Seminario para niños
El seminario es un lugar especial donde jóvenes y adultos se preparan para ser sacerdotes. Allí, de forma voluntaria, inician un camino de formación que los ayuda a servir a la comunidad.
Contenido
- Seminarios católicos: ¿Qué son y cómo funcionan?
- Seminarios evangélicos
- Véase también
- Galería de imágenes
Seminarios católicos: ¿Qué son y cómo funcionan?
Los seminarios católicos son conocidos con varios nombres, como “seminario diocesano” o “seminario mayor”. Un seminario diocesano es el de una diócesis (una zona geográfica que tiene un obispo). También existen los “seminarios interdiocesanos”, que sirven a varias diócesis de una región o país.
Algunos seminarios tienen nombres que muestran su origen, por ejemplo:
- Seminarios conciliares: Fundados después del Concilio de Trento.
- Seminarios metropolitanos o archidiocesanos: Pertenecen a una archidiócesis.
- Seminarios patriarcales: Pertenecen a un patriarcado latino.
- Seminarios de órdenes religiosas: Llevan el nombre de la orden religiosa a la que pertenecen, como “seminario claretiano” o “seminario jesuita”.
Historia de los seminarios católicos
La idea de los seminarios como los conocemos hoy es relativamente reciente. Se formalizaron durante el Concilio de Trento, un gran encuentro de la Iglesia católica que se celebró entre 1545 y 1563.
Antes de este Concilio, la formación de los sacerdotes no era tan organizada. Los nuevos sacerdotes a veces eran elegidos por intereses políticos. Las órdenes religiosas (como los monjes) sí tenían sus propias reglas y un tiempo de preparación llamado Noviciado.
El Concilio de Trento decidió que era muy importante que los sacerdotes estuvieran bien preparados. Por eso, se decretó que cada diócesis debía tener un seminario. El Papa Pío IV confirmó esta decisión. Se establecieron reglas sobre la edad mínima de los candidatos, las materias que debían estudiar y el papel del obispo en su formación. También se confirmó que los sacerdotes debían vivir el celibato, es decir, no casarse.
Muchos obispos y líderes religiosos apoyaron esta nueva forma de formación. Por ejemplo, San Carlos Borromeo, obispo de Milán, fue uno de los primeros en crear seminarios. También San Vicente de Paul en Francia y San Ignacio de Loyola, fundador de los Jesuitas, ayudaron a establecer muchos seminarios.
En América, después de la llegada de los españoles, también se fundaron seminarios en ciudades importantes como Ciudad de México, Bogotá y Lima.
Cambios después del Concilio Vaticano II
La formación en los seminarios incluía el estudio del Latín, las Escrituras, la administración de los sacramentos, el derecho de la Iglesia y el canto gregoriano. Los jóvenes recibían diferentes "órdenes" o pasos en su camino.
Esta estructura cambió con el Concilio Vaticano II (1962-1965). Este Concilio modernizó la Iglesia. Se reorganizaron los estudios y la formación. Una de las novedades fue que la Iglesia católica podía usar los idiomas locales en las ceremonias, en lugar de solo el latín.
¿Cuál es el propósito de un seminario?
El objetivo principal de un seminario mayor es formar a los futuros pastores de la Iglesia, siguiendo el ejemplo de Jesús como guía y servidor.
¿Cómo se organiza un seminario?
Un seminario mayor necesita un equipo de personas para funcionar correctamente, elegidas por el obispo:
- Un rector: Es un sacerdote que dirige el seminario, supervisa los estudios y sigue de cerca el progreso de los estudiantes.
- Un director espiritual: Un sacerdote que escucha y acompaña a los estudiantes en sus inquietudes.
- Un confesor: Un sacerdote que administra el sacramento de la Confesión.
También suele haber otros roles como el prefecto de estudios, el ecónomo (que maneja las finanzas) y el bibliotecario.
¿Qué se estudia en un seminario?
Los estudios en un seminario mayor se dividen en dos etapas principales:
- Estudios filosóficos: Duran dos o tres años.
- Estudios teológicos: Duran cuatro años.
En total, la formación dura al menos seis años. A veces, hay un año inicial de preparación (propedéutico) y años de práctica en una parroquia o en una zona de misión.
Muchos seminarios colaboran con universidades, especialmente si son universidades católicas. Los seminarios son centros de conocimiento y debate. A menudo, personas que no se preparan para el sacerdocio (llamados laicos) también pueden estudiar Filosofía eclesiástica o Teología allí.
Las bibliotecas de los seminarios son muy ricas en libros de filosofía y teología, pero también tienen secciones de psicología, sociología, antropología, literatura y otros temas importantes para la formación de los estudiantes.
El programa de estudios incluye materias como:
- Filosofía (Ontología, Lógica, Ética)
- Teología (fundamental, moral, dogmática)
- Biblia
- Historia de la Iglesia
- Derecho canónico
- Liturgia
- Música
- Idiomas (como Latín, Griego Antiguo, Hebreo Bíblico, Italiano, Francés e Inglés)
Seminarios menores y órdenes religiosas

En la Iglesia católica, los seminarios suelen pertenecer a la diócesis y están bajo la autoridad del obispo. Además, existen los “seminarios menores”. Estos son colegios para chicos más jóvenes, desde la educación básica hasta la secundaria, que están pensando en ser sacerdotes.
Los seminarios menores cumplen con los requisitos académicos de cualquier escuela oficial, pero su enfoque es ayudar a los jóvenes a explorar su vocación. Se preocupan por su crecimiento humano, espiritual y su madurez.
Las órdenes religiosas (como los jesuitas o los salesianos) también forman a sus propios miembros para el sacerdocio. Pueden enviar a sus estudiantes a seminarios diocesanos o fundar sus propios seminarios con la aprobación del obispo.
En España, actualmente hay 51 seminarios menores. El de la Diócesis de Getafe, en Rozas de Puerto Real (Madrid), es uno de los que tiene más alumnos.
Los seminarios y los cambios en las vocaciones
Después del Concilio Vaticano II, hubo cambios en la Iglesia y en la sociedad. Esto, junto con otros fenómenos como la globalización y la separación de la Iglesia y el Estado en muchos países, ha hecho que el número de jóvenes que eligen ser sacerdotes haya disminuido en algunas partes del mundo.
Esta situación se nota más en Europa, Estados Unidos, Canadá y Australia. Sin embargo, en Latinoamérica, aunque también ha habido una baja, el número de vocaciones es mayor que en Europa. Además, en lugares como India y el Lejano Oriente (como Filipinas y Vietnam), el número de jóvenes que quieren ser sacerdotes está aumentando, incluso en países donde la mayoría de la población no es cristiana.
Requisitos para entrar a un seminario católico
Cada Conferencia Episcopal (la reunión de obispos de un país o región) tiene sus propias normas, pero en general, para ser admitido en un seminario mayor, un católico debe cumplir estos requisitos:
- Ser varón.
- Tener un deseo sincero de ser sacerdote.
- Solicitarlo de forma completamente voluntaria, sin presiones.
- Tener capacidad moral, espiritual e intelectual.
- Gozar de buena salud física y mental.
- Estar dispuesto a vivir el celibato, es decir, ser soltero.
- Ser católico y haber recibido los sacramentos del bautismo, confesión, comunión y confirmación.
- Estar dispuesto a llevar una vida dedicada al estudio, la oración y las actividades de la Iglesia.
Seminarios evangélicos
Los seminarios evangélicos también son centros de formación. El Consejo Internacional para la Educación Teológica Evangélica, fundado en 1980, contaba en 2015 con 1000 escuelas en 113 países.
Véase también
En inglés: Seminary Facts for Kids
- Colegio bíblico
- Seminario judío
- Seminario islámico
- Seminario ortodoxo
- Universidad Católica
- Universidad Pontificia