Claudia Lars para niños
Datos para niños Claudia Lars |
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Información personal | ||
Nacimiento | 20 de diciembre de 1899 San Salvador ![]() |
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Fallecimiento | 22 de julio de 1974![]() |
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Sepultura | Cementerio de Los Ilustres | |
Nacionalidad | Salvadoreña | |
Información profesional | ||
Ocupación | escritora, periodista, editora, locutora, traductora y política. | |
Años activa | XXXXIV | |
Conocida por | Tierra de infancia | |
Movimiento | Modernismo hispánico | |
Género | Poesía | |
Distinciones | Orden Nacional José Matías Delgado | |
Margarita del Carmen Brannon Vega, más conocida por su nombre artístico Claudia Lars, fue una destacada poetisa de El Salvador. Nació en Armenia el 20 de diciembre de 1899 y falleció en San Salvador el 22 de julio de 1974. Su poesía es muy apreciada por su belleza y su habilidad para usar las palabras de forma especial. Es considerada una de las voces más importantes de la poesía en Centroamérica durante el siglo XX.
Contenido
Los primeros años de Claudia Lars
Claudia Lars fue hija del ingeniero estadounidense Peter Patrick Brannon y de la salvadoreña Manuela Vega Zelayandía. Desde pequeña, fue amiga de Consuelo Suncín, quien más tarde se casaría con el famoso escritor Antoine de Saint-Exupéry.
Su educación comenzó en casa con la maestra Mercedes Mendoza. Después, asistió al colegio de La Asunción en la ciudad de Santa Ana. Cuando tenía 17 años, con la ayuda del general Juan José Cañas, publicó un pequeño libro de poemas llamado Tristes Mirajes. Lamentablemente, no se conserva ninguna copia de este primer trabajo.
En 1919, sus padres la enviaron a Estados Unidos. Allí conoció a Le Roy Beers, quien se convertiría en su primer esposo. En Estados Unidos, Claudia Lars también trabajó enseñando español en la Escuela Berlitz de Brooklyn.
Entre el volcán y el mar nació la niña de este libro: el volcán de sus abuelos morenos; el mar de sus abuelos blancos. Nacer y crecer en una costa tan aromada y dulce, entre yerbas, frutos y pájaros de mil colores, es desde la cuna maravillosos dones de belleza. En el valle natal mi corazón se fue abriendo como una flor gozosa, y su raíz de sangre y arrobamiento se anudó, con fuerza oculta y permanente, al seno acogedor de la madre tierra.
— Claudia Lars, Tierra de infancia.
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Viajes y sus obras

Claudia Lars publicó muchos textos en la revista Repertorio Americano, con 98 colaboraciones entre 1921 y 1948.
En 1927, Claudia Lars regresó a El Salvador con su esposo, ya que él fue nombrado cónsul de Estados Unidos. Ese mismo año, nació su único hijo, Leroy Beers Brannon. En esta época, Claudia se relacionó con importantes intelectuales salvadoreños como Salarrué, Serafín Quiteño y Alberto Masferrer.
Fue en 1933 cuando empezó a usar el nombre artístico de Claudia Lars. En 1934, publicó su libro Estrellas en el Pozo. También participó en programas de radio de poesía para niños, lo que muestra su interés por el público más joven. Además, colaboró en la sección "Página de los niños" del periódico El Diario de ayer antier y antier.
A principios de la década de 1940, Claudia Lars ganó el segundo lugar en los Juegos Florales de la Feria Novembrina en Guatemala en 1941, con su obra Sonetos del arcángel. Otros de sus libros publicados en esos años fueron La casa de vidrio (1942), Romances de Norte y Sur (1946), Sonetos y Ciudad bajo mi voz (1947). Este último ganó un premio importante en la celebración de los 400 años de la ciudad de San Salvador.
En 1948, Claudia Lars viajó a Guatemala como representante cultural de la embajada de El Salvador. Allí conoció a Carlos Samayoa Chinchilla, quien sería su segundo esposo. Antes de casarse, trabajó en Estados Unidos empacando duraznos y traduciendo historietas para Walt Disney. También colaboró con periódicos en El Salvador que estaban en contra de ciertas ideas políticas de la época.
Claudia Lars es una voz muy importante en la literatura salvadoreña. Escribió principalmente poesía que expresaba sus sentimientos más profundos, pero también algunas obras con mensajes sociales. Su primer libro de poemas, Estrellas en el pozo, se publicó en 1934. Mantuvo una buena relación con muchos artistas e intelectuales salvadoreños. Por ejemplo, dedicó su segundo libro de poesía, Canción redonda (1937), al pintor Salarrué.
También trabajó con instituciones culturales del gobierno y fue editora de la revista literaria Cultura. Ayudó a muchos escritores jóvenes de El Salvador a empezar sus carreras. Publicó sus recuerdos de la infancia en el campo salvadoreño en el libro Memorias de infancia.
El estilo de Claudia Lars
Claudia Lars es reconocida por la belleza de su poesía y por su gran habilidad para manejar la métrica, que es la forma en que se organizan los versos en un poema. Su estilo fue evolucionando y madurando con el tiempo.
Ella misma mencionó algunas de sus influencias:
"Influencias: Inolvidable y tempranera, la de Amado Nervo, el místico... Después, la de Francis Thompson y Christina Rossetti. Más tarde, la de Gabriela Mistral (en mis temas maternales e infantiles) y quizá, en algunas composiciones o inspiraciones, la de Juan Ramón Jiménez. No digo con esto que esos poetas se adivinen detrás de mis versos. Solamente quiero decir que de ellos brota lo mío —con su propio color y movimiento—, como brota el manantial pequeño del agua invisible y maternal que está escondida allá dentro...en las profundidades de la tierra..."
Últimos años y reconocimientos
De vuelta en El Salvador, Claudia Lars trabajó en el Departamento Editorial del Ministerio de Cultura, que hoy se llama Dirección de Publicaciones e Impresos. Allí dirigió la revista Cultura. Algunos de los libros que publicó en esta etapa fueron: Donde llegan los pasos (1953), Escuela de pájaros (1955), Fábula de una verdad (1959) y sus memorias Tierra de infancia.
Sus obras siguieron recibiendo premios. Sobre el ángel y el hombre obtuvo el segundo lugar en el Certamen Nacional de Cultura en 1962. Del fino amanecer ganó el primer premio compartido en los Juegos Florales de Quezaltenango en 1965.
Antes de su fallecimiento, la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas le otorgó un doctorado Honoris Causa, que es un reconocimiento muy especial. También fue distinguida con la Orden José Matías Delgado, una de las más altas condecoraciones de El Salvador.
Después de su muerte, se publicó Poesía última. Además, David Escobar Galindo recopiló sus mejores poemas en un libro llamado Sus mejores poemas en 1976. En 1999, para celebrar los cien años de su nacimiento, el Consejo Nacional para la Cultura y el Arte publicó dos volúmenes con toda su poesía, recopilada por Carmen González Huguet.
Algunas de sus obras más conocidas
- Estrellas en el Pozo (1934).
- Canción redonda (1937).
- La casa de vidrio (1942).
- Romances de norte y Sur (1946).
- Sonetos (1946).
- Ciudad bajo mi voz (1946).
- Donde llegan los pasos (1953).
- Escuela de pájaros (1955).
- Tierra de Infancia (1958).
- Fábula de una Verdad (1959).
- Presencia en el Tiempo (1960).
- Girasol (1962).
- Sobre el ángel y el hombre (1962).
- Del fino amanecer (1964).
- Nuestro pulsante mundo (apuntes sobre una nueva edad) (1969).
- Obras escogidas (1973).
- Poesía última (1974).
Galería de imágenes
Véase también
En inglés: Claudia Lars Facts for Kids