Teoría monetaria moderna para niños
La Teoría Monetaria Moderna (TMM), también conocida como neocartalismo, es una idea económica que explica cómo funcionan las economías de los países hoy en día. Se enfoca en aquellos países que usan su propia moneda, la cual es emitida por el gobierno y no está respaldada por algo físico como el oro.
El punto principal de la TMM es que un gobierno que controla su propia moneda puede crear tanto dinero como necesite. Esto significa que puede pagar por lo que quiera comprar, cumplir sus promesas de pago futuras y dar dinero a otros sectores sin límites. Por lo tanto, un gobierno así no puede quedarse sin dinero ni ir a la quiebra en su propia moneda. Siempre puede pagar sus deudas en su propia moneda.
La TMM es un tema de debate entre los economistas. Algunos la critican por sus ideas y por las recomendaciones que propone para manejar la economía. La TMM tiene puntos de vista diferentes a los de la economía tradicional.
La base de esta teoría viene de las ideas del economista alemán Georg Friedrich Knapp de 1895, con aportes importantes de Alfred Mitchell-Innes. Estas ideas influyeron en el libro Tratado sobre el dinero de John Maynard Keynes en los años 1930.
En los sistemas financieros actuales, los bancos privados pueden crear dinero, pero esto no aumenta la riqueza total del país. El dinero que el gobierno gasta es el que entra en circulación. Los impuestos y las leyes que obligan a pagar con la moneda del país le dan valor a esa moneda, creando una demanda por ella. Multas y licencias también hacen que la gente necesite esa moneda. La TMM dice que el nivel de impuestos y el gasto del gobierno (si hay más gastos que ingresos o viceversa) son herramientas para controlar la inflación (cuando los precios suben mucho) y el desempleo, no solo para conseguir dinero.
Algunos expertos creen que esta teoría describe cómo funciona el sistema monetario desde que se dejó de usar el patrón oro en 1971.
Contenido
- Orígenes de la Teoría Monetaria Moderna
- Conceptos Clave de la TMM
- Transacciones Verticales: Gobierno y Ciudadanos
- El Papel de los Impuestos
- Dinero y Economía Pública y Privada
- Ahorro Privado y Préstamos Bancarios
- El Mercado de Bonos del Gobierno
- Deuda y Moneda: Gobierno y Bancos
- Control de las Tasas de Interés
- Transacciones Horizontales: Dentro del Sector Privado
- El Sector Exterior
- Aplicación de Políticas Económicas
- Defensores de la TMM
- Críticas a la TMM
- Véase también
Orígenes de la Teoría Monetaria Moderna
Las ideas de la Teoría Monetaria Moderna se basan en la "teoría estatal del dinero" o cartalismo, desarrollada por el economista alemán Georg Friedrich Knapp en el siglo XIX. También toma ideas de la "teoría del crédito del dinero" de Alfred Mitchell-Innes, las propuestas de "finanzas funcionales" de Abba Lerner, las ideas de Hyman Minsky sobre los bancos y el enfoque de "balances sectoriales" de Wynne Godley.
En 1905, Knapp escribió que el dinero es una "creación de la ley", no solo un objeto valioso. En ese tiempo, el dinero estaba ligado al oro. Knapp comparó su teoría con la idea de que el valor del dinero dependía del metal precioso que contenía. Él decía que el gobierno puede crear billetes sin respaldo en oro y hacer que la gente los use si los acepta para pagar impuestos.
La idea más común era que el dinero surgió del trueque para facilitar el intercambio de bienes. Pero los que apoyan la TMM, como Randall Wray y Mathew Forstater, dicen que muchos economistas clásicos, como Adam Smith y Karl Marx, ya tenían ideas similares sobre el dinero respaldado por impuestos.
Alfred Mitchell-Innes escribió en 1914 que el dinero no era solo un medio de intercambio, sino una forma de pagar deudas a futuro. El dinero del gobierno era una deuda que el gobierno podía cobrar a través de impuestos. Él explicó que cada vez que se paga un impuesto, se está "rescatando" una parte de la deuda que el gobierno creó al emitir dinero.
John Maynard Keynes citó a Knapp y el cartalismo en su libro de 1930, lo que muestra cómo estas ideas influyeron en su pensamiento sobre el papel del gobierno en la economía.
En 1947, Abba Lerner escribió que la responsabilidad de evitar la inflación y las crisis económicas recaía en el gobierno, porque tiene la capacidad de crear y controlar el dinero.
El término "Teoría Monetaria Moderna" fue creado por el economista australiano Bill Mitchell. Por sus orígenes, también se le llama "neocartalismo".
Conceptos Clave de la TMM
Transacciones Verticales: Gobierno y Ciudadanos
La TMM llama "transacciones verticales" a los intercambios entre el gobierno (incluyendo el tesoro y el banco central) y el sector no gubernamental (personas, empresas y bancos privados, y el sector exterior).
El presupuesto del gobierno puede tener un déficit (gasta más de lo que recauda) o un superávit (recauda más de lo que gasta). Según la TMM, si el gobierno tiene un déficit, está añadiendo dinero a las cuentas del sector privado. Si tiene un superávit, está retirando dinero de esas cuentas.
Esto significa que el sector privado solo puede ahorrar mucho si el gobierno tiene déficits. Si el gobierno tiene superávits, el sector privado tendría que "desahorrar" o reducir sus ahorros.
La TMM no cree que siempre sea necesario un superávit del gobierno en tiempos de mucha demanda. Al contrario, un superávit puede hacer que la gente dependa más de los préstamos bancarios para sus gastos. Los economistas de la TMM suelen apoyar los déficits del gobierno si el sector privado quiere ahorrar y si el país quiere usar todos sus recursos, como tener pleno empleo. Creen que los déficits continuos son necesarios para un crecimiento económico estable y para evitar la deflación (cuando los precios bajan mucho). Solo si la economía tiene demasiada demanda y hay riesgo de inflación, sería bueno reducir el déficit.
El Papel de los Impuestos
En un sistema donde el gobierno puede crear su propia moneda, nunca puede quedarse sin dinero. Por lo tanto, los impuestos no sirven para que el gobierno obtenga dinero para gastar. Su función principal es controlar la cantidad de dinero en circulación y evitar que la economía se "recaliente" y haya inflación.
Según la TMM, no hay razón para que el presupuesto del gobierno esté siempre equilibrado. Lo ideal es aumentar los impuestos cuando la economía crece y reducirlos cuando hay una recesión. Los impuestos también aseguran que la gente use la moneda del país, ya que necesitan esa moneda para pagar sus obligaciones fiscales.
Dinero y Economía Pública y Privada
La idea de que el dinero es una "creación del Estado" significa que el gobierno no necesita recaudar impuestos antes de gastar. Puede gastar para impulsar la economía y el empleo. Los economistas de la TMM, como James Kenneth Galbraith, creen que el gobierno puede tener déficits grandes sin mucho riesgo de inflación, incluso con pleno empleo. Argumentan que, durante las crisis, si el gobierno busca superávits, retira dinero de la economía, lo que perjudica a las empresas y a los ciudadanos. Un déficit del gobierno, por el contrario, contribuye a la riqueza del sector privado. Por lo tanto, los déficits y la deuda pública son herramientas para que el gobierno logre el máximo empleo y producción.
Ahorro Privado y Préstamos Bancarios
La TMM explica que el ahorro privado aumenta cuando la economía crece. El gasto del gobierno con déficit busca estimular la actividad económica, lo que aumenta el ingreso nacional y, por lo tanto, el ahorro privado. Cuando el gobierno gasta, inyecta dinero en el sistema, lo que reduce la necesidad de préstamos bancarios y puede bajar las tasas de interés.
El Mercado de Bonos del Gobierno
Como el gobierno puede crear su propio dinero, no necesita pedir prestado a los compradores de bonos. Por lo tanto, no está obligado a aceptar las tasas de interés que el mercado imponga. Según la TMM, mantener un mercado de bonos públicos es una decisión opcional para un país con soberanía monetaria.
Deuda y Moneda: Gobierno y Bancos
La TMM pone mucha atención en cómo interactúan el gobierno, el banco central y los bancos comerciales. El tesoro del gobierno tiene una cuenta en el banco central, y los bancos comerciales también tienen cuentas allí.
Cuando el gobierno gasta, el dinero sale de su cuenta en el banco central y entra en las cuentas de los bancos comerciales, aumentando las reservas de todo el sistema bancario. Los impuestos hacen lo contrario: retiran dinero de las cuentas privadas y reducen las reservas de los bancos.
Control de las Tasas de Interés
Los bancos centrales suelen fijar una meta para las tasas de interés. Para lograrlo, el banco central interviene en el mercado bancario. Los bancos comerciales deben tener una cantidad mínima de dinero (reservas) en el banco central al final del día. Si un banco tiene menos, puede pedir prestado al banco central (pagando una tasa de descuento). Si tiene más, puede prestarlo a otros bancos o dejarlo en el banco central (ganando una tasa de interés).
Si el gobierno gasta más de lo que recauda, hay un exceso de reservas en el sistema bancario, lo que empuja las tasas de interés a la baja. La TMM dice que el gasto del gobierno baja las tasas de interés a corto plazo, lo contrario de lo que se cree tradicionalmente. Para evitar que las tasas de interés bajen demasiado, el banco central puede vender bonos del gobierno, retirando así el exceso de reservas. Si el gobierno recauda más de lo que gasta, hay un déficit de reservas, y las tasas de interés suben. El banco central puede comprar bonos para inyectar reservas y mantener las tasas estables.
Transacciones Horizontales: Dentro del Sector Privado
La TMM llama "transacciones horizontales" a los intercambios dentro del sector privado, como cuando los bancos dan préstamos. Para esta teoría, la idea de que los bancos solo prestan el dinero que tienen depositado es engañosa. Los préstamos bancarios crean una deuda y un depósito del mismo tamaño. Los bancos comerciales no pueden crear riqueza financiera sin crear una deuda correspondiente; solo el gobierno o el banco central pueden hacerlo.
El Sector Exterior
La TMM analiza las importaciones y exportaciones como transacciones horizontales. Si un país importa bienes, esto es posible porque otros países quieren la moneda del país importador.
Los defensores de la TMM, como Warren Mosler, creen que los déficits comerciales (importar más de lo que se exporta) no son necesariamente malos y pueden mejorar la vida de las personas a corto plazo, porque se obtienen bienes que de otra forma no se tendrían. Las exportaciones, en cambio, son un costo porque el país pierde bienes que podría haber consumido. Sin embargo, el país importador da su moneda a manos extranjeras, lo que representa una futura demanda de sus propios bienes.
La TMM reconoce que las importaciones baratas pueden afectar a las empresas locales y causar desempleo, pero considera que decidir si esto es bueno o malo es una cuestión de valores, no solo económica. También reconoce que un país que depende mucho de las importaciones puede sufrir si el comercio se reduce.
Cuando un país importa más de lo que exporta, los extranjeros acumulan la moneda local. Sin embargo, ese dinero nunca sale realmente del país importador. El extranjero puede usarlo para comprar bienes locales o depositarlo en un banco local.
La deuda en moneda extranjera es un riesgo real para un país, porque no puede crear esa moneda. Para pagarla, necesita que la demanda de su propia moneda sea alta. Si el tipo de cambio cae, la deuda puede volverse impagable y llevar al país a la quiebra.
Aplicación de Políticas Económicas
Basándose en sus ideas, la TMM propone varias formas de manejar la economía.
La TMM prefiere el sistema de moneda emitida por el gobierno al sistema de dinero respaldado por mercancías (como el oro). En el sistema actual, el gobierno puede gastar con déficit para estimular la economía. La TMM dice que la palabra "endeudamiento" es incorrecta para un gobierno soberano, porque lo que hace es emitir sus propias deudas, que son riqueza financiera para el sector privado.
Según esta teoría, el gobierno soberano no tiene límites financieros para gastar. Puede comprar cualquier cosa que esté a la venta en su propia moneda. La única limitación es que un gasto excesivo puede causar inflación.
Algunos economistas de la TMM creen que la mejor manera de eliminar el desempleo y mantener los precios estables es un programa de garantía de empleo financiado por el gobierno. Esto significa que el gobierno ofrecería trabajos a todos los ciudadanos que los necesiten, generalmente con un salario mínimo. Esto actuaría como un "estabilizador automático": se expandiría en tiempos de crisis (aumentando el déficit) y se reduciría cuando la economía crezca (reduciendo el déficit). Dicen que esto puede mantener los precios estables porque ataca el desempleo directamente y crea una "reserva" de trabajadores que pueden pasar al sector privado cuando haya más empleos.
Otros defensores de la TMM, como Warren Mosler, sugieren grandes reducciones de impuestos o incluso suspenderlos por completo en tiempos de mucho desempleo y poco crecimiento económico. Creen que reducir los impuestos puede ayudar a la economía a recuperarse, aumentando el consumo, la producción y el empleo.
Defensores de la TMM
Los principales centros de la TMM son la Universidad de Misuri-Kansas City, donde enseñan Randall Wray, Stephanie Kelton y William Black, y el Centro para el Pleno Empleo y la Estabilidad de Precios de Warren Mosler.
James Kenneth Galbraith es uno de los defensores más conocidos de la teoría.
Economistas como Warren Mosler, L. Randall Wray, Stephanie Kelton, Bill Mitchell y Pavlina R. Tcherneva son los principales responsables de revivir el cartalismo. Bill Mitchell fue quien acuñó el término "Teoría Monetaria Moderna". Pavlina R. Tcherneva ha desarrollado el primer modelo matemático para la TMM y se ha enfocado en la idea del trabajo garantizado.
Scott Fullwiler ha aportado análisis técnicos detallados sobre los sistemas bancarios y monetarios.
Rodger Malcolm Mitchell explicó la esencia del cartalismo en su libro Free Money (1996).
Algunos autores, como Wray, sitúan el cartalismo dentro de la Economía poskeynesiana. El cartalismo se ha propuesto como una teoría que complementa la teoría del circuito monetario. El cartalismo explica las interacciones "verticales" (gobierno a privado), mientras que la teoría de circuitos explica las interacciones "horizontales" (privado a privado).
Hyman Minsky apoyaba un enfoque cartalista para entender la creación de dinero. Basil Moore en su libro Horizontalists and Verticalist explica las diferencias entre el dinero bancario y el dinero del gobierno.
Steven Hail y Rohan Grey son otros economistas conocidos de la TMM. Rohan Grey es fundador de la Red de Moneda Moderna.
Críticas a la TMM
La TMM ha recibido muchas críticas de diferentes economistas, tanto por sus ideas como por sus recomendaciones de política económica.
El economista post-keynesiano Thomas Palley dice que la TMM es una repetición de ideas keynesianas, pero con un análisis "demasiado simple" y que subestima los riesgos de aplicar sus políticas. Palley critica que la TMM no considera los problemas de conflicto entre la política fiscal y monetaria, y que las ideas de la TMM sobre las limitaciones financieras del gobierno ya eran conocidas por los economistas keynesianos. Él cree que las políticas de la TMM causarían inestabilidad financiera en una economía abierta con tipos de cambio flexibles. También dice que la TMM no tiene una buena explicación para la inflación, especialmente en un contexto de pleno empleo, y que sobreestima la importancia del dinero impreso por el gobierno.
Marc Lavoie dice que, aunque la idea neocartista es "correcta", muchas de sus afirmaciones son difíciles de entender debido a la complejidad de las operaciones de los bancos centrales y el gobierno.
El economista Paul Krugman, ganador del Premio Nobel, cree que la idea de la TMM de que el déficit no importa si tienes tu propia moneda es "simplemente incorrecta". Acusa a los defensores de la TMM de cambiar las reglas de la macroeconomía y la explicación de la inflación a su conveniencia.
Los defensores de la TMM responden que las críticas muestran una falta de comprensión de la teoría. Aunque a veces se les acusa de decir que "los déficits no importan", los autores de la TMM han aclarado que ese no es un principio de su teoría.
El economista Robert P. Murphy dice que la visión de la TMM "no se corresponde con la realidad" y que es "totalmente equivocada". Él argumenta que la afirmación de la TMM de que reducir la deuda pública disminuye el ahorro privado solo es cierta para la parte del ahorro que no se invierte.
Murphy también critica la TMM porque cree que la deuda pública no es riqueza para el sector privado en su conjunto, ya que los bonos solo se pueden cobrar cuando vencen, es decir, después de que el gobierno haya recaudado los fondos de los mismos contribuyentes en el futuro.
En respuesta, los defensores de la TMM señalan que el pago de intereses de la deuda pública no tiene por qué venir de los impuestos, ya que los bonos pueden pagarse creando dinero.
J. Bradford DeLong, exasesor del presidente Bill Clinton, dice que la TMM no es una teoría, sino una "tautología" (una verdad que se repite). Otros críticos han dicho que la TMM "ignora las lecciones de la historia" y tiene "fallas fatales".
Véase también
- Economía monetaria
- Teoría del crédito del dinero
- Teoría cuantitativa del dinero
- Economía política
- Política económica
- Economía poskeynesiana
- Historia económica
- Historia del pensamiento económico