Tā moko para niños
Tā moko es un tipo de arte corporal permanente que los maoríes, el pueblo originario de Nueva Zelanda, han practicado tradicionalmente en la cara y el cuerpo.
En 1769, el capitán James Cook describió el tā moko así: "Las marcas en general son espirales dibujadas con gran precisión y elegancia. Un lado corresponde con el otro. Las marcas en el cuerpo se parecen a las hojas de adornos antiguos, como trabajos de filigrana. Tienen tantas formas que, de cien que al principio parecían iguales, ninguna era idéntica al examinarlas de cerca."
Los artistas que hacían el tā moko, llamados tohunga-tā-moko, eran muy respetados y se les consideraba especiales o sagrados.
Contenido
Orígenes e Importancia Cultural del Tā Moko
El tā moko tiene sus raíces en la antigua patria maorí, la Polinesia oriental. Las herramientas y métodos usados eran parecidos a los de otras partes de Polinesia. Antes de que llegaran los europeos a finales del siglo XVIII, muchas personas importantes de la comunidad maorí tenían moko. Si alguien de alto rango se iba de la isla sin él, se le consideraba de baja posición social.
Recibir un moko era un paso muy importante entre la niñez y la vida adulta. Este momento iba acompañado de muchos rituales. El pueblo maorí es muy creyente y agradece a sus dioses por lo que tienen. Además de mostrar la posición y el rango, otra razón para hacerse un tā moko era para verse más atractivo.
Los hombres solían tatuarse la cara, la parte superior de las piernas (raperape en maorí) y los muslos (puhoro en maorí). Las mujeres, por lo general, se marcaban los labios (kauae) y la barbilla. Otras zonas donde se veían estos diseños eran las frentes de las mujeres, la parte superior de las piernas, los muslos, el cuello y la espalda. En los hombres, era común verlos en la espalda, el vientre y las pantorrillas.
Históricamente, el moko era diferente de un tatuaje normal. La piel se tallaba con uhi (cinceles), no se perforaba. Esto dejaba la piel con surcos en lugar de una superficie lisa.
Herramientas Antiguas para el Tā Moko
Al principio, los tohunga-tā-moko (especialistas en moko) usaban varios uhi (cinceles). Estos cinceles estaban hechos de hueso de albatros. Se insertaban en un mango y se golpeaban con un mazo.
Los colores se hacían de diferentes materiales. Para el color del cuerpo se usaba awheto (un hongo). Para el color negro de la cara se usaba ngarehu (maderas quemadas). También se mezclaba el hollín de la goma de Kauri quemada con grasa para hacer pigmento. El pigmento se guardaba en recipientes decorados llamados oko, que a menudo se enterraban cuando no se usaban. Los oko se pasaban de generación en generación.
Se cree que el kōrere (un embudo de alimentación) se usaba para dar de comer a los hombres. Sus bocas se hinchaban mucho después de recibir el tā moko.
Los hombres eran principalmente los especialistas en tā moko. Sin embargo, hay registros de algunas mujeres a principios del siglo XX que también practicaban este arte. También se cuenta que una mujer capturada en la década de 1830 fue vista haciendo moko en la espalda de la esposa de un jefe.
Cambios a lo Largo del Tiempo
La costumbre de los pākehā (personas de origen europeo) de coleccionar y comerciar con mokomokai (cabezas tatuadas) cambió la forma en que se veía el tā moko al principio del período colonial.
El historiador King menciona que a finales del siglo XIX, las agujas empezaron a reemplazar a los uhi como herramientas principales. Este método era más rápido y tenía menos riesgos para la salud. Sin embargo, la textura del tā moko cambió y se volvió lisa. El tā moko en los hombres dejó de practicarse alrededor de la década de 1860. Esto se debió a los cambios en la moda y a la influencia de la cultura europea.
Las mujeres continuaron recibiendo moko a principios del siglo XX. El historiador Michael King entrevistó a más de 70 mujeres mayores en la década de 1970. A ellas se les había hecho el moko antes de una ley de 1907 que afectó estas prácticas. Tradicionalmente, las mujeres solo se tatuaban los labios, alrededor de la barbilla y, a veces, las fosas nasales.
El Tā Moko Hoy en Día
Desde 1990, el tā moko ha vuelto a ser popular tanto para hombres como para mujeres. Es un símbolo de identidad cultural y muestra el resurgimiento del idioma y la cultura maorí.
La mayoría de los tā moko que se hacen hoy en día se realizan con máquinas de tatuar. Sin embargo, también se ha recuperado el uso de los uhi (cinceles). Las mujeres también se han involucrado más como artistas del tā moko. Algunos ejemplos son Christine Harvey de las Islas Chatham, Henriata Nicholas en Rotorua y Julie Kipá en Whakatane.
En el año 2000, se creó la organización Te Uhi a Mataora. Su objetivo es "preservar, mejorar y desarrollar el tā moko como una forma de arte viva". Una gran parte de los neozelandeses tienen algún tipo de tatuaje hoy en día. Hay una "aceptación creciente... como una forma de expresar la cultura y la individualidad".
Respeto Cultural en el Arte del Tatuaje
Los europeos conocieron el tā moko cuando James Cook hizo su primer viaje. Los primeros visitantes maoríes a Europa, como Moehanga en 1805, Hongi Hika en 1820 y Te Pēhi Kupe en 1826, todos tenían moko en toda la cara. Lo mismo ocurría con algunos europeos que vivían como maoríes, como Barnet Burns. Sin embargo, hasta hace poco, este arte no era muy conocido en el mundo.
Cuando personas que no son maoríes usan diseños de tā moko, a veces puede generar discusiones sobre el respeto cultural. Por ejemplo, el uso de diseños maoríes por parte de artistas como Robbie Williams y Ben Harper, o en un desfile de moda de Jean-Paul Gaultier en 2007, fue un tema de debate.
Para responder a la demanda de diseños maoríes de una manera respetuosa con la cultura, el grupo Te Uhi a Mataora promueve el uso del término kirituhi. Este término ha sido muy bien aceptado: "Kirituhi se traduce literalmente como 'piel dibujada'. A diferencia del Moko, que requiere un proceso de permisos, información familiar e histórica, el Kirituhi es simplemente un diseño con estilo maorí que se puede aplicar en cualquier lugar, por cualquier razón y a cualquier persona..."
Véase también
- Haka, danza tribal maorí.