Batalla del río Betis para niños
Datos para niños Batalla del río Betis |
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Parte de Guerra de Sertorio | ||||
Fecha | 80 a. C. | |||
Lugar | Estuario del río Betis, actual Guadalquivir, en Hispania | |||
Resultado | Victoria rebelde | |||
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Comandantes | ||||
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La Batalla del río Betis fue un enfrentamiento militar importante que ocurrió en el año 80 a. C. Se llevó a cabo en el estuario del río Betis, conocido hoy como el Guadalquivir, en la antigua Hispania (actual España). Esta batalla fue parte de la Guerra de Sertorio, un conflicto en el que se enfrentaron dos grupos de la República romana.
En esta batalla, un ejército de la República romana, liderado por Lucio Fufidio, se enfrentó a un ejército rebelde. Este último estaba bajo el mando de Quinto Sertorio, un líder de la facción conocida como los "populares". La batalla terminó con una victoria para Sertorio y sus fuerzas rebeldes. Gracias a este triunfo, Sertorio logró tomar el control de una gran parte de Hispania, específicamente la región conocida como Hispania Ulterior.
Contenido
¿Qué fue la Guerra de Sertorio?
El inicio de un gran conflicto
Para entender la Batalla del río Betis, es importante conocer el contexto de la Guerra de Sertorio. Esta guerra civil comenzó en el año 88 a. C. cuando Lucio Cornelio Sila marchó con sus legiones hacia Roma. Esto dio inicio a una serie de conflictos internos en la República romana.
Quinto Sertorio era un seguidor de Cayo Mario, otro líder romano. Sertorio se unió a la facción de Mario para luchar contra los partidarios de Sila, conocidos como los "optimates". Después de la muerte de Mario y de otro líder, Lucio Cornelio Cina, Sertorio empezó a dudar de la dirección de su propio grupo.
El viaje de Sertorio a Hispania
En el año 82 a. C., durante la segunda guerra contra Sila, Sertorio decidió dejar Italia. Fue nombrado gobernador de Hispania, lo que le permitió trasladarse allí. Sin embargo, su facción perdió la guerra en Italia poco después de su partida.
En el año 81 a. C., Sila envió a Cayo Annio Lusco con varias legiones para tomar el control de las provincias hispanas que estaban bajo el mando de Sertorio. Después de un breve intento de resistencia, Sertorio y sus hombres fueron expulsados de Hispania.
El regreso a Hispania
Sertorio y sus seguidores terminaron en Mauritania, una región en el norte de África. Allí lograron conquistar la ciudad de Tingis. Fue en este lugar donde recibieron una invitación muy importante. Los lusitanos, una tribu valiente de la Península ibérica, estaban a punto de ser invadidos por el gobernador enviado por Sila. Los lusitanos le pidieron a Sertorio que fuera su líder en la lucha contra Sila.
Sertorio aceptó la invitación. En el año 80 a. C., desembarcó en el puerto pesquero de Baelo Claudia, cerca de los Pilares de Hércules (lo que hoy conocemos como Gibraltar). Así, Sertorio regresó a Hispania por tercera y última vez, listo para la batalla.
¿Cómo se prepararon para la batalla?
Las fuerzas de Sertorio
Una vez en Hispania, Sertorio estableció un campamento en una montaña cercana a Baelo. Allí comenzó a reunir a sus fuerzas. Contaba con 2.600 soldados romanos, muchos de ellos veteranos de guerras anteriores. También tenía 700 aventureros y mercenarios de África.
Los lusitanos, por su parte, aportaron 4.000 guerreros de infantería (a pie) y 700 jinetes. A estos se sumaron muchos hispanorromanos que no estaban contentos con el gobierno, así como personas de las tribus locales como los turdetanos y celtíberos, y refugiados de Italia. En total, el ejército de Sertorio superaba los 8.000 hombres.
Los ejércitos de los Optimates
En contraste, los ejércitos de los "optimates" (los rivales de Sertorio) en toda la península eran mucho más grandes. Según el historiador Plutarco, sumaban unos 120.000 soldados de infantería, 6.000 jinetes y 2.000 honderos y arqueros.
Lucio Fufidio, el gobernador de Hispania Ulterior, tenía la tarea de detener la rebelión de Sertorio en su provincia. Fufidio marchó con su ejército, que estaba destinado a invadir Lusitania, hacia Baelo.
La estrategia de Sertorio
Sertorio era un comandante muy activo y no esperó a Fufidio. En lugar de eso, movió sus fuerzas hacia el este. Los dos ejércitos se encontraron en el estuario del río Betis. Se cree que un ejército romano promedio de esa época tenía entre 15.000 y 20.000 soldados, incluyendo tropas auxiliares. Sin embargo, el hecho de que Sertorio pudiera avanzar tanto en la provincia sugiere que el control de Fufidio sobre el territorio era débil. Es posible que Fufidio no pudiera reunir más de 10.000 o 12.000 soldados en ese momento.
¿Cómo se desarrolló la Batalla del río Betis?
El lugar de la batalla, el estuario del río Betis, era un área pantanosa y complicada. Este tipo de terreno favorecía a quienes lo conocían bien. Muchos de los soldados de Sertorio eran de la región, lo que les dio una gran ventaja.
La única descripción que se conserva de la batalla es del historiador Salustio, quien escribió:
Después de esto, Fufidio llegó con sus legiones. Descubrió que las orillas del río eran muy empinadas y que, si tenían que luchar, el cruce del río sería muy difícil. Todo favorecía más a sus enemigos que a su propio bando.
En la batalla, Fufidio perdió a 2.000 de sus hombres y el control de una gran parte de Hispania. Aunque Fufidio sobrevivió al combate, su reputación se vio muy afectada. Se le consideró el hombre que había perdido Hispania frente a Sertorio.
¿Qué pasó después de la batalla?
El crecimiento del ejército de Sertorio
Después de esta importante victoria, algunos historiadores creen que el ejército de Sertorio no creció mucho, manteniéndose en unos 8.000 guerreros. Sin embargo, otros expertos piensan que su ejército pudo haber crecido rápidamente hasta alcanzar los 20.000 hombres en poco tiempo.
El impacto de la victoria
La victoria en la Batalla del río Betis marcó el comienzo de la Guerra de Sertorio. Este conflicto afectó gravemente a la península ibérica durante los siguientes ocho años. Sertorio demostró ser un líder militar muy hábil, superando a todos los generales que Roma envió en su contra y destruyendo varios ejércitos enemigos.
En el momento de su mayor poder, Sertorio llegó a controlar casi toda la península ibérica. La guerra solo terminó cuando un grupo de sus propios seguidores, que estaban descontentos, planearon una conspiración y lo asesinaron durante un banquete.
Véase también
En inglés: Battle of the Baetis River Facts for Kids