Pedro de Quiñones para niños
Pedro de Quiñones (León, 1408-1455), V señor de Luna, merino mayor de Asturias, fue hijo primogénito de Diego Fernández de Quiñones I, «el de la buena fortuna» y de María de Toledo. Participó de forma activa en la convulsa vida política y militar castellana de su tiempo junto con su padre y su hermano Suero.
Biografía
Fue educado en la casa del condestable de Castilla en tiempos de Juan II, Álvaro de Luna. En 1431 participó como «contino de la Casa del Rey» en la batalla de la Higueruela y formó parte de la comitiva que cercó a los infantes de Aragón en Alburquerque.
Contrajo matrimonio en 1432 con Beatriz de Acuña, hija de Martín Vázquez de Acuña, I conde de Valencia de Don Juan, y de María de Portugal. Tuvieron siete hijos, Diego Fernández de Quiñones, que sería primer conde de Luna, Suero, Fernando, María, Constanza, Leonor y Mencía.
Su vinculación personal con la facción de Álvaro de Luna no evitó que su posición se inclinara bien por la causa de Juan II bien por la de los Infantes de Aragón, según encontrara representados sus intereses en uno u otro bando. En este contexto, los Quiñones formaron parte del grupo de presión que fuerza al rey a limitar el poder de su valido, consiguiendo además gracias a acuerdos e intrigas, validar el carácter hereditario de la Merindad Mayor de Asturias que ostentaba su padre. Por el acuerdo de Casatronuño de 1439 lograron del rey la facultad para que el anciano Diego Fernández Quiñones fundara cuatro mayorazgos, uno para cada uno de sus hijos varones. En 1441 Pedro es nombrado miembro del Consejo Real y mayordomo mayor del príncipe Enrique, además de obtener diversas encomiendas que reforzaron la posición política de la familia en el antiguo reino astur leonés. No durará mucho esta situación de privilegio y en los años inmediatos la familia es expulsada de una Merindad Mayor que pasó en integrarse en buena medida en el señorío de los príncipes de Castilla y León.
En 1445 muere su padre y se produce la batalla de Olmedo, en la que su facción es derrotada, cayendo herido, siendo apresado y perdiendo la Merindad de Asturias. Ahora bien, su alianza con el grupo dirigido por el príncipe Enrique un año después, enfrentado ahora a Álvaro de Luna, le permitió recuperar los estados de su padre y la merindad mayor del Principado.
En 1448 acude con el príncipe Enrique a la Entrevista de Záfraga convocada por Juan II, donde es apresado junto con todos los de su bando. Pasó por las prisiones de Roa, la del Alcázar de Segovia y finalmente la del de Toledo, lo que supuso el más duro golpe que sufrió el linaje Quiñones en toda su historia. Es liberado en 1450 gracias a una trama urdida por el príncipe Enrique. En 1451 establece una concordia con Juan II y abandona su militancia en los bandos oligárquicos.
Muere en 1455 en su casa palacio de Palat de Rey en León.