Rafael Gómez Ortega para niños
Datos para niños Rafael el Gallo |
||
---|---|---|
![]() |
||
Información personal | ||
Nombre de nacimiento | Rafael Gómez Ortega | |
Nacimiento | 16 de julio de 1882 Madrid (España) |
|
Fallecimiento | 25 de mayo de 1960 Sevilla (España) |
|
Causa de muerte | Enfermedad | |
Sepultura | Cementerio de San Fernando | |
Nacionalidad | Española | |
Familia | ||
Familia | Familia Gallo | |
Padres | Fernando Gómez García Gabriela Ortega Feria |
|
Cónyuge | Pastora Imperio (1911-1934) | |
Familiares | José Gómez Ortega (hermano) Fernando Gómez Ortega (hermano) |
|
Información profesional | ||
Ocupación | Matador y torero | |
Seudónimo | Gallito, el Gallo y Divino Calvo | |
Rafael Gómez Ortega (nacido en Madrid el 16 de julio de 1882 y fallecido en Sevilla el 25 de mayo de 1960) fue un famoso torero español. Se le conocía por varios apodos como Gallito, el Gallo y más tarde el Divino Calvo. Era el hermano mayor de Joselito y parte de la importante familia Gallo, conocida por su tradición en el mundo del toreo.
Contenido
La vida de Rafael Gómez Ortega
¿Quién fue Rafael Gómez Ortega?
Rafael Gómez Ortega nació en una familia con una larga historia en el toreo, la Familia Gallo. Su padre, Fernando Gómez García, y sus hermanos, Fernando y Joselito, también fueron toreros. Su madre, Gabriela Ortega Feria, a quien llamaban «la Seña Gabriela», nació en Cádiz en 1862. Rafael también era cuñado de Ignacio Sánchez Mejías, quien se casó con su hermana Dolores Gómez.

Rafael empezó a torear desde muy joven, participando en eventos con becerros cuando tenía solo nueve años. Se convirtió en torero profesional el 28 de septiembre de 1902 en la Real Maestranza de Sevilla. Su padrino en este evento fue Emilio Torres, Bombita, y Ricardo Torres, Bombita Chico, fue el testigo. En 1904, confirmó su alternativa en Madrid con Lagartijo chico como padrino.
El 20 de febrero de 1911, Rafael se casó con la cantaora Pastora Imperio en la iglesia de San Sebastián de Madrid, pero su matrimonio duró menos de un año.
Momentos destacados de su carrera
Uno de sus mayores éxitos ocurrió en Madrid en 1912 con un toro llamado Jerezano. En esa ocasión, realizó una faena muy completa que impresionó al público madrileño. Otro triunfo importante fue en la misma plaza con el toro Peluquero, de la ganadería de Bañuelos, al que le cortó una oreja el dos de mayo de ese mismo año.
La pérdida de su hermano José en 1920 le afectó mucho. Rafael se retiró de los ruedos el 4 de octubre de 1936 en Barcelona. Después de la guerra civil española, regresó a Sevilla. Allí, siguió participando en muchos festivales junto a Juan Belmonte, quien era un gran amigo y apoyo para él. En sus últimos años, Rafael y Belmonte solían reunirse en una famosa tertulia taurina en el bar Los Corales en Sevilla.
Rafael Gómez Ortega era un gran aficionado al fútbol y seguidor del equipo de Sevilla. Incluso visitaba a los futbolistas en los vestuarios. En 1955, apareció brevemente en la película española Historias de la radio, donde el actor Paco Rabal le hizo una pequeña entrevista.
Falleció en Sevilla el 25 de mayo de 1960. Sus restos descansan en el cementerio de San Fernando, junto a los de su hermano José, bajo un monumento creado por Mariano Benlliure.
El estilo de Rafael Gómez Ortega
Rafael Gómez Ortega era conocido por ser una persona muy particular, generosa y con una vida llena de historias interesantes. Pero, sobre todo, fue un torero de gran talento, con un estilo elegante y variado. Se le consideraba un torero-artista, a veces brillante y otras veces impredecible. Solía decir: «prefiero una bronca a una corná», lo que mostraba su forma de ser.
Fue uno de los primeros toreros importantes en negarse a torear ciertos toros, incluso dejándolos ir vivos. Esto causaba sorpresa, pero el público lo aceptaba. Por eso, su forma de torear se ha llamado «anticombativa». Él esperaba un toro que le gustara para poder mostrar su arte. Otros toreros famosos como Curro Romero o Rafael de Paula siguieron un camino similar.
Rafael fue muy influenciado por Lagartijo, a quien conoció a través de su padre. Era un torero clásico y muy completo, que representaba bien la forma tradicional de torear. También introdujo novedades importantes, como la serpentina, el par del trapecio y los cambios de manos por la espalda. El pase del celeste imperio, que luego se llamó «estatuario» en la época de Manolete, también fue una de sus aportaciones. El crítico Gregorio Corrochano destacó su estilo clásico, que a veces quedaba oculto por su forma de torear más llamativa:
Rafael era un torero clásico, con el arte jugoso de la escuela sevillana. Tan clásico era que macheteaba con la izquierda, suerte poco lucida, pero necesaria, como hacían los clásicos. Así ganaba tiempo preparando la hora de matar.Diario ABC
Véase también
En inglés: Rafael Gómez Ortega Facts for Kids