Bartolomé Bermejo para niños
Bartolomé de Cárdenas, conocido como Bartolomé Bermejo (nacido en Córdoba alrededor de 1440 y fallecido en Barcelona cerca de 1501), fue un importante pintor gótico español. Su trabajo está documentado entre 1468 y 1501 en los territorios de la Corona de Aragón.
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Biografía de Bartolomé Bermejo
Se sabe poco sobre la vida de Bartolomé Bermejo, uno de los pintores más destacados del estilo hispano-flamenco (una mezcla de arte español y flamenco). Fue un artista que viajaba mucho, viviendo en Valencia, Daroca, Zaragoza y Barcelona. Se sabe que nació en Córdoba gracias a una inscripción en el marco de su obra La Piedad del canónigo Desplà, de 1490, que se encuentra en la catedral de Barcelona. La inscripción dice:
OPUS. BARTHOLOMEI. VERMEIO. CORDUBENSIS. IMPENSA. LODOVICI. DE. SPLA. BARCINONENSIS. ARCHIDIACONI. ABSOLUTUM. XXIII. APRILIS. ANNO. SALUTIS. CHRISTIANAE MCCCCLXXXX.
Sus primeros trabajos en Valencia
El primer documento que menciona a Bermejo es de 1468, en Játiva. Es un contrato para pintar un retablo (una obra de arte grande que decora un altar) dedicado a San Miguel. El encargo fue hecho por Antoni Joan, un caballero de Játiva. En este contrato, Bermejo firma como ciudadano de Valencia.
La pintura, titulada San Miguel triunfante sobre el demonio con el donante Antoni Joan, se conserva en la National Gallery de Londres. En ella, San Miguel aparece con una armadura brillante y una capa, de pie sobre un dragón. A su lado, arrodillado y más pequeño, está Antoni Joan, el hombre que encargó la obra. Bermejo usó la técnica del óleo con gran habilidad, similar a los pintores flamencos como Jan van Eyck. Se nota su atención a los detalles en la vegetación y en la armadura de San Miguel, donde se refleja una ciudad. El fondo dorado de la pintura es un estilo más tradicional español, mostrando cómo Bermejo combinó lo mejor de ambos mundos artísticos.

Otra obra importante de esta época es el Tríptico de la Virgen de Montserrat, que se encuentra en la catedral de Acqui Terme (Italia). Fue encargado por Francesco della Chiesa, un comerciante de Valencia. En la tabla central, la Virgen con el Niño y el donante (Francesco della Chiesa) están en un paisaje con montañas y el mar. La sierra de Montserrat se convierte en el trono de la Virgen. Bermejo pintó con mucho detalle las flores y plantas del paisaje. Solo esta tabla central es de Bermejo; las partes laterales fueron terminadas por Rodrigo de Osona y su taller.
Estancia en Daroca
Después de Valencia, Bermejo se estableció en Daroca, una localidad en Aragón. En 1474, firmó un contrato para pintar un retablo dedicado a Santo Domingo de Silos para la iglesia de la ciudad. En esta época, se le atribuyen varias obras, como el San Juan Bautista en el desierto (Museo de Bellas Artes de Sevilla) y la Muerte y Asunción de la Virgen (Berlín).
También de estos años es el Cristo de la Piedad del Castillo de Peralada. En esta pintura, Jesús aparece sentado en el borde de su tumba, mostrando sus heridas, y es sostenido por ángeles. Bermejo pintó un cáliz con joyas en el suelo, que simboliza el sacrificio. La pintura muestra su gran habilidad con el óleo.
Bermejo se casó con Gracia de Palaciano en Daroca. Ella tuvo algunos problemas con las autoridades de la época. A pesar de esto, Bermejo siguió trabajando en Daroca.
El contrato para el retablo de Santo Domingo de Silos especificaba que Bermejo debía pintar la obra con sus propias manos, usando óleo y colores finos. Sin embargo, Bermejo no entregó las pinturas a tiempo y se mudó a Zaragoza antes de terminar.

Tres años después, solo había terminado la pieza central, Santo Domingo de Silos entronizado como obispo, que es una de sus obras más famosas. La iglesia de Daroca llegó a un acuerdo con otro pintor, Martín Bernat, para que terminara el retablo. Sin embargo, reconocieron el talento de Bermejo y le pidieron que terminara la parte inferior del retablo (la predela) y las caras de las figuras. Las partes restantes fueron terminadas por Bernat.

También de Daroca son las tablas de un retablo dedicado a Santa Engracia. La imagen principal de la santa, ricamente vestida, se encuentra en el Isabella Stewart Gardner Museum de Boston. Otras partes del retablo, como la predela y el ático (la parte superior), se conservan en la iglesia de los Sagrados Corporales de Daroca. Bermejo mostró su habilidad para pintar diferentes telas y materiales, inspirándose en la cultura de la época.
Años en Zaragoza
Bermejo se mudó a Zaragoza a más tardar en 1477 y permaneció allí hasta 1483. A pesar de sus problemas anteriores, trabajó para la Catedral del Salvador y la Basílica del Pilar. Junto con Martín Bernat, pintó el retablo para el mercader Juan Lobera. Bermejo se encargó de dibujar todas las escenas y pintar todas las caras de las figuras.
Este retablo incluía una Virgen de la Misericordia (ahora en Grand Rapids) y El milagro de la nieve. También se cree que de este retablo provienen las tablas con San Vicente y San Lorenzo.

En la Catedral de Zaragoza, Bermejo también realizó otros trabajos. Se sabe que pintó la tabla de doble cara (pintada por ambos lados) con la Epifanía (la Adoración de los Reyes Magos) y la Santa Faz. Esta obra, que perteneció a la Reina Isabel I, se conserva en la Capilla Real de Granada. En la Epifanía, Bermejo creó una escena compleja con muchas figuras.
La Piedad del canónigo Desplà en Barcelona
El rastro de Bermejo en Zaragoza se pierde en 1483, y reaparece en Barcelona en 1486. Allí, fue considerado para pintar las puertas del órgano de la iglesia de Santa María del Mar, aunque el encargo fue para otro pintor.
Su obra más famosa en Barcelona es La Piedad del canónigo Desplà, pintada en 1490 para el canónigo Lluís Desplà. Esta pintura es considerada una obra maestra del final de la Edad Media en España.
En la Piedad, la Virgen sostiene el cuerpo de Jesús en su regazo. A un lado, aparece el canónigo Desplà, y al otro, San Jerónimo. La escena se sitúa en un paisaje amplio con un cielo que amenaza tormenta a la izquierda y una ciudad luminosa a la derecha. Bermejo incluyó muchos detalles en primer plano, como plantas, flores y animales (mariposas, lagartijas, caracoles, mariquitas), algunos de los cuales tienen significados simbólicos.
Los últimos documentos que mencionan a Bermejo son de 1501, cuando se le pagó por unos diseños para vidrieras en la Lonja de Mar de Barcelona. Después de esto, no se tienen más noticias del pintor.