Valladolid, dedicado a la Adoración de los Reyes. En esta obra, Berruguete incluyó retratos de los clientes, lo que era común en la época.
Trabajos en Toledo

Uno de sus proyectos más importantes fue la sillería alta del coro de la catedral de Toledo. Este trabajo se dividió entre Berruguete y Felipe Bigarny. Berruguete se encargó de 35 sillas del lado de la Epístola. Cuando Bigarny falleció, Berruguete también terminó la silla del arzobispo. La obra se completó en 1548.
Las sillas del coro de Toledo son famosas por sus tallas en madera de nogal. Berruguete creó figuras que parecen retorcerse y salirse de sus marcos, mostrando una gran expresividad y anatomía.
También se le atribuye el retablo de la Visitación en el monasterio de Santa Úrsula de Toledo. Aunque el taller participó mucho, el grupo central de la Visitación es una obra muy característica del maestro.
Para la Sacra Capilla del Salvador de Úbeda, Berruguete realizó un grupo de la Transfiguración de gran tamaño. Lamentablemente, esta obra fue destruida en el siglo XX, y solo se salvó la figura de Jesús.
Su última obra importante fue el sepulcro del cardenal Tavera para el Hospital de Tavera en Toledo. Berruguete trabajó en este sepulcro de mármol de Carrara desde 1557 y lo terminó poco antes de su muerte en 1561. El sepulcro muestra un gran realismo en la figura del cardenal.
Alonso Berruguete falleció en septiembre de 1561 en el mismo Hospital de Afuera. Su cuerpo fue llevado a su señorío de Ventosa de la Cuesta para ser enterrado.
Véase también
En inglés: Alonso Berruguete Facts for Kids