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Demonio de Tasmania para niños

Enciclopedia para niños
Datos para niños
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Demonio de Tasmania
Sarcophilus harrisii taranna.jpg
Estado de conservación
En peligro (EN)
En peligro (UICN 3.1)
Taxonomía
Reino: Animalia
Filo: Chordata
Subfilo: Vertebrata
Clase: Mammalia
Subclase: Marsupialia
Orden: Dasyuromorphia
Familia: Dasyuridae
Género: Sarcophilus
Especie: S. harrisii
Boitard, 1841
Distribución
Distribución en Tasmania.
Distribución en Tasmania.
Sinonimia

Sarcophilius laniarius

El demonio de Tasmania (Sarcophilus harrisii) es un marsupial carnívoro que hoy en día solo vive en la isla de Tasmania, al sur de Australia continental. Es el marsupial carnívoro más grande que existe, después de la extinción del lobo marsupial.

Este animal es del tamaño de un perro pequeño. Tiene un cuerpo fuerte y musculoso, cubierto de pelo negro. Se le conoce por su olor particular, su grito fuerte y su comportamiento enérgico al comer, de ahí su nombre. Puede cazar, pero también come animales muertos (carroña) y, a veces, alimentos de casas cercanas. Suele ser solitario, pero puede alimentarse en grupos. A diferencia de otros marsupiales, puede estar activo durante el día sin sobrecalentarse. A pesar de su aspecto robusto, es sorprendentemente rápido, puede trepar árboles y nadar.

Se cree que los marsupiales llegaron a Australia desde lo que hoy es América del Sur hace millones de años, cuando la Tierra era diferente. Se han encontrado fósiles de animales parecidos al demonio de Tasmania. Se desconoce cuándo desapareció del continente australiano, pero se cree que fue hace unos tres mil años. Se piensa que los dingos, que no viven en Tasmania, pudieron haber contribuido a su desaparición en el continente.

El demonio de Tasmania no tiene una sola pareja para toda la vida. Los machos compiten por las hembras y las cuidan para que no se apareen con otros. Las hembras pueden tener crías varias veces al año, y la mayoría de las hembras de dos años se quedan preñadas. Tienen muchas crías pequeñas, pero solo cuatro pueden sobrevivir porque solo hay cuatro pezones en la bolsa (marsupio) de la madre. Las crías crecen rápido y se independizan a los nueve meses.

Antiguamente, se les consideraba una amenaza para el ganado y se les cazaba. En 1941, se convirtieron en especie protegida y su población se recuperó. Sin embargo, desde finales de los años 1990, una enfermedad contagiosa ha reducido mucho su población. En 2008, fue declarado en peligro de extinción. El gobierno de Tasmania ha creado programas para protegerlos, incluyendo la cría de demonios sanos en cautiverio. También mueren muchos por atropellos en las carreteras. Es muy difícil encontrar demonios de Tasmania fuera de Australia.

Es el animal símbolo de Tasmania y aparece en muchos logotipos. Es un atractivo turístico y se hizo famoso mundialmente por Taz, un personaje de dibujos animados.

¿Cómo es el demonio de Tasmania?

El demonio de Tasmania es el marsupial carnívoro más grande que existe. Tiene un cuerpo fuerte y bajo, con un cuello corto y una cabeza grande. Su cola mide aproximadamente la mitad de su cuerpo. Sus patas delanteras son un poco más largas que las traseras, lo cual es raro en marsupiales. Pueden correr hasta 13 km/h en distancias cortas.

Su piel es casi siempre negra, con manchas blancas en el pecho y la espalda. Los machos son más grandes que las hembras. Un macho adulto mide unos 65 cm de cuerpo y cabeza, con una cola de 25 cm, y pesa unos 8 kg. Las hembras miden unos 57 cm, con una cola de 24 cm, y pesan unos 6 kg. Tienen cinco dedos largos en las patas delanteras, que les ayudan a sujetar la comida. Las patas traseras tienen cuatro dedos. No pueden esconder sus garras. Alcanzan su tamaño completo a los dos años y pocos viven más de cinco años en la naturaleza.

Archivo:Tasmanian Devil markings
Dos demonios, uno de ellos sin sus características marcas blancas. Aproximadamente el 16 % de diablos salvajes carece de marcas.

La cola es importante para ellos. La usan para equilibrarse al correr y para dejar su olor en el suelo, marcando su territorio. También guardan grasa en la cola; una cola gruesa significa que el animal está sano.

Archivo:Tasdevil large
Su gran cabeza y cuello le permiten generar la mordida más fuerte por unidad de masa corporal de cualquier mamífero en la Tierra.

Tienen una mordida increíblemente fuerte para su tamaño, la más potente de cualquier mamífero vivo en el mundo si se compara con su peso. Pueden abrir la mandíbula entre 75 y 80 grados, lo que les permite romper carne y huesos. Sus dientes y mandíbulas son parecidos a los de las hienas, un ejemplo de evolución convergente (cuando animales diferentes desarrollan características similares). Tienen 42 dientes, como los perros, que no se caen, sino que crecen lentamente toda su vida.

Sus garras son largas, lo que les permite cavar madrigueras y agarrar presas. Gracias a sus dientes y garras, pueden atacar incluso a wombats de hasta 30 kg.

Tienen bigotes largos en la cara y la cabeza que les ayudan a encontrar comida en la oscuridad y a saber si hay otros demonios cerca. Su sentido del oído es el más importante, y también tienen un excelente olfato, que les permite detectar olores a un kilómetro de distancia. Su visión es mejor en blanco y negro, lo que les ayuda a ver objetos en movimiento por la noche.

¿Dónde viven y qué necesitan?

Los demonios de Tasmania se encuentran en casi todos los hábitats de la isla de Tasmania, incluso cerca de las ciudades. También viven en la pequeña isla de Robbins, que se conecta con Tasmania cuando la marea está baja.

Prefieren vivir en bosques secos y zonas boscosas cerca de la costa. Aunque no viven en las zonas más altas de la isla, su población es alta en los bosques secos. También se les ve cerca de carreteras, donde a menudo encuentran animales atropellados para comer, aunque esto también los pone en peligro. Los expertos creen que la destrucción de su hábitat no es la mayor amenaza para ellos, ya que se adaptan a muchos lugares.

El demonio de Tasmania es el único animal donde se encuentra un parásito acintado llamado Dasyurotaenia robusta, que es una especie rara.

¿Cómo se comportan y qué comen?

El demonio de Tasmania es una especie clave en el ecosistema de Tasmania, lo que significa que es muy importante para mantener el equilibrio natural.

Son cazadores nocturnos y crepusculares, lo que significa que están activos al anochecer y por la noche. Durante el día, descansan en arbustos densos o en agujeros. Se cree que son nocturnos para evitar a las águilas y a los humanos. Los jóvenes son más activos al atardecer.

Los demonios jóvenes pueden trepar árboles, pero les cuesta más a medida que crecen. Pueden subir árboles de hasta 7 metros de altura si no son verticales. Los adultos a veces comen demonios jóvenes si tienen mucha hambre, por lo que trepar puede ser una forma de escape para los más pequeños. También pueden nadar y cruzar ríos.

Los demonios de Tasmania no viven en manadas; la mayor parte del tiempo están solos después de ser destetados. Aunque se les considera solitarios, un estudio reciente mostró que todos los demonios de una región están conectados en una red social. No son animales que defiendan un territorio fijo, lo que permite que muchos demonios compartan una misma zona sin problemas. Se mueven dentro de un área de unos 4 a 27 km², buscando comida.

Suelen usar tres o cuatro guaridas regularmente. Les gustan mucho las madrigueras hechas por wombats porque son seguras. También usan lugares con mucha vegetación cerca de arroyos y cuevas. Los adultos usan las mismas guaridas toda su vida. Se cree que algunas guaridas han sido usadas por varias generaciones de demonios. Pueden cambiar de guarida cada uno a tres días, recorriendo unos 8.6 km cada noche.

Archivo:Baby Tasmanian Devil
Juvenil jugando en el agua en Mole Creek, en el centro-norte de Tasmania.

La temperatura del ambiente afecta su cuerpo. Pueden mantener su temperatura corporal entre 37.4 y 38 °C. A diferencia de otros marsupiales, pueden regular su temperatura y estar activos durante el día.

Su cuerpo consume energía de manera eficiente, lo que les permite sobrevivir más tiempo si hay poca comida.

Alimentación

Los demonios de Tasmania pueden cazar presas grandes, como canguros pequeños, pero suelen ser oportunistas y comen más carroña (animales muertos) que presas vivas. Su dieta es muy variada y depende de lo que encuentren. Prefieren los wombats porque son fáciles de cazar y tienen mucha grasa. También comen mamíferos pequeños, aves, peces, frutas, plantas, insectos, ranas y reptiles. Se sabe que comían crías de tilacino cuando sus padres no estaban, lo que pudo haber contribuido a la extinción del tilacino.

Cerca de las casas, a veces muerden zapatos o ropa. Se han encontrado objetos extraños en sus excrementos, como collares de animales, púas de equidna, lápices y plástico. Aunque pueden romper mallas metálicas, usan sus mandíbulas fuertes para escapar del cautiverio, no para entrar en lugares de comida. Como no son muy rápidos, no pueden perseguir a un canguro o un conejo, pero atacan a animales débiles o enfermos.

Pueden correr a 25 km/h en distancias cortas. Se cree que antes de la llegada de los europeos, tenían que perseguir a otros animales nativos para encontrar comida.

A menudo, empiezan a comer por el sistema digestivo de los animales muertos, que es la parte más blanda. Pueden comer hasta el 40% de su peso corporal en media hora si tienen la oportunidad. Después de una comida grande, se vuelven pesados y lentos, lo que los hace fáciles de acercar.

Pueden comer un animal pequeño por completo, incluyendo huesos y piel. Esto es útil para los granjeros de Tasmania, ya que ayudan a limpiar los cadáveres y evitan la propagación de insectos.

La dieta puede cambiar entre machos y hembras, y según la época del año. Los jóvenes a veces trepan árboles para comer larvas y huevos de aves.

Archivo:Tasmanian Devils feeding
Tres diablos alimentándose. La comida es un evento social para el diablo de Tasmania, y los grupos de dos a cinco individuos son habituales.

Aunque cazan solos, la alimentación es un evento social para ellos. Pueden reunirse hasta doce demonios para comer, aunque lo más común es ver grupos de dos a cinco. Hacen mucho ruido al comer, que se puede oír a varios kilómetros. Se cree que este ruido es una señal para que otros demonios se unan a la comida, así se aprovecha mejor y se ahorra energía.

Hacen unos veinte gestos y once sonidos diferentes para comunicarse mientras comen. Generalmente, muestran su dominio con sonidos y posturas, aunque también hay peleas. Los machos adultos son los más agresivos y suelen tener cicatrices.

La digestión es muy rápida. Los demonios de Tasmania vuelven a los mismos lugares para defecar, creando "letrinas del diablo". Se cree que esto es una forma de comunicación. Sus excrementos son grandes y suelen ser grisáceos por los huesos que comen.

Se cree que los demonios de Tasmania y los tilacinos tenían una relación compleja. El tilacino comía demonios, y los demonios se aprovechaban de las presas de los tilacinos. También compiten con las águilas audaces y los cuoles por la comida.

Reproducción

Las hembras empiezan a reproducirse a los dos años. Son fértiles una vez al año. El apareamiento ocurre generalmente entre febrero y marzo, o hasta junio. Los machos luchan por las hembras, y las hembras se aparean con el macho dominante. Las hembras pueden ovular varias veces en un corto período. Los machos a menudo retienen a sus parejas para evitar que se apareen con otros. No son monógamos; tanto machos como hembras pueden tener varias parejas.

La gestación dura veintiún días. Las hembras dan a luz a veinte o treinta crías muy pequeñas, de apenas 0.2 gramos. Al nacer, las crías tienen las patas delanteras bien desarrolladas con garras. Como la hembra solo tiene cuatro pezones, solo cuatro crías pueden sobrevivir y alimentarse en la bolsa (marsupio). Una vez dentro, cada cría se queda pegada a un pezón durante unos cien días. La bolsa de los demonios se abre hacia atrás.

Dentro de la bolsa, las crías crecen rápido. A las dos semanas, ya se les ve la nariz. A los quince días, se les ven las orejas, y a los tres meses, abren los ojos. Empiezan a tener pelo a los cuarenta y nueve días y están completamente cubiertas a los noventa días.

Abandonan la bolsa unos ciento cinco días después de nacer, pesando unos 200 gramos. Después de salir de la bolsa, las crías se quedan en la madriguera unos tres meses más, antes de independizarse en enero. Durante este tiempo, la madre las cuida y las amamanta. La leche de las demonios tiene más hierro que la de otros mamíferos.

Debido a la enfermedad de los tumores faciales, las hembras en las zonas afectadas están empezando a reproducirse más jóvenes, a solo un año de edad. La enfermedad también ha hecho que la temporada de reproducción sea menos definida, con nacimientos en cualquier momento del año.

¿Cómo se protegen?

El demonio de Tasmania estaba muy extendido por Australia hace miles de años, pero su población disminuyó y quedó limitada a Tasmania. Se cree que su desaparición del continente se debió a la llegada de los dingos y los aborígenes australianos, o a cambios en el clima. En Tasmania, donde no había dingos, los demonios sobrevivieron.

Los primeros colonizadores de Tasmania cazaban demonios porque creían que atacaban al ganado. En 1830, se ofrecían recompensas por cazarlos. Sin embargo, estudios recientes muestran que los demonios no eran una gran amenaza para el ganado. La caza y el envenenamiento los llevaron al borde de la extinción.

Después de la muerte del último tilacino en 1936, el demonio de Tasmania recibió protección legal en junio de 1941, y su población se recuperó lentamente. En los años 1990, se cazaban unos 10.000 demonios al año.

El tamaño exacto de la población de demonios es difícil de estimar. A mediados de los años 1990, se calculaba entre 130.000 y 150.000, pero es posible que fuera una sobreestimación. En 2008, se estimó entre 10.000 y 100.000, con 20.000 a 50.000 adultos. Los expertos creen que la población ha disminuido más del 80% desde 1996.

En 2005, la especie fue clasificada como vulnerable. En 2009, la UICN la clasificó como especie en peligro de extinción.

Zorros

La disminución de los demonios es un problema porque su presencia ayuda a controlar a los zorros rojos, que fueron introducidos ilegalmente en Tasmania. Los demonios comen la carroña que alimentarían a los zorros y también cazan zorros jóvenes. Si los zorros se establecen en Tasmania, dificultarían la recuperación del demonio y afectarían a otras especies. Se están usando cebos especiales para zorros que no dañan a los demonios.

Atropellos

Los vehículos son una amenaza para los demonios. Un estudio de 2010 mostró que son difíciles de ver por los conductores. Para evitar atropellarlos, los conductores tendrían que ir a la mitad de la velocidad normal en zonas rurales. La mejora de las carreteras ha aumentado los atropellos, ya que los animales son más difíciles de ver en el asfalto oscuro. Los demonios son vulnerables porque a menudo van a las carreteras a comer animales atropellados. Se han tomado medidas como reducir la velocidad, crear caminos alternativos y educar a la gente para disminuir los atropellos.

Enfermedad del tumor facial

Archivo:Tasmanian Devil roadsign
Señal de tráfico que previene a los conductores sobre la presencia de demonios en los alrededores.

Desde 1996, una enfermedad llamada tumor facial de los demonios de Tasmania (DFTD) ha afectado gravemente a la población, reduciéndola en más del 80% entre 1996 y 2016. Solo la costa occidental y el noroeste de Tasmania están libres de la enfermedad. Los demonios infectados mueren a los pocos meses.

Los primeros signos de la DFTD son bultos alrededor de la cara que se convierten en tumores. Estos tumores les impiden comer, y los demonios mueren de hambre. La enfermedad también puede extenderse a otros órganos.

Esta enfermedad es un tipo de cáncer que se transmite de un animal a otro, especialmente a través de heridas durante las peleas. Los científicos están retirando a los animales enfermos y poniendo en cuarentena a los sanos para proteger la especie. Los demonios de Tasmania tienen poca diversidad genética, lo que los hace más propensos a este tipo de cáncer. Sin embargo, investigaciones de 2016 sugieren que los demonios están evolucionando para intentar volverse inmunes a la enfermedad.

Se están estudiando las poblaciones salvajes para entender cómo se propaga la enfermedad y cómo afecta a los demonios. Esto incluye atrapar demonios para ver si están enfermos y cuántos hay. El objetivo es que más demonios sobrevivan hasta la edad de reproducción.

Un estudio de 2011 sugirió criar demonios con diversidad genética para ayudar a su conservación.

Galería de imágenes

Véase también

Kids robot.svg En inglés: Tasmanian devil Facts for Kids

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Demonio de Tasmania para Niños. Enciclopedia Kiddle.