Juan Crisóstomo para niños

Datos para niños San Juan Crisóstomo
Patriarca de Constantinopla
Predecesor	Nectario
Sucesor	Arsacio
Clérigo, teólogo y escritor
Otros títulos	Padre de la Iglesia Oriental. Santo megalo-mártir de la Iglesia ortodoxa griega
Información religiosa
Ordenación diaconal	En el 381 por Meletio de Antioquía.
Ordenación sacerdotal	En el 386 por Flaviano I de Antioquía.
Culto público
Festividad	Rito romano: –27 de enero (vetus ordo). –13 de septiembre (novus ordo) Rito bizantino –27 de enerojul./ 9 de febrerogreg. (traslado de sus reliquias) –30 de enerojul./ 12 de febrerogreg. (fiesta de los Padres trisolares) –13 de noviembrejul./ 26 de noviembregreg.
Atributos	Vestiduras de obispo griego, libro.
Venerado en	Iglesia católica Iglesia ortodoxa Comunión anglicana Iglesia Luterana Sínodo de Misuri
Patronazgo	Constantinopla. Pío X lo declaró patrono de los predicadores
Santuario	Catedral Patriarcal de San Jorge, Estambul Basílica de San Pedro, Ciudad del Vaticano
Información personal
Nombre	San Juan Crisóstomo
Nacimiento	347 Antioquía (Siria)
Fallecimiento	14 de septiembre, ca. 407 Comana Pontica (Armenia Secunda)
Padres	Antusa (madre) y Juan (padre)
Alma mater	Escuela de Antioquía
Obras notables	Letter to Acacius bishop of Melitene

Juan Crisóstomo (en griego: Ἰωάννης ὁ Χρυσόστομος, en latín: Ioannes Chrysostomus), también conocido como Juan de Antioquía, fue un importante líder cristiano. Nació en Antioquía alrededor del año 347 y falleció en Comana Pontica el 14 de septiembre de 407. Fue patriarca de Constantinopla y es considerado uno de los grandes Padres de la Iglesia en el Oriente.

La Iglesia ortodoxa griega lo reconoce como uno de sus teólogos más importantes y uno de los "tres pilares" de su fe, junto con Basilio el Grande y Gregorio Nacianceno. Juan Crisóstomo se destacó por sus discursos públicos y por hablar en contra de los problemas de su tiempo.

Su nombre "Crisóstomo" viene del griego chrysóstomos, que significa 'boca de oro'. Este apodo se le dio un siglo después de su muerte debido a su increíble habilidad para hablar, lo que lo convirtió en el orador más destacado entre los Padres griegos.

¿Quién fue Juan Crisóstomo?

Sus primeros años y educación

Juan Crisóstomo nació en Antioquía (en la actual Siria) cerca del año 347. En ese tiempo, Antioquía era una ciudad muy importante en el Imperio Romano de Oriente. Su padre, Secundo, era un oficial del ejército romano y falleció poco después de su nacimiento. Por eso, Juan y su hermana mayor fueron criados por su madre, Antusa, quien era cristiana.

Juan fue bautizado en el año 370, cuando tenía 23 años. Luego, fue ordenado como lector, un cargo menor en la Iglesia. Estudió con el filósofo Andragatio y después con Libanio, un famoso orador que apoyaba las antiguas creencias romanas.

Libanio quedó muy impresionado con la forma de hablar de Juan y pensó que tendría una gran carrera en el gobierno. Sin embargo, un encuentro con el obispo Melecio cambió la vida de Juan. Él empezó a estudiar teología con Diodoro de Tarso y a vivir de forma muy sencilla y estricta.

Su vida como ermitaño y sacerdote

Juan quería vivir una vida más dedicada a la fe, así que se convirtió en un eremita (una persona que vive sola y apartada) alrededor del año 375. Vivió así hasta que su salud se vio afectada por el exceso de vigilias y ayunos durante el invierno. Esto lo obligó a regresar a Antioquía y retomar su trabajo como lector. Crisóstomo siempre creyó en una vida monástica activa y útil, y no le gustaba la idea de una vida de oración sin hacer nada más.

En el año 381, Meletio de Antioquía lo ordenó diácono. Luego, en el 386, el obispo Flaviano I de Antioquía lo ordenó sacerdote. Este fue un período muy feliz para él. Durante doce años, su principal tarea fue predicar. Se hizo muy popular por su elocuencia. Son muy conocidas sus explicaciones sobre pasajes de la Biblia y sus enseñanzas sobre la moral, muchas de las cuales se encuentran en sus Homilías (discursos).

Con el tiempo, Crisóstomo se convirtió en el sucesor de Flaviano I. Como obispo, se preocupó mucho por ayudar a los pobres. También habló en contra de los abusos de los poderosos. Su forma de explicar las Escrituras de manera directa (a diferencia de otros que usaban interpretaciones simbólicas) lo llevó a hablar sobre temas sociales que explicaban cómo vivir una vida cristiana.

Cuando Nectario falleció el 27 de septiembre de 397, Juan fue nombrado metropolitano de Constantinopla, aunque él no quería. Constantinopla era la capital del Imperio Romano de Oriente, y su metropolitano más tarde recibió el título de Patriarca. Para que Juan pudiera dejar Antioquía, donde era muy querido, tuvo que ser acompañado por soldados para evitar que la gente se alborotara. Fue nombrado metropolitano el 26 de febrero de 398 por Teófilo, patriarca de Alejandría, quien lo hizo a regañadientes por orden del emperador Arcadio.

Su tiempo como obispo en Constantinopla

Constantinopla, fundada por Constantino I el Grande en el año 330, se convirtió en la capital del Imperio Romano de Oriente y en la sede principal de la Iglesia en el Oriente. También era un lugar de discusiones religiosas y de intrigas en la corte. A Crisóstomo no le gustaban los lujos que venían con su cargo. Durante su tiempo como obispo, se negó a dar fiestas costosas y criticó el alto nivel de vida de otros líderes religiosos. Sus intentos de cambiar la Iglesia en Constantinopla encontraron resistencia de los poderosos y de algunos clérigos que no querían cambiar. Aunque esto lo hizo más popular entre la gente común, sus reformas tuvieron poco éxito. Su estancia en Constantinopla fue muy difícil.

Desafíos y su partida final

Teófilo, el patriarca de Alejandría, quería tener más poder que Constantinopla y se opuso a Crisóstomo. Teófilo no estaba de acuerdo con las ideas de Orígenes y acusó a Crisóstomo de apoyarlas. También aprovechó que cuatro monjes de Egipto, conocidos como los "cuatro hermanos largos", a quienes él había castigado por sus ideas, fueron recibidos por Crisóstomo en Constantinopla. Además, Crisóstomo se ganó otra enemiga: la emperatriz Elia Eudoxia, esposa de Arcadio. Ella se sintió ofendida por las críticas de Crisóstomo sobre la forma de vestir lujosa de las mujeres.

Crisóstomo se caracterizó por hablar en contra de los problemas causados por las autoridades. Su actitud llevó a que Eudoxia, Teófilo y algunos clérigos molestos se unieran en su contra. En el año 403, convocaron una reunión llamada el Sínodo de la Encina, donde acusaron a Crisóstomo de apoyar las ideas de Orígenes y decidieron que debía ser depuesto de su cargo.

Sin embargo, poco después, el emperador Arcadio lo reinstaló, temiendo la reacción del pueblo y porque un incidente en el palacio fue interpretado por la emperatriz como una señal divina. Pero la paz duró poco. Crisóstomo criticó una estatua de plata que Eudoxia mandó construir frente a la catedral. Por esto, fue suspendido de nuevo y enviado a una región lejana cerca de Armenia.

Cuando el papa Inocencio se enteró de lo que le había pasado a Crisóstomo, protestó, pero no fue escuchado. Crisóstomo siguió escribiendo cartas que tenían mucha influencia en Constantinopla. Como sus enemigos querían que su influencia terminara, decidieron desterrarlo a un lugar aún más lejano, cerca del Cáucaso. Sin embargo, nunca llegó a su nuevo destino, pues falleció durante el viaje el 14 de septiembre de 407. Sus últimas palabras fueron: "Gloria a Dios por todo".

Los problemas que tuvo en vida muestran cómo el poder del gobierno influía en la Iglesia de Oriente en ese tiempo. También demuestran la rivalidad entre Constantinopla y Alejandría por ser la sede principal de la Iglesia en el Oriente. Estas tensiones causaron muchos problemas y divisiones dentro de la Iglesia.

¿Por qué son importantes las homilías de Juan Crisóstomo?

Relieve bizantino de Juan Crisóstomo (siglo XI).
Museo de Louvre.

Durante sus primeros dos años como sacerdote en Antioquía (386-387), Juan Crisóstomo dio una serie de ocho discursos, llamados homilías. En ellos, hablaba a los cristianos de su comunidad que participaban en fiestas y celebraciones judías. El objetivo principal de estas homilías era evitar que los cristianos siguieran costumbres judías y así mantener su propia identidad religiosa.

Juan Crisóstomo notó que muchos cristianos, especialmente mujeres, iban a las sinagogas en días festivos judíos. Le gustaba la forma solemne de las ceremonias judías y disfrutaban escuchando el shofar (un instrumento de cuerno) en Rosh Hashaná. Crisóstomo quería que los cristianos que tenían lazos con el judaísmo eligieran claramente entre una fe u otra.

Sus discursos tuvieron un gran impacto en la difusión de ideas contra el judaísmo. Esto llevó a la creación de leyes y normas sociales que aumentaron la separación entre las comunidades. Crisóstomo y otros cristianos de su época querían establecer una comunidad cristiana que fuera diferente de todas las demás. Como era un orador muy talentoso y tenía mucha influencia en Antioquía, sus palabras llegaron a la mayoría de la gente. A menudo mencionaba problemas que ocurrían en lugares frecuentados por judíos para desanimar a los cristianos de ir allí.

En griego, sus homilías se llaman Kata Ioudaiōn, que significa "Contra los Judíos". Sin embargo, algunos estudiosos dicen que el título original no refleja del todo el contenido. Argumentan que el objetivo principal de Juan Crisóstomo eran los miembros de su propia comunidad cristiana que seguían observando las fiestas y ayunos judíos.

Algunos expertos en los Padres de la Iglesia explican que en el siglo IV, era común expresar la oposición a ciertos puntos de vista de forma muy fuerte, usando un estilo de oratoria llamado psogos (culpa o censura). Por eso, calificar a Juan Crisóstomo de "antisemita" (que es un término moderno) podría no ser exacto para el contexto histórico de su época. Otros estudiosos, sin embargo, creen que la teología de Crisóstomo sí era claramente contraria al judaísmo.

Reconocimientos y celebraciones

Con el tiempo, Juan Crisóstomo fue reconocido de nuevo. En el año 428, la corte imperial estableció una festividad en su honor el 26 de septiembre. Más tarde, el 27 de enero de 438, sus restos fueron trasladados solemnemente a la iglesia de los Santos Apóstoles en Constantinopla.

Varios monasterios en el monte Athos llevan su nombre. El Martirologio Romano y los libros de santos orientales celebran a Juan Crisóstomo el 27 de enero, que es el aniversario del regreso de sus restos a Constantinopla. También se le celebra el 30 de enero junto con Basilio Magno y Gregorio Nacianceno, quienes también fueron oradores muy famosos. En el calendario romano actual, la festividad de Juan Crisóstomo se trasladó al 13 de septiembre.

En 1568, el Papa Pío V lo declaró doctor de la Iglesia, siendo uno de los cuatro doctores orientales. Por su parte, el Papa Pío X lo nombró patrono de los predicadores.

También es reconocido en el Calendario de Santos Luterano.

Obras importantes

• Crisóstomo, Juan. Sobre la vanagloria, la educación de los hijos y el matrimonio. Ciudad Nueva, 1997.
• Crisóstomo, Juan. Comentario a la Carta a los Gálatas. Ciudad Nueva, 1996.
• Crisóstomo, Juan. La verdadera conversión. Ciudad Nueva, 1997.

Véase también

En inglés: John Chrysostom Facts for Kids