Gaspar de Haro y Fernández de Córdoba para niños
Datos para niños Gaspar de Haro y Fernández de Córdoba |
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![]() Retrato de Gaspar de Haro, VII marqués del Carpio, hacia 1660. Grabado de Arnold van Westerhout, Biblioteca Nacional de España
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Información personal | ||
Nacimiento | 1 de junio de 1629 Nápoles |
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Fallecimiento | 16 de noviembre de 1687 Nápoles |
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Sepultura | Santa Maria del Carmine | |
Nacionalidad | Española | |
Familia | ||
Padre | Luis Méndez de Haro y Guzmán | |
Información profesional | ||
Ocupación | Político | |
Cargos ocupados | Embajador de España ante la Santa Sede (1671-1683) Virrey de Nápoles (1683-187) |
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Gaspar de Haro y Guzmán (también conocido como Gaspar Méndez de Haro), fue el séptimo marqués del Carpio y de Eliche. Nació el 1 de junio de 1629 y falleció en Nápoles en 1687. Fue un importante noble, diplomático y político español de su época.
Contenido
La vida de Gaspar de Haro
Sus primeros años y desafíos
Gaspar de Haro fue hijo de Luis de Haro, quien fue un ministro muy cercano al rey Felipe IV de España. Su madre fue Catalina Fernández de Córdoba. Gaspar comenzó su carrera en la corte real, ocupando cargos como el de montero mayor y alcalde de importantes palacios como el Palacio del Buen Retiro.
En 1662, fue acusado de un delito grave contra el rey. Fue condenado a diez años de destierro, lo que significaba que debía vivir lejos de su hogar. Sin embargo, prefirió ir a la guerra contra Portugal en lugar de cumplir su castigo.
Durante la guerra, fue capturado en la batalla de Ameixial el 8 de junio de 1663. Estuvo prisionero en Lisboa durante cinco años. A pesar de estar preso, en 1668 fue elegido por la reina Mariana de Austria para negociar la paz con Portugal. Después de firmar el acuerdo, regresó a Madrid.
Fue perdonado y nombrado embajador en Roma a finales de 1671. Sin embargo, tardó en viajar a su destino, esperando obtener un puesto de mayor influencia en el gobierno. Solo cuando Juan José de Austria tomó el poder, y al ver que sus esperanzas no se cumplían, decidió partir hacia Roma en 1677.
Su tiempo como embajador en Roma
El marqués del Carpio llegó a Roma el 13 de marzo de 1677. Para complacer al Papa, hizo una entrada solemne y se presentó ante Su Santidad, el Papa Inocencio XI.
Pronto surgieron desacuerdos con el Papa. Estos problemas se debían a los límites del "barrio español" de Roma. Esta era una zona alrededor del Palacio de España, la sede de la embajada española. El embajador tenía derechos especiales en esta área, como la protección de las leyes locales (inmunidad) y beneficios económicos, como no pagar impuestos por ciertas mercancías.
El marqués del Carpio logró ampliar este barrio, incluyendo muchas calles y plazas. En 1678, el embajador controlaba una zona que incluía 850 casas y 206 tiendas, además del palacio.
Además, hubo otros dos problemas que tensaron su relación con el Papa. Primero, al inicio de su embajada, el marqués gastó una gran suma de dinero (60.000 escudos, una moneda antigua) en lujosas carrozas y trajes para sus sirvientes. Quería que la administración del Papa le devolviera una parte de ese dinero, una cantidad muy alta.
Segundo, la situación empeoró a finales de agosto de 1677 debido a la necesidad de reclutar soldados. Estos soldados eran para ayudar a Mesina (en Sicilia), una ciudad que se había rebelado contra el gobierno español con apoyo francés.
Curiosamente, sus relaciones con el embajador de Francia, César d'Estrées, fueron mucho más amistosas. Esto es notable porque España y Francia estaban en guerra hasta que se firmó la Paz de Nimega en 1679.
La corte de Madrid, con el rey Carlos II de España a la cabeza, apoyó la defensa del barrio español. Querían mantener la igualdad entre las naciones. Sin embargo, en otras ocasiones, la corte le pidió moderación a su embajador. Creían que irritar al Papa con asuntos menores podría perjudicar los intereses de España.
Para evitar que la situación empeorara, en septiembre de 1682 el rey nombró al marqués del Carpio virrey de Nápoles. Gaspar de Haro salió de Roma el 2 de enero de 1683. Después de su partida, el 6 de enero de 1683, las autoridades del Papa ocuparon el barrio español.
Su gobierno como virrey de Nápoles
El marqués del Carpio llegó a Nápoles a principios de 1683. Para gobernar el Reino de Nápoles, usó un estilo similar al que aplicó en Roma. Fue muy estricto y firme, pero al mismo tiempo, fue muy generoso y apoyó mucho los espectáculos y la cultura.
Falleció en Nápoles en 1687. Es recordado como uno de los virreyes de Nápoles más importantes y apreciados.
Un gran protector de las artes
Don Gaspar es especialmente recordado por ser un gran mecenas, es decir, una persona que apoya y financia a artistas. También era un hombre con una gran cultura.
Heredó de su padre, quien también era coleccionista, una gran cantidad de pinturas. Él mismo fue añadiendo más obras de arte de gran calidad a su colección. Entre ellas, destaca que ya en 1651 poseía la famosa Venus del espejo de Velázquez, que hoy se encuentra en la National Gallery de Londres.
Poco después de llegar a Roma, el marqués del Carpio empezó a interesarse por aumentar su colección de pinturas. Visitaba tiendas de antigüedades y los talleres de los artistas. En solo seis años, el tiempo que duró su embajada en Roma, reunió 1462 pinturas, 30 álbumes de dibujos de maestros antiguos y contemporáneos, además de muchas esculturas. También se hizo amigo de artistas como Luca Giordano y el arquitecto Philip Schor, con quienes mantuvo una relación cercana cuando se estableció en Nápoles.
En Roma, la actividad del marqués del Carpio no se limitó a aumentar su colección personal o la del rey. También tuvo un papel público. Se sabe que organizó una Academia Platónica en la embajada. Hizo del Palazzo di Spagna un lugar de encuentro para artistas e intelectuales. En 1680, el marqués del Carpio pidió al rey Carlos II que creara una Academia Artística "de la nación española" en Roma, pero esta idea no tuvo éxito por falta de apoyo desde Madrid.
Su época en Roma también estuvo marcada por la compra de la colección del cardenal Camillo Massimi, que fue muy importante por las esculturas y antigüedades que incluía. También añadió a su patrimonio muebles lujosos, mesas con piedras preciosas, medallas, bustos, adornos de jardín y fuentes monumentales. Entre todas ellas, destaca un encargo muy importante para la época: una versión de la famosa fuente de la Piazza Navona, diseñada por el anciano Gian Lorenzo Bernini.
El inventario de sus posesiones en Roma en 1682-1683, antes de irse a Nápoles, muestra a don Gaspar como un gran coleccionista de pintura, antigüedades, medallas, joyas y libros. Su colección no solo incluía obras de artistas del pasado como Leonardo da Vinci, Giovanni Bellini, Giorgione, Tiziano, Rafael y Caravaggio, sino también de artistas de su propio siglo como Velázquez, Rubens y Van Dyck. Esto lo convierte en un ejemplo de los grandes coleccionistas del Barroco, que no solo se preocupaban por las pinturas, sino también por decorar sus galerías con esculturas, muebles y otros objetos de arte.
Galería de imágenes
Véase también
En inglés: Gaspar Méndez de Haro, 7th Marquess of Carpio Facts for Kids