Jack Sheppard para niños
Datos para niños Jack Sheppard |
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Jack Sheppard en la celda The Stone Room en la prisión de Newgate. Ilustración publicada en los Anales de Newgate.
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Información personal | ||
Nacimiento | 4 de marzo de 1702 Londres, Inglaterra, Reino Unido |
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Fallecimiento | 16 de noviembre de 1724 (22 años) Londres, Inglaterra, Reino Unido |
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Nacionalidad | Inglés | |
Información profesional | ||
Ocupación | Criminal | |
Jack Sheppard (4 de marzo de 1702-16 de noviembre de 1724) fue un destacado criminal inglés del Londres de principios del siglo XVIII. Nacido en el seno de una familia pobre, fue aprendiz de carpintero hasta 1723; sin embargo, a siete meses de concluir su entrenamiento laboral, empezó a dedicarse al robo. Durante 1724, fue arrestado y encarcelado cinco veces, aunque logró escaparse en cuatro ocasiones, situación que permitió que se convirtiera en una figura pública y popular entre los pobres. Finalmente fue capturado, condenado y ejecutado en Tyburn, donde acabó su breve carrera criminal de menos de dos años. Varios motivos lo llevaron a su perdición, entre los cuales se encuentra la incapacidad del célebre «captor de ladrones», y ladrón, Jonathan Wild, de controlarlo y dominarlo, y las lesiones que éste sufrió a manos de uno de sus amigos cercanos, Joseph "Blueskin" Blake.
Destacó por sus varios intentos de huir de la justicia por sus crímenes. Una «Narrativa» autobiográfica, que se creyó escrita anónimamente por Daniel Defoe, se vendió en el momento de su ejecución, y pronto le siguieron obras famosas. El personaje de Macheath en La ópera del Mendigo (1728), de John Gay, está basado en su vida, y su mención en esta obra ayudó a que permaneciese en primera plana durante más de un siglo. Alrededor de 1840 regresó nuevamente al consciente colectivo cuando William Harrison Ainsworth escribió una novela titulada Jack Sheppard, con ilustraciones de George Cruikshank. La popularidad de su historia y el miedo de que otros intentaran imitar su comportamiento, condujo a las autoridades londinenses a prohibir todas las obras que lo tuvieran como protagonista durante cuarenta años.
Contenido
Primeros años
Sheppard nació en White’s Row, en la ciudad de Londres, en la zona de Spitalfields. Durante las dos primeras décadas del siglo XVIII, el barrio de Spitalfields fue conocido por la presencia de asaltantes de carretera y por ser un área económicamente pobre, demostrándose así que Sheppard pertenecía a una familia de escasos recursos. Fue bautizado el 5 de marzo, un día después de su nacimiento, en St. Dunstan's, Stepney, lo que sugiere el temor a la mortalidad infantil por parte de sus progenitores, posiblemente debido a que el recién nacido era débil o enfermo. Sus padres le pusieron el nombre de John, en honor a su hermano mayor, que había fallecido antes de su nacimiento. Durante su vida fue conocido como Jack, el «caballero Jack» o «el muchacho Jack». Tuvo un segundo hermano llamado Thomas, y una hermana menor, Mary. Su padre, un carpintero, murió durante su juventud, y su hermana fallecería dos años después.
Ante la imposibilidad de su madre de mantener a la familia, principalmente a falta de los ingresos de su padre, fue enviado a los seis años de edad al hospicio Mr. Garrett, ubicado cerca de St. Helen Bishopsgate, que funcionaba como una casa de misericordia donde se ofrecía trabajo a los niños desamparados. Inicialmente fue aprendiz de un carpintero de sillas de caña de la parroquia por una paga de veinte chelines. Sin embargo, su nuevo apoderado también murió tempranamente. De esta manera fue enviado a un segundo carpintero de sillas de caña, que lo maltrataba, razón por la cual a los diez años de edad empezó a trabajar como ayudante en el almacén de William Kneebone, un tapicero de muebles que tenía un establecimiento comercial ubicado en la calle Strand. Su madre había trabajado para Kneebone desde la muerte de su padre. Kneebone le enseñó a leer y a escribir, y lo envió de aprendiz del carpintero Owen Wood, en Wych Street y Durry Lane, en el barrio de Covent Garden. Es así que el 2 de abril de 1717 firmó un contrato de aprendizaje por siete años.
Hacia el año 1722, demostraba ser una futura promesa como carpintero. A los veinte años de edad era un hombre bajo de estatura, que contaba con 1,63 metros de alto, con complexión ligeramente musculada, pero engañosamente fuerte. Tenía una cara pálida, con grandes ojos oscuros, una boca grande y sonrisa amplia. A pesar de ser un poco tartamudo, su ingenio lo hizo popular en las tabernas de Drury Lane. Sirvió honestamente como aprendiz de carpintero por cinco años, pero más tarde comenzó a mezclarse con el mundo del crimen.
Joseph Hayne, un moldeador de botones que poseía un almacén en las cercanías, también regía una taberna llamada Black Lion en Drury Lane, y promovía a los aprendices locales a frecuentarla. La taberna Black Lion era visitada por criminales como Joseph "Blueskin" Blake, quien en el futuro se convertiría en su compañero de crimen, y además por el auto-proclamado «captor de ladrones» Jonathan Wild, secretamente el eje central de un imperio criminal en Londres, y más tarde su implacable enemigo.
Captura final
Su último periodo de libertad duró dos semanas, y durante el cual se disfrazó de mendigo y regresó a la ciudad. Irrumpió en la casa de empeño de los hermanos Rawlin ubicada en Drury Lane la noche del 29 de octubre de 1724, llevándose consigo un traje de etiqueta negro, una espada de plata, anillos, relojes, una peluca y otros objetos. Se vistió como un caballero petimetre, y utilizó las ganancias de los objetos para pasar un día y la noche siguiente en la compañía de mujeres. En la mañana del 1 de noviembre, fue arrestado.
En esta ocasión fue situado en la celda Middle Stone Room, que se encontraba en el centro de Newgate, junto a la celda Castle, y donde podía ser observado en todo momento. Además se le esposó con pesas de trescientas libras. Era tan famoso, que los carceleros cobraban cuatro chelines a los visitantes de la alta sociedad para que lo pudieran ver, y el pintor del rey, James Thornhill, le pintó un retrato. Varios personajes ilustres de la época mandaron una petición al rey Jorge I rogándole que no fuera ejecutado y que en su lugar lo desterraran a alguna colonia. La multitud de gente de buenas costumbres que lo visitó fue exorbitante, pero a pesar de todo el convicto siempre mantuvo una postura alegre y calmada, e invariablemente respondió a todo lo que se le decía con burlas y bromas.
El 10 de noviembre se presentó ante el juez Powis en la corte conocida como Court of King’s Bench en el Palacio de Westminster. Allí se le ofreció la oportunidad de que su sentencia fuese reducida a cambio de información sobre sus socios, pero despreció la oferta, y la pena de muerte fue ratificada. Al día siguiente, Blueskin fue ejecutado y Sheppard fue trasladado a la celda de los condenados.
Ejecución
El lunes 16 de noviembre de 1724 fue trasladado a la horca en Tyburn para ser ejecutado. Planeaba escapar una vez más durante el camino hacia la horca, pero la navaja con la que pretendía cortar la soga que le ataba fue descubierta por un guardia momentos antes de que saliera de Newgate por última vez.
Una festiva procesión desfiló en las calles de Londres, en la zona de Holborn y Oxford Street, en cuyo centro iba Sheppard en una carreta, acompañado del mariscal de la ciudad y soldados con librea. Esta procesión tuvo la asistencia de aproximadamente 200.000 personas —un tercio de la población de Londres—. La procesión se detuvo en la taberna Oxford, en donde el convicto bebió una última pinta de jerez. Una atmósfera de carnaval atravesaba Tyburn, en donde se vendía la autobiografía oficial, publicada por Appleby y probablemente escrita anónimamente por Defoe. Tras la ejecución, sus restos fueron enterrados en el cementerio de la iglesia de St Martin-in-the-Fields.
Legado
Sus hazañas han causado a lo largo de la historia una espectacular reacción del público. Incluso ha sido citado —favorablemente— como ejemplo en sermones, periódicos, panfletos, gacetas y baladas que han sido dedicadas a sus sorprendentes proezas; de hecho, su trayectoria fue adaptada al teatro casi inmediatamente después de su muerte. Harlequin Sheppard, una pantomima escrita por John Thurmond —subtitulada A night scene in grotesque characters o Escena nocturna con personajes grotescos—, se estrenó en el Teatro Real de Drury Lane el sábado 28 de noviembre, apenas dos semanas después de que fuera ejecutado. El relato de su vida se mantuvo célebre a través del Calendario de Newgate, un boletín informativo que se publicaba mensualmente en Londres sobre las ejecuciones y la biografía de los reos más famosos. También se publicó un sainete de tres actos llamado The Prison Breaker, el cual jamás fue producido teatralmente; sin embargo, posteriormente fue combinado con melodías convirtiéndose en La ópera del cuáquero —una imitación de La ópera del mendigo—, y presentada en La feria de San Bartolomé en 1725 y 1728. Un diálogo imaginario entre Jack Sheppard y Julio César se publicó en el diario British Journal el 4 de diciembre de 1724, donde Sheppard favorablemente compara sus virtudes y proezas con las del César.
Posiblemente la obra teatral más célebre basada en su vida fue La ópera del mendigo, escrita por John Gay (1728). De hecho, Sheppard sirvió como inspiración del personaje de Macheath, y su adversario, Peachun, fue basado en Jonathan Wild. La obra teatral fue popular en aquella época y fue presentada regularmente por más de cien años; incluso cabe mencionar que ayudó a recuperar la fortuna que Gay había perdido anteriormente en la obra Burbuja de los mares del Sur. Dos siglos después, La ópera del mendigo sirvió como referencia para la creación de La ópera de los tres centavos, de Bertolt Brecht y Kurt Weill (1918).
Su leyenda y su vida pudieron haber sido la fuente de inspiración para la serie de grabados de William Hogarth Industry and Idleness (1747), donde se muestra el descenso paralelo de un aprendiz, llamado Tom Idle, hacia el mundo del crimen y finalmente a la horca, junto con el auge de su compañero aprendiz, Francis Goodchild, quien contrae matrimonio con la hija de su amo y toma control del negocio, volviéndole rico, y finalmente convenciendo a Dick Whittington de convertirse en Alcalde de Londres.
Un melodrama basado en su historia apareció en la primera mitad del siglo XIX, titulado Jack Sheppard, The Housebreaker, or London in 1724, bajo la autoría de William Thomas Moncrieff y publicado en 1825. Sin embargo, en aquella época tuvo más éxito la tercera novela de William Harrison Ainsworth, titulada Jack Sheppard, que fue publicada desde enero de 1839 en varios fascículos en la revista Bentley's Miscellany, con ilustraciones de George Cruikshank, superponiéndose con la circulación de los episodios finales de Oliver Twist, de Charles Dickens. Dicha obra fue una arquetípica novela de Newgate, manteniéndose cercana a los hechos reales de su vida, pero sin embargo, retratándolo como un héroe fanfarrón. Al igual que los grabados de Hogarth, la novela emparejaba el descenso de un «holgazán» aprendiz hacia el crimen con el surgimiento de un personaje típico del melodrama, Thomas Darrell, proveniente de cuna aristocrática, quien derrota a su malvado tío para recuperar su fortuna. Las imágenes de Cruikshank complementaron perfectamente el relato de Ainsworth; al respecto Thackeray escribió: «…el señor Cruikshank creó de forma tan realista las ilustraciones, que parecería que el señor Ainsworth únicamente aumentó las palabras». La novela rápidamente se volvió popular y fue publicada en formato de libro ese año, antes de que la versión serializada fuera completada, e inclusive sobrepasó las ventas de las primeras ediciones de Oliver Twist. La novela de Ainsworth fue adaptada a una exitosa obra teatral por John Buckstone y presentada en el teatro Adelphi Theatre en octubre de 1839. Efectivamente, parecería que los grabados de Cruikshank fueron creados deliberadamente para ser adaptados y repetidos en el escenario como tableaux vivants. La colaboración entre Ainsworth y Cruikshank en la elaboración de la novela ha sido descrita como el «clímax ejemplar» de la «novela pictórica dramatizada artísticamente».
El relato generó una especie de manía cultural, embellecida por panfletos, grabados, caricaturas, obras teatrales y suvenires, que no se repitió hasta la creación de la novela Trilby, de George du Maurier, en 1895. A principios de 1840, un canto de la obra de teatro de Buckstone, titulado Nix My Dolly, Pals, Fake Away, fue reportado como el causante de «ensordecer las calles». Una alarma pública se originó debido a que se temía que la gente joven pudiera imitar el comportamiento de Sheppard, y esto causó que el Lord Chamberlain prohibiera, por lo menos en Londres, la licencia de cualquier obra que contuviera a «Jack Sheppard» en el título por cuarenta años. Sin embargo, numerosos burlesques fueron escritos después de que la censura se retirara, como una popular pieza del teatro Gaiety Theatre, llamada Little Jack Sheppard (1885-86), escrita por Henry Pottinger Stephens y W. Yardley, y con música de Meyer Lutz y otros.
La leyenda de este famoso ladrón resurgió varias veces en el siglo XX, entre las que se incluyen dos películas de cine mudo tituladas The Hairbreadth Escape of Jack Sheppard (1900) y Jack Sheppard (1923); un libro de Christopher Hibbert llamado The Road to Tyburn (1957); un drama británico llamado Where’s Jack? (1969), dirigido por James Clavell, con Tommy Steele en el papel principal; un proyecto de cine jamás estrenado de la productora FilmFour Productions en el 2000, titulado Jack Sheppard and Jonathan Wild, dirigido por Benjamin Ross, quien también escribió el guion con la colaboración de John Preston, y con la participación de los actores Tobey Maguire y Harvey Keitel en los papeles estelares; un drama televisivo del año 2002, llamado Invitation to Hanging; y una serie de novelas de Neal Stepheson conocidas como Ciclo barroco (2003-2004), en las que la vida de Jack Sheppard sirvió de inspiración al personaje de Jack Shafoe.
Las razones para el duradero legado de sus hazañas en la imaginación popular han sido evaluadas por Peter Linebaugh, que sugiere que la leyenda ha sido fundada en el prospecto de excarcelación, del escape que ha sido llamado por Michel Foucault en Historia de la locura en la época clásica como el «gran confinamiento», en el cual un número «irrazonable» de miembros de la población eran encerrados e institucionalizados. Las leyes impuestas a Sheppard y a otros criminales semejantes de la clase trabajadora eran una herramienta para disciplinar a la multitud revoltosa a aceptar el aumento de leyes severas de propiedad. En el siglo XIX, Charles Mackay ofreció una opinión sobre Sheppard en el libro Delirios populares extraordinarios y la locura de las masas:
«Ya sea que la multitud, sintiendo las punzadas de la pobreza, simpatizan con los audaces e ingeniosos depredadores que se llevan la superfluidad del hombre rico, o ya sea el interés que la humanidad en general siente por la documentación de la arriesgada aventura, es seguro que la plebe de todos los países mira con admiración a los grandes y exitosos ladrones».
Véase también
En inglés: Jack Sheppard Facts for Kids