Palacio Episcopal de Barcelona para niños
Datos para niños Palacio Episcopal de Barcelona |
||
---|---|---|
Palau del Bisbe | ||
Bien Cultural de Interés Local (BCIL) | ||
Patio del Palacio Episcopal.
|
||
Localización | ||
País | España | |
Ubicación | Barcelona, ![]() |
|
Coordenadas | 41°23′03″N 2°10′30″E / 41.384036, 2.175097 | |
Información general | ||
Usos | Palacio episcopal | |
Estilo | Románico y neoclásico | |
Parte de | Muralla romana de Barcelona | |
Inicio | Siglo XIII | |
Finalización | Siglo XVIII | |
Remodelación | Siglo XX | |
Propietario | Archidiócesis de Barcelona | |
Diseño y construcción | ||
Arquitecto | Pere Isern, Mateu Capdevila, Antoni Carbonell, Pedro de Lucuce, José Mas Dordal, Tomàs Soler i Ferrer, Enric Sagnier | |
El Palacio Episcopal de Barcelona (en catalán, Palau del Bisbe) es un edificio histórico. Se encuentra en el Barrio Gótico de Barcelona, en el distrito de Ciudad Vieja. Está rodeado por varias plazas y calles importantes. Este palacio es la residencia oficial del arzobispo de Barcelona. También es la sede del Archivo Diocesano, donde se guardan documentos importantes.
El edificio que vemos hoy comenzó a construirse en el siglo XIII. Ha tenido varias remodelaciones a lo largo de los años. Algunas de las más importantes fueron en 1681, 1769, a principios del siglo XIX, en 1909 y en 1928. El Palacio Episcopal es considerado un Bien Cultural de Interés Local. Esto significa que es un edificio muy valioso para la cultura de Cataluña.
Contenido
¿Cómo se originó el Palacio Episcopal de Barcelona?
Los inicios de este palacio no se conocen con exactitud. Sin embargo, se cree que hubo un primer edificio en este lugar. Este edificio existía en la época del Imperio romano, alrededor del siglo V. Estaba junto a una antigua basílica, que luego se convirtió en la Catedral de Barcelona.
Se han encontrado restos de este primer palacio bajo tierra. Estos restos se pueden ver en el Museo de Historia de Barcelona. El primer palacio estaba frente a una puerta de la Catedral. En 1316, este edificio fue vendido al rey Jaime II de Aragón para ampliar el Palacio Real Mayor de Barcelona.
La construcción del nuevo palacio en el siglo XIII
En 1253, se empezó a construir un nuevo palacio en la ubicación actual. Esta iniciativa fue del obispo Arnau de Gurb. El nuevo edificio se levantó junto a las torres de la antigua muralla romana. Se aprovechó parte de la muralla para su construcción.
El trabajo en el edificio actual se realizó entre los siglos XII y XIII. Su estilo era románico. Tenía tres pisos y un patio central. En el patio, destacan unas arcadas con arcos de medio punto. Sus columnas tienen capiteles decorados. Estos son ejemplos únicos de la escultura románica civil de la ciudad.
El palacio incluía la capilla de Santa Lucía. Esta capilla se construyó en 1257. Hoy forma parte del claustro de la Catedral. Es pequeña y de planta cuadrada, con una bóveda apuntada. Esto ya muestra el inicio del estilo gótico.
Cambios y ampliaciones en los siglos XIV y XVI
En el siglo XIV, el obispo Guillem de Torrelles impulsó la construcción de un segundo piso. Esta obra fue realizada por Pere Isern. También se abrió una ventana de estilo gótico en el primer piso. En 1355, parte del huerto del palacio se usó para crear la plaza Nueva.
En 1505, el obispo Pere Garcia decidió construir dos nuevas alas. Estas alas daban a las calles Obispo y Montjuic del Obispo. Así, el patio interior quedó rodeado por los cuatro lados. Los arquitectos de esta obra fueron probablemente Mateu Capdevila y Antoni Carbonell.
En 1614, se construyó un puente. Este puente unía las dos torres de la muralla romana. Conectaba el palacio con la cercana Casa de l'Ardiaca. Tenía dos arcos y una pasarela. Fue demolido en 1823.
Remodelaciones en los siglos XVIII y XIX
Entre 1768 y 1773, el obispo Josep Climent ordenó reconstruir las alas del siglo XVI. Estaban muy deterioradas. Las obras estuvieron a cargo de Pedro de Lucuze. También se hicieron otras mejoras, como una nueva mayordomía y una escalera.
En 1769, se construyó la fachada de la calle Obispo. Es sencilla y elegante. La puerta principal tiene pilastras jónicas y un escudo del obispo Climent.
Entre 1782 y 1784, el palacio se amplió con un nuevo edificio. Este edificio, obra de Josep Mas i Dordal, tiene fachada a la plaza Nueva. Su estilo es neoclásico. Tiene cuatro plantas y un cuerpo central con un frontón. La fachada estaba decorada con pinturas de Francesc Pla. Hoy solo quedan algunos restos. Dentro, destaca la Sala del Trono, con pinturas sobre el Antiguo Testamento.
A principios del siglo XIX, se hicieron más reformas. Estuvieron a cargo de Tomàs Soler i Ferrer. En 1816, se compró una casa en la calle de la Palla. Esta casa se unió a la parte nueva del palacio. También se incorporaron casas de la calle Montjuic del Obispo. En 1889, se restauró la Torre Bisbal, una de las torres romanas.

Transformaciones en el siglo XX y actualidad
Entre 1908 y 1913, se hicieron pequeñas intervenciones. Se remodeló la galería del primer piso para crear una capilla. También se reformó la Sala Cardenal Casañas. En 1912, el arquitecto modernista Lluís Domènech i Montaner propuso un proyecto para la plaza Nueva. Quería reconstruir el puente entre las torres y remodelar la fachada. Este proyecto nunca se realizó.
En 1928, el arquitecto diocesano Enric Sagnier restauró el edificio. Se construyó la fachada de la plaza Garriga i Bachs. Esta fachada tiene esgrafiados de santos como Paciano y Olegario. La reforma de Sagnier cambió mucho el aspecto del palacio. Se eliminaron elementos barrocos y neoclásicos. Fueron reemplazados por estilos historicistas, como el neorrománico y el neogótico.
En esa fecha, se instaló una fuente en el patio del palacio. Tiene una columna con cabezas de ángel que sueltan agua. Encima de la columna hay una imagen de la Virgen María. La obra original de Josep Maria Camps i Arnau fue reemplazada en 1959 por una de Tomàs Bel i Sabatés.
En 1943, se colocó un monumento al obispo Irurita en la fachada de la calle Obispo. Fue obra de Vicente Navarro.
Después de la guerra civil, se siguieron haciendo reformas. El obispo Gregorio Modrego y su sobrino, Jerónimo Jiménez Modrego, buscaron modernizar el palacio. En 1951, el arquitecto Manuel Puig Janer hizo pequeñas intervenciones. Entre 1956 y 1958, se demolieron casas cercanas para abrir la avenida de la Catedral. Esto dio una nueva vista a la fachada de la plaza Nueva.
Entre 1972 y 1982, se reformó el Archivo Diocesano. Esta obra estuvo a cargo de Joan Bassegoda i Nonell. En 1992, el arquitecto Josep Maria Botey restauró las fachadas de la plaza Nueva y de la calle de la Palla. En 1999, se restauró el Salón del Trono y las pinturas de Francesc Pla.
Galería de imágenes
-
Proyecto de urbanización de la plaza Nueva, de Lluís Domènech i Montaner (1912).
Otros temas de interés
- Historia de Barcelona
- Arquitectura de Barcelona
- Bienes de interés cultural de la comarca del Barcelonés